La perfidia de Rubalcaba causa una guerra interna en el PP
La derecha española es sólida, monolítica, pétrea, firme cual sobresueldo cobrado puntualmente, mes tras mes. Pero todo ello se sustenta en la existencia de otro. Un enemigo. Némesis. Un oponente creíble, poderoso, capaz de oponer resistencia en la Batalla de las Ideas, y cuando digo “Ideas” quiero decir “Poltronas”.
Durante muchos años, el PP tuvo en el PSOE a un oponente extraordinariamente fuerte. Tanto que, de hecho, llegó a ser hegemónico, y aún hoy ha gobernado más años España desde que se reinstauró la democracia (21) que la suma de UCD y PP (17, contando los dos años largos que todavía tiene por delante Rajoy). La existencia de un peligro cierto de perder las poltronas, de tener que estar años y años en la oposición, en la intemperie, apenas cobrando un sobresueldo digno, pero sin poder colocar a todos los paniaguados, que son muchos, siendo humillados por los gerifaltes del PSOE, que siempre se quedaban los mejores puestos en los Consejos de Administración,… La competencia real con el PSOE, sin duda, contribuía a galvanizar el partido. O nos unimos, o nos hundimos, venía a ser el lema.
Pero ahora, el PP ve cómo no hay oposición. Cómo puede hundirse en intención de voto y, aun así, que todos los pronósticos le den la victoria en unas elecciones generales, con mayorías no absolutas pero sí suficientes, a poco que se ceda una poltrona a CiU (si Cataluña sigue por aquí; y si no… ¡aún mejor, electoralmente hablando!). Cómo puede incumplir prácticamente todas sus promesas electorales, colar una agenda ideológica carpetovetónica, enfangarse más y más con los escándalos de corrupción e, incluso en estas circunstancias presentar mejor estado de salud que la oposición. Porque la oposición, dirigida con manos de mantequilla por Rubalcaba, está mucho peor, qué duda cabe.
Lo cual resulta particularmente extraño, si tenemos en cuenta que se supone que Rubalcaba es el archienemigo perfecto para el PP, dado que toda la derecha española le atribuye una descomunal capacidad para pergeñar todo tipo de estratagemas siniestras, un carácter maquiavélico puesto al servicio del Mal. Igual es que la derecha española se equivocaba, o que lo decía porque le convenía tener por ahí a Rubalcaba; o, más sencillamente, porque el hombre está electoralmente quemado y da igual lo que haga o deje de hacer.
Pero existe otra explicación, que haría las delicias de peones negros y teóricos de la conspiración encandilados con la insaciable capacidad del PSOE para hacer el Mal. Y es esta: Rubalcaba se ha dado cuenta de que el talón de Aquiles del PP está en quitarle su razón de ser: con Rubalcaba, el PSOE ha dejado de ser la URSS para convertirse en Corea del Norte, a efectos antagonísticos. El PSOE se ha hundido tanto, y sobre todo es tal la imagen de encefalograma plano, la carencia absoluta de alternativas creíbles, que da la sensación de fin de época. De que el bipartidismo se acabará primero por el PSOE. Y, con ello, ha comenzado en el PP el aburrimiento. El deseo por acaparar la mayor parte posible de pastel, ahora que ya no es posible que se lo quiten. E incluso, y miren que me da la risa sólo de pensarlo… ¡La disputa ideológica! ¡La Batalla de las Ideas, dentro del PP!
O eso, o que la Batalla por la Poltrona, visto que no hay rival, ahora se ventila dentro del PP. Igual que cuando la principal oposición al PSOE, en los años de hegemonía de Felipe González, se la hacían los sindicatos, entre ellos UGT, que supuestamente era “su” sindicato. No menospreciemos nunca la capacidad del español para el cainismo, que la tenemos muy interiorizada.
Sea cual sea el motivo, la verdad es que Rajoy no pasa una semana, últimamente, sin recibir algún sobresalto proveniente de sus filas. Menos mal que al hombre estas cosas le dan lo mismo y él sigue ahí, imperturbable, que si no, lo estaría pasando verdaderamente mal. Por un lado, los follones con los dirigentes regionales a propósito del monstruo de la financiación autonómica, un sistema que, desde su génesis, es sencillamente imposible que satisfaga a todos. Por otro lado, el griterío interno, cada vez más sonoro. No es sólo la entrevista de Aznar en Antena 3; es la campaña, verdaderamente espectacular, que ha montado Pedro J. en El Mundo para intentar cargarse a Rajoy, y que lleva meses en marcha, con un progresivo aumento en intensidad. Ahora ya no es sólo explicar lo malo e inconsistente que es Rajoy; directamente, se pide su dimisión. Su sustitución por un dirigente con convicciones, que baje impuestos y suba publicidad institucional. ¡Pero si hasta han creado un hashtag de sólo 18 caracteres, #bajadadeimpuestosya, para llamar a la revolución!
En ese contexto, la aparición de Aznar resultó verdaderamente providencial en El Mundo, donde algunos incluso están hablando ya de crear un nuevo partido, liderado por Aznar y sus supuestos fieles (que son los opositores internos de Rajoy), o de montar un congreso extraordinario en el PP para birlarle el partido a Rajoy. Todo muy conspiranoico, muy “ciénaga madrileña”, pero ahí está. Y eso, la desunión interna, es realmente lo único que puede cargarse el PP.
No hablo de simplemente hacerles perder el poder, que eso puede venir por muchas vías: me refiero a cargarse el partido al modo de la UCD, generando una jaula de grillos cada vez más sonora, que, combinada con la inoperancia demostrada por la mayoría de sus dirigentes, lleve a la gente “de orden” que les vota a dirigirse a otra opción electoral, sea una hipotética Unión Española de Aznar, sea UPyD, o sea cualquier otro partido que intente quedarse ese espacio político. Todo ello suena poco probable, pero no imposible. Y tampoco que la mítica unidad del PP se socave con escisiones de “baja intensidad” protagonizada por dirigentes regionales, como ocurrió en Asturias con Álvarez Cascos.
Personalmente, todo ello me parece aún un tanto inverosímil, sobre todo teniendo en cuenta lo mucho que manda ahora el PP en las instituciones; y, muy especialmente, la resistencia que ha demostrado Rajoy para aposentarse en una poltrona y no moverse de ella bajo ningún concepto, por más que intenten quitársela. Aunque no dejo de pensar en que haría mucho bien a tanto tertuliano necesitado de enemigo (y eso que tienen ahí a los catalanes para ensimismarse) una escena en la que, tras la implosión del PP, aparezca una oscura figura con barba, cansada y achacosa, con el 17% de los votos, liderando un Gobierno de coalición nacional. Pero eso sí que pertenece al ámbito de la política-ficción. Sobre todo, porque implica que se presente Rubalcaba a unas nuevas elecciones.
Pues a parte del lío Aznar andan la mitad de los presidentes autonómicos liados con Rajoy por el déficit y Vidal Cuadras ha creado un partido para presentarse a las europeas (que algo les quitará al PP pues le dan coba en el TDT party a este tío).
En fin, que la estrategia Rubalcaba de dejar que el PSOE se hunda para que el PP le acompañe puede parecer rídicula, pero dado el nível actual en el que se mueve la política, el PSOE en 2015 presenta a Madina o López que no se les relaciona con los gobiernos de Zapatero, y con un poco que se recuperen y algún partido dispuesto a pactar…
Comentario escrito por MrChombee — 27 de mayo de 2013 a las 8:22 pm
Yo es que no entiendo porque tantas y tantas páginas para algo que no me parece mas que, y viva la palabreja de moda, postureo por parte de Aznar. Enseñar la patita y demostrar que, como el dinosaurio, seguía estando allí. Pero sin ninguna consecuencia practica. Estilo las rabietitas que se pegaba Gallardón con sus teóricas salidas de partido, retiradas de la política, