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En Catalunya vuelve a amanecer-III

En Catalunya vuelve a amanecer III

�Sucede lo mismo que durante el franquismo, cuando nadie dec�a nada�
Francesc de Carreras, analista de la Catalunya real, El Inmundo, 27 de Junio de 2005

Barcelona, Agosto de 2005

Son las 10 de la ma�ana. Desde las ranuras que hay en los protectores contra granadas de las ventanas veo que hace un d�a excelente. Mi novia y yo nos calzamos las chanclas, y nos preparamos para ir a la playa.
Abro la puerta del portal, saco la cabeza y miro hacia el tejado. Por suerte, los francotiradores no nos est�n esperando: v�a libre. Agachados y protegidos por la barretina anti-balas, intentamos llegar hasta el coche. Las balas silban cerca de mis o�dos. A lo lejos se ve el humo de los bombardeos. Parece que esta noche la batalla ha sido especialmente cruenta.
Una vez dentro del coche �blindado- nos dirigimos hacia la Vil�la Ol�mpica. Cuando cruzamos la calle Val�ncia, los cuerpos de varias personas �charnegos- nos impiden continuar. Debemos bajar del coche y proseguir andando. Nos pegamos a la pared para evitar los disparos de los francotiradores del tejado.
Dos manzanas m�s abajo encontramos un taxi parado en un sem�foro. Su conductor, probablemente un oyente de la Cope, presenta un balazo en la cabeza. Saco el cuerpo del interior y proseguimos nuestro viaje a la playa. En una terraza cercana a la Pedrera se puede ver a los nacionalistas bailando sardanes, con la cabeza de un inmigrante extreme�o colgada de una lanza. Ellos s� que viven bien.
Uno de ellos se acerca a nosotros:
“Setze jutges d�un jutjat mengen fetge d�un penjat”, le digo con un profundo acento ampurdan�s.
“Poden continuar”
Fiu, por poco…
Por la calles se ve a los votantes no-nacionalistas perseguidos por los malvados fascistas de ERC. Todos con escolta, sin poder vestir un chandal con la bandera espa�ola y sin poder educar a sus hijos en Barcelona.
Mi novia me dice: “Cuidado, Popota, otro control”.
Un militante de CiU me apunta con una parabellum, claro. Ahora me acuerdo de la reuni�n de Perpignan y la Declaraci�n de Barcelona.
“Visca el Bar�a i visca la Moreneta!”
“Pot continuar”
Glups�
Ya estoy llegando a la playa, en una pared cerca de las torres Mapfre se puede ver a Maragall y Piqu� dirigiendo un pelot�n de fusilamiento donde los no-nacionalistas son pasados por las armas. A su lado, el Mariscal Roviretxe, que dirige las operaciones, analiza un mapa. Eso quiere decir que al fin los mossos est�n preparados para invadir les Illes, Valencia, la Franja aragonesa y el Rosell�n, adem�s de varios enclaves mediterr�neos.
Ya estoy en la playa. Saco la colchoneta, la toalla con los colores de la senyera y la crema solar con factor de protecci�n 15.
Esto es lo que vivimos d�a a d�a en Barcelona.
�����Oh Dios m�o, De Carreras, liberadnos!!!!!, ���Son los txarlis, no siento las piennas!!!