Civilization V: ¿luz al final del túnel?
Hace un par de años salió el muy esperado Civilization V. Muchos fuimos los que nos compramos un nuevo ordenador, única y exclusivamente, para que la última entrega de la saga Civilization pudiera funcionar en él. Muchos los que, con un brillo fanático en los ojos, casi acorralamos al dependiente de la tienda preguntándole: “¿pero tiene la tarjeta SX23-K SVGA o la SX23-K2? ¿Cuál es de las dos? ¡Contesta! ¡CONTESTA!”. Muchos los que, en fin, recibimos con verdadera expectación el juego.
El resultado fue muy decepcionante, como ya comenté aquí. Uno está acostumbrado a llevarse decepciones en todos los órdenes de la vida, menos con La Roja (y que La Roja no decepcione, para aquellos que tenemos memoria histórica, es en sí una decepción): te decepcionan tus representantes políticos, tus jefes, tus compañeros de trabajo, tus opinólogos favoritos, tu familia, tu pareja y tus amigos… Sí, incluso los guionistas de Juego de Tronos y los concursantes de “¿Quién quiere casarse con mi hijo?” pueden decepcionarte en alguna ocasión. Pero… ¿llevarte una decepción con el Civilization? Eso era una sensación nueva.
La verdad es que el juego no había por dónde cogerlo. La IA (anteriormente conocida como «el ordenador») no había por dónde cogerla, el juego resultaba tedioso y anárquico, los gráficos eran muy pobres, la mayoría de los cambios y de las exclusiones empeoraban claramente el juego… Por primera vez, el nuevo Civilization constituía un inequívoco paso hacia atrás, en todos los aspectos, en relación con los anteriores. Así que lo metí en un cajón, me descargué un infernal modpack del Civilization IV extraordinariamente adictivo (no era cuestión de quedarme sin mi ración de horas y horas y horas perdidas jugando al Civilization) y esperé tiempos mejores.
Hace unos días, lanzaron por fin la primera expansión del Civilization V, llamada… Wars & Gods, creo, pero la verdad es que no me acuerdo. Y no la tengo aquí ahora. que a ver cómo creen que estoy aquí escribiéndoles sobre el Civilization V, en lugar de continuar jugando; pues porque no lo tengo ahora mismo. Sufro mucho (y sí: podría buscarlo en Internet. Pero ello me obligaría a dedicar más tiempo a buscarlo y menos a jugar a la partidita del Civilization 2 que acabo de comenzar, que esa es la única versión del juego que tengo en este ordenador; menos da una piedra).
Sin que el juego sea una maravilla aún (sigue muy por detrás del IV), la verdad es que han arreglado los mayores desaguisados. Vuelve la religión y el espionaje, que le dan bastante más gracia al juego. El ordenador sigue siendo bastante estúpido y resulta fácil camelárselo, pero no tanto como en la versión original. El sistema de diplomacia es una porquería. Y la gestión de las ciudades, recursos, etcétera, en general le da menos libertad y posibilidades a los usuarios. Sin embargo, al menos ahora resulta divertido jugar, y no un páramo de desesperación.
Para que lo entendamos todos: ahora parece que eres Ángela Merkel llamando a Rajoy, y no Rajoy llamando a Merkel. El sistema de batalla ofrece muchas posibilidades (un gran defecto del Civilization siempre fue que, al final, la cosa acababa resumiéndose en enviar contra el enemigo una acumulación de cientos y cientos de unidades que se atizaban contra otras tantas, y a ver quién ganaba). Algunas innovaciones del juego, como que los recursos sean limitados (si tienes caballos puedes equipar un determinado número de unidades, no infinitas), tienen su gracia. Además, probablemente haya por ahí modpacks de los usuarios que mejoren más el juego, aunque aún no he indagado.
Y, por último: han añadido nuevas civilizaciones, entre ellas dos que para alguien como yo son un “must to”: Bizancio, con su cultura, su tenacidad defensiva, su perpetua decadencia… y España. Perdón, parece que alguien no lo ha leído bien: ESPAÑA (pronúnciese con particular énfasis en la ‘P’). ¡Aproveche para jugar con ESPAÑA, antes de que se rompa y la retiren definitivamente en el Civilization VI!
Concluyo de lo cual que usted:
-Es soltero empedernido, o bien
-Tiene una relación de pareja a la franchute, esto es, en plan la tía esa que escribió el libro donde describía como se zumbaba a media Francia mientras quería mucho a su marido el escultor, cornudo consentido por tanto. Sin malicia, la cornuda en este caso es su querida Santa, y usted un enfermo del cibersexo, que cantaban las poetisas.
Rogamos ulteriores aclaraciones, o no, que mejor pensado, nos importa un guano.
Comentario escrito por Jiri — 10 de julio de 2012 a las 10:55 am
La verdad es que yo no recuerdo que el Civ V me causase tan mala impresión. Me pareció que estaba bien. Que tenia cosas buenas con respecto a los anterirores (el aspecto mas táctico del combate ahora que no podias tener 200000 tios y aparatos de guerra en el mismo sitio), peor en otras (el rollo de las ciudades-estado independientes), pero en general, mas de lo mismo pero remozado.
