El nudo de la corbata
Ayer asistà a mi segunda boda en apenas tres semanas. Mucho me temo que, tras años y años alejado de este tipo de celebraciones, algo ha cambiado. Porque todas las bodas a las que habÃa asistido hasta la fecha no dejaban de ser compromisos adquiridos por mis padres, y a rebufo de ellos aparecÃa yo, «el chaval», dispuesto a comer y beber todo lo que hiciera falta, entre otras cosas por el insufrible aburrimiento de la ceremonia y fastos posteriores, generalmente sentado en la mesa «joven», perpetrada por los amigos de mis padres para, teóricamente, «departir agradablemente con gente joven, como tú», un ideario de campamento tan terrorÃfico como Ustedes estarán pensando.
Justamente por eso, desde el momento en que adquirà la mayorÃa de edad legal una de las manifestaciones más sonadas de mi independencia recién adquirida fue mi negativa tajante a asistir a más bodas de compromiso en las que, en realidad, los invitados eran mis padres. Llevaba nueve años escapándome del sarao, pero ahora algo ha cambiado. Algo a un tiempo agradable y terrorÃfico: ahora me invitan a mÃ.
– Agradable porque quien se casa es amigo tuyo, y porque tienes ocasión de disfrutar de una velada rodeado de «gente joven, como tú», pero de la «buena».
– Y terrorÃfico por lo que se deduce del comentario que atinadamente me hizo un amigo en la boda de hace tres semanas: «esto de las bodas es como las palomitas. Pasado un tiempo de repente explota una, luego otra, otra más y en poquÃsimo tiempo explosionan casi todas» (ni que decir tiene que el «casi» nos deja un atisbo a la esperanza, el dicho «cuando veas las barbas de tu vecino mesar pon las tuyas a remojar» está cargado de sabidurÃa popular pero para aquellos que aún creemos en un mundo distinto, caracterizado por una redefinición y actualización constante de la compleja relación con nuestro hÃgado, la vida caótica, la Libertad en su sentido más puro, etc., Ustedes, o al menos algunos de Ustedes, ya saben de qué estoy hablando, siempre nos queda la opción de afeitarnos la barba / resistirnos por todos los medios a explosionar como las demás palomitas).
En fin, por mi parte les aseguro que sabré asumir mis responsabilidades, y no es que las tropas no regresarán el 30 de Junio, sino que se quedarán, si de mi depende, en la Base Al Solterus por los siglos de los siglos.
Pero con independencia de lo anterior, la boda de ayer sà supuso un horripilante paso adelante en la consecución de un aura de respetabilidad social, o «estás hecho todo un señor». Porque hasta ayer, en las pocas ocasiones en que no tuve más remedio que ponerme esa asquerosa e inútil prenda, inventada vayan Ustedes a saber por qué sádico del protocolo, siempre habÃa podido contar con la asesorÃa procedimental de mi padre (o «dame, que eres un inútil. Ya está»). Pero ayer mi padre estaba de vacaciones, el muy irresponsable, y hete aquà que tuve que componérmelas solo.
Hablo, como Ustedes podrán imaginarse, de la corbata. Mi padre me habÃa dado sólidas indicaciones sobre cómo hacerme el jodÃo nudo, y prometió complementarlas con una asistencia telefónica 24 h en caso de necesidad. Asà que cuando, previsoriamente, a las 17 h (dos horas antes de la boda), me dispuse a hacer el nudo, lo primero que hice fue llamar a mis padres.
A las 17.10 h habÃa comprobado en mis carnes lo cruel que puede ser mi padre en el uso de los pronombres demostrativos y personales: «primero lo pasas por ahÃ, luego a la derecha, otra vez detrás y a la derecha, por delante y vuelves a meterlo por ahû. HabÃa que hacer algo.
La solución la encontré, como tantas y tantas veces, en Internet. Les sorprenderÃa saber lo complejo y fascinante que puede resultar el mundo de los nudos de corbata. Podemos optar, de menor a mayor nivel de complejidad, por el nudo simple, el medio nudo windsor o español, y el nudo windsor o inglés, el más complejo y con mayor glamour. Pueden Ustedes imaginarse que un tipo duro como yo irÃa directamente a por el windsor.
