Disfrutando de las entrañables fiestas
Como cualquier persona de bien, siempre he odiado la Navidad. Además de todos los factores habituales que contribuyen a la malignidad del evento (sonrisas seráficas, consumismo frenético, multitud de dÃas «superespeciales» por motivos absurdos que consisten en aunar consumismo frenético y sonrisas seráficas, …), en mi caso se une un factor definitivo: mi cumpleaños, el mismo dÃa de Navidad.
En el pasado, cumplir años el dÃa de Navidad era una desgracia, sobre todo, de orden económico. No creo que les cuente ningún secreto si les digo que para cualquier niño o adolescente tanto la Navidad como el cumpleaños, además de fechas entrañables, son, sobre todo, oportunidades de mejorar el estado de cuentas. En mi caso, la unión de navidades y cumpleaños derivaba en un espectacular desequilibrio de la balanza presupuestaria, consistente en cuatro / cinco meses de bonanza y siete (entre los cuales, para más inri, estaban los de verano) de la más absoluta penuria.
Afortunadamente, el problema económico se ha visto parcialmente superado con el discurrir de los años (ahora disfruto de penuria o bonanza, segÃn los casos, los doce meses del año, con independencia de los ingresos navideños, los cuales, por otro lado, se han visto inexplicablemente disminuidos hasta lo anecdótico conforme aumentaba mi edad y, por tanto, también mis necesidades), pero se ha visto rápidamente sustituido por el sentimental. La verdad, no es que me preocupe mucho cumplir años (aún no he llegado a la fase crÃtica de los treinta, momento en el cual sin duda acabará apareciendo el vacÃo de «Dios mÃo, tengo treinta años y ¿dónde está la novia? ¿dónde están los churumbeles? Y, por encima de todo, ¿dónde está el piso en propiedad y el contrato indefinido?»), pues uno se consuela pensando que la muerte es un evento aún relativamente lejano, y a fin de cuentas mientras el balance «aumento de esperanza de vida – edad» tienda al equilibrio tampoco hay tanto de lo que preocuparse (por ejemplo, si la esperanza de vida sube un año al año gracias a los avances en el campo de la medicina, si todo va bien, a los 100 años seguiré teniendo por delante más o menos unos 55 años de vida, tabaco y similares aparte); sin embargo, el factor de desequilibrio de aunar mi cumpleaños con la Navidad contribuye poderosamente a que este malhadado dÃa, el 25 de Diciembre, sea con gran diferencia el peor del año. Por decirlo gráficamente, no disfruto viviendo en el mundo de Bambi y Tambor, aunque sea por un dÃa, pero habrá que asumirlo.
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Pues no te felicito el cumpleaños, ya que lo pintas así. A mí tampoco me han gustado nunca las navidades, siempre se me han hecho un poco triste. Lo bueno es que con la edad por un lado se me han hecho más llevaderas, quizá por costumbre, y por otro lado he perdido un poco el reparo en escaquearme rápidamente de la interminable sobremesa de los días «señalados».
Cuando se es pequeño los padres tienen más autoridad sobre uno, pero ahora al menos ya no nos pueden ‘obligar’ a tragar con todo eso. Además mi hermano también pasa bastante, y mis padres creo que ya lo han asumido, así que básicamente mis navidades consisten en los encuentros justos de obligada cortesía, en los que procuro permanecer el tiempo mínimo para no quedar mal y poder largarme a hacer lo que me apetezca.
Comentario escrito por Avelino — 23 de diciembre de 2003 a las 8:36 pm
Pues yo tampoco te felicito si tu cumpleaños te ocasiona tantas angustias. Ese relato me ha parecido de lo más Woody Allen jejeje :-D.
