Reestructurar versus liquidar
Imaginemos que fulanito fabrica puré de patatas. Para hacerlo, necesita un proveedor que le venda patatas, y unos trabajadores que fabriquen el puré. Como el 99% de las empresas, fulanito está endeudado. Por los motivos que sean, fulanito sufre una caída de la demanda, y su empresa empieza a perder dinero. En ese momento, fulanito deberá renegociar con los acreedores para conseguir mantener con vida la actividad productiva.
A partir de ese momento, pueden pasar dos cosas. Fulanito puede dedicar todo el dinero que recibe de las ventas del puré a pagar a los bancos -y al estado-, dejando de lado el pago a sus trabajadores y a sus trabajadores. Los resultados de esa decisión son sencillos: los proveedores dejarán de proporcionarle patatas, los trabajadores dejarán de trabajar, fulanito llegará a unas ventas de puré de patatas de cero euros, cerrará la empresa y todo el mundo se irá a la calle.
La segunda opción es que fulanito renegocie su deuda bancaria y su deuda con el estado. Obviamente, es la única medida que puede permitir la supervivencia de la empresa, por eso en los sistemas legislativos civilizados se contempla la bancarrota como algo normal y regulado. Te pagaré más a largo plazo, te cedo acciones de la empresa, si me perdonas una parte de la deuda te abonaré el resto, etc. En fin, lo más normal del mundo para cualquier persona que sepa algo de economía.
Cambiando de tema, ahí va el texto que el PPSOE metió el pasado Agosto, en cuatro días, en la Constitución Española (135.3):
«Los créditos para satisfacer los intereses y el capital de la deuda pública de las Administraciones se entenderán siempre incluidos en el estado de gastos de sus presupuestos y su pago gozará de prioridad absoluta.»
Para acabar con un apartado de tendencias, hace poco leía a un alcalde andaluz de un municipio quebrado que la única manera de cumplir los planes de viabilidad era liquidar todos los servicios públicos y seguir cobrando impuestos. En eso estamos.
Hablando de liquidar sevicios públicos,el ayuntamiento de Madrid ,liderado por la brillante e inefable Ana Botella,está pensando en convertir el parque de bomberos que da cobertura al centro histórico de la ciudad en un spa de lujo.
http://www.huffingtonpost.es/2012/11/28/el-ayuntamiento-de-madrid_n_2206095.html
Una cosa buena es que esa mención en la Constitución se puede quitar, una mala que , votando lo que votamos, va a ser díficil….
ese alcalde andaluz no sería también sobrino del presidente de la agrupación de constructores…
Con lo fácil que hubiera sido redactar lo siguiente:
«Todos los acreedores de las administraciones españolas tienen derecho a disfrutar del cobro digno y adecuado de sus créditos. Los poderes públicos promoverán las condiciones necesarias y establecerán las normas pertinentes para hacer efectivo este derecho»
Y después, numerarlo, por ejemplo, como artículo 47bis, y pasárselo por el forro de los pantalones, o contestar un «vuelva usted mañana, si eso».
La constitución también garantiza empleo y vivienda digna, ya puestos
[…] crisis la línea roja que no se traspasa es una decisión política – o bien es la actual, el pago de una deuda asfixiante e impagable, como ordena nuestra Consti, o bien los servicios públicos y revitalizar la […]
Parvulesco,
Xapó.