A las 17.45 desistà de conseguir un nudo Windsor en condiciones. Mi pobre corbata, sometida a un sádico festival de giros y retorcimientos, amenazaba con cobrar vida propia. Por otro lado, el espectáculo de ver a un sujeto 45 minutos seguidos delante de un ordenador haciendo todo tipo de visajes con un trozo de tela que, en apariencia, buscaban el suicidio por autoestrangulamiento, podÃa llevar a algún vecino horrorizado a llamar a la policÃa o a los loqueros. Asà que tuve que bajarme los pantalones (metafóricamente, no ante los vecinos) y, para preservar siquiera un atisbo de mi virilidad, buscar algún término medio que no llegara a la metrosexualidad de pedir a alguno de mis amigos que se hiciera cargo de la situación y me ayudara (exactamente el mismo criterio en virtud del cual, en situaciones en las que busco una calle y no tengo ni puta idea de dónde está, prefiera tardar seis horas en encontrarla por mis propios medios. ¡La muerte antes que pedir ayuda!).
El puto nudo windsor
Pero, en el convencimiento de que alguien me podÃa decir que optar por un nudo simple era poco viril, busqué y busqué hasta encontrar la solución: el nudo americano, más versátil y sencillo que el envarado windsor (en realidad, el nudo americano es el nudo simple, pero como se llama «americano» y no «simple» como que tiene más glamour). Y en apenas un suspiro, a las 17.55, conseguà (aún no sé muy bien cómo) hacerme un nudo de la corbata más que aceptable. Prueba superada, hasta la próxima ocasión al menos. Por lo pronto, puedo decirles que en el momento del triunfo sentà un ansia infinita de paz, asà como la búsqueda del bien y la mejora en la condición social de los humildes.
¿Mi corbata de rositas?
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Ja ja ja, muy bueno. En septiembre pasé por algo similar. Me dirigía a la boda de un amigo y llegaba tarde. Como además se celebró en La Rioja, lejos de mi residencia habitual, conduje todo el camino con una vestimenta más cómoda que el traje para la boda.
Cuando ya me había cambiado y me dirigía hacia la iglesia, me percaté de lo mismo: que no sé hacerme el nudo. Así que, haciendo gala de mi metrosexualidad, al contrario que Guillermo sí pedí ayuda a un atónito transeunte (la situación era desesperada, es cierto), el cual amablemente se puso la corbata, se hizo el nudo y después se la quitó con el nudo hehcho para que me la pudiese poner yo.
Comentario escrito por Avelino — 18 de abril de 2004 a las 7:43 pm
Uhmm… ¿Debería estudiar semiótica para deducir de tu artículo un significado oculto relacionado con la retirada de las tropas de Irak? ;)
Si no, estoy de acuerdo contigo, el nudo americano también es mi favorito, para que luego nos llamen anti-USA.
Comentario escrito por JR — 18 de abril de 2004 a las 7:44 pm
Muy bueno el post.
Creo que todos hemos pasado por eso. Las primeras veces, nos lo hacía nuestro padre. Luego cualquier amigo, por las prisas y eso. Por cierto: siempre que pedimos ayuda para que nos anuden la corbata, después de casi estrangularnos, nos piden que se la demos, q sólo se la saben hacer dsd su punto de vista, es q me confundo y me queda hecha un churro.
Después llegó el gran paso: te lo haces tú y tienes los 30 segundos delante del espejo que tarda en bajar los ocho pisos el ascensor, pq las prisas aprietan, incluso más que el dichoso nudo. Puta carrera de derecho…no podía haber estudiado para jardinero?? A los jardineros no les veo cn el puto lazo de verdugo. en fin ahora es un ritual más que automático, en efecto: metes esto (lado ancho) por ahí, le das la vuelta por detrás, estiras de esto por aquí y ya estás presentable. Luego para que lleges al despacho y la secretaria del jefe t diga en plan confidencial y por hacerte un favor: no t combina la corbata con la camisa…como si encima tuviera q saber que colores van bien con otros, eso es ya para nota. Esto último no me ha pasdo todavía, gracias a Dios las corbatas me las elige mi madre.