Aunque tambien he de decir que no me enganchó mas que una temporadita asi que no se si es que no le examiné a fondo a ver. Recuerdo, si, que tras meses de una alianza fructifera un cabrón vecino decidio merendarme a base de bien, por lo visto porque no le molaba que conquistase yo antes a nuestro enemigo común, asi que fue darle matarile a este y proceder el a invadirme todo el terreno ocupado y parte del corazón de mi patria.
Lo cual no habla tan mal de la IA, o muy mal de la natural mia, cosa que al fin al cabo es mucho mas probable.
Comentario escrito por Latro — 10 de julio de 2012 a las 12:46 pm
A partir de una cierta edad, la única forma de perder el tiempo con dignidad delante de un PC es dejarse de ‘civis’ y empezar una partida al Europa Universalis III (https://en.wikipedia.org/wiki/Europa_Universalis_III), continuar con el Victoria II (https://en.wikipedia.org/wiki/Victoria_II) y rematar con el Hearts of Iron III (https://en.wikipedia.org/wiki/Hearts_of_iron_III)
Comentario escrito por Mishima — 10 de julio de 2012 a las 10:00 pm
Mierda pa su boca. Todos sabemos que volver al Panzer General Scorched Earth es como volver al sabor de las natillas caseras de mama…
Comentario escrito por Garganta Profunda — 11 de julio de 2012 a las 12:44 am
#3, ¿No le gustó más el Victoria I que el Victoria II? Es cierto que el segundo es mucho más jugable y abruma menos con las innumerables variables del II, pero yo lo veía más flexible -Por ejemplo, la guerra carlista podian ganarla los carlistas-, y desde luego la banda sonora era otro tema. Uno se veía mejor invadiendo y anexionandose Portugal con la Kaisermarsch de Wagner mientras las pasa putas siendo dominado que con la nueva, francamente. A mi además me tarda muchísimo en cargar el juego, no sé por qué. Y sí, era caótico, pero era un juego que realmente te puteaba, en el que lo pasabas mal, sabiendo que probablemente al final nunca conseguirias tu objetivo. Ah, y podias jugar a la Primera Guerra Mundial!
Comentario escrito por Quebec — 11 de julio de 2012 a las 11:27 am
El Hearts of Iron III es infumable al lado del fantástico II. Pensar que por partir en 10 cada unidad de la edición anterior el juego es mejor es lamentable. Especialmente si te pones a manejar Alemania o la URSS.
Del CIV V, lo dicho por alguno, tampoco era tan mala. Los hexágonos y la desaaprición de los «Stacks of Doom» solo se puede considerar positivo.
En cuanto al Europa Universalis III, le he dado mil oportunidades y no acabo de engancharme. Lo inexplicable sigue siendo como hacen falta máquinas del S. XXII para manejar juegos con características técnicas del XX. Esos tiempos de carga interminables y ese aspector casposillo de la interfaz, ¿se consideran una «feature» de la casa? Personalmente no me considero más cool por jugar a algo que se vea feo y minoritario.
Comentario escrito por Pip — 11 de julio de 2012 a las 12:52 pm
Me podries llamar lo que os de la gana, pero aún reconociendo el mérito que tiene, yo no juego uno de esos de Paradox ni que me apunten con pistola; ya tengo con mi curro para romperme la cabeza como para ir a casa a intentar descifrar esos sistemas que tienen.
Aunque no estaria mal que Paradox sacase uno del mundo moderno, lo puliesen con mods y demas, y lo pusiesemos como prueba para candidados – hala, maneje usted el pais en unas 4 partidas a ver que tal le va y según el promedio que saque le dejamos o no inscribirse como candidato.
Comentario escrito por Latro — 11 de julio de 2012 a las 3:32 pm
No he probado ni el Victoria ni el Europa… Espero que sean buenos, porque los voy a probar. Del civilization, por lo que recuerdo, no me gusta la disparidad temporal de culturas.
Ahora, si quieren algo que haga sudar, prueben el Napoleon Total War en modo dificultoso. Ah, y dejando que el adversario en las batallitas sea un real player…
Comentario escrito por gekokujo — 13 de julio de 2012 a las 10:22 am
Sobre el victoria le puedo recomendar que pruebe ambos. Es verdad que el II se le hará mucho menos tedioso y mucho más progresivo que el I, pero la banda sonora del primero, sus mas variados escenarios y el encanto del puteo y de una gestión mucho mas compleja llegan a echarse de menos…Eso sí, en el I, mejor jugar con pequeñitos potentes estilo Bélgica u Holanda que con grandes potencias.
Comentario escrito por Quebec — 13 de julio de 2012 a las 9:25 pm
Probaré el Victoria I… :)
Comentario escrito por gekokujo — 20 de julio de 2012 a las 2:57 pm
[…] dieciséis años jugando al Civilization, ya iba siendo hora de expandir horizontes. Conminado por Mishima, me hice con el juego Europa Universalis 3. Un juego que permite desarrollar una nación desde la […]
Pingback escrito por Europa Universalis: el juego perfecto para independentistas catalanes | Chapapote Discursivo — 08 de agosto de 2013 a las 5:23 pm
[…] la fase “voy a novelizar el comienzo de una partida al Civilization”, “Dies the Fire” se pone en plan novela de aventuras, con todas sus características, que […]
Pingback escrito por “Dies the Fire”’ y el Emberverse – S.M. Stirling « La Página Definitiva — 22 de agosto de 2013 a las 6:56 pm