#15M: menos es más
Hace unos días comentábamos que una de las principales virtudes del movimiento #15M era la indefinición de sus objetivos. La protesta del #15M nace como respuesta a la brutal crisis económica; a las vergonzosas medidas, dictadas por los mismos que provocaron la crisis, que ha aplicado el Gobierno; a la crisis de representatividad generada por una clase política particularmente mezquina y sólidamente enquistada en los resortes del poder; por cuestiones, en fin, con las que la mayoría de la población, de generaciones diversas (léanse la impresión que se llevó mi madre –sí, mi madre, ahí es nada- de su visita a la #acampadavalencia hace un par de días), y también muchos que votan al PPSOE, puede estar de acuerdo.
Hermoso momento de reminiscencias falleras, en la Plaza del Ayuntamiento de Valencia… ¡En plena jornada de reflexión! ¡Qué escándalo!
Sin embargo, conforme pasaban los días se han dado dos procesos al mismo tiempo, realimentados el uno al otro, hasta cierto punto comprensibles, que tienen como resultado estrechar el alcance y capacidad de influencia del movimiento:
1. El público que se concentra en las plazas, que conforma las asambleas, que mueve el asunto en la calle, representa, de forma nítida, posiciones de izquierda
Es normal que así ocurra, puesto que es mayor la tradición asamblearia, movilizadora y amante de las manifestaciones poco formalizadas por parte de la izquierda que de la derecha. Los conservadores también se manifiestan (recuerden la maravillosa legislatura 2004-2008, en la que se reunían sábado sí, sábado no en Madrid para exigir que los homosexuales no se pudieran casar o que el Gobierno detuviese su afán por regalárselo absolutamente todo a la ETA), pero de forma mucho más organizada. Al menos, en España.
Pero esto tiene, como consecuencia lógica, que el público más cercano a posiciones conservadoras se aleje progresivamente del movimiento. Y es una lástima. Porque las concentraciones tendrían mucha más fuerza, desde todos los puntos de vista, si lograsen integrar al público conservador o, al menos, apolítico. El cual, por muy conservador o apolítico que sea, seguramente también está de acuerdo con los postulados básicos del movimiento y muy harto de soportar el contraste entre el impacto brutal de la crisis y la inoperancia y el afán por colocarse en puestos – chollo de la clase política. Los conservadores también lloran, también pierden su trabajo de la noche a la mañana y también tienen que soportar a la misma clase política.
2. Movidos por la lógica asamblearia y por la necesidad de demostrar que están tomando decisiones, las concentraciones están concretando principios programáticos que ya no son transversales.
Ayer la #acampadasol publicó una serie de propuestas aprobadas en la Asamblea del viernes. Encontramos una respuesta a los problemas que motivaron la movilización, pero también a otras cosas que suponen bajar mucho más a la tierra, provenientes de la agregación de diversos grupúsculos e intereses en torno a las concentraciones, y que, en fin, tienen como resultado el desarrollo de un programa político claramente apoyado en postulados políticos de izquierda, como corresponde con la gente que participa en las asambleas y que son clara mayoría en las concentraciones: el apoyo a las energías renovables, la Tasa Tobin, la derogación de la reforma universitaria de Bolonia, desvinculación total entre la Iglesia y el Estado, nacionalización de la banca que haya sido salvada por la intervención del Estado, … No podría estar más de acuerdo con todas estas medidas. Son, todas, propuestas canónicas de la izquierda situada más allá del PSOE. Es poco probable que conciten el apoyo mayoritario de la población. Y, sobre todo, no es el movimiento del #15M el que ha de canalizarlas.
A mi juicio, un movimiento de estas características puede ser útil, en el corto plazo, para influir en las elecciones de hoy. De hecho, precisamente por eso, para influir en las elecciones y conseguir la atención mediática y social, es por lo que se convocan las manifestaciones el 15 de mayo y por lo que tienen continuidad después. Pero, en el medio y largo plazo, sin duda se busca utilizar la influencia y predicamento que han conseguido las protestas como referente social para, o bien generar un movimiento político “blanco”, centrado en muy pocas propuestas, o bien para insertar en la agenda política, también en la de los partidos mayoritarios, dichas propuestas (personalmente, la segunda opción me gusta mucho más).
El problema es que lo urgente (las Elecciones Autonómicas y Municipales) puede desactivar en cierta medida lo importante. Parece claro que los resultados que se barruntaban antes del #15M, la marea azul del PP, no van a verse demasiado afectados por las concentraciones, y que a quien debilitarán todavía más, con todo merecimiento, es al PSOE. A no ser, como comentábamos en el anterior artículo, que aumente la participación, en cuyo caso alguna sorpresa –relativa- podemos llevarnos. Pero, en condiciones normales, los resultados sancionarán una gran victoria del PP a costa del hundimiento del PSOE.
Este no es el peor de los mundos posibles si asumimos, como asume el #15M, que PP y PSOE son PPSOE. Pero mucha gente influyente, afín al PSOE, que ya lleva toda la semana hablando de que la izquierda se está suicidando y cosas por el estilo (al parecer, para ellos el actual PSOE es “la izquierda”), dedicará todos sus análisis a hablar del error cometido por el #15M, de su infantilismo y falta de rigor, de su afán por influir sin legitimidad para hacerlo, de que el PSOE es la causa común, del voto útil y noeslomismo, y bla, bla, bla.
Una buena forma de blindarse frente a este tipo de consideraciones es abandonar la lógica derecha – izquierda, al menos en lo que se refiere al PPSOE. Para ello, es preciso centrarse en pocas propuestas, que claramente conciten el apoyo de una mayoría de la población, y que sean transversales en lo ideológico.
La más importante de todas, a mi juicio, es la reforma de la Ley Electoral. En el #15M subyace la idea de que las obvias carencias de representatividad de la ley actual, que favorecen poderosamente las dinámicas de voto útil al PPSOE, se solucionarían con la simplicidad de “un hombre, un voto” y circunscripción única. A mí esto me parece un error, porque sustituye la excesiva fragmentación actual por un modelo uniforme sin sensibilidad territorial. Quizás convertir las CCAA en circunscripciones podría ser un paso más razonable. Y, personalmente, no se me ocurre mejor propuesta de reforma, más sensata y adecuada para eliminar el actual déficit democrático, que la expresada por Andrés Boix: aumentar el Congreso de los Diputados a 400 y repartir los 50 nuevos escaños a partir de los votos “sobrantes”, es decir, los que hayan quedado sin representación en la asignación provincial de escaños. Este es el nudo gordiano, cuya modificación facilitaría considerablemente desfacer los muchos entuertos de una democracia tan deficitaria como la nuestra.