Cambiando de tercio, ZP empieza a trabajar en domingo…
Comentario escrito por Mi casa, teléfono... — 18 de abril de 2004 a las 9:04 pm
Yo sigo en mis trece y en todas las bodas a las que he asistido no he llevado corbata! (y luego salgo en las fotos con una pinta de mafioso de tres al cuarto que ni te cuento…)
Excusa que doy: No me sale de los cojones, me aprieta y me ahoga.
Razon verdadera: No se hacerme el dichoso nudo.
Por cierto Guillermo, como en todo librito de instrucciones que se precie siempre hay un paso inexplicable que lo convierte en limitante. ¿Me podrias explicar como coño se pasa del paso 4 al paso 5 en el nudo americano?
Comentario escrito por Garganta Profunda — 18 de abril de 2004 a las 9:11 pm
La dificultad en repetir uno propio el nudo de la corbata cuando nos lo enseñan, es por causa de una apraxia ideomotora debido a lesión del hemisferio derecho del cerebro a nivel del lóbulo parietal.
Comentario escrito por Murdoch — 18 de abril de 2004 a las 9:23 pm
La pregunta es… cuando ganó el PSOE, os disteis algún golpe en la cabeza, con los saltos de alegría?
Comentario escrito por Murdoch — 18 de abril de 2004 a las 9:27 pm
Muy buena, Guillermo. Yo creo que lo del nudo nos ha pasado a todos los que hemos tenido que ponernos corbata en tan incómodo trance. Eso sí, ya verás el día que te cases (jajaja). O cuando, tras tus conocimientos recientemente adquiridos, tengas que actuar como un iniciador para otros sujetos que no tengan ni idea de cómo ponerse el bendito cachivache.
Saludos
Comentario escrito por Josh — 18 de abril de 2004 a las 9:51 pm
OFFTOPIC: Murdoch, no. Estábamos tirados por los suelos riéndonos con las reacciones de la derecha. Como hoy.
ONTOPIC: Algo que me chocó del chiringuito de corbatas de la estación de Chamartín en Madrid es que te las podían vender con el nudo ya hecho. A esto se le llama vivir el día.
Comentario escrito por JR — 18 de abril de 2004 a las 9:55 pm
Lo de la corbata no es tan terrible. En 1993 compré una corbata, y alguien me hizo el nudo. Desde entonces, la guardo (con el mismo nudo), aflojando y apretando un poco (para que pase la cabeza) cuando la necesito usar. A los 11 años puedo constatar que el nudo sigue en buen estado.
Comentario escrito por unodelos60 — 18 de abril de 2004 a las 10:04 pm
Hace unos años ví corbatas con el nudo ya hecho (fijo e inamovible) y que en realidad se ajustan al cuello con una goma. Es bastante cutre, la verdad, pero para un compromiso importante e inesperado -como la victoria de ZP- puede bastar. (Que nadie se ofenda, pero si algunos sociatas nunca fueron capaces de aceptar que Aznar se pasara por la piedra a Felipe, ¿Por qué nos sorprende ahora que los pepes aún no se hayan recuperado de las elecciones?)
Comentario escrito por l.g. — 18 de abril de 2004 a las 10:20 pm
Yo tambien tuve boda ayer y tambien aprendí a hacerme el dichoso nudo.
No sabia que fuese el americano…
Comentario escrito por Draco — 18 de abril de 2004 a las 10:21 pm
Un post oportuno (y muy bueno, por cierto), dentro de unos días me hago la foto de la graduación y luego la graduación en sí, ya sí que estoy convencido de lo que no llevaré (aunque seguro que evitaría que se te pusieran ahi, ejem).
Comentario escrito por Solid — 18 de abril de 2004 a las 10:26 pm
Hay corbatas de pega, con el nudo hecho y cogidas al cuello de la camisa con una gomilla. Es una solución.
