ACTUALIDAD DE ESPAÑA FEBRERO
DE 2003
19/02/04:
ETA hace campaña
La entrada de ETA en campaña
electoral es una triste tradición de nuestra vida política.
Habitualmente, ETA hacía acto de presencia en la campaña
de una forma en la que dejaba bien patente la hondura del conflicto
político que está en la base de la terrible opresión
de Euskal Herria: asesinando gente. Esta vez, por fortuna, la situación
de debilidad de la banda es tal que su manera de enturbiar la campaña
ha sido un comunicado.
Pero no un comunicado cualquiera,
no, sino uno en el que ETA afirma su voluntad de cesar los atentados
en Cataluña, y sólo en Cataluña, pues esta
región y el País Vasco comparten muchas cosas en común,
entre ellas su bajo índice de españolidad, dice ETA,
que augura un compromiso con la Causa superior del independentismo.
Sorprendentemente, ETA no aplica
ese mismo análisis al País Vasco, donde es indudable
que el compromiso con el independentismo y la lucha contra Madrid
es si cabe aún mayor; no en vano los luchadores por la libertad
de Euskal Herria proceden de allí, el propio Gobierno vasco
está firmemente comprometido con el proyecto de Euskal Herria
y si no hubiera una inmensa mayoría de vascos deseosos de
alcanzar la independencia como fuera, ¿por qué habría
de existir ETA? ¿Para financiar su supervivencia con actividades
mafiosas?.
Las preguntas que pueda suscitar
una decisión así (¿se convierte Cataluña
en un refugio seguro para los enemigos de Euskal Herria –concejales
de pueblos de 200 habitantes y cocineros del Ejército- o
sólo para los catalanes de nacimiento? ¿Los malvados
inmigrantes andaluces, e hijos de inmigrantes nacidos en Cataluña
pero producto de un siniestro plan franquista para ahogar los sentimientos
patrióticos, forman parte del cupo? Si ETA persigue a un
siniestro político españolista y éste logra
cruzar la frontera de Cataluña ya no hay posibilidad de asesinarle?
¿Y si el Campechano se queda solo en Baqueira haciendo gala
de su campechanía?), a fin de cuentas, como es obvio, dan
totalmente igual pues los comunicados de ETA merecen exactamente
la misma credibilidad –ninguna- que las treguas de ETA, o
la ideología de ETA.
Sin embargo, las consecuencias políticas
son otras, y tras una primera reacción unánime de
todos los partidos políticos condenando el comunicado (y
por desgracia, no hemos visto que ninguno de ellos, ni siquiera
el PP, hayan aprovechado para condenar la violencia de género,
o a Sadam), cada uno ha arrimado el ascua a su sardina.
Porque
a nadie se le escapa que el comunicado de ETA es consecuencia directa
de la famosa entrevista de Carod con los terroristas,
de contenido aún desconocido pero que mucha gente (en particular,
el Gobierno) parece conocer a la perfección. Incluso con
independencia de lo que realmente discutiera Carod con los terroristas
(si nada en particular, el hombre se queda en donde antes; un ignorante;
si un acuerdo producto del cual es este comunicado, un miserable
indigno de ocupar ningún cargo público), se da la
paradoja de que todos condenan el comunicado de ETA, pero todos
le otorgan la máxima importancia. ETA, por tanto, lo ha conseguido.
Vuelven los buenos viejos tiempos
de la Ruptura de Españaza como objetivo vital de todos los
que no son el PP, con el PP como único adalid de lo netamente
hispánico. Vuelve el espectáculo lamentable de los
desencuentros PSC – PSOE (si Zapatero reaccionó bien
en el primer round, ahora se ha equivocado grandemente al echar
un nuevo pulso; bastaba con esperar a que el propio Carod desmintiese
cualquier acuerdo con ETA, como así ha hecho), y vuelve,
de nuevo, Carod Rovira, la vedette de la política española.
A uno le dan ganas de que gane el PSOE aunque sólo sea por
ver a Carod de ministro de Exteriores, entrevistándose con
los chechenos en Rusia, con los islamistas en Marruecos (no, no
con Mohamed VI, con los otros), con los independentistas corsos…
haciendo amigos.
Pero el caso es que esta vez Carod
ha hecho lo que se esperaba de él, y en lugar de pegar gritos
y postularse como objeto de plebiscito, ha confirmado que él
no tiene nada que ver con el comunicado de ETA. La verdad es que
no podría hacer otra cosa (asumir alguna relación
con esta obscena “tregua parcial” sería el fin
definitivo de su vida política, pues aunque ganara el voto
de cuatro descerebrados perdería casi todos los demás),
pero en cualquier caso el gol por la escuadra beneficia, sin duda,
al PP, aunque sólo sea por tratarse del único partido
“con posibles” de hacer algo en las elecciones que obviamente
no tiene nada que ver con Carod Rovira. Naturalmente, al PP le ha
faltado tiempo para hacer lo que más le gusta y lanzarse
al cuello, no del ex conseller sense cap, sino de sus aliados, el
ambiguo más ambiguo de todos los ambiguos, el compañero
de viaje por excelencia, el PSOE.
A decir verdad, recordando viejos
tiempos a uno le entraban ganas de coger unos cuantos F-18 y bombardear
la Generalitat y, de paso, todos los pueblos catalanes en los que
el PP no tenga mayoría absoluta, pero lamentablemente, aunque
una acción así estaría plenamente justificada
por Humanitaria, por defensora de la auténtica democracia
y por ser Cataluña, toda ella, un nido de terroristas (pues
¿no han conseguido la impunidad frente a ETA cuando ni siquiera
su tierra natal, el malvado País Vasco, la tiene?), últimamente
en LPD andamos cortos de F-18 (hemos enviado uno a Irak para bombardear
los recientemente hallados Jardines Colgantes en el primer vuelo
de testeo del aparato, y el otro no nos lo han enviado aún
de eBay), así que por momentos hemos sopesado la posibilidad
de coger unos cuantos huevos de la nevera y tirarlos en el Palau
de la Generalitat, y luego esperar la salida del Gobierno catalán
y, quién sabe, llamarlos “asesinos”. Pero una
acción así sería moralmente reprobable, por
situarnos al mismo nivel que los asesinos (no hablo aquí
del tripartito, sino de ETA; los del tripartito, por compañeros
de viaje, son mucho peores que ETA).
Así
que al final nos hemos conformado con una actividad inusual en nosotros.
Pensar un rato en lo del comunicado. Y hay que convenir que es muy
raro. Todo el mundo sabe que el PP es el máximo enemigo de
ETA, y así lo ha demostrado con su acertada (hasta que utilizaron
el CNI para hacer proselitismo electoral) política antiterrorista.
Sin embargo, ahora ETA se saca de la manga un comunicado con obvias
implicaciones políticas cuyo efecto electoral más
previsible, no se escapa ni a un niño de cinco años,
juega en beneficio del PP. Qué raro. ETA le da al PP la mayoría
absoluta. Y justo cuando acababan de publicarse unas encuestas que
ponían seriamente en duda dicha mayoría absoluta,
y apuntaban cierta recuperación del PSOE. Qué raro.
A los dos días aparece el comunicado, igualito que la primera
vez que Carod Rovira hizo su triunfal aparición en el mundo
de Bambi “dialogo con ETA para que dejen las armas porque
yo lo valgo”. Qué raro.
Guillermo
López (Valencia)
|