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Apoyo rotundamente la propuesta del Sr. Boix para la reforma de la ley electoral, si no vamos a un sistema de 350 circunscripciones con doble voto un solo candidato en lista abierta, más un banco de restos y un porcentaje de corte que se anula si se obtiene un escaño de manera directa (sistema alemán), que es la más que más democrática me parece en las simulaciones. También ha sido apoyada por políticos como Peces Barba o Llamazares. Hasta recuerdo haber leído esta carta de un exiliado que bien conozco en El País hace una temporada: http://www.elpais.com/articulo/opinion/Vaya/timo/elpepiopi/20080114elpepiopi_6/Tes
Comentario escrito por Baturrico — 22 de mayo de 2011 a las 2:23 am
Estoy de acuerdo con lo que expones al indicar que este movimiento debería concretar muy pocas reivindicaciones para evitar que parte de la sociedad se pudiese considerar excluida. Para mí, no deberían proponer soluciones sino únicamente exponer los principales problemas que se han generado en nuestra democracia para focalizar lo que hay que corregir; es decir, que intenten marcar la agenda política.
Creo que uno de los principales problemas de este movimiento es la legitimidad y representación del mismo. Buena parte de la sociedad nos podemos ver reflejados en el movimiento de protesta en sí mismo, pero realmente, hasta hoy, las personas que conforman este movimiento solo se representan a sí mismas como individuos y creo que no están en condiciones de hablar en nombre de nadie, ni siquiera en el mío, a pesar de la simpatía que tengo por esta reacción de la gente.
No creo que el movimiento pueda ser considerado unas «cortes constituyentes» que decida las soluciones que deben aplicarse para solucionar esos problemas; la adopción de soluciones nos corresponde a la totalidad de la sociedad. Desde mi punto de vista, el movimiento ya ha cumplido la finalidad que debe tener: mostrar que parte (y ojalá fuese toda) de la ciudadanía no está dispuesta a continuar por la senda marcada por partidos políticos, sindicatos y demás entes orgánicos, que consideramos que no defienden nuestros intereses y, es por lo que hemos tenido que «organizarnos» por nuestra cuenta y para protestar, precisamente, también contra los agentes que tienen la finalidad de representar a la sociedad.
A partir de ahora ya ha quedado demostrada la capacidad que tiene la sociedad para movilizarse sin el apoyo y la coordinación de las organizaciones que deberían impulsar y catalizar dichos movimientos sociales; partidos políticos, sindicatos y demás organizaciones sociales han perdido el monopolio del impulso de movilizaciones. Creo que en el futuro se van a repetir este tipo de reacciones espontáneas como protesta ante algunas futuras reformas. Mi opinión es que el movimiento, una vez hayan quedado expuestos cuales son los problemas que deben ser corregidos, debe levantar las tiendas de campaña y de forma periódica realizar presión para que los distintos agentes sociales vayan aportando sus propuestas de solución a esos problemas hasta que se corrijan las deficiencias del sistema.
Creo que sobre la base de los resultados electorales de hoy, este movimiento va a ser machacado, más todavía, por parte de medios de comunicación aludiendo a que no representan más que a 10.000 o 20.000 personas y también va a existir una interpretación torticera de los datos de la abstención, votos en blanco, nulos y de los partidos minoritarios.
Comentario escrito por menipo — 22 de mayo de 2011 a las 2:46 am
OK a la propuesta de Andrés, pero ¿que IU pase de 2 a 30 es de las diez cosas más importantes que deben pasar aquí abajo?
Comentario escrito por popota — 22 de mayo de 2011 a las 2:51 am
Independientemente de que el movimiento como tal me parezca extraordinario, a mi también me ha decepcionado un poco leer la lista de propuestas que ha salido de Sol. Me parece un programa de máximos más que de mínimos y contiene cosas que espantaran al electorado de la derecha. Y está claro que para doblegar a la inercia partitocrática se necesita sumar a gente de ambos lados. En ese sentido me parece crítico ver cómo evolucionan las cosas el lunes, cuando probablemente esté claro que el PP ha ganado (no se si mucho o poco) y el PSOE ha perdido casi todo.
Sobre el sistema que propone Andrés, aunque mucho mejor de lo que tenemos ahora, me da la sensación de que se queda algo corto. Sería muy dificil que una mayoría de votantes aprobase ampliar el número de escaños del parlamento. Probablemente lo verían como un aumento del número de estómagos agradecidos que votan automáticamente lo que su cabeza de partido indica haciendo gestitos con la mano. De hecho, nuestro parlamento sería igualmente representativo si cada partido enviase un diputado que pudiese apretar el botoncito tantas veces como escaños tuviera su partido. Romper ese círculo vicioso que encadena al diputado a la voluntad del comité del partido es, a mi juicio, más necesario que aumentar el número de partidos con representación.
Comentario escrito por InVino(Veritas) — 22 de mayo de 2011 a las 2:58 am
La propuesta que hacía Andrés es una propuesta de mínimos, que no implicase cambiar la Constitución: es lo máximo que se pueden retorcer las cosas sin cambiar la Ley Electoral, si no me equivoco. De ahí que se quede corta (a mí también me parecen muy importantes las listas abiertas, p.ej., y me consta que a él también).
El cambio de la ley electoral tiene la ventaja de que es una propuesta concreta, tangible, difícil de atacar (puesto que claramente se puede colegir, del tipo de argumentaciones geniales que hacen respecto de la Ley Electoral en el PPSOE, que lo único que les preocupa es mantener el chollo que les conviene a ellos), y con consecuencias prácticas bastante importantes. No es sólo IU, es que los movimientos protesta como este puedan influir más claramente sobre la agenda política de los partidos, y que se pueda abrir el juego democrático.
Otras propuestas más ambiciosas, que impliquen un cambio de la Constitución, son más jodidas y pueden matar a la criatura antes de tiempo. Por ejemplo, imaginémonos que, por razones no explicadas, pero derivadas de un momento de histeria colectiva y enajenación mental de los diputados, de Campechano, y de los que guardan el cortijo, se convoca un referéndum sobre el modelo de Estado.
Todos los medios del Estado, y todos los medios de comunicación con visibilidad, salvo quizás Público, los tienes dedicados a explicar a la gente que si Campechano se va, lo siguiente será un Gobierno de coalición encabezado por un dirigente de ETA cuyos antepasados, además, son catalanes. Sacas un 80% a favor de Campechano que entierra el movimiento para mucho, mucho tiempo, y que fija a Campechano al trono (bueno, a su hijo) durante décadas.
Quiero decir con esto que me parece, mucho más importante que ser ambiciosos, ser inteligentes en el manejo de los tiempos. Esto es una carrera de fondo y se trata de ir ganando apoyos, dejando que se pongan en evidencia desde el PPSOE y ensanchando mes a mes la base social de los que están cabreados con el actual estado de las cosas. Y eso sólo puede hacerse con un programa de mínimos dirigido, como bien dice menipo, a designar los problemas, no a proponer las soluciones.