Comentario escrito por petrus — 18 de abril de 2004 a las 10:34 pm
Solid, pues la mayoría de laboratorios fotográficos te hacen el afoto con nudo de mentirijilla (se ajustaba con pinzas).
Para la graduación en sí es otra cosa, aunque en la mía, por si te interesa, hubo mucha gente que fue sin corbata.
Comentario escrito por JR — 18 de abril de 2004 a las 10:35 pm
Que curioso, le llaman a uno señor con corbata. ¿Que le llamarían con piercing en forma de aro en el tabique nasal?. Creo recordar que esto sí que es todo un signo de originalidad y carisma.
Comentario escrito por Octubre Rojo — 19 de abril de 2004 a las 5:24 am
(Disculpen esas tildes, un lapsus)
Comentario escrito por Octubre Rojo — 19 de abril de 2004 a las 5:26 am
jajaja, pasé por algo parecido hace unas semanas, echando de menos a mi mamáaaa.
Pero no yo no salí de casa hasta que logré el puto medio nudo windsor, también vía internet!
Saludos
Comentario escrito por zruspa — 19 de abril de 2004 a las 12:49 pm
Joder Guillermo, afortunado tu, pero yo he tenido que llevar ese trapo puesto en el cuello cientos de veces (Es lo que tiene haber trabajado en «El cutre Ingles» y familia muy recta y «de toda la vida» en navidades y saraos por el estilo) Yo aprendi con la tierna cifra de 6 o 7 anyos, con una guia como la que has dado.
Garganta Profunda, para pasar del 4 al 5, lo que tienes que hacer es, cuando pasas el lado ancho por la parte de detras del nudo, lo pasas entre el nudo y la especie de prepucio que se suele formar por delante.
Animo, tampoco es tan dificil!!!
Comentario escrito por JAIME — 19 de abril de 2004 a las 2:18 pm
Me hace mogollón de gracia, porque he pasado por lo mismo. Por cierto, que el nudo que me hago siempre es el último. Es sencillo y bonito.
Tengo un librito que habla de las nosecuántas formas de anudarse la corbata, escrito por dos matemáticos. No te cuento…
Y si empiezas a ir a las bodas de los amigos, malo. Poco te queda ;)
Comentario escrito por José Carlos Rodríguez — 19 de abril de 2004 a las 3:35 pm
lo siento murdoch, resulta que zapatero ha cumplido su promesa… debe joder no?
Comentario escrito por Incitatus — 19 de abril de 2004 a las 4:45 pm
Yo pasé por lo mismo, en mi caso el tema era más peliagudo porque era un empleo lo que estaba en juego.
Gracias Google
Ahora me la hago con los ojos cerrados, el medio nudo -bien gordo y cuadrado- que el windsor me da claustrofobia.
Desde que uso corbata para trabajar y no hago botellón creo más en el déficit cero y menos en el Ché.
Comentario escrito por El duque de winsor — 19 de abril de 2004 a las 5:59 pm
¿Por qué en cuanto que se acercan los 30 años, todo dios se pone como nervioso y se empieza a casar en masa?
Misterios del código genético humano.
Comentario escrito por Ava — 19 de abril de 2004 a las 6:22 pm
Incitatus,
me gusta que la gente (aunque no lo comparta), cumpla sus promesas. Sobre todo si se han basado en ellas, para ganar votos en unas elecciones.
Un «10» para Zapatero.
Ves que fácil?
Comentario escrito por Murdoch — 19 de abril de 2004 a las 8:11 pm
Tienes razón Ava at. A partir de lo 30 todo el mundo se vuelve loco y se casa con cualquiera, con lo primero que tienen a mano. Tengo un amigo cuya novia le dan ataques de rabia furibunda e insulta al primero que pilla. (A mi ya me ha tocado dos veces).¡Y el pringao se casará con la loca esta!