Bueno, sólo decir que a mi sí me gustan las navidades, sí, sí, con dos cojones y turrón. Soy agnóstico desde hace un buen tiempo y debo confesar que cuando estoy con creyentes me ocurre como a Niesztche que si pasaba una hora con un cristiano terminaba -según sus propias palabras- dudando de sus convicciones. Afortunada o desafortunadamente no soy tan loco como Niesztche y ciertos ritos como el de visitar a los amigos y familiares y comprar regalos, suelo disfrutarlos de forma bastante sana o estúpida no sé. Lo mejor es la doble estrategia que como agnóstico hiperguay he tomado últimamente a fin de que no me asalte alguna nausea sartreana propia de tipos profundos sabeh!! : durante una partecita de la noche (hasta las doce más o menos) soy el universitario común, que tiene un trabajo común, en una oficina común, en una corporación común que se dedica a ser lo más «politically correct», a hacer regalitos y mostrarme tan suficiente como cualquiera de los gándules de Crónicas Marcianas; el otro pedazo de la noche: también, jejeje, pero me «deshinibo» un poco más me consigo con los colegas del viejo barrio, los amiguetes de la Universidad y (este año) con mi futura esposa y nos vamos de marcha como en tiempos mejores, más juveniles (es que yo ya paso los treinta pero no mucho eh!), eso sí sin perder la compostura y la figura que corresponde a caballeritos como nosotros (damas no hay nunca han habido, son otra cosa, bueno sí mi novia).
Así que creo que con esto respondo lo que alguien escribió por ahí respecto a lo lúgubres que podemos ser los que por aquí escribimos, ya ven que no lo soy tanto.
Por cierto que a modo de terapia comunicar que hoy me amonestaron en el currelo, una perfecta inútil y aduladora que ha tenido la suerte de ser jefa, me ha hecho perder mi fe en el mercado, bueno me ha hecho trastabillar en mis convicciones. Ya en serio me ha afectado, reconozco que estos tiempos precarios ponen a temblar a cualquiera. A lo mejor está nochebuena Santa me trae una consciencia progresista jejejeje.
Salud y disculpad la incoherencia y por si no les veo al que le agrade le deso Feliz Navidad y al que no Buena Marcha. Y eso si tíos sed felices hasta dónde os dejen….
Comentario escrito por Strepto — 23 de diciembre de 2003 a las 9:40 pm
Anda, aquí todo el mundo cascando de la navidad y mañana con un colocón de los buenos. Hay que pasarselo bien, si fueramos árabes pues celebrariamos el fin del ramadán o la fiesta del cordero, somos de tradición cristiana y celebramos la navidad, no hay que darles más vueltas.
Yo, me anticipo, y me estoy tomando un whiskazo (jonhnnie walker etiqueta negra), a vuestra salud. A disfrutar, que son dos días y ya vamos por la mitad.
Comentario escrito por petrus — 23 de diciembre de 2003 a las 11:24 pm
Feliz, feliz en tu día,
amiguito que Dios te bendiga,
que reine la paz en tu día
y que cumplas muchos más.
Hermoso, ¿no creéis? Los payasos de la tele eran los más grandes. Y cristianos, como Dios manda (no va a mandar ser budistas).
Me solidarizo contigo, Guillermo. Yo también sé lo que significa para un niño ahorrador, pero mal administrador, el injusto reparto que sufrimos los que cumplimos los años en estas mágicas fechas. Pronto seré treinteañero, y sin miedo a la crisis, porque por algo me llaman «crisis».
Me aburre la Navidad, ¿por qué no la quitan? No me siento en absoluto redimido por el nacimiento de un bebé judío hace más de dos mil años. Quiero celebrar el nacimiento de Bogart, o el de Sinatra, o la pasión y muerte de Billie Holiday, que esos sí que son dioses redentores. Quiero vivir en el año no sé cuantos después de Bogie. Quiero cosas verdaderamente sagradas, no dioses venidos a menos.
