Corea del Sur
Corea del Sur es un país situado al sureste de Corea del Norte, uno de los únicos rescoldos que quedan de la guerra fría. Como consecuencia de la subsistencia (más que existencia) de un régimen comunista al ladito (y con una frontera al más viejo estilo berlinés), Corea del Sur es mimada por los países occidentales de forma preocupante : tras haber tenido que soportar unos Juegos Olímpicos ahí, ahora nos clavan un Mundial de Fútbol a estas intempestivas horas, amargando la fiesta a más de uno. Pero todo sea por demostrar a los comunistas, lo más cerca posible de su casa, todo lo que se están perdiendo.
Con todo, Corea del Sur es un lugar medio civilizado (por mucho que esté cerca de Cuba pueden apostar a que a nadie se le ocurriría montar en Santo Domingo ni los Juegos Panamericanos), sobre todo gracias a grandes corporaciones benefactoras que realizan la labor del Estado sin padecer las cortapisas que la democracia y los derechos suponen a la hora de desarrollar una acción de gobierno firme y valiente. Bajo la égida de Hyundai, Corea del Sur ha entrado por la puerta grande (la del maletero) en el mundo civilizado.
Como prueba definitiva de lo acertado de esta afirmación queda un dato : su selección de fútbol se ha plantado en cuartos de final como si nada, casi como si fuera la selección española.
TRAYECTORIA
Corea del Sur se clasificó para los Mundiales de Italia 90 y de EE.UU. 94 (cuando la FIFA decidió que era preciso poner a simpáticos asiáticos a dar una nota de color en los estadios y lavar la vergüenza de que hasta esa fecha sólo los coreanos del norte, comunistas ellos, hubieran hecho algo en un Mundial -Inglaterra 66-). Evidentemente, pasó sin pena ni gloria por ambos campeonatos, que para algo todavía no estaban totalmente asentadas las consecuencias políticas de la caída del Muro de Berlín. A diferencia de la campanada dada por sus hermanos del Norte, los surcoreanos no habían sido capaces de ganar ni un partido.
Para evitar este tipo de enojosos problemas (que afean la capacidad de un país anfitrión como sólo España fue capaz de hacerlo en su día), los surcoreanos han montado para este ” su ” Mundial un equipo que lleva 6 meses concentrado y entrenándose, lo que le ha permitido ganar por primera vez algún partido internacional.
ASÍ JUEGAN
Dice el mito que Corea del Sur es un equipo temible por ordenado, sacrificado, disciplinado y solidario. La traducción de esta frase de entrenador que ha pasado por la Escuela de Entrenadores de la Federación al lenguaje habitual del mundo del fútbol es que “” corren como cabrones y le echan un par de pelotas “. En definitiva, que se trata de un equipo técnicamente limitado, ingenuo y sacrificado. Cada vez que un contrario recibe la pelota aparecen varios coreanos insistentemente en rededor para incordiar. Y así todo el rato.
Tácticamente, la mano de Guus Hiddink, entrenador holandés vividor y juerguista (véase su perfil en nuestra sección de entrenadores), ha modelado una selección un tanto extravagante para los cánones actuales. Pero, dado que todos los ” grandes equipos ” (Argentina, Francia, Inglaterra, España, Italia, Alemania…) fundamentan su juego en defender como posesos y fiar todas sus posibilidades a la genialidad de algún delantero, no deja de tener sentido que Corea del Sur, en ausencia de un tipo que de verdad marque diferencias, deba apostar por jugar al ataque para marcar algún gol (jugar al ataque, aclaramos, significa más o menos que haya dos o tres tipos por delante del balón en una jugada, a diferencia de los ninguno o uno del fútbol más evolucionado). Se trata de una opción táctica que nos parece inevitable y, por ello, tampoco excesivamente meritoria.
ESTRELLITAS
De acuerdo con la opinión más extendida en la prensa deportiva española, la ” estrellita ” de Corea del Sur es la FIFA, que designa árbitros que le allanen el camino. Como la prensa deportiva española es como es, y tiene esa tendencia a poner vendas a cualquier herida, no hemos de tomarnos en serio esta afirmación.
Lamentablemente, y como al resto de prensa, en ausencia de comentarios sobre arbitrajes, se nos acaba casi todo lo que podemos mencionar sobre Corea del Sur, y nos da pereza informarnos. No sabemos, en consecuencia, quién puede ser la ” estrellita ” de turno. Últimamente, es cierto, ha aparecido su delantero Hahn (o algo así), el que metió el ” gol de oro ” a Italia, con inusitado protagonismo más porque los italianos del Perugia no le renuevan el contrato que por sus calidades futbolísticas. Estos italianos, en vez de acordarse de cómo el chaval fallo el penalty pitado contra los azzurri como un chico agradecido que es han preferido centrarse en la bellaquería de su otra acción para encontrar una excusa para hacer lo que de todas formas estaban deseando : librarse de un paquete de tomo y lomo. Tampoco creemos, en consecuencia, que el tipo dé el perfil deseado como ” estrellita “.
La estrella de Corea del Sur, por impresentable, acaba siendo, en realidad, su afición : pintarrajeada, disfrazada, vestida de rojo, ignorante… cumple todos los requisitos de patetismo que harían las delicias de un dictador con ansias exterminadoras, pues representa el grado máximo de desindividualización posible en un mundo donde la competición al respecto es muy dura.
PRONÓSTICO
De nuevo en la misma tesitura que en anteriores ocasiones, este humilde glosador de las miserias de los rivales españoles se enfrenta a la terrible obligación de calibrar las posibilidades de una panda de mantas tan malos que parece imposible incluso vislumbrar la eliminación de una selección como la española. Corea del Sur, creemos, va a decir este sábado adiós a ” su ” Mundial (que se puede convertir en el Mundial de una España victoriosa tras haber vencido a Eslovenia, Paraguay, Suráfrica, Irlanda, Corea, EE.UU., y Senegal en la final).
Compartir:
Tweet
Nadie ha dicho nada aún.
Comentarios cerrados para esta entrada.