Diario de un aspirante a tertuliano

En campaña. Día 6: El Desafío

Publicado en Uncategorized por el 4 de marzo, 2004

– Peligro, peligro. En la Cope andan poco amistosos con Rajoy, o al menos con sus asesores de imagen, desde que, en la entrevista doble de Olga Viza, el candidato a Presidente-lector-del-Marca respondió que no escucha ninguna emisora de radio. ZP dijo que cuando se sube al coche sintoniza la Ser. ¡Y por qué diablos no respondió Rajoy que él escucha la Cope! Hay que ver, con el sufrido trabajo a favor de la causa que realiza Jiménez Losantos todos los días. La encuesta del CIS, con cocina o sin ella, le da al PP un resultado cercano a la mayoría absoluta. Sin embargo, todos dicen que sigue siendo alto el número de indecisos y de personas que no quieren desvelar su voto en las encuestas. Don Federico debe de ver la campaña demasiado anodina, con el riesgo consiguiente de que no se obtenga la mayoría absoluta –la otra opción es, como sabemos, el caos-, así que está alertando de que nadie se duerma en los laureles. España tiene ante sí en la próxima legislatura “El Desafío” (nacionalista, socialista y antiespañol, claro) y nadie quiere ver al pobre de Rajoy teniendo que pactar con los periféricos para poder seguir apareciendo en el telediario de TVE, ¿a que no?

En campaña. Día 5: Guiñoles

Publicado en Uncategorized por el 3 de marzo, 2004

– Un debate de verdad. A falta de un cara a cara entre los Rajoy y Zapatero reales, esta noche hemos podido ver un ágil, completo y descacharrante debate entre las réplicas del guiñol. No ha habido tema que no haya sido diseccionado por los candidatos, con los argumentos habituales que se cruzan las baterías de defensa y contraataque de los dos partidos. La capacidad retórica de los guiñoles ha superado con creces la realidad, proporcionando un intercambio muy ingenioso de respuestas a los dedos en la llaga que se ponían todo el tiempo los oponentes. El nivel, alto, de ocurrencias al que nos tiene acostumbrados el guión de los guiñoles ha brillado en esta ocasión con un debate de verdad que ya nos gustaría poder presenciar protagonizado por las réplicas de carne y hueso.

– Argumento único. El debate de los guiñoles daba buena cuenta de cuál es la línea de los discursos en estas elecciones. Todo el mundo tiene claro que para centrar el ataque al adversario hay que concentrar los argumentos en su contra en dos o tres ideas a lo sumo. Así, se puede decir que básicamente la crítica del PSOE consiste en poner el espejo frente a lo ocurrido en la legislatura de la mayoría absoluta y centrarse en que hay que cambiar de rumbo con urgencia. Por contra, el pasado que muestra el PP es idílico, lógicamente, pero prefiere orientar la mirada de los votantes hacia el futuro inmediato: no se puede poner en manos del PSOE el legado de Aznar porque ese partido y sus compañeros de viaje son unos insolventes. Con el tono del debate del guiñol, esto se resume en ZP exclamando “mirad qué ristra de problemas y de crispación deja el gobierno del PP” y Marianico que responde “pues anda que tú”.

– Verde que te quiero verde. Pasó un poco inadvertido en la precampaña, pero resulta que Los Verdes han optado por arrimarse a un buen árbol, con amplia sombra electoral, para defender su programa. En vez de plantar batalla por su cuenta y con sus siglas, una parte de los partidos verdes que existen en España -existir, existen muchos, otra cosa es que se hagan notar- ha pactado con el PSOE un programa común a cambio del apoyo en las urnas. Quizá esta circunstancia tenga relación con las nada tímidas propuestas medioambientales que ha presentado Zapatero. No es que se hayan vueltos radicales ecologistas, pero lo cierto es que el PSOE está incidiendo en una línea más verde que sirve, además, de factor diferenciador con el PP. Un breve resumen de las propuestas sería: cambios en el modelo energético, cumplir Kyoto, incentivar el “buen comportamiento ecológico” y nuevas políticas del agua.