Un cordial saludo
Comentario escrito por Guillermo_Lopez — 22 de mayo de 2011 a las 3:09 am
Muy de acuerdo en lo de manejar los tiempos y abstenerse de quererlo todo ya. Yo tampoco creo que una reforma constitucional sea , a dia de hoy, posible. Pero , ¿regula de la misma manera la CE el sistema electoral en ayuntamientos y comunidades autónomas? Si no me equivoco estos se rigen por Ley Orgánica, lo que les hace un blanco mucho más facil para la reforma. Además, si lo que interesa es avanzar hacia formas democráticas más participativas, el municipio es, probablemente, el sitio más lógico por donde empezar.
Saludos!
Comentario escrito por InVino(Veritas) — 22 de mayo de 2011 a las 3:43 am
Yo no sé quñe ha pasado en Sol y de dónde vienen esas propuestas exactamente, pero mucha gente, especialmente dentro de «Democracia Real Ya» están muy preocupados por lo que está ocurriendo, porque como muy bien dices, presentar un programa electoral de izquierdas, que es lo que han hecho, no tiene cabida en el espíritu que organizó el 15M.
Es una suerte que gente como escolar o vosotros estéis dando voz pública a esta crítica, esto permite ver aún una posibilidad de mantener el espíritu de DRY vivo.
Comentario escrito por Nacho Pepe — 22 de mayo de 2011 a las 3:44 am
Coincido con el comentario de @grasas en que no podemos eludir la responsabilidad de los ciudadanos en el estado actual del «Sistema». Hasta hace bien poco, todos manifestábamos abiertamente y sin rubor que la política no nos interesaba en absoluto convirtiéndonos, de ese modo,en co-responsables.
Con nuestra pasividad hemos permitido que las vacantes de los puestos de responsabilidad fueran ocupadas por oportunistas que han manejado los asuntos con la incompetencia que les caracteriza y con el único objetivo de obtener réditos económicos, políticos o sociales para sí mismos y su extensa trama de clientelismo. Y ahora que nos han tocado el bolsillo nos llenamos de indignación.
De modo que no seamos simples y tratemos de aprender de nuestros propios errores o correremos el grandísimo riesgo de desaprovechar una excelente ocasión de que éstos no se vuelvan a repetir. Estoy convencido de que podemos. Pero no se solucionará este fin de semana. Eso seguro. Adelante!
ÁcidoPúblico
Comentario escrito por ÁcidoPúblico — 22 de mayo de 2011 a las 10:29 am
Sólo necesitamos una cosa: la reforma de la iniciativa legislativa popular.
1) Las leyes que surjan de la iniciativa legislativa popular serán las normas supremas del ordenamiento jurídico.
2) No habrá materia alguna vedada a la iniciativa legislativa popular. Se suprimirá cualquier trámite previo de admisibilidad.
3) El número de firmas necesarias será el 10% del censo electoral.
4) El parlamento no podrá introducir enmiendas en las proposiciones de ley.
5) Si la proposición es rechazada por el parlamento será sometida a referéndum vinculante en un plazo no superior a tres meses. Para ser aprobadas necesitarán 3/5 de participación y 3/5 de votos afirmativos.
6) Las leyes aprobadas por este procedimiento sólo podrán ser modificadas a través de un referéndum.
Así nuestros representantes se lo pensarían dos veces antes de apartarse de unos votantes que tienen el botón de la bomba atómica.
Comentario escrito por Paco Pérez — 22 de mayo de 2011 a las 11:04 am
Yo creo que el problema principal del sistema electoral es precisamente que está demasiado basado en el criterio de territorialidad, cuando tenemos una cámara, el Senado, creada precisamente al efecto de representar los territorios.
Por ello, manteniendo la circunscripción provincial y la magnitud media de las circunscripciones (que de media oscila entre los 6 y los 7 escaños), no se ataja el problema de los efectos desproporcionales, que, recordemos, son mayores que los del sistema mayoritario americano. Los problemas de la fórmula d’Hondt se palpan cuando la magnitud media de los distritos no es mayor que 6 o 7 escaños, por encima de eso, la formula sí que genera efectos proporcionales. El problema, a mi entender, es la obsesión por hacer coincidir la circunscripción con un criterio territorial.
Por ello, creo que la traducción de votos en escaños del Congreso de los Diputados debería realizarse en distrito único sobre todo el territorio nacional, con el fin de igualar el valor democrático de cada voto, y de respetar el criterio de «un hombre, un voto» en la mejor tradición francesa, convirtiendose esta cámara en una auténtico reflejo de las opciones ciudadanas, y trasladando la representación territorial (que no ciudadana) a la cámara del Senado, que para eso existe, aumentando incluso sus competencias en materia de legislación. De este modo, los partidos nacionales con una importante dispersión del voto, obtendrían por fin un reflejo fidedigno de su apoyo electoral en todo el Estado, única forma a mi entender de atajar las dinámicas perversas del creciente bipartidismo. Si no, más representación de partidos con intereses regionales, más barrer para casa, y menos cuestionamiento de la hegemonía PPSOE en los asuntos del Estado.
Comentario escrito por Lidia — 22 de mayo de 2011 a las 11:20 am
Un muy buen post, Guillermo, iba fenomenal, todo perfecto.. ¡hasta que me citas elogiosamente! y queda muy mal que entonces venga yo aquí a decir que el comentario es cojonudo.
Pero lo es. Está perfectamente descrito por qué el movimiento #15M está llamado a tener problemas y disolverse cual azucarillo. Al decir esto no pretendo quitarle valor. Lo ha tenido, y mucho. Es un primer aviso. Y es cojonudo que la semana previa a unas elecciones haya concentrado tanto vigor ciudadano y democrático. Que la política haya salido a la calle y los ciudadanos se hayan apropiado, un poquito, de ella.
Coincido plenamente en el espíritu del mensaje: menos es más. La protesta funcionará si logran vehicular un contenido de mínimos y hacerlo visible y viable para los próximos meses. El contenido existe: esta democracia nuestra está en una fase avanzada de esclerosis y hay que dar a los ciudadanos los instrumentos de apropiarse de ella y de la toma de decisiones. Punto. Si luego, tomadas las decisiones por los ciudadanos, éstas nos llevan a las renovables o a la energía nuclear ése es otro tema.
Para lograr el paso a una democracia más participativa y donde los ciudadanos tengamos más posibilidades de actuar y determinar las decisiones, hay muchas medidas que adoptar. No se trata de si IU pasa a tener 30 escaños o 70. Se trata de que una ley electoral más justa dé la posibilidad de que los ciudadanos sientan que su voto puede ser plural porque será trasladado con más fidelidad. Y de que a partir de ahí surjan dinámicas políticas diferentes.