¡Rebelaos contra el espíritu navi-ebrio! ¡Sustituid las figurillas del belén por regalos kitsch de tiendas de chinos! ¡Poned a Gardel cantando la porquería del mundo para tapar el toque de las doce campanadas! ¡Recitad los versos del Tao te king cuando el día de reyes se reúna toda la familia al calor de las disputas de borrachos! ¡Brindad por la captura de Saddam y por el cercano exterminio de los anti-españoles nietos de anti-españoles!
Paz en la tierra a los hombres de buena voluntad (en el caso de que, además de querer el bien, esos individuos acierten al decidir qué cosa es el bien). Pero por si acaso no os fieis de los que van de buenos…
Feliz lo que sea.
Comentario escrito por Scardanelli — 24 de diciembre de 2003 a las 2:18 am
Lo de concentrar festividades como santo, cumpleaños, reyes, y ya los que andamos por la veintena entrada y échándole mucho morro cuando crios en plan pionero, Papá Noël (nunca pudimos anticipar las trágicas consecuencias en cuanto preparación del terreno para la conquista capitalista del gordo del traje rojo; nuestro afán de MÁS regalos lo hizo trágicamente posible) es una puñetera jodienda en la que me solidarizo con Guillermo al ser víctima de una situación parecida; se me junta absolutamente todo en el plazo de tres semanas y luego el resto del año siempre era una larguísima travesía del desierto de la austeridad.
Ahora todo el año es austeridad, supongo que mis padres hicieron sus cálculos y decidieron concebirme en la fecha adecuada para nacer como nací en pleno diciembre y así acostumbrarme desde niño a aceptar los ciclos económicos bruscos del capitalismo de los que sin duda y como vulgar obrero seré víctima toda mi vida hasta que algún teórico economista de prestigio lo remedie con alguna teoría absurda como invertir en páginas web.
Personalmente pienso que las Navidades sólo tienen sentido para los crios; para ellos tiene tres grandes incentivos; los regalos, las vacaciones y que todavía sus cabezas no se han ensuciado de realidad y son incapaces de percibir cuantísima falsedad hay en relaciones familiares, amistosas y vecinales de todo tipo. Desde su punto de vista papá y mamá se quieren y todo es alegría y encima te hacen regalos sin merecerlo; el puto paraiso.
Parece que el mundo adulto esté atrapado entre un hartazgo hacia estas fiestas (cosa que sería comprobable si alguien se toma la molestia de hacer una curva «nºde personas que ponen belén o árbol / edad»), sólo deseables con unas pocas personas que de verdad se valoran como valiosas en la propia vida de cada uno, y la necesidad de aparentar con una falsa sonrisa en el rostro que todo sigue siendo la sencilla felicidad y esperanza de la lejana infancia a las que el entorno obliga por:
1) Desde siglos ha, se supone que nos tenemos que alegrar desde el fondo del corazón, como decía Scardanelli, por el nacimiento de un bebé judío con presunta fimosis. Dejando a un aparte la valiosa base de las enseñanzas del tal Jesús que ha configurado buena parte de la moralidad moderna, y obviando el tema de cómo su casi totalmente desconocida figura real e histórica ha sido manipulada por los lunáticos de turno a lo largo de la historia, que naciera un supuesto Jesús en el día de la festividad del Dios Sol romano, me toca un poco la genitalia. Vamos que mirado objetivamente, es que da lo mismo, oiga. Y no creo que yo sea una excepción por mucho que la gente diga después «yo soy católico no practicante», expresión que debería haber parido Groucho Marx como ejemplo de la tontería humana.
2)Se supone que son tiempos en los que debemos sentir de corazón la hermandad, la fraternidad y la buena voluntad entre los hombres que tan deseables son pero chocan con la terrible realidad de que los seres humanos no somos buenos salvajes predispuestos a la fraternidad hacia todo bicho viviente y si alguna vez lo fuimos, en cuanto crecemos se nos olvida cómo era eso. Es un choque entre un deseo entrañable y necesario que cada uno guarda para los suyos pero impuesto desde fuera y la realidad de que siempre hay a quienes no se traga y se prefiere tener lo más lejos posible, grupo en el que parientes, conocidos y vecinos se empeñan en formar parte y el destino, en ponernoslos cerca. No se puede ser un ejemplo viviente y demandado por el entorno de persona afable que desea amor para todos sus semejantes cuando se está muchas veces hasta los mismísimos de los susodichos semejantes.
