Josep Moreno es el principal asesor de Jorge Alarte, persona de su máxima confianza, jefe de su gabinete y el encargado de llevar la estrategia de comunicación del PSPV. Como otros fichajes de relumbrón del alartismo (Salvador Broseta), proviene de la gestión de Alarte en el ayuntamiento de Alaquàs, donde Moreno se ha pasado un montón de años como jefe de gabinete de prensa (hasta que en 2007 fue sustituido, precisamente, por Broseta).
Como ya se comentó en La Paella Rusa, Moreno es el autor de la brillante ocurrencia de acusar a Canal 9 de contratar unos actores para que montasen follón delante de la sede del PSPV; también firmó un magistral artículo en El País en el que venía a decir que los medios que no apoyaban a Alarte eran unos hijos de la gran puta.
Moreno es conocido por sus arranques de ira desatada, dirigida indistintamente contra sus acólitos del PSPV o contra los malvados periodistas, todos a sueldo del PP (¿cómo se entiende, si no, que no se rindan a los encantos de la política alartista, cualquiera que sea ésta?). En este último caso, el procedimiento suele ser así: Moreno coge el teléfono y llama al orden al periodista de turno, al que amenaza con joder vivo tan pronto como el PSPV tome el poder.
No es que esta estrategia, directamente emanada del espejo en el que implícitamente se mira Josep Moreno (Miguel Ángel Rodríguez, eterno asesor de Aznar en materia de comunicación hasta finales de la década de los 90), sea un prodigio de elegancia, pero tal vez incluso podría funcionar. Meter miedo funciona, sobre todo si logras acojonar a la gente con tus amenazas. Pero, claro, para acojonar has de tener poder. Cuando Miguel Ángel Rodríguez le decía a Antonio Asensio aquello de “vas a acabar en la cárcel… Tenemos más guardaespaldas que tú”, la amenaza era creíble. En cambio, ¿qué amenaza puede proferir, exactamente, Josep Moreno? ¿Un temible “como no me hagas caso te inundaré a notas de prensa del PSPV”? Una estrategia basada en las amenazas, si no tienes poder real que te respalde, no da miedo. Da risa.
Se supone que Moreno debería dar mucho miedito porque es una especie de jefe de gabinete del líder de la oposición. Y eso, desde la perspectiva con la que ha llegado el Tigre de Alaquàs a la secretaría general del PSPV (controlemos el partido, esperemos sentados a que se hunda el PP, que hay que ver lo rápido que se hunde, y ya nos llegará el poder cual maná. Como en Murcia), significa: “cuando mandemos, te joderemos vivo”. ¿Cómo reaccionará el periodista prototípico ante dicho planteamiento?
Posibilidad A: el PSPV no llegará al poder en 2011. De hecho, cuando llegue al poder, si alguna vez llega, no será Alarte quien lo consiga. Las amenazas de Josep Moreno quedan sin efecto. En el mejor de los casos, la línea informativa del periodista se mantiene igual. En el peor, se recrudece contra el PSPV.
Posibilidad B: ¡Dios mío, he visto las encuestas que le dan un 28% al PSPV y creo que están tocando el poder con las yemas de los dedos! ¡Alarte puede ganar! ¡Josep Moreno puede ganar! ¿Y si deciden joderme? Pues para evitarlo, y dado que el mensajito de Moreno no es “o me apoyas o te joderé”, sino “cuando mande te joderé por no haberme apoyado”, se deriva lógicamente que el periodista en cuestión hará lo que esté en su mano para impedir el ascenso al poder del PSPV.
Pero que no se preocupe mucho Josep Moreno: pocos periodistas manejan la posibilidad B. De hecho, tanto es así que esta brillante estrategia ya ha conseguido, además de los éxitos mencionados, enajenarse parcialmente el apoyo del principal medio de comunicación afín (Prensa Ibérica, con sus periódicos Levante – EMV e Información, líderes de audiencia en los territorios en los que operan). Sólo El País permanece incólume en su apoyo a Alarte (cabe suponer que por orden directa de Blanco), y de hecho ahí publicó Moreno su ya mítica columna, allí se publicaron las dos entrevistas sucesivas a Carmen Martínez, y en El País apareció el pasado lunes un espectacular par de noticias: por un lado, la que explicaba que el PSPV está viviendo un Nuevo Amanecer con Alarte, una renovación generacional que está aupando a gente joven a las candidaturas, con amplia experiencia política; no en vano llevan desde su más tierna edad dedicados a hacer carrera en el PSPV. Por otro lado, la que denunciaba que en la provincia de Alicante comienzan a sustituir a veteranos del partido por malvados jóvenes campsistas, niñatos mimados que no han dado un palo al agua en su vida, pues llevan desde su más tierna edad dedicados a hacer carrera en el PPCV.
