Flautas y parasitismo

Someto a su consideración una pregunta que se formula el economista Amartya Sen en su último trabajo, The idea of Justice. Básicamente Sen defiende, por un lado, pasar de iluminados que crean modelos perfectos e inatacables para concentrarse en logros más imperfectos -i.e. no hace falta que esperemos a diseñar la sociedad perfecta, bastaría con pequeños pasos como exigir a nuestro Ministro de Exteriores que luchara contra la esclavitud en lugar de ir a hacer la pelota a dictaduras totalitarias como la uzbeka sostenidas por el uso de esclavos infantiles para cultivar algodón-, y por el otro apuesta por la ética y la redistribución en contra de los yihadistas de la eficiencia. Vamos al siguiente párrafo.

Hola. Soy el siguiente párrafo -Martínez Power- y les presento a Anita, Luisito y Pepita. Anita, Luisito y Pepita se están peleando por una flauta, y berrean casi tanto tanto como un pelotón de economistas recogenueces exigiendo abaratar el despido después de que los sociópatas hundieran los mercados especulando con deuda. Con el tiempo, se van calmando como los susodichos economistas, todos ellos compungidos por el fin de la recogida de nueces motivada en el IBEX del día anterior, después de que los mismos sociópatas provocaran una subida más bestia que el advenimiento del cruyffismo-leninismo a la liga española. Se van calmando, y exponen sus motivos para quedarse con la flauta.

Anita dice que la flauta tiene que ser para ella, ya que es la única que sabe tocarla. Luisito dice que debe ser para él, ya que Anita y Pepita tienen muchos juguetes y él no tiene ninguno. Pepita, en cambio, afirma que la flauta debe corresponderle a ella, ya que es la que la ha fabricado. La primera pregunta que uno se formula es cuál de los tres (la utilitarista, el igualitarista o la libertaria) tiene razón. La segunda pregunta es cómo se puede aplicar esa solución y hasta qué punto es lícito que sea alguien de fuera el que tome una decisión y obligue a los tres niños a cumplirla.

Sin embargo, la más importante es la tercera pregunta. En estas aparece otro niño, llamado Don Emilio, que no sabe ni tocar ni fabricar la flauta, y tiene montones de juguetes, y se queda con la flauta. Ha venido con su primo, que es más alto que el FMI, más bruto que las fuerzas de seguridad, más tonto que el Gobierno y más fuerte que los sociópatas que a base de ludopatía tratan de convertir en humo las pensiones de los trabajadores, y dice que lo más eficiente -y aquí enseña unos informes con gráficas hechos por prestigiosos economistas- es que él se quede la flauta, y Anita, Luisito y Pepita obtengan a cambio un recorte de sus horas de recreo.

La tercera pregunta es: ¿Hasta cuándo?

Para los amantes de la estadística, Sen está casado con una Rothschild.

12 Comentarios en “Flautas y parasitismo”

  1. Respecto a lo de la dictadura uzbeka, supongo que el ministro de Exteriores sigue la senda del que está llamado (por él mismo, por supuesto) a ser el libertador de Catalunya… Parece ser que el susodicho hace bastantes buenas migas con la familia del presidente, en concreto con su hija (en el plano mercantil, no seais malpensados, que para cepillarse contra pago a una ciudadana de la ex-URSS no es necesario moverse del área metropolitana de Barcelona).

    Por cierto, puestos a buscar interpretaciones neoliberales a la historieta, mientras Anita, Luisito y Pepita están discutiendo, nadie está usando para nada esa flauta. Se supone que si la han fabricado, y alguien se ha molestado en aprender a tocarla, es para que la toquen. Si van a discutir y pelearse por ello, el primo del FMI encima les está haciendo un favor al eliminar un objeto de peleas. Y conociendo al género humano, los tres preferirán que se lleve la flauta alguien de fuera antes que renunciar a sus derechos en favor de uno de sus compañeros…

  2. La senda ya estaba previamente trazada, por supuesto, el campechano en todas las que puedas encontrar. Esta ya es de risa, lucha contra el terrorismo (hay que joderse):

    http://www.elpais.com/articulo/espana/Primera/visita/Espana/presidente/uzbeko/elpepiesp/20030128elpepinac_15/Tes?print=1

    Y de este domingo en el país, articulo del capitán libertad Catalán:

    http://www.elpais.com/articulo/reportajes/Laporta/diva/uzbeca/elpepusocdmg/20100509elpdmgrep_5/Tes

    Especialmente asqueroso resulta pensar que el próximo campeón de liga si Clemente y las legiones fachi-soletanas no lo impiden, lucen UNICEF en el pecho.

  3. “Tu comentario está pendiente de moderación.”

    Pero bueno…¿Y esto?,¿ Ya llego el Estalinismo?

    Hablando de recogenueces, remitirse al mejor amigo de Popota:

    http://www.lorem-ipsum.es/blogs/laleydelagravedad/2010/05/notas-sueltas-sobre-los-gnomos-de-zurich.html

  4. Lo de laporta es para mear y no echar gota. Gil y gil hablando catalán. Lo que nos faltaba.

  5. La frase:

    «más tonto que el Gobierno»

    invalida cualquier razonamiento basado en esas premisas.

    Es imposible.