3) Por un extraño giro sólo explicable con la utilización descarada por parte del capitalismo de la psicología humana y de sus necesidades, el personal anda envuelto en una espiral en la que intenta comprar esos buenos deseos que en muchos casos (salvo con las personas que de verdad le importan a cada uno) son incapaces de sentirse, con regalos y dinero. Al final todo se reduce a un «tanto me regalas, tanto supongo que me aprecias aunque en el fondo ambos dos nos seamos indiferentes o nos despreciemos… y además, me has regalado la misma puta sevillana a veinte duros para colocar encima de la tele como todos los años». Pero claro, si el problema es ese, ahí está el Corte Inglés para remediarlo.
Al final, todo esto de paz, amor y buena voluntad, más allá de la escasa gente que el personal suele reconocer que le merece la pena, parece propio de un gran hermano de Orwell (no el de Tele 5, que alguno habrá a quien haya que aclarárselo) en el que las directrices de la masa y la perversión del lenguaje obligan a hacer como que se piensa y se siente lo que ni se piensa ni se siente. No sé si os habéis dado cuenta, pero llegada la Navidad, anunciada acojonantemente en Agosto por el tradicional calvo, el entorno se llena de eslóganes y carteles, voces e imágenes diciéndonos que nos debemos sentir hermanos de TODOS (horror) nuestros semejantes. Si igualamos a Jesucristo o a Papa Noël con el Gran Hermano ya tenemos la analogía completa completita. La gran diferencia es que este gran hermano es mucho más inteligente que el de la novela, que sólo ha encontrado encarnación en paises como Corea del Norte, encontrando en el mecanismo de satisfacer pobremente las necesidades emocionales con sustitutivos de los sentimientos sinceros una forma de generar movimientos de dinero que como supongo generan empleo y beneficios.
En fin, que a ver si pasa rápido el trago y por lo menos el cordero está jugoso (groaaaarg).
Comentario escrito por Ava — 24 de diciembre de 2003 a las 5:54 am
En definitiva, y como conclusión revolucionario-anarco-sindicalista-gueverista-romanista-clasista-marxista-neoliberalista-peronista (y es que parece que en este mundo si no te ponen una etiqueta no te sitúan) reclamo la libertad de que la gente se de opíparas comidas, haga regalos y se quiera sentir entrañablemente unido a parte o toda la humanidad cuando a cada uno le salga de la ya mencionada genitalia, que pegarse 4 comilonas oficiales más otras tantas de compromiso en una semana, forzar sonrisas falsas y gastarse una pasta en regalos horrorosos es una tortura que no habría permitido ni Torquemada.
¿Habrá cordero o cochinillo?
Comentario escrito por Ava — 24 de diciembre de 2003 a las 6:04 am
Pues yo secundo a Ava en su reclamo libertario. Señores cada quien con su opinión, pero decir que la navidad es una fiesta que engarza en el sistema capitalista perfectamente es una perogrullada mayúscula: sí joder, el Gran Hermano de Orwell y Tel 5 y todo lo que querais pero a fin de cuentas también hay algunas cosas buenas como los regalos, la comida y algún gesto sincero que todavía queda por ahí. Creo que fue Hesse en El Lobo Estepario quien que ciertas prácticas que parecen de la «chusma» o que son aconsejadas por la «costumbre» (ya saben que Hesse era un elitista de marca mayor) deben ser disfrutadas sin mayor reflexión, que no es sano racionalizarlo todo. Las navidades pueden ser un coñazo, yo particularmente no celebro el nacimiento de Jesús, celebro que por una noche puedo estar con los viejos amigos de mi barrio, los cólegas de la universidad (que son casi los mismos que los del barrio) y mi novia. Y todo eso con el mejor vino, camaradería y comida que pueda pagar un españolito (o sea no mucho :-D).