Pero no basta eso. Además tenemos que poner en marcha de forma urgente mecánicas complementarias de:
– participación en la toma de decisiones a escala local, que es donde es factible, de una vez por todas;
– transparencia de la acción administrativa y de las relaciones de ciudadanos y empresas con la Administración.
Entre pensar medidas para poner esas dos cosas en marcha más una buena reforma electoral tenemos ya las bases para un movimiento regenerativo potente. Y ahí hay mucho curro, mucho que debatir y mucho que proponer. Así que menos tonterías sobre educación en valores, publicidad sexista y redefinición de las fuerza armadas y vamos a empezar por el principio, por la manera en que rehacemos los cimientos del propio sistema democrático español. Porque de eso se trata.
Por cierto, y por alusiones, la propuesta de reforma es lo que considero límite (y eso estirando un poco el concepto de «circunscripción») dentro de la Constitución española. No sería mi modelo ideal, que se aproximaría a lo que he propuesto para mi Comunidad Autónoma, donde sería fácil establecerlo porque basta con cambiar la ley electoral.
http://www.elpais.com/articulo/Comunidad/Valenciana/nueva/ley/electoral/elpeputec/20101101elpval_5/Tes
Pero para llevar un cambio así a España (o el cambio a circunscripción única, o a que sean las CCAA las circunscripciones, y no las provincias, algo por cierto mucho más coherente con nuestro actual modelo de Estado que las otras dos alternativas) es preciso reformar la Constitución. Y no parece que eso sea demasiado fácil. ¿Qué se puede hacer dentro del marco que tenemos? Pues eso.
Y luego ya nos ponemos a reformar la Constitución. Con un Congreso de los diputados compuesto de la manera que se derivaría de mi propuesta quizás sería más fácil el cambio.
Respecto de la crítica que algunos hacéis de que la opinión pública no admitiría un aumento del número de diputados, lamento discrepar. Varias CCAA, entre ellas Madrid o Valencia lo han hecho, y en varias decenas, recientemente. Y eso en Cámaras autonómicas cuya actividad es, digámoslo finamente, no demasiado arrolladora (en Valencia tienen 5 meses al año de descanso y sólo durante 7 hay sesiones, por ejemplo). ¿Alguien ha escuchado alguna protesta?
Comentario escrito por Andrés Boix Palop — 22 de mayo de 2011 a las 11:39 am
Para aclarar: listas abiertas ya las hay. Se le llama «elecciones al Senado». Y no funcionan mucho mejor que lo que hay en las otras elecciones.
Por mi parte, por que no una reforma en profundidad de la ley electoral, aunque ello implique tocar articulos de nuestra constitucion? Es mas, por que debe de constar la ley electoral en la constitucion? hace falta?
Dicho esto, como dices, tocar la CE es ahora mismo tabu. Por tanto, lo mas sensato parece tocarlo todo sin tocar la CE. Elecciones en los ayuntamientos, en las CC.AA. (al menos, catalunya tiene desde 1979 pendiente la elaboracion de una ley electoral propia)… eso ya seria un gran paso para reducir la partitocracia.
Comentario escrito por CusCus — 22 de mayo de 2011 a las 11:48 am
Ya que estamos en esto: por que la ley electoral establece los bloques electorales en los medios publicos en funcion del resultado de hace 4 anhos?
Recuerdo mi primera campanha electoral en Francia (re-eleccion de Chirac): los 17 candidatos tenian exactamente el mismo espacio publico. Daba igual Chirac que Besancenot, Jospin que la mujer que pedia la independencia de Guyana. Y el mensaje podia ser altamente rupturista y renovador, permite la presencia de gente como Bayrou que no ganaran, pero ern unos pepitos grillo excelentes.
Por no decir que lo mas triste es como, ayer, los medios «privados» (con anuncios publicos) publican fotos de «los candidatos»: 5 en BCN (ignoro si los de SI, CUP, PxC, UPYD, C’s… no son ya candidatos).
Comentario escrito por CusCus — 22 de mayo de 2011 a las 11:55 am
Entiendo el planteamiento de menos es más, pero me parece un poco pronto para renunciar, permitidme la expresión, al «programa máximo».
No dudo que la opinión pública aceptaría la ampliación del número de diputados. El problema, en mi opinión, sigue siendo el discurso que legitima el cambio del sistema electoral. Existe el riesgo que de modificar únicamente la ley electoral, y no reformar la Constitución, se produzca un efecto de «arreglar un roto con un descosido», algo que es sin duda más alcanzable, pero no estoy segura de que ataje el problema de la crisis de la representatividad. Además, la clase política española tendría la coartada de paralizar una auténtica regeneración a base de este tipo de cambios. La crisis de representación necesita ser abarcada con un acercamiento máximo entre ciudadanía y representantes, y a mi entender, el distrito único permitiría una ausencia máxima de distorsión entre la voluntad ciudadana y la representacion parlamentaria. Creo que es totalmente compatible con la democracia liberal representativa. Es más, creo que no perjudica en absoluto la configuración territorial del Estado, y que la representación territorial debería ser canalizada´, repito, a través de la cámara del Senado, creada a tal efecto, y cuyas funciones han sido marginadas deliberadamente.
Por otra parte, tu propuesta Andrés, me parece compleja en cuanto a la contabilización de los restos por circuncripción. Mientras el cómputo de los votos para su traducción en escaños siga siendo la provincia (o la CA), entraríamos en el debate de premiar los restos en términos de porcentajes no representados por circunscripción (el 20% de los votos no ha sido traducido en la CA X) o de contabilizar los restos mayores en términos absolutos pero sin atender al porcentaje que representan en cada circunscripción (el 20% de los votos no ha sido contabilizado en la CA 1 pero el 15% de los votos no representados en la CA 2 es mayor en términos absolutos que el 20% de la CA1). Cuál representaríamos??? Creo que seguiríamos inmersos en la lógica de la representación basada en criterios territoriales, en una Cámara que debe de traducir la voluntad de toda la ciudadanía.
Por lo menos, da gusto poder discutir esto como posibilidades tangibles de cambio.
Comentario escrito por Lidia — 22 de mayo de 2011 a las 12:11 pm
Votos, Lidia, votos. Hay que contar votos. En concreto, los restos mayores por circunscripción de cada partido que no les han dado representación. Y así asignas los 50 diputados sobrantes a partidos. Dentro de estos partidos, luego, esos diputados se asignan por provincia, a los restos mayores, de nuevo, que no haya obtenido escaño.