Y parte del legado de Josep Moreno radica, precisamente, en que está creando escuela: sus actitudes barriobajeras van extendiéndose como la pólvora, como demuestran el nivelazo de las dos entrevistas de Carmen Martínez en El País y el comportamiento impresentable, cada vez más acusado y más chirriante en su sectarismo, de otros cargos del partido crecidos a la sombra de Moreno. ¡El Señor Calabuig ha leído muchos manuales, pero Josep Moreno va más allá y los escribe y todo, el tío!
En cambio, no puede decirse que Moreno cautive demasiado en Ferraz, donde el espectáculo de los actores de Canal 9 y otras macarradas de consumo interno han dejado huella. Y es que, por muy comprensible, elogiable incluso (como prueba del valor que se da a la fidelidad), que sea rodearse de gente de toda la vida, parece obvio que el cargo le viene grande, como también le ocurrió en su día a M.A.R. cuando Aznar llegó al poder. No es lo mismo gestionar el gabinete de prensa de un pueblo que aspirar a ganar unas Elecciones Autonómicas. Sobre todo si tu estilo es el de un macarra barriobajero. Porque puede que el director y redactor único de, pongamos por caso, La Voz de Alaquàs se acojone ante las amenazas de Moreno de quitarle la publicidad institucional, pero no es previsible que consiga el mismo efecto con medios mucho más grandes y que, sobre todo, no dependen de él.
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A mí estas cosas me flipan mucho. Es decir, puedo entender que un José Caballos, un Cipriá Ciscar, un Ignacio González, un Miguel Ángel Rodríguez o cualquier otro número 3 (= esbirro) del partido que en ese momento mande intente presionar a los medios para que le sean favorables; puedo comprender que desde esa posición se amenace y se avasalle, se intente incluso comprar la voluntad de un periódico o de una radio… Pero hacerlo cuando estás en la oposición, con una posibilidad nimia de ganar, y sabiendo que no sólo amenazas en vano sino que también puedes ponerte frontalmente en contra a unos medios que nunca se han puesto demasiado a tu favor? Hay que estar muy zumbado para pensar que eso funciona.
¡Vais a saco! Ya veréis lo que pasará con vuestra web cuando gane el PSPV las elecciones…
Joder con L’Anguila de la Marxal, menuda jartá de reír! A ver cuánto tardas en recibir la llamadita de Josep Moreno!
Coincido con ambos, con l’Anguila y con Otis. Es surrealista pensar que una estrategia basada en las amenazas, y además amenazas chungas de «te llamo por teléfono y te pongo en posición de firmes», pueda funcionar desde la oposición. Y una oposición, además, sin apenas perspectivas de ganar. Lo que hay que hacer en estos casos, bien al contrario, es mucha sonrisita, mucho granjearse la simpatía de los periodistas, mucho dar facilidades; sobre todo, tendiendo puentes con los periodistas hostiles. Eso es algo que Zapatero, por ejemplo, siempre ha hecho muy bien; de hecho, ahí tenéis el ejemplo de su relación con El Mundo, al que durante años ha estado mariposeando.
Un cordial saludo
Moreno está sentenciado y le quedan dos telediarios. Un partido político puede soportar ciertos niveles de incompetencia. Sobre todo si el jefe es tan burro que no la percibe o los problemas generados no le llegan y salpican personalmente. Pero aunque Alarte adora a Moreno, que ejerce de papá, guardaespaldas, confesor y amiguito del alma, Blanco está hasta los cojones. Porque a él no hacen más que llegarle quejas de todo tipo. De gente del partido. De medios de comunicación. Incluidos los próximos.
Alarte, que siente una dependencia freudiana de Moreno, ha acabado por prometer que se librará de él, buscándole acomodo, por supuesto, tras las elecciones. El problema es que, al paso que va, puede ser una de las últimas decisiones que tome. Porque «el gran estratega» le ha llevado a un desastre tan sonrojante que ríete tú de la ridiculez de Lady Ashton.
Menuda jartá de reir. Solamente un pero: Darth Vader es único, incomparable. Igualar a lord Darth Vader con Josep Moreno es insultar la memoria de este lord sith. Aunque Josep sea Moreno, Vader es fiel reflejo del lado oscuro y mano derecha del mal, que encarna el emperador. Moreno es un aspirante a aprendiz de aspirante de Vader que en lugar de la fuerza del lado oscuro y el sable de luz utiliza tirachinas sin gomas. ¡Como se entere Pajín!