Salud.
Comentario escrito por Strepto — 24 de diciembre de 2003 a las 1:39 pm
Jope Strepto! Hablas de Navidad o de fin de año? Hoy es un día q no suele estar muy bien visto dejar a la familia plantada e irte por ahí.
En mi caso con el pedazo resfriado q llevo encima estoy libre de esas tentaciones aunq reconozco q me aptc hacer eso después de la cena.
Ava, de todas formas no veo q halla falsedad en las relaciones familiares (debe ser q mi condición de soltero me permite vivir engañado), creo q de verdad nos apreciamos todos aunq muchas veces no nos podamos ni ver. Momentos inducidos como estos te hacen reflexionar un poco y salirte arcialmente de la típica relación desde la rutina. Lo malo, es mirar a los q faltan. Eso es lo q menos me gusta, por «a» o por «b» siempre te acabas acordando de ellos en vez de disfrutar de «los q están»
Salu2 y Felices Fiestas
Comentario escrito por Muab´Dib — 24 de diciembre de 2003 a las 3:33 pm
Hombre Muab, paso parte de la noche con la familia y luego con los colegas que con orden todo se puede.
Comentario escrito por Strepto — 24 de diciembre de 2003 a las 3:40 pm
Eso si, papá cumple años de ido a quien sabe dónde el sábado, pero me queda mi muy andaluza madre. Y es que uno siempre se acuerda de los que se han ido.
Salud.
Comentario escrito por Strepto — 24 de diciembre de 2003 a las 3:42 pm
Sólo en caso de que no aparezca por aquí en algunos días (hasta el año próximo posiblemente) quiero aprovechar para introducir otro de mis comentarios offtopic de costumbre y desearles a todos mis contertulios y gestores, así como demás miembros del staff de LPD, FELICES FIESTAS o FELICES JUERGAS según sea el caso. En especial a los miembros del futuro PARTIDO DEFINITIVO: Beria, Garganta, Guariguanche, Scardanelli, Lena Horne (que descubrimiento!!! me das tu email guapa?), Petrus, Avelino, Muab Dib (y el resto de la casa de Atreides) y todo aquel que se me quede en el tintero .
También un año 2004 PRÓSPERO, sin PP y sin Rajoy y con contratos fijos para todos (que estamos soñadores hoy).
Gracias por los buenos momentos que he podido disfrutar en vuestra compañía y espero que todo el año próximo el UNIVERSO LPD siga siendo éste lugar de encuentro de nosotros los miembros de la generación Z o la que sea. Dudemos siempre de todo, decía mi padre y si le agregamos unas cuantas ironías y chascarrillos tanto mejor.
Salud y FELIZ LO QUE SEA como diría Scardanelli.
Comentario escrito por Strepto — 24 de diciembre de 2003 a las 4:51 pm
Desde los áridos páramos del pensamiento crítico y ecléctico, la plantilla de P.R.E. (o sea, uno mismo) te desea:
¡¡FELIZ CUMPLEAÑOS, GUILLERMO!!
Y feliz Navidad, año nuevo y esas cosas de menor importancia.
Comentario escrito por JR — 24 de diciembre de 2003 a las 5:59 pm
Guillermo, ¿en LPD hay paga extra?
Comentario escrito por petrus — 24 de diciembre de 2003 a las 9:11 pm
Sí, les pagan el doble este mes: en vez de no pagarles nada, no les pagan nada de nada.
En cualquier caso, Guillermo, yo sí te deseo un feliz cumpleaños, al menos dentro de lo que cabe. Y para todos, como dice una amiga mía, feliz navidad «y todas esas mariconadas».