Comentario escrito por Andrés Boix Palop — 22 de mayo de 2011 a las 12:14 pm
A bote pronto, y como habéis dicho, una reforma del sistema electoral vía modificación de la CE (en cuanto al sistema de circunscripciones; pagar a otros 50 diputados y subirnos a 400 me convence menos) y una transformación de la LOREG (sistema Saint-Laguë en vez de D’Hondt, doble vuelta, etc.) serían muy positivas para acabar con la partitocracia… pero es atacar una consecuencia del problema antes que una causa.
Creo mucho más necesario el potenciar el ámbito municipal y obligar a la gente a mover su culo y combatir así su idiotez (en el más estricto sentido etimológico del término), porque es muy triste limitarse a esa «pajilla» de cada cuatro años… pero follar cansa, y la gente en España se cansa más aún.
Por otro lado, si nos metemos a reformar la CE, hay más de un Título a modificar (p. ej., urge una reforma de la Justicia que saque a los partidos de la designación de altos cargos judiciales, así como una reordenación territorial y el blindaje de ciertos servicios a favor del Estado). Incluso, el catálogo de derechos fundamentales debería «empaparse» de ciertas reivindicaciones que imponen los nuevos tiempos (vivienda).
Con respecto al movimiento 15M, creo que sería muy lógico percibir cierta resaca a partir de mañana, síntoma adecuado para reorientarlo. Dentro de un mes o dos, sería mucho más efectivo, qué sé yo, montar caceroladas ante el Congreso o una iniciativa legislativa popular seria antes que limitarse a acampar en la calle.
Comentario escrito por Eugenio Martillo — 22 de mayo de 2011 a las 12:27 pm
Lidia totalmente de acuerdo contigo… lo que expones es lo que llevo defendiendo desde hace 3 dias. Quisiera exponer una serie de puntos
1.- Con la reforma propuesta de Andres, el unico efecto que se consigue es la situacion actual pero maquillada, dando a los partidos politicos que se benefician del sistema, de una excusa para estar otros 30 años con un sistema electoral no proporcional. Que es muy complicado hacer reforma constitucional en un pais con tantos cleavages y tantos intereses.. es cierto, pero es evidente que la mayoria de la ciudadania quiere una reforma real, que impacte en el resultado.
2.- Como ya expuse en el blog de andres, atar los votos a la circunscripcion provincial supone desterrar la prorpocionalidad de las provincias que no son nucloos urbanos importantes. Es cierto que soria es muy peqeña en si, pero si sumas todas las provincias con menos de 600.000 habitantes resulta.. que suman más que la poblacion capitalina que se cree con el derecho de abrorgarse para ellos solos la proporcionalidad, porque sufren un costo mayor para lograr el escaño.
3.- Como decia ayer y lida hoy, el senado tendria que ser la camara donde se vean representados los intereses autonomicos, y no en el congreso, donde se mercadea para lograr investiduras, creando provincias de primera de segunda y de tercera.
4.- La iniciativa legislativa popular esta muy bien, ahoar bien soy esceptico con la participacion ciudaana en los referendums. Si un 10% del censo electoral consgue que por cojones sus porpuestas hayan de ser votadas en referendum, la abstencion va a ser enorme. demas las propuesta seran de lo mas extrañas y variopintas.
5.- La derivacion del mvimiento en un programa electoral de izquierdas solo esta logrando la implosion del mismo desde dentro, y desfortundamente, terminara dando la razon a la cope e intereconomia, cuando despotricaban del mismo, señalando que eran los mismos de siempre. En mi pinion, se debe reducir a las exigencias primigenias, reforma de las leyes electoral y de partidos politicos.
Comentario escrito por lalo — 22 de mayo de 2011 a las 1:04 pm
otra cosa… que se me olvidaba, en el senado hay listas abiertas a medias, son listas abiertas pero bloquedas, frente a las abiertas sin bloquear. Qus su uso en el senado sea testimonial, se debe a la actual utilidad del senado español como pesebre
Comentario escrito por lalo — 22 de mayo de 2011 a las 1:16 pm
4.- La iniciativa legislativa popular esta muy bien, ahoar bien soy esceptico con la participacion ciudaana en los referendums. Si un 10% del censo electoral consgue que por cojones sus porpuestas hayan de ser votadas en referendum, la abstencion va a ser enorme. demas las propuesta seran de lo mas extrañas y variopintas.
Pues poner de acuerdo a tres millones y medio de personas en quince días no me parece tema baladí….y , aunque ofenda esa proporcionalidad total que defiendes a capa y espada, unos límites mínimos de aceptación por circunscripción autonómica ayudarían bastante a darle representatividad.
No sea que se pongan de acuerdo dos millones de madrileños y uno y medio de valencianos para tirar el estatuto catalán, por ejemplo. Aunque esta propuesta de limite autonómico sería tan federal que daría asco.
Comentario escrito por galaico67 — 22 de mayo de 2011 a las 1:26 pm
Ok.. quizas he exagerado un poco respecto a la iniciativa legislativa popular.. pero mantengo mi escepticismo sobre la participacion ciudadana en los referendums.
Comentario escrito por lalo — 22 de mayo de 2011 a las 1:35 pm
Es curioso ver cómo los salvapatrias apoyaban primero la circunscripción única, y maldecían de la provincial, que encumbraba a los paletos poco poblados en detrimento de los urbanitas apiñados.
Hasta que alguien vino a decir: «Eh, que la circunscripción única jode la sensibilidad de nuestra comunidad autónoma». A saber qué comunidad será esa, cuya sensibilidad es más importante que la sensibilidad de las provincias, o de España en su conjunto.
Y como queda un tanto feo implantar un sistema asimétrico de circunscripción única en todas partes, salvo en las comunidades sensibles (las otras, si lo son, no interesan), pues ahora se pide la circunscripción autonómica… hasta que alguien proteste por la sobrerrepresentación de La Rioja o Cantabria, y entonces se haga presión otra vez hacia la circunscripción asimétrica.
Yo creo que la solución sería un Parlamento absolutamente representativo como el italiano de los años 70 y 80: coaliciones de 5 o incluso 7 partidos, cambio de ministros cada mes, amenaza de ruptura de la coalición y cambio de presidente de gobierno cada año, ruptura efectiva de la coalición y elecciones cada dos años (que repetían el resultado anterior, y vuelta a coaligarse de nuevo)… No sé si el país saldría adelante, pero se iba a entretener del carajo. Y con tanta elección, sería un buen entrenamiento para eso que piden algunos de montar referendos continuamente.
Comentario escrito por López — 22 de mayo de 2011 a las 2:41 pm
Yo también comparto las ideas de Guillermo respecto a las acampadas, Creo que deberían centrar sus propuestas en medidas de recuperación de la política por parte de los ciudadanos. Después los que somos de izquierdas, liberales, independentistas o conservadores ya nos organizaremos para hacer propuestas concretas y dar por saco.
