El árbol de la vida – Terrence Malick
Artículo aparecido originalmente en Valencia Plaza.
Con el estreno de la última película de Terrence Malick, han vuelto no las clases sociales, sino las castas. La película o fascina o provoca el tedio más absoluto. De hecho, se ha creado esa dualidad, consistente en presentar que los cinéfilos están por encima del resto de los mortales: por un lado, las televisiones se han hinchado a hacer reportajes de gente saliendo de la sala a los veinte minutos de película, entrevistando a gente que se expresaba como podía, en plan “en la pinícula hubieron muchos momentos de sueño”; por otro lado, no han parado de salir cinéfilos entendidísimos, que han dicho que la película es un gran poema, que no la puede comprender nadie que no sea un cinéfilo entendidísimo como ellos, que es una peli que habla del torrente vital que expresa la comunión del ser humano con el entorno desde una perspectiva heideggeriana (y otras cursiladas aún mayores) y, claro, a ver quién discute eso [acceso al artículo completo]
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Comentario de Rocamadour (16/10/2011 01:58):
¡No se limita usted a poner a parir la peli, va también -permítame simplificar- a por los que les ha gustado! Ahora entiendo cómo se sienten los seguidores de Juego de Tronos. En mi caso lo intentaré llevar con más deportividad: al fin y al cabo creo que compartimos nuestra admiración por David Simon… Les dejo que tengo Persona esperándome en el DVD.
Comentario de Manuel de la Fuente (16/10/2011 10:29):
No, Rocamadour. Entiendo que la película puede gustar. Lo que critico es ese discursito que ha proliferado en los medios de comunicación de críticos snobs que sueltan frasecitas en plan “película para paladares exquisitos” o “puro poema audiovisual, que no gustará a todos”. Vamos, que un poco más y dicen “no está hecha la miel para la boca del asno”. Y a mí que se hagan reseñas llamando paletos o incultos a la gente que no es cinéfila o no le gusta la peli, es algo que no me gusta nada de la prensa española. Cuando, además, tan listos como son, se les escapa el tufo Opus Dei que tiene la película. Pero Vd. es un alma sensible. Por eso no se da por aludido, porque le gusta “The Wire”. Vd. conoce el verdadero arte!
Un abrazo.
Comentario de Karraspito for President (16/10/2011 17:48):
Yo no creo que el artículo ponga a parir a la película. Simplemente intenta ponerla en su sitio, siendo como es un artículo de entretenimiento que forma parte de una industria, y no un pequeño regalo de los dioses creado desinteresadamente para el bien de la Humanidad, como algunos parece que pretenden con ciertos directores. Pero bueno, ya lo ha explicado mucho mejor el propio Manuel.
Personalmente, pienso ir a verla porque me encanta Malick (he visto “The thin red line”, como todo el mundo, y tuve la inmensa suerte de poder ver en pantalla grande “Badlands”, hace un año, y ambas me parecieron obras maestras). Sé que me va a gustar, independientemente de tufillos a Opus y demás, y agradezco a Manuel su crítica, que siempre aporta otros puntos de vista.
Un saludo.
Comentario de Karraspito for President (16/10/2011 17:49):
Terrence Malick es el Steve Jobs de la industria cinematográfica.
Comentario de Dr. Gregorio de la Casa (16/10/2011 22:36):
Pues lo que es a mí, esta crítica sí que sí.
Siempre que se olvidan de que es un arte que además consiste en 100 butacas que llenar, la joden. Y creo que Hitch no se refería sólo a la pasta.
Comentario de Álvaro (17/10/2011 11:55):
de badlands mola bastante más la historia real de esos dos pobres diablos, karraspito. el engendro poético exculpatorio que perpetró este hombre no tiene sentido ninguno. Hay un libro: http://www.amazon.com/Caril-Ninette-Beaver/dp/0397009976
Comentario de Manuel de la Fuente (17/10/2011 21:09):
Gracias a ti, Karraspito.
Un abrazo.
Comentario de de ventre (19/10/2011 23:19):
karraspito for president! el resplandor es super de serie b!
y “eyes wide shut” o “la chaqueta metálica”? ooooh, mira: sexo! ooooh, mira: violencia! y encima de kubrick: tiene que ser buena por cojones. menudo par de truños!
iñarritu es el gran bluff del cine actual. menos mal que alguien lo dice! 21 gramos era lamentable y encima si aún hubiera tenido 3d, habríamos disfrutado de los pezones de naomi watts, pero ni eso!
y además, el muy capullo se metió con alonso cuarón, como que se había vendido al cine americano! joder, si “hijos de los hombres” le da cien patadas como cine a disfrutar y cine de reflexión a cualquier basura del primero.
de malick ni me hablen! la delgada línea roja era la mayor porquería del universo. estoy con ud. manuel, los críticos son unos cretinos!
poema fílmico? poema fílmico? tocame la bolla, poyero!
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