Comentario escrito por jasev — 25 de diciembre de 2003 a las 10:34 am
Felicidades Guille!!!!!!!
Comentario escrito por Muad´Dib — 25 de diciembre de 2003 a las 10:51 am
Como tb voy a estar ausente, a partir de mañana, aprovecharé para felicitar y desear lo mejor (es decir, lo q pidió Strepto) en el año nuevo a todos los integrantes de LPD y resto de compañeros de blog: Garganta, Strepto, Beria, Petrus, Guariguanche, Scardanelli, Avelino (dios te pague tus consejos.. pq uno no esta sobrao:D), al amiguito skepkics-o como se escriba-, a Ava I «el extenso», JR.. y los q me olvido
Felices Fiestas!!
Comentario escrito por Muad´Dib — 25 de diciembre de 2003 a las 11:03 am
Buenaass!
Hacia tiempo que no escribia nada en las güeblogs, bien es cierto, pero es que llevo una semanita resacosa a base de langostinos, turrones a la piedra, cava y manjares varios que para que contar… hoy por fin me he levantado de la cama a una hora mas o menos decente y he tenido a bien visitar la pagina para ver como os iba a todos.
Parafraseando a Strepto, FELICES FIESTAS a todos y en especial a los miembros integrantes del futuro Partido Definitivo: Strepto, Beria, Petrus, Muad´Dib, La princesa Guanche, Scardanelli, Avelino, y como no al Papichulo!
Y feliz cumpleaños Guille. Por cierto, el mio fue el el 22.
Un saludo. Voy a seguir viciandome al FIFA 2004.
Comentario escrito por Garganta Profunda — 27 de diciembre de 2003 a las 12:47 pm
Pues yo reitero mi afirmación de que me gustan las Navidades, los turrones, los regalos y las reuniones familiares. Lo que pasa es que sois unos amargados. Yo no celebro ni el nacimiento del niño dios, ni el solsticio de invierno, ni las predicciones de Aramís Fuster (más que nada porque soy ateo practicante); simplemente me alegra tener vacaciones y tiempo libre para pasar tiempo con mi familia y mis amigos.
¿Lo de los regalos? En mi familia tenemos una tradición: o se hacen por iniciativa propia, o si no te quieres mojar pides a la persona a regalar una lista de regalos; cada uno pide un número de cosas y el regalante elige un artículo y lo regala. Así nadie regala sevillanas para poner encima de la tele. Es un método muy recomendable (advertencia: método no recomendable para familias numerosas).
¡Viva la Navidad! ¡Viva la Semana Santa y vivan las benditas vacaciones de verano! A mi me da igual que se llamen Navidades o Hannukah o Fiesta del Sol Naciente mientras haya vacaciones; a vosotros os dejo la nimiedad de escojer el nombre que le querais dar.
¡Feliz Año Nuevo!
Comentario escrito por Pakoman — 31 de diciembre de 2003 a las 5:16 pm
Pakoman, a ti te gustan las vacaciones, como a todos, no la Navidad. Lo que reivindicamos es que las fiestas navideñas se conviertan en simples vacaciones laicas y que quien quiera celebre el nacimiento del Mesías o lo que más le plazca. El carácter espiritual, el sentido de la fiesta, que lo ponga cada uno, no que nos lo imponga el Estado. ¿O no habiamos quedado en que el Estado debía favorecer todas las religiones por igual, sin dar preferencias al cristianismo, y respetar incluso a quien no sea devoto de ninguna secta?