En campaña. Día 4: Vueltas

Publicado en Uncategorized por el 2 de marzo, 2004

– Vueltas de tuerca. Estos chicos del PP deben de ser muy aficionados al bricolaje: se llevan todo el día ensayando a ver qué pasa con la siguiente vuelta de tuerca. Ahora Rajoy no se corta un pelo a la hora de colocar la política antiterrorista en el centro de la campaña. Si es tan importante, ¿no es más lógico esforzarse por mantener la lucha contra ETA al margen del debate? A este paso, van a terminar convenciendo a todo el mundo: no de que el PSOE es débil y pusilánime contra el terrorismo, sino de que la política antiterrorista es cuestionable, los consensos entre los partidos no sirven para nada y el pacto contra ETA es menos valioso que un corte de dos minutos del mitin de Mariano en el telediario de la noche. Por lo demás, es preferible seguir a Piqué en sus recomendaciones: vamos a dejar de poner a Carod en el centro del escenario; a menos que en el programa del PP se incluya el facilitar que ERC obtenga grupo propio en el Congreso, pues darle votos a los independentistas es lo único que consigue el ‘estilo Acebes’. Mejor dicho, el estilo de Acebes-Michavila-Zaplana-Trillo-largo-etc, ya que en el fondo todos están cortados por el mismo patrón que han diseñado los estrategas del PP con Rajoy y los demás jugando un papel de candidato bifronte, cuyas asperezas sólo se manifiestan por boca de los demás y no de Rajoy.

– Vuelta y vuelta. Al mismo tiempo que las generales, se celebran elecciones andaluzas. Lo recuerdo por si alguien no se ha enterado. Y es que hay cosas que existen aunque no aparezcan en los informativos de A3 o T5. Aquí los candidatos, con Chaves y Teófila al frente de la batalla, andan de descalificación en descalificación a la espera de que las urnas dicten el veredicto -de estabilidad absoluta- que se espera desde hace tiempo. Da la sensación de que en el PP-A ocupan más su tiempo en buscar las excusas para el día después que en remediar el estancamiento electoral que sufre, tan solo atenuado por la tendencia imparable hacia el bipartidismo en beneficio de los dos grandes. En cuanto al debate, las ideas que se aportan son pasadas por la parrilla, vuelta y vuelta, que manejan segundos espadas como Antonio Sanz y José Caballos, a la sazón cabezas de lista por Sevilla. Inaudita la rapidez con que del contraste de propuestas se pasa a la discusión sobre si es la Junta o el Gobierno central la administración responsable de los problemas de Andalucía. En un debate en la radio entre los dos candidatos antes citados, increíble fue también la habilidad para adjudicarse los méritos de todo lo que no es considerado como problema. Lo bueno es gracias a mí, lo malo es culpa tuya. De ahí no salen, no vaya a ser que un debate serio sobre propuestas se les fuera a indigestar.

En campaña. Días 2 y 3: Sin corbata

Publicado en Uncategorized por el 1 de marzo, 2004

– Tú a Logroño y yo a California. Los mítines de Rajoy de este fin de semana han estado acompañados de esa imagen de hombre gris que ya le adivinamos el mismo día del Dedazo. En Logroño, nevando y junto al presidente de La Rioja, ni siquiera la mano de Urdaci habría evitado una crónica electoral tan anodina. El candidato, por lo demás, no hace otra cosa que prometer más de lo ya recibido por el pueblo por obra y gracia de estos ocho años del PP. Estamos a la espera de alguna propuesta-reclamo que se saque por sorpresa de la chistera para animar el debate más allá de la descalificación global de la capacidad de los demás para gobernar. Porque, la verdad, que el partido gobernante diga que ellos son los únicos capacitados para ocupar el poder suena demasiado a tomadura de pelo, aunque la gente trague.