Pingback: Anónimo
Gracias por vuestros comentarios. A mi tocayo L’anguila camalera sólo puedo darle la razón. Claramente, la fuerza no es fuerte en Josep Moreno; los midiclorianos esos brillan por su ausencia. Pero ten en cuenta que una cosa es lo que pensemos de él y otra, muy distinta, lo que él piensa de sí mismo. Y él piensa, está convencido, que su estrategia es brillante, que tiene a los medios acojonados y, por lo visto, incluso piensa que el PSPV va a ganar. La verdad es que eso es lo que se dedica a difundir por ahí: «vamos a ganar, ya veréis, hacedme caso, que soy un gurú». Y no descartéis que lo haga porque haya leído en algún manual que le haya prestado el Señor Calabuig que así comunicará fe en la victoria a los suyos, generándose un círculo virtuoso de profecías autocumplidas, que esos manuales son muy densos y dan mucho de sí. De manera que, adelantándose a su gestión como jefe de gabinete de Presidencia, no ve la hora de amenazar al primero que se le ponga por delante.
Abrazos
PD: Guillermo, en menudo lío me habéis metido!
Hola, yo tengo el placer de conocer a Josep Moreno, y quiero decirte que no comparto para nada la definición que aquí das de él.
Lo considero un tío ingenioso, con una cabeza muy bien amueblada y con un corazón de oro, es más puede decir que me siento afortunado de ser amigo suyo, por lo que me parece un poco injusta las calificaciones que en tu blog le dispensas.
Estoy seguro que Josep no amenaza a nadie ni utiliza artimañas barrio bajeras como aquí describes.
Mi humilde recomendación es que hagas por conocerlo y podrás comprobar todo esto que te describo.
Gracias por dejarme intervenir en tu interesante blog por el que me pasaré de vez en cuando.
Un saludo.
Olé, Óscar.
No conozco al señor Moreno, pero lo que sí puede asegurarse leyendo su mensaje es que tiene amigos inteligentes. Al menos alguno. Como Usted.
Desde ese desconocimiento, sin embargo, me llama la atención lo que cuenta el periodista de Las Provincias enlazado arriba que le ocurrió. Podría estar mintiendo, claro. Pero el propio artículo de Moreno en El País que también se ha comentado hace que la historia parezca bastante creíble. ¿O no? Espero que en esto más o menos estemos de acuerdo. Con lo que su amigo Moreno tiene un problema de comunicación, que se dice ahora. Un problema que, si encima va y resulta que el tipo es un encanto, cariñoso e ingenioso, adquiere dimensiones monumentales pues la imagen que proyecta no puede estar más alejada de eso. Debería despedir a sus asesores en imagen y comunicación. ¡Aunque quizás se lo impide el ser muy buena persona!
Más allá del tema de la imagen, creo que Moreno también tiene un problema de competencia en lo que se refiere al fondo de su trabajo, que es definir con Alarte cómo llevar al PSPV a la victoria, que podríamos resumir así:
Si el tío que manda desde hace años, en medio de una crisis pavorosa, con la caja vacía y una tasa del paro del 25%, estando además imputado por corrupción, por chorra y absurda que nos pueda parecer a casi todos la imputación y su recorrido, te vuelve a ganar las elecciones y encima incrementando la ventaja que te saca, quizás debieras empezar a plantearte que algo no estás haciendo bien.
Andrés, ¡has metido la pata hasta el fondo! ¡Si el bueno de Óscar es precisamente uno de esos asesores a los que dices que Moreno tendría que despedir porque justamente es una de las personas que trabajan con él!
Y la verdad es que sería una pena, pues si algo ha demostrado Óscar con su comentario es que hay, en efecto, vida inteligente en la 4ª planta de Blanqueries.
Se agradece, Óscar, la deportividad con la que has asumido la crítica y el tono de tu intervención. Como a todos nos gusta mucho hablar de política estaremos encantados de que te pases por aquí a discutir. De hecho, el guante que te lanza Andrés es muy interesante. Doy por hecho que la estrategia de Alarte, dado que en parte la diseñas tú, ha de pareceres más o menos adecuada. ¿Por qué crees que no funciona a pesar de que, como bien señala Andrés, contáis con las condiciones de partida soñadas por cualquier partido de la oposición -véase lo fácil que parece tenerlo Rajoy, por ejemplo, no siendo un gran candidato-?