Humildemente,
Scardanelli
Comentario escrito por Scardanelli — 31 de diciembre de 2003 a las 5:58 pm
A mi el Estado no me impone nada. No me ha llegado ninguna multa por no poner el Belen en casa. Sólo el Rey impone eso de la Navidad en su discurso de Nochebuena que ocupa todas las cadenas de televisión (sí, ya se que el Rey forma parte del Estado). Pero por el resto, los únicos que imponen el sentido religioso de la Navidad son El Corte Inglés & Cía. Aunque cada vez pasan más de lo espiritual y se centran en cuestiones metafísicas tan profundas como la que se refleja en esta frase «la Navidad te da un no sé qué…»
Que se llame Navidad o vacaciones de invierno es cuestión de tradición. Es como la Semana Santa. ¿Vacaciones de Abril? Las procesiones de SS, por ejemplo, se promocionan porque es un legado cultural; que sí, que tiene honda significación religiosa, pero también la tienen las catedrales. Y me estoy perdiendo un poco porque he dormido todo el día y estoy desorientado.
¡Os deseo un feliz 2004!
Comentario escrito por Pakoman — 02 de enero de 2004 a las 1:36 am
«Es la mejor constatación que podemos hacer hoy, 25 años después de que España se dotara de una Constitución democrática por segunda vez en su Historia (al margen, claro está, de que no haya habido una Segunda Cruzada, en esta ocasión): »
Tanto en la constitucion de la primera republica como en la de la restauracion (aunque un poco tarde) se reconocia el sufragio universal.
Por cierto tu articulo es de un Jacobino que tira para atras, veo mi cabeza en una guillotina por no estar de acuerdo :(
Menos Robespierre y mas Burke
Comentario escrito por Guillermitojacobino — 04 de enero de 2004 a las 5:38 am
Te han llamado jacobino Gullermo!! Vaya piropo!! Que envidia me das, ya quisiera yo que alguien me comparara con mi adorado Robespierre…
Comentario escrito por Beria — 09 de enero de 2004 a las 6:24 pm
Oye beria, siempre me ha inquietado ¿Tu que opinas de Orwell? ¿No crees que merecio ser fusilado en el proceso del POUM?
Ese despreciable trotskysta necesitaba ser eliminado ¿Verdad?
:) Como mola tener las ideas tan claras
Comentario escrito por Papichulo — 10 de enero de 2004 a las 3:32 am
No hombre, siempre esta bien que haya escritores que digan tonterias… Rebelion en la granja es, como minimo, patetico, ademas de una patada en el culo a los trostkistas: el hecho de aceptar que Stalin llevo a cabo las politicas sugeridas por Trostki (la construccion del molino, por ejemplo) es muy revelador. NI SIQUIERA ERA CAPAZ DE EXPRESAR SUS IDEAS SIN QUE LE TRAICIONARA EL SUBCONSCIENTE.
Comentario escrito por Beria — 12 de enero de 2004 a las 1:14 pm
Perdona, no he contestado tu pregunta. No merecio ser fusilado ni aunque nos hubiera obligado a leer sus tediosas obras, su ignorante Rebelion en la granja, su aburridisimo 1984 o su incalificable Homenaje a Catalunya.
Este tipo me recuerda a Mendoza, cuya obra La ciudad de los prodigios es alabada por todo genero de progres respetables, pero repudiada por mi y por unos cuantos anarquistas que conozco.
Una vez se la referi a un nonagenario anarquista espanyol, protagonista de la Revolucion de Octubre en Asturias y fundador de la CGT y su mirada me convencio del hecho de que no tenia que haer mas preguntas. Los motivos de su repugnancia no me los explico, que cada uno saque sus propias consecuencias…
Comentario escrito por Beria — 12 de enero de 2004 a las 6:28 pm
«su aburridisimo 1984»
Si, al lado de la amenidad de das Kapital no hay comparacion…
«Una vez se la referi a un nonagenario anarquista espanyol, protagonista de la Revolucion de Octubre en Asturias y fundador de la CGT y su mirada me convencio del hecho de que no tenia que haer mas preguntas. Los motivos de su repugnancia no me los explico, que cada uno saque sus propias consecuencias…»
Un comunista citando un hecho individual para justificar una idea basada en un colectivo
Hoy mato a alguien
Comentario escrito por Papichulo — 12 de enero de 2004 a las 10:32 pm
Oye, Beria, el Papichulo está hecho todo un maestro del sarcasmo.