  6. El ejemplo de Sem tiene un problema, creo, con lo de fabricar la flauta. Marx, supongo, distinguiría entre el trabajador que la construye y el propietario de los materiales con los que está hecha. Ya tenemos cuatro contendientes que aspiran a que les demos la flauta.

    Si nos ponemos tontos, y queremos meter a Botín en la ecuación, y haciéndolo en plan simpático, él sería el que presta el dinero para comprar los materiales y los instrumentos para fabricarla. De modo que hay 5 candidatos a quedársela:

    – El que la sabe tocar.
    – El que no la puede comprar.
    – El que ha puesto los materiales para que se fabrique.
    – El que ha currado para fabricarla.
    – El que ha prestado dinero para permitir la adquisición de materiales e instrumentos.

    El drama de nuestra sociedad es que nadie parece ver demasiado aberrante ni injusto que sea este último quien legítimamente se lleva más parte del pastel. Y que a partir de haber admitido que no nos pareciera mal que así fuera, la idea de que ello es justo ha devenido realidad inmutable, de modo que en la actualidad es incluso una evidencia moral que aspira a predicar la justicia de que quienes se dedican a eso ganen más dinero que nadie, no sean gravados con impuestos, etc.

  7. Y toque quien toque la flauta la SGAE querrá su parte.

  8. El problema es que todos dan por supuesto que alguien tiene que quedarse con la flauta, nadie parece querer renunciar voluntariamente a sus derechos, ni se les ocurre que la flauta sea de la comunidad.

    Si al final se la lleva don Emilio, es porque los demás hacen la guerra por su cuenta, defienden sus intereses y si estuviesen el la piel del tal Emilio harían exacatamente lo mismo. Si los 4 hiciesen un frente común, posiblemente Emilio tendría que salir por piernas, y su colega el forzudo posiblemente no llevaría la lealtad al extremo de recibir una buena paliza a cambio de nada; o si ha de imponerse la fuerza, puede acabar descubriendo que también le puede pegar un par de puñetazos a su amo y quedarse la flauta él…

    Bueno, en definitiva, creo que al final lo que pierde a todo el mundo es su individualismo y su mezquinidad, supongo que los que inicialmente estámn discutiendo por la flauta prefieren ver a un Emilio fastidiando a los demás por igual que ver prosperar al compañero…

  9. Lo mejor es que Anita monte una Academia de Flauta y le dé clases a Luisito. Así Luisito puede tocar la flauta y ganarse la vida (pagando, eso sí, el correspondiente canon a Pepita, que la fabricó).

    Ya tenemos a los 3 ganándose la vida, y la flauta puede ser de un cuarto (el que tenía los materiales) que a su vez se la alquila a Luisito…

  10. Yo, para ser sincero, creo que me he hecho un poco de lío con la flauta, con Anita, con Pepito y compañía. Pero en cualquier caso, posiblemente la flauta esté fabricada con materiales contaminantes, o su proceso de fabricación sea altamente contaminante y/o consuma una serie de recursos cuya disponibilidad a medio plazo no esté asegurada y además supongan un tremendo impacto social, político y cultural en las zonas donde se encuentran las materias primas necesarias. Así que mi opción es, que después de usar la flauta en una celebración erótico-festiva en la que Anita haga una perfonmance masturbatoria, se olviden de la flauta (o la echen al fuego) y busquen alternativas menos suicidas y dañinas que la flauta. Posiblemente ¿Pepito? acabe teniéndose que joder. Aunque adoptando la perspectiva de pesimista de Lluís, posiblemente todos los implicados adopten posiciones cortoplacistas, hasta que lelgue el momento en el que no haya forma de hacer más flautas y, en medio de graves perjuicios económicos y sanitarios, todos juntos se tengan que entender quieran o no.

  11. Lluis,

    Pues sí. No es que sea la solución neoliberal, es la solución moderna. La flauta encima del armario, y adiós muy buenas.

    «Bueno, en definitiva, creo que al final lo que pierde a todo el mundo es su individualismo y su mezquinidad, supongo que los que inicialmente estámn discutiendo por la flauta prefieren ver a un Emilio fastidiando a los demás por igual que ver prosperar al compañero…»

    Puede ser. De cualquier modo, yo no tengo claro que la gente no tenga derecho a ese individualismo.

    «Ya tenemos a los 3 ganándose la vida, y la flauta puede ser de un cuarto (el que tenía los materiales) que a su vez se la alquila a Luisito…»

    Ysi uno no quiere, qué hacemos? A mí soluciones cooperativas como la que esbozas me parecen bien, pero me parece que son muy difíciles de aplicar si pensamos en la propiedad de la flauta, y más fáciles de aplicar si pensamos en términos de posesión de la flauta con una propiedad colectiva e indivisa. Vamos, que la cosa me parece más sencilla de solucionar si hablamos de de derechos de posesión y de uso que de derecho de propiedad. Si encima nos las habemos con gente de esa que tiene claro al 100% que se decanta por una de esas opciones, ya ni te cuento…

    Bah,

    Esa sería la solución perroflauta no? A mí aún me faltan un par de tardes de Polanyi, que diría el Impostor…

    Saludos, gracias por las respuestas y disculpas por el retraso.

  12. Bunnymen,

    Se siente, cuando se mete más de un link en un comentario salta el radar.

    Saludos,