Por supuesto, si te apetece escribir algo sobre vuestra estrategia política, explicábamos y tal, tienes la Paella a tu disposición. Porque habrás visto que esto
Es un engendro de lo más plural.
Jo també anime Óscar a que ens explique si pensa que durant aquests anys hem tingut oposició. Perquè és molt evident que la major part de la gent que escriu a La Paella Rusa pensa que no. I, de fet, estem una mica enfadats perquè, com els passa a molts altres dels que us vàrem votar, ens sentim estafats. Donada la situació en matèria econòmica, de sanitat, d’educació… al llarg d’aquests anys la veritat és que hauríem esperat alguna cosa més que el que,a efectes pràctics, ha sigut copiar les polítiques del PP però, això sí, «amb un somriure i sense furtar».
Coincido mucho con la Anguila de la Marjal y con todos los que habéis comentado después. Por mucho que Óscar parezca un chaval muy presentable, los modos de Moreno son conocidos en la ciudad y, lamentablemente para el PSPV, no dan miedo sino, más bien, risa y pena.
De mis años de Madrid me quedó una enseñanza sobre jefes de gabinete. Un buen jefe de gabinete es como una buena compresa. No se ha de notar que la llevas. No ha de apretarte. Traducido a términos políticos, que la gente de fuera sepa que existes es muy mala señal.
Que una web como ésta y otros medios de comunicación estén hablando y escribiendo de Moreno es la mejor prueba de su gigantesco fracaso (que encima sea para poner de manifiesto el ridículo matonismo del personaje, no digamos). ¡Si hiciera bien su trabajo nadie estaría hablando de él! ¿Alguien sabe quién era el jefe de gabinete de Pla? ¿Alguien puede nombrarme, fuera de quienes están en el circuito de la política profesional, al de Camps?
Un jefe de gabinete, además de discreto, algo que por lo visto Moreno no quiere ser (¿alguien se imagina al Serrano de Moncloa enviando una nota a un medio o un artículo para poner a parir a alguien?, ¡por Dios, un poco de profesionalidad!), tiene que ser eficaz. Y sólo puede serlo si es mínimamente respetado.
Eso se puede conseguir por la vía del miedo, que es la que gusta a Alarte y a Moreno. Pero aunque funcione de puertas para adentro, entre quienes lógicamente tienen miedo a perder el sueldo, de puertas para afuera es un fracaso si mandas poco o nada. Como muy bien dice la Anguila de la Marjal, esto no es Alaquàs, joder, y no se trata de controlar a la hoja parroquial del pueblo.
El respeto se consigue de muchas formas. Por ser un trabajador incansable (p. ej. De la Vega), por demostrar lealtad a la gente con la que has trabajado (lamento poner el ejemplo, pero en esto Cascos es paradigmático, en mis años de Madrid no hablaba mal de él nadie que hubiera currado con él o pactado algo con él, ni siquiera el PNV, los catalanes o mi partido), por ser brillante y saber defender políticas (Rubalcaba), por ser eficaz y conocerte todos los codos de las cañerías del sistema (Serrano)… Hay muchas posibilidades de ganarte, si no la simpatía y afecto de los tuyos, de los rivales y de los periodistas, sí EL RESPETO. Y un jefe de gabinete, ante todo, antes que miedo, ha de generar respeto. Ya digo que con el miedo, en algunos casos, puedes conseguir el respeto (se ha puesto aquí el caso de MAR) pero ni es la única vía ni funciona siempre.
Lamentablemente, con el impresentable del Moreno, que será muy brillante y agudo para el chascarrillo entre amiguetes y la gracieta a corto plazo, pero que carece de visión estratégica y que es un tipo vanidoso y en el fondo acomplejado, empeñado en achacar a los demás y a conspiraciones sólo por él imaginadas lo que es una consecuencia muy sencilla de su incompetencia y la de quienes le rodean (el estado de coma del PSPV), las cosas no tendrán arreglo. Porque él ni respeto ni miedo. Lo que da, como muy bien se ha dicho aquí, es risa. Y pena. Aunque yo la pena, sobre todo, la siento por mi partido, joder, que me lo están dejando desguazado.
Por lo demás, señor garrofó, preguntaré si es verdad eso de moreno. Creo que ya hablamos del tema. Yo es que a Alarte lo veo más o menos seguro de que continuará porque nadie querrá mover el tema en Valencia mientras dilucidan lo de Madrid. Otra cosa es que Moreno caiga. Que debería. Pero a lo mejor, a día de hoy, es el propio Alarte el que empieza a ser consciente de ello. No hay que subestimar la capacidad de Alarte para apuñalar cuando menos se lo espera uno. Lo que pasa es que con las elecciones a la vuelta de la esquina, pues no es plan de montar
Bueno, señor Martin, yo es que creo que lo de la cartita en El País es un error garrafal ya irremediable. Porque a partir de eso te resulta creíble cualquier historia de matonismo que te cuenten sobre el personaje.