El problema principal que tenemos tanto en política como en economía es que los ciudadanos no tenemos ningun tipo de control sobre como van las cosas. Existe la percepción que votar, en gran medida, no sirve de nada. Para cambiar esto hay muchas ideas que se debrían pensar y promover:
– Apoyar las iniciativas legislativs populares es una. Por peligroso que parezca,
– Cambiar el sistema electoral. Aunque estoy en contra de la circunscripción única, algo se deberá hacer, aunque sea un parche parcial como el que propone Andrés (perdón por la expresión que no busca ser ofensiva).
– Fomentar al máximo la posibilidad de que nazcan nuevos movimientos políticos y que los minoritarios existentes puedan crecer. Para ello reducir el mínimo exigible del 5% al 3% siempre que sea posible, como por ejemplo en las elecciones al País Valencià (perdón también por la invasión de competencias por parte de un catalán, pero clama al cielo).
– Presionar a los medios de comunicación desde dentro desde fuera o como sea para que den más cancha a los minoritarios. Cosas como las fotos de los cinco candidatos a la alcaldía de BCN debería prohibirse por parte de la JEC.
– La política (como repite Popota sistemáticamente) no se hace solo votando, hay que participar en el mundo economico. En las empresas, en las asociaciones profesionales e intentar conseguir sindicatos o lo que sea del siglo XXI que sean independientes.
– Tal vez y en esto no estoy muy puesto, cambiar la legislación para que los delitos de corrupción relacionados con la gestión pública no prescriban a los cinco años y para que sean tratados con una mayor eficacia en cuanto a resultados. Un poco de más de rapidez no estaría mal. Millet al paso que vamos morirá de viejo antes de ser juzgado.
– Las listas abiertas o semi-abiertas también pueden ayudar, pero supongo que es difícil de cambiar.
Comentario escrito por Jordi P. — 22 de mayo de 2011 a las 2:57 pm
Estoy completamente de acuerdo con 10. De hecho, una de las mayores vergüenzas y escándalos de nuestra democracia es el Senado. No actúa como cámara territorial, no tiene poder real sobre el Congreso y mira que hay gente ahí metida llevándoselo crudo. El Senado debería ser una cámara de representación territorial para que Cuenca sea oída y tenida en cuenta y el Congreso, un hombre, un voto, sin inventos, con una regla de tres. Y todo esto implica cambiar la Constitución. Lo que siempre hemos dicho en los bares cuando sale esta conversación, recurrente como origen de todos los males del país, es que difícilmente PP y PSOE van a quitarse beneficios a sí mismos teniendo la sartén por el mango. Es como lo de las Cortes franquistas votando por la reforma. Eso sólo pasa una vez en la vida y con muchas sombras por ahí detrás.
Comentario escrito por Álvaro — 22 de mayo de 2011 a las 3:02 pm
http://www.adn.es/lavida/20110521/NWS-0285-Oficiales-GCivil-Union-concentraciones-intervenir.html
glups
Comentario escrito por karpov — 22 de mayo de 2011 a las 3:36 pm
Bueno, la evolución que comenta Guillermo en el artículo era previsible, ¿no? Si la mayor parte de la gente movilizada es más o menos de izquierdas, parece inevitable que sus propuestas también lo sean en cierta medida. Y tratándose de un movimiento espontáneo y sin organización formal ni cabezas visibles, era de esperar que se desviase de lo que esperaban los chicos de «Democracia Real Ya»; una vez se pone la bola a rodar, ésta va a su aire… Como ya se dijo por aquí estos días atrás, la ambigüedad del movimiento es al mismo tiempo su mayor fuerza y su mayor debilidad.
De todas formas, reformar la ley electoral puede ser necesario, pero no se trata de una preocupación fundamental para la mayoría de la gente. De hecho, ahora que lo pienso, muy pocos de mis conocidos podrían entender cabalmente la discusión que estáis teniendo aquí. Y no es que la gente sea tonta, sólo dedica sus energías a otras cosas. En lo único que estaríamos todos de acuerdo, y supongo que es lo que está sacando a tantas personas de casa estos días, es esa sensación difusa de que las cosas van mal y el futuro ya no es lo que era.
Comentario escrito por Eye — 22 de mayo de 2011 a las 5:47 pm
Una solución al problema logístico de las iniciativas legislativas populares es votarlas el día de las elecciones. De esta manera podríamos permitirnos reclamar un menor porcentaje de firmas para convocar iniciativas sin tener por ello que ir a votar todos los martes. Por supuesto esto no quita que otras iniciativas que sus convocantes consideren más urgentes pudieran proponerse a mitad de una legislatura. Simplemente habría que presentar un porcentaje de firmas mucho más significativo.
Comentario escrito por InVino(Veritas) — 22 de mayo de 2011 a las 6:15 pm
Copio el ladrillo del otro post y disculpen again…
Por alusiones, en qué habíamos quedado, que lo importante era el debate -heterodoxo, heterogéneo, plural, etc, etc- típico en un tejido social fuerte e independiente o unas mínimas exigencias de consenso de un bloque monolítico?
La socialdemocracia nació en unas circunstancias históricas únicas y sustentándose en un delicado equilibrio capital-trabajo con la que la masa obrera pasó a ser clase media. Pero con la globalización económica el capital es mucho más difícil de fiscalizar y controlar y la demanda de trabajo es mucho más grande (un chino/indio te hace el mismo trabajo que… etc), así que comprar derechos sale mucho más barato. El resultado es el empobrecimiento de la clase media y la recreación otra vez de una sociedad clasista, una élite con despacho entre Wall Street y la Casa Blanca, DSKs y demás, y un colectivo de trabajadores precarios con pocos derechos y un Estado de bienestar de capital privado: IKEAs, Ryanairs, Oranges, Zaras, Lidls, etc.
Eso es lo que hay. Las demandas de mínimos que salen en las comisiones a mí me parecen, aunque totalmente legítimas en un paradigma socialdemócrata, totalmente desfasadas e inviables económicamente. Muy bien, hay dinero para tapar el agujero presupuestario de España mediante progresividad fiscal. ¿Pero dónde está el poder para implementarlo? El Estado no puede fiscalizar los capitales globales, no puede frenar las deslocalizaciones de empresas y esto implica poner la socialdemocracia en crisis. Que los bancos devuelvan el dinero público implica corralito Argentina style, tasar las transacciones financieras implica fuga de capitales, reestructurar la deuda española implica el desmoronamiento del euro y la vuelta a la peseta.
Esto conlleva asumir otro punto de vista que vaya más allá de asumir vagas cartas a los reyes magos y más enfocado en qué podemos hacer nosotros mismos. En el momento que un millón de personas piden un crédito a un banco X, ese millón de personas entran en deuda con él y este banco deviene muy poderoso. Y así todo, precisamente cambiando de estilo de vida es como se rompen las lógicas viciosas de expropiación de nuestras vidas, de la economía a la escala de capitales y no de personas, etcétera.