Comentario escrito por Ana Tema — 19 de abril de 2004 a las 10:53 pm
Pero, ¿por qué no se puede ir sin corbata a una boda (o acontecimiento similar)?, ¿¡qué sentido tiene la corbata como prenda de vestir!?, ¿quién la inventó y con que extraña y oculta finalidad?, ¿acaso reducir el aporte de oxígeno al cerebro y conseguir así respetables y tontitos «señores»?, ¿por qué es ley que las chicas y mujeres tengan siempre que comprarse un vestido o traje nuevo (que ya nunca más se volverán a poner) para las bodas y acontecimientos similares?, ¿por qué, por qué, por qué?, ¿por qué no nos comprometemos a iniciar una revuelta popular contra todas estas convenciones sociales referidas al vestir?, ¡eso es!, ¡comprometámonos desde aquí a no llevar corbata en nuestra próxima boda!, otro mundo es posible, hagamos que sean ciertas las promesas de los profetas de la sociedad red, iniciemos una descentralizada revolución civil a través de nuestras negativas a ponernos corbatas en el gaznate.
Comentario escrito por Chemi — 20 de abril de 2004 a las 1:28 am
En mi caso, a falta de un mes escaso para mi boda, y siendo la segunda vez que voy a llevar «eso», espero que el recuerdo de tus esfuerzos me haga sentirme mejor cuando esté a punto de fallecer por asfixia. No sé qué dirá la novia, cuando vea que no aparezco.
Comentario escrito por Danuto — 20 de abril de 2004 a las 2:02 am
Yo tengo una corbata «de pega» un poco rara, con el nudo ya hecho, y que se puede aflojar o apretar con una cremallera….
no se nota nada, y es una solución adecuada para las prisas…
Comentario escrito por Burbuja — 20 de abril de 2004 a las 10:40 am
Casarse es, en términos filosóficos, pasar de la absoluta incondicionalidad a la suma determinación. Hablando en plata, se renuncia a la posibilidad total de conquista en favor de una posesión definitiva. El soltero, aunque no se coma un rosco, al menos dispone siempre de todas las hembras del planeta. Es un cazador universal que puede lanzar saetas a diestro y siniestro sin miedo a las represalias en forma de amasador de pan.
Mi sed de absoluto me impide anudarme una soga (o una corbata) al cuello.
Humilde(y libre)mente,
Scardanelli, casado con todas.
Comentario escrito por Scardanelli — 20 de abril de 2004 a las 2:20 pm
Murdoch, te estas desviando del ideario losantino ten cuidado…. yo que tu rezaba un par de padresnuestros…. recuerda ZP ha incumplido su promesa.
Comentario escrito por Inciatus — 20 de abril de 2004 a las 2:48 pm
¿Pues qué te puedo decir Guille?…sólo que si conoces algún babalao cubano vayas encomendándote a los poderes sobrenaturales de Oshún, Obatalá y otra deidad africana de nombre metrosexual.
A mi me ha pasado, antes de casarme con mi chica venezolana me explosionaron cuatroscientas bodas, algunas de ellas protagonizadas por gentes a las que repudio ontológicamente (ovbviamente las rechacé) y otras por ese primo o prima de Sabadell que sólo vemos en los funerales y que, oh casualidad, te quiere muy juntito a su lado y se pasa la noche gastándote bromas y recordándote episodios infantiles que te hacen sospechar que ésta vida es un remake de Total Recall («ni puta idea sobre lo que hablas primo» no es una frase aceptable)… en fin que luego de chorrocientas bodas vino la mía y, mira tu por donde, no ha estado tan mal la cosa ésta de estar casado y menos con mi venezolana.
Respecto de la corbata, puedo decirte Guille (a fin de saciar tu sed de conocimiento) que es un invento croata y que de hecho la voz «corbata», sería una degeneración del gentilicio y voz «croata» según he leido alguna vez. Menudo invento, a todas luces metrosexual para los cánones de la época (no recuerdo la fecha ni el siglo ni nada) y que explicaría las guerras fratricidas de la Ex-Yugoslavia, ya que millones de tíos con corbata todos los días no irrigarían la suficiente sangre como para pensar en derroteros menos violentos que la guerra.
Salud.
Comentario escrito por Strepto — 20 de abril de 2004 a las 4:12 pm
Uy, GUillermo ! Pero si eso de las bodas no es nada, disfruta, disfruta de la explosión de bodas ! Luego vienen las increíbles barrigas crecientes con sorpresa a los 9 meses. Y te puedo asegurar, que también se acumulan, como si alguien hubiera dado un chupinazo de salida !