De hecho, supongo que a estas alturas el propio Moreno es consciente de que fue una equivocación.
(hay otro tema, y es que a veces la pinta física de uno juega malas pasadas; de igual modo que el 99% de la gente que no conozca a Fabra tiene que creerse que es un mafioso si lo dicen los medios porque su pinta es como el arquetipo del mafioso de película; lo mismo le pasa a Moreno y su físico si se empieza a decir que es un matón que va amenazando)
A todo esto, una pregunta para todos. Y especialmente para Óscar, cuya presencia por aquí se hace cada vez más imprescindible. A saber, más allá de ser amigo de Alarte y de servirle de jefecillo de organización en Alaquàs, ¿qué formación tiene Moreno? ¿Qué experiencia y capacitación ha acreditado para estar en un puesto tan sensible?
Por poner un ejemplo tonto. Alarte lo ha designado para negociar con la gente de Camps la reforma del Estatut. Más allá de reivindicar en plan tontorrón e ingenuo que esto estaría bien que se hiciera en las Cortes y tal, lo que me pregunto es: ¿Moreno tiene formación jurídica o de algún tipo? ¿Ha trabajado en la Administración alguna vez? ¿Sabe de reparto de competencias?
Ojo, que no digo que no sepa, porque no tengo ni idea sobre el personaje. Sólo pregunto. Y muy agradecido si alguien me informa.
Hombre, señores, un poco de atención a la provincia del Submarino Amarillo, ese equipillo especializado en aguarle la fiesta al Valencia…
¿Que Fabra tiene pinta de Cappo di tutti Cappi? ¿Han visto una foto de su segundo, el alcalde de la Vall d´Alba, el alcalde heredador? Si parece salido de Sicilia y que hubiera estudiado con Salvatore Giuliano
¿Y el heredero en la Diputación? ¿ Pueden ver a Javier Moliner y no pensar en Los Soprano?
Y miren, mientras buceaba un poco en busqueda de datos con que justificar mi desconfianza en las cualidades que adornan al Sr Moliner -de cuya inteligencia no tengo duda, ser Ingeniero y al acabar la carrera simultanear puestos en el Ayuntamiento y en la Universidad dicen mucho de lo bien que va el «sistema»-, que pieza más simpatica que me he encontrado:
http://opinionesinexpertas.blogspot.com/2009/09/sr-javier-moliner-la-wikipedia-no-es.html
Si esto no dá para cortarle un par de trajes con trabillas italianas a nadie en el PP de Castellón, no se que necesitan para hacer oposición ¿Un alcalde matando gatitos?
Joder, amb el Moreno dels collons. Ara s’entenen moltes coses.
Magníficas aportaciones, tanto en el artículo como en los comentarios. La historia de Javier Moliner es de traca. Sobre todo por la falta de sutileza de esta gente a la hora de irrumpir en el espacio público de Internet para hacer propaganda de lo suyo. La Paella Rusa tiene pendiente hacer algún artículo, quizás incluso una serie, sobre la labor de los asesores y dirigentes políticos en dar el coñazo en los comentarios de los artículos e inundar twitter de consignas, para lo cual me apunto ya el cojonudo link que nos ha aportado Galaico67.
Bueno, es que los valencianos no le prestais suficiente atención al Teruel de la Comunitat.
Lo que pasa por aquí es alucionante. Quizá a mi me parece más evidente porque soy criado y crecido en tierras no benditas por el mare Nostrum, pero leer la prensa local da para muchas risas. Desde el alcalde de Castellón pagando – en grado de tentativa- por una exposición de animales disecados, hasta tener un municipio que no tiene PGOU actualizado – y que crece y crece y hace a la gente d´Or- por no adoptar sus normas a la legalidad vigente hasta el milagro de la multiplicación de los Pais y los «asesores» . O un consejero de Medi Ambient paranyer confeso
Y lo más triste es que el PSPV-sección Castellón-,con estos mimbres que desacomplejadamente le regala el PP- protesta muchas veces pero no es capaz de articular una politica consecuente. Huele todo demasiado a «famiglias», a ladrillo y a «no vamos a hacernos daño»
Y ,mientras tanto, intenta no molestar al electorado que nunca le va a votar. Parece preferir eso a intentar no avergonzar a los que les votan
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