Que eso tiene un contenido ideológico, político, por supuesto, es que cuando hay más de dos personas reunidas ya tenemos política, porque es regulación de conflictos de convivencia. El hombre es un animal político. Hasta los tríos son política. Ignorar esto dice mucho de la empanada mental de mucha gente. ¿Unirnos a partir de mínimos? ¿Democracia real? ¿Control de los partidos políticos? ¡Pero si estos “mínimos” son en realidad máximos, no hay ningún modo de llevarlos a cabo! Si hasta Merkel y Sarkozy hablaron de eliminar los paraísos fiscales y no hicieron nada de nada. Hablar de reformas electorales está bien, pero ¿qué tipo de poder tienes para llevarlo a cabo? Sólo somos 50.000 personas en plazas, esperas a que la mayoría se canse, desalojas a los que quedan y problema solucionado. Iniciativas Legislativas Populares, etcétera, no creo que solucionen en ningún caso el problema de fondo que es la viabilidad económica del sistema actual. Si hay gente que dice que profundizar en esto es politizarse, pues vale.
PD Disculpen pero mucho mucho el ladrillo.
Comentario escrito por parvulesco — 22 de mayo de 2011 a las 6:57 pm
A modo de posdata, sólo decir que cambiar la ley electoral es de las cosas más difíciles, porque quién tiene el poder para cambiarla es el más beneficiado por ella…
Comentario escrito por parvulesco — 22 de mayo de 2011 a las 6:59 pm
En todo caso, a mí me mola el rollo alemán, sistema híbrido mayoritario-proporcional con circunscripciones muy pequeñas, listas abiertas, donde el ciudadano pueda hablar con el candidato tranquilamente, y todo federal de abajo arriba. Joer cómo tengo la lengua/dedos hoy.
Comentario escrito por parvulesco — 22 de mayo de 2011 a las 7:07 pm
Viendo la participación electoral, y los resultados provisionales, la Dogflute Revolution ha sido el pedo de un bebé, magnificado por miles de altavoces.
Los que mueren a puñados en Siria y Libia, en busca de auténticas revoluciones, no sabrán si reír o llorar.
Comentario escrito por López — 22 de mayo de 2011 a las 10:19 pm
Desde el punto y hora en que asumes que tu forma de pensar (izquierda) es la única verdadera y que promueve el progreso y a lo demás le llamas, con suma condescendencia, «conservadurismo», no entiendo por qué te extrañas de que lo del 15M se haya quedado en una acampada de chavales de extrema izquierda desencantados con el PSOE y no haya conseguido aunar a gente de otras «ideologías».
Sólo de leer el programa que propusieron tras las asambleas ya se da cuenta uno de qué va la cosa.
Lo triste es que en la página del movimiento democraciaralya deslegitiman la victoria del PP porque dicen que sólo representa a un 25% de los votantes. ¿A cuantos representan ellos, al 1%? Os aseguro que me da pavor el concepto de democracia que tienen estos tíos, y me dan bastante mal rollo las cosas que se leían en muchas de las pancartas. Retrocedía uno a los tiempos de la URSS, prácticamente. El problema es que lo que proponen no sólo son medidas ultraconservadoras y regresivas (llevan un siglo inventadas), sino que encima son decididamente equivocadas, como se ha demostrado empíricamente allí donde han sido puestas en práctica.
A la izquierda (especialmente a la española) le hace falta reflexionar tras la caída del muro de Berlín, hacer una autocrítica, abandonar la retórica marxista-leninista (en algunos casos estalinista) y reformar su discurso conservador y caduco. En otros países como UK nos llevan años de ventaja en esto.
Comentario escrito por J — 23 de mayo de 2011 a las 12:33 am
J, y cómo quieres que lo llame? ¿Liberalismo? ¿Centro? Estoy haciendo un análisis en torno al eje izquierda – derecha, si unos son la izquierda, los otros son la derecha = conservadores. Cualquier otra acepción era mucho menos precisa. No tenía ningún matiz peyorativo
Comentario escrito por Guillermo_Lopez — 23 de mayo de 2011 a las 9:54 am
El movimiento 15m no se mueve en parámetros Zapatero vs Rajoy sino de Barceló vs Antonio López.
Comentario escrito por Paco Pérez — 23 de mayo de 2011 a las 10:39 am
j.. ya en suresnes el psoe rechazo la doctrina marxista leninista como tu dices, y ya aplicaron la tercera via con zpp. el siguiente paso, ya solo les queda eso en esta deriva, sería integrarse en el ala mas blanda del pp. justamente lo que tiene que hacer el psoe si quiere recuperar votos es volver a la izquierda aunque sea la mas moderada.
Sigo pensando como hace 3 dias que es necesaria la reforma electoral en españa.. y lo confirman los resultados electorales de ayer.. a los partidos nacionalistas y regionalistas tradicionales se le han sumado, sandokan, cascos, etc.. se han dado cuenta que la estrategia revilla.. somos lo mas mejor de españa y nuestras anchoas ni te cuento.. da resultado en todas las regiones de españa.. en 15 años todos seremos estupidamente regionalistas, a excepcion de madrid que velara por la integridad del imperio
Comentario escrito por lalo — 23 de mayo de 2011 a las 11:31 am
en Catalunya en las autonómicas se presentó una plataforma cívica (Ciutadans pel Canvi) ligada al PSC que tienen en el programa una ILP para una reforma de la ley electoral. Hasta hubo una comisión de expertos con una propuesta muy bien definida. ¿La respuesta de la gente? Ninguna, porque NS/NC.
Se presentaron partidos con un programa electoral idéntico a lo que se pide en las Asambleas, y la gente sigue con el «No nos representan». NS/NC generalizado.
Comentario escrito por parvulesco — 23 de mayo de 2011 a las 12:36 pm
A lo mejor es un royo mío, pero como leo a Eye por ahí arriba en una línea similar, me sumo. Francamente, creo que le dan demasiada omportancia al asunto de la reforma de la ley electoral. Parece que fuese un gran problema.
Así, a primeras me parece a mi que la CE dice algo de los partidos, sindicatos, organizaciones profesionales y patronal, algo así como que han de ser «democráticos». Mi optimismo enfermizo me hace suponer que cuando un político con mando se acostumbra a escuchar a los militantes de base, seguramente después le cueste menos escuchar al ciudadano de a pie… o al menos desarrollará algún tipo de empatía.
Ya luego nos metemos con el lío de las cámaras y la ley electoral… a ver cuál decide qué y cómo, y cómo se escogen sus integrantes. [Que sí, que esta bien tener un «centro de día» en la Plaza de la Marina Española, pero no acaba de convencer… además sin carga real de trabajo corremos el riesgo de que sus senectas señorías sufran de entumecimiento cerebral, y otras enfermedades psicolaborales.]
