La Catalunya que viene II
El Centre d’Estudis Sobiranistes ha publicado ya su propuesta de Bases para la ley de consultas populares por vía de referendum que debe elaborar el Parlament de Catalunya en cumplimiento del Estatuto.
Fracasado el intento del Estatuto de federalizar el Estado en clave plurinacional, más pronto que tarde la democracia española deberá dar salida a la creciente demanda de aplicación del derecho a decidir. Como bien dijo el Lehendakari Ibarretxe en la exitosa conferencia que dio en Barcelona, la defensa del derecho a decidir no es una cuestión de más nacionalismo, sino de más democracia. Por eso todos los partidos que estuvieron en la lucha anti-fascista, incluyendo al PSOE y al PCE, defendían entonces la aplicación del derecho de autodeterminación a las distintas naciones que conforman (hoy) España.
Es por ello interesante leerse el riguroso estudio del CES, hecho desde el escrupuloso respeto a las leyes españolas y asumiendo como punto de partida una interpretación de las mismas «contrario a Catalunya, como es costumbre». Además de responder a las cuestiones concretas -censo, carácter consultivo o vinculante, fechas, régimen electoral-, hecho que lo distancia de los brindis al sol formulados hasta ahora por los partidos catalanistas, lo más relevante del documento es que apuesta por dar la iniciativa de la convocatoria al pueblo aún cuando el gobierno o el parlamento de turno esté en contra de dicha consulta.
Está claro que la autodeterminación de un pueblo es un derecho democrático que emana de su soberanía, pero no le llamemos ‘derecho a decidir’ por favor.
Esto es demagogia. También los carcas defienden el derecho a decidir, pero en este caso los colegios católicos para sus hijos. En castellano, por supuesto.
Es un constructo mental demasiado amplio para ser defendido en un debate.
#1 popota se ha cuidado muy mucho de hablar del derecho «de un pueblo» a decidir…