Alex :P
Comentario escrito por Agarkala — 20 de abril de 2004 a las 5:54 pm
Lo mejor que tiene casarse es que luego te puedes divorciar.
Comentario escrito por petrus — 20 de abril de 2004 a las 6:09 pm
Joder petrus, qué poca fe en el matrimonio. ;-)
Comentario escrito por Avelino — 20 de abril de 2004 a las 6:52 pm
Ninguna. Soy un damnificado.
Comentario escrito por petrus — 20 de abril de 2004 a las 10:42 pm
Agarkala, no se pué tener más razón
Comentario escrito por José Carlos Rodríguez — 20 de abril de 2004 a las 11:46 pm
Ese nudo es un four in hand, no un americano. El americano es más complicado que ése y se parece más a un windsor. De hecho al four in hand se le llama a veces también español, aunque curiosamente en España el que se utiliza habitualmente es el italiano.
De nada
Comentario escrito por ZP — 21 de abril de 2004 a las 12:15 am
Recuerdo que hay corbatas para niños, en las que el nudo es de pega, y se abrochan con un boton o similar,muy sencillo. Supongo que existira lo mismo para adultos patosos.
Comentario escrito por Jaime — 21 de abril de 2004 a las 2:17 pm
Hola chavales
jajajajaja veo q no soy el único, a mí me pasó lo mismo en 3 bodas (sic) q tuve en Octubre y mientras empecé con las entrevistas laborales (q aunq un pibe de bigote decía q «había más empleos q trabajadores» (siguiendo con su costumbre de hacer bromas con temas intrascendentes) pues hice unas 20 hasta q me cogieron en algún lado: ir a ver al vecino y si ya se había ido coger al portero o traseuntes atónitos.
Ahora currando ya he tenido q aprender por narices.
Por cierto, un servidor se alista voluntariamente en el cuerpo Al Solterus. Todo por la causa.
Comentario escrito por Muad´Dib — 23 de abril de 2004 a las 12:32 pm
Inciatus hablas de corbatas?
PD: Nunca leo a Losantos, es un impresentable y un zumbao
Comentario escrito por Murdoch — 23 de abril de 2004 a las 5:00 pm
El nudo americano (como casi todo ultimamente) sale siempre más o menos torcido.
Comentario escrito por Junjan — 25 de abril de 2004 a las 2:15 am
Yo ya hace un monton de años que me case, y unos pocos que me divorcie. Solo de pensar en volver a casarme o, tener que ir a una boda aunque no sea la mia, me entra diarrea. Afortunadamente solo suelo asistir a borracheras de amigos que a los que sus ex les han quitado los niños, el piso, el coche, los muebles. De verdad, ¿pero quien invento eso de las bodas?.
Amigo que estes pensando en casarte, no te voy a convencer de que no te cases, pero de verdad ¿te puedes permitir el lujo de gastarte todo ese dinero en un día?. ¿Realmente necesitas 400 invitados el día de tu boda?. Piensatelo.
Comentario escrito por jodelacuesta — 26 de abril de 2004 a las 5:10 pm
Fabrico y vendo corbatas con nudo hecho y sistema de cremallera para ajustarlas al cuello
Comentario escrito por Dalmiro Coello — 26 de abril de 2004 a las 7:02 pm
gracias :Me fue muy util
favio
Comentario escrito por favio — 11 de junio de 2004 a las 11:23 pm
Bien por fin el puto nudo windsor DerechOO!!! gracias sirvio de bastante el grafico, y es verdad: «primero la muerte a que pedir ayuda»!!!
Comentario escrito por Ayala — 23 de agosto de 2004 a las 6:47 pm
si seran pendejos pinches españoles,los mexicanos para todo somos buenos,no creo que ni para hacer una corbata sean buenos,en fin ni para hablar sirven,parece que se estan atragantando con una verga.hasta luegoamigos gachupines.
Comentario escrito por omar cordova — 04 de diciembre de 2004 a las 3:25 am