Comentario escrito por pululando — 23 de mayo de 2011 a las 1:26 pm
Copio y pego:
ARGUMENTOS EN CONTRA DE LA PUBLICIDAD
Algunos de los argumentos en contra de la publicidad en mercados de competencia monopolística son:
– la publicidad no es informativa, sino competitiva,
– las economías de escala son ilusorias,
– la publicidad aumenta los costes,
– los publicistas pueden utilizar su influencia para manipular los medios de comunicación,
– la publicidad se utiliza como una barrera de entrada en el mercado, y
– la publicidad no es una actividad productiva.
Comentario escrito por Paco Pérez — 23 de mayo de 2011 a las 2:07 pm
Comparando con el sistema democrático alemán, hay dos puntos importantes: por un lado mantener unos medios de comunicación públicos e independientes, que hablen en un lenguaje para alguien que ha pasado la selectividad, y en eso hay que agradecer al Sr. Rodríguez su cambio a mucho mejor, suprimiendo la publicidad (y las servidumbres que conlleva), y por otro tener un sistema representativo de las minorías. Por ello, las circunscripciones pequeñas, de unos 70mil votantes, con el banco de restos para la ‘zweite Stimme’ obtiene una representación difícilmente mejorable. El diputado está obligado a pasar un día a la semana en su circunscripción, y «queda» con los vecinos en el bar de la esquina -eso va en serio, que a mí me echaban regularmente las invitaciones en el buzón-. Y las minorías quedan representadas.
No se trata de que IU tenga 30 ó 17 diputados ó 3. Se trata de que cualquier movimiento o preocupación social pueda alcanzar representatividad y no se frustre. Así ocurrió en los 70 y 80 con Los Verdes y así ha ocurrido tras la reunificación con los postcomunistas y los disidentes socialdemócratas con La Izquierda. Había un sentir social, y se tradujo en un movimiento político.
La democracia de calidad pasa por ahí. Derecho a la información, y derecho a la representación política. Ayer Escolar da bastante en el clavo en su ‘blog’, en http://www.escolar.net/MT/archives/2011/05/cuatro-propuestas-para-una-democracia-mejor.html
Entre tanto, me seguiré muriendo de envidia cuando vea el ‘Tagesschau’ después de una jornada electoral, con las entrevistas a los candidatos en el estudio, y con las preguntas y repreguntas de cualquier periodista de los de allí.
Comentario escrito por Baturrico — 23 de mayo de 2011 a las 4:26 pm
Ah, se me fue el santo al cielo. La solución de añadir 50 diputados es la más práctica sin tocar la Constitución. El sistema alemán sería mucho mejor, pero conformarnos con esa situación mixta sería ya un gran avance.
Bloquear las mayorías absolutas y desligar RTVE y los tribunales del poder político serían un gran avance en la calidad democrática de nuestra piel de toro. Aunque igual es mucho pedir, de Cánovas y Sagasta, pasando por Primo de Rivera y Franco, que ahora tengamos una democracia seria es soñar demasiado.
Comentario escrito por Baturrico — 23 de mayo de 2011 a las 4:31 pm
De acuerdo contigo baturrico, no en vano llevo loando el sistema aleman desde hace dias…
SObre escolar… nunca me ha gustado el tio, me parece demagogo a mas no poder, y habla de las cosas de un modo superficial porque tengo la sensacion de que no da para mas. Estoy de acuerdo con las propuestas que hace.. pero de nuevo un parrafo por cada una.. asi es facil pontificar. LLevo años intentadome explicar su exito.. a excepcion de cuando contrato una becaria-actriz para que se desnudara en su blog.. luego va pontificando
Comentario escrito por lalo — 23 de mayo de 2011 a las 5:50 pm
Dos cosicas:
Aunque sea verdad como apuntan por ahi arriba que el marxismo como sistema economico es un desastre, no es menos cierto que el supuesto «cientifismo» que la escuela neoclasica -y los liberales que son sus profetas- nos quieren vender es otro pufo similar. A mi las llamadas a la dictadura del proletariado me causan la misma alergia que las invocaciones al poder salvador de un mercado que tiene tanto de libre como de popular Corea del Norte.
De momento en algunas asambleas del 15M ya han acordado mantener las convocatorias indefinidamente durante todos los domingos (al final es verdad que todo movimiento es religioso o no lo es). La idea es que sean en lugares visibles (plazas y puntos concurridos) para animar a la gente a que se sume. El objetivo es debatir en publico para demostrar que se puede y que se debe.
Comentario escrito por InVino(Veritas) — 23 de mayo de 2011 a las 7:29 pm
Hey Parvulersco, que me he leído tu ladrillo y evidentemente pones el dedo en la llaga. La sostenibilidad del sistema.
En realidad está por ver hasta dónde se podrán soportar las tensiones del mercado globalizado. En Brasil y China están tomando medidas proteccionistas para evitar precisamente un recalentamiento de sus economías. En realidad eso es una señal de que la libertad de capitales es una bomba en manos de desaprensivos. Tarde o temprano habrá que afrontar como se regula eso.
España poco puede hacer, especialmente porque ha perdido gran parte de su soberanía económica, vaya de su soberanía. Es en este sentido que comprendo que digas que cambiar las reglas políticas no va a solucionar los problemas. Pero es un paso. Para eso están las crisis.
Leo a algunos comentaristas de lo económico y se me pone la piel de gallina. España no ha tocado fondo pues aparece el espectro del hambre, está descendiendo el consumo de productos de la cesta básica. Señores, ¡hambre!
Sigo insistiendo en los paralelismos entre España 2012 y Francia 1789. Profundizar en las desigualdades sociales es coquetear con la revuelta. Y quizás el PP va a ser el catalizador de ese proceso. Tiempo al tiempo.
No me malinterpreten, no estoy apelando al retorno a la socialdemocracia. Estoy apelando a que desde la política se empiece a cuestionar el modelo económico actual, cosa que no hacen ni PP, ni PSOE. Porque hablan todo el tiempo de lo que sea, menos de los problemas reales. Por eso les pusieron en bandeja tomar la iniciativa a los chicos/as de Sol.
Comentario escrito por Gekokujo — 23 de mayo de 2011 a las 10:16 pm
El movimiento 15 M se ha ido a la mierda precisamente porque la gente que formaba parte de él no ha comprendido que no ERA ni PODÍA SER un movimiento ideológico (de izquierdas en este caso).
Cuando se rechazó el manifiesto llamado «TODOS A UNA, POR FIN» el movimiento murió. Una pena.
Comentario escrito por uhy — 24 de mayo de 2011 a las 2:47 am