Arafat muere en el hospital
A pesar de que no existe confirmación oficial, la última noticia difundida por una agencia francesa de fuentes médicas indica que es irreversible la muerte cerebral de Arafat en el hospital de París. En consecuencia, lo que dice el título de esta anotación no es cierto en el momento en que escribo, pero lo será posiblemente en cuestión de horas o de pocos días. Parece ya improbable un nuevo traslado de vuelta a casa del líder palestino: la muerte le llegará en un hospital extranjero, lejos del lugar donde será enterrado. Tras entrar en coma esta mañana, los rumores sobre el fallecimiento se han sucedido hasta el punto de que durante una hora de esta tarde se daba por seguro. En cualquier caso, aquello sobre lo que tantos analistas han especulado -qué ocurrirá en Oriente Próximo tras la desaparición de Arafat- se verá pronto en la realidad. El futuro de la paz en la zona dependerá de cómo resuelvan los palestinos el «problema interno». Quizás sea el momento para que los EEUU y la UE den la talla como mediadores.
Actualización 06/11 – Larga agonía la de Arafat. Se dice en las últimas horas que su situación sigue siendo crítica pero no irreversible. Sin embargo, la sensación que está llegando a muchos es que la vida del líder palestino está en manos de la familia y de los dirigentes de la ANP. Este intervalo de tiempo salpicado de partes médicos y desmentidos está sirviendo para que la transición de poder en Palestina, a través de una dirección colegiada inédita entre las diferentes facciones, no quede fuera de control. En algún diario se apunta que Arafat ha tenido tiempo de nombrar a un sucesor. La incertidumbre no contribuye a ninguna expectativa favorable para la etapa que ya se ha abierto con un ‘rais’ más cerca de la muerte que de la vida. El propio entierro puede ser motivo de conflicto. La negativa al entierro en la Explanada de las Mezquitas ha sido ya expresada con estas palabras: «Aquí se entierra a reyes judíos, no a terroristas árabes». De nuevo, posturas irreconciliables que se apoyan en lo simbólico para condicionar el futuro de ambos pueblos.
Ganó Bush
Ganó Bush, a pesar de todo. ¿Será verdad aquello que dijo, que Dios hablaba a través de él? A la espera todavía del resultado definitivo de Ohio, los abogados empiezan a prepararse para lo que haga falta. CNN: «Projections are outstanding in the presidential election for only a handful of states with Ohio — with most of the votes counted but still too close to call — being the key. George W. Bush is ahead in projected Electoral College votes but a senior John Kerry aide early Wednesday refused to concede defeat while Ohio’s 20 Electoral College votes are still in play.» Edwards ha dicho que será contado hasta el último voto.
Actualización 17:30 – Ahora sí ha ganado, definitivamente, tras desestimarse la idea de poner a trabajar a la legión de abogados. «Kerry Concedes Defeat; Bush Wins Second Term»: «After a long night of silence, Sen. John F. Kerry called President Bush today and conceded defeat in the 2004 presidential election. The Massachusetts senator had been considering continuing his battle to win the White House with a fight over provisional ballots in the decisive state of Ohio, thinking he still stood a chance of closing a gap of about 140,000 votes separating him from Bush. He apparently changed his mind.»
El Día D
Por fin llegó el momento en que los ciudadanos de EEUU (los que votan) deciden qué pollo va a gobernar el mundo en los próximos cuatro años. Por primera vez en muchos años, la polarización es notable y casi nadie piensa que sea igual uno que otro. El pronosticador del «voto electoral», que ha estado variando todo este tiempo al ritmo de las encuestas, da ahora mismo una victoria de Kerry. Crucemos los dedos. En cualquier caso, ya se acabaron los mil y un análisis basados en especulaciones: una vez sepamos el resultado (veremos cuánto tarda el definitivo, que esa es otra), se verá qué consecuencias tiene para Europa y el resto del mundo. ¿Se acaba la era Bush? Cuidado con el insomnio.
(sigue…)