Pero me gusta el niño…
Comentario escrito por Scardanelli — 13 de enero de 2004 a las 12:40 am
Puedes empezar por suicidarte Papichulo, lo unico que he expresado son opiniones personales mias y la de un personaje que, debido a su trayectoria vital, pense era una opinion al menos interesante, no he tratado de basar ninguna idea basada en un colectivo, como tu dices. Aunque asi fuera, admito mis contradicciones, las propias de un comunista cuyas circunstancias se han desarrollado en una sociedad mas o menos liberal. No seas dogmatico, que los dogmaticos son muy pesados incluso cuando esconden su dogmatismo en la inteligente ironia, como tu.
Te gusta 1984? Pues tu mismo, colega, yo para dormir la siesta prefiero los animalillos de la 2.
Saludos
Comentario escrito por Beria — 13 de enero de 2004 a las 6:27 pm
Yo tambien puedo justificar los Bombardeos de Guernika por los ojos de un conde que perdio un brazo por la represion.
No soy dogmatico, menos con los Comunistas de palo que van en Mercedes o hacen campañas para Alberto Ruiz Gallardon.
Y si, me gusta 1984, porque no es una novela futurista, es simplemente la novela de la Union Sovietica.
Comentario escrito por Papichulo — 13 de enero de 2004 a las 8:08 pm
Mas bien la novela de la RDA, no crees?
Por cierto, regalame un Mercedes, no me importa que tenga una pegatina gigante que rece: SOY UN COMUNISTA DE PALO.
OK?
Ay, estos fachillas lo que exigen a los demas y lo poco que se exigen a si mismos, mira que compara la Revolucion de Octubre con el bombardeo de Guernica…
«Hoy mato a alguien»
Comentario escrito por Beria — 14 de enero de 2004 a las 12:40 pm
Como cualquier persona de bien, siempre he odiado la Navidad…
En realidad yo estaba buscando la fuente, el contexto en el que Nietszche dijera «El conocimiento mata el obrar» por cuestiones académicas y personales… y me topé con ésto.
Diría casi «sin palabras», pero en este sentimiento de escribir al «eter» dejo fluir el pensamiento.
Todos los comentarios siguientes a tu reflexión me parecieron alucinantes, casi inentendibles o fuera de mi realidad cotidiana, pero volviendo a tus reflexiones y las de Strepto por primera vez en mucho tiempo no me sentí tan sola.
Tengo ya 44 y una hija de 18 que es a la vez mi perdición y la luz de mis ojos así como mis mejores dolores de cabeza… Ya separada de su padre por más de 8 años y metida tardíamente en la carrera de psicología de la UBA (Universidad de Buenos Aires – Argentina) me sentía cada vez más aislada… y qué decir de las Navidades!… si te sirve de consuelo aquí somos muchos los que nos sentimos así todos los domingos…
Hay un amigo de la familia que suele decir «los domingos son para llorar»…
Los «escucho» discurrir sobre la vida y ésto, aunque no lo creas, me da esperanza. Me siento menos sola en el universo.
También, es cierto, me siento en desigualdad de condiciones. Nuestro nivel intelectual no alcanza ni cerca el de ustedes, y menos el mío en particular. No me apasiona nada que sea impuesto y solo disfuto (raramente) de escenas familiares auténticas, de cafés o tragos compartidos entre pares (de increíble espectro de edades) y por PRIMERA VEZ me animo a «hablar» al «eter interneteano».
Tarde, pero feliz cumpleaños… aunque hasta eso me han echado a perder en la cátedra de psicoanálisis: uno festeja simplemente que dos sujetos han tenido un encuentro sexual con final exitoso (?) nueve meses (más o menos) antes de esa fecha…
saludos desde Buenos Aires, que de buenos… bué…
:) laura
Comentario escrito por Laura — 25 de abril de 2004 a las 7:27 pm