– Sin corbata. Mientras tanto, Zapatero se daba un baño de masas en California, quiero decir, en la capital de Andalucía, que es para los socialistas como el fértil campo californiano para los demócratas. Todavía es recordado el baranda de la Junta que dijo hace años aquello de la California europea. En Sevilla se ha presentado ZP sin corbata. Y, con bastante desparpajo, le ha pedido a Rajoy que se haga acompañar de Rato en el debate cara a cara si lo necesita para vencer sus reticencias. Al final no tendremos debate, pero sugerencias de debates a la carta no van a faltar. Yo me pido uno con Labordeta frente a todos los miembros del gobierno del PP.

– Los huevos y las cestas. Pedro Jota ha escrito este domingo un artículo -imagino que una sábana, como de costumbre- titulado «El triunfo de la moderación». No lo he leído, ni falta que me hace. En la entradilla de la versión de pago de la web de El Mundo se puede leer: «Han venido a entrevistarme dos colegas de Le Point y Liberation y les he dicho que éstas llevan camino de ser -si ETA no las enturbia con la sangre de algún asesinato- «las mejores elecciones de nuestra democracia»». Nuestro periodista favorito no da puntada sin hilo, como sabemos. Muerto y enterrado el felipismo, ¿cómo no iban a ser estas las mejores elecciones de la democracia? Además, el diario El Mundo celebrará con un gran titular la victoria de Rajoy, al que no hacen más que dedicarle elogiosos editoriales, lo mismo que si ganara Zapatero, quien no es sino el candidato socialista ‘preferido’ por Pedro Jota. Pase lo que pase, el periódico no pierde. ¿Hay alguien que no se haya dado cuenta todavía en dónde reside la grandeza del Periodismo Independiente?

– Tan español como el que más. En el nuevo programa de Olga Viza en Telecinco, les hizo la periodista una entrevista-cuestionario a los dos candidatos principales. Una de las preguntas es: ¿qué periódico compraría si sólo tuviera un euro? Zapatero responde, lógicamente y para disgusto de Pedro Jota, que El País. Con la misma rapidez en la respuesta, Rajoy dice que el Marca. Celebrada respuesta por parte de todos los ciudadanos que ya tienen decidido votar a Mariano como representante del español medio. Y depresión instantánea en el competitivo sector de la prensa centrista. Rajoy debería haber respondido: el ABC si es lunes o martes, El Mundo si es miércoles o jueves, y La Razón si es viernes o sábado. Y el domingo, el Marca, ¡por supuesto!

– La campaña tranquila de Rajoy. Las fuerzas de seguridad han evitado, por fortuna, un atentado de ETA en los próximos días. La noticia, que debería devolver la campaña a la normalidad habitual de estos periodos, pasa antes por el gabinete electoral que por el gabinete de comunicación del Ministerio. Poco se puede decir de las repugnantes declaraciones del señor Acebes acerca de quién se alegra o se deja de alegrar por tal o cual trabajo de la Guardia Civil. Las ‘salidas de tono’ ministeriales gustarán muy poco al candidato Rajoy, según él mismo dice, pero nadie evitará que este impresentable y actual (ir)responsable de la política de Interior vuelva a ocupar sillón de ministro en un nuevo gobierno del PP.

– Una propuesta para el debate. Vamos a ver si aprovechamos la campaña para el debate y los compromisos con los ciudadanos, aunque después se conviertan en compromisos incumplidos. El candidato de Izquierda Unida ha lanzado la idea de una agencia pública de transparencia para vigilar a los cargos públicos y sus patrimonios. Ésta y otras propuestas de Llamazares contra la corrupción están fuera de época, habrán pensado en el PP: esto es más propio de la etapa negra de la historia de España que se cerró en el 96. Apuesto a que a los redactores del programa electoral del partido de Rajoy ni se les ha pasado por la cabeza prometer el fin de la corrupción, cuando a todas luces ésta ya no existe. Para contraatacar, es bastante probable que el PP encargue la redacción sobre la marcha de esa parte del programa a Carlos Fabra, ínclito presidente de la Diputación de Castellón. ¿Quién mejor que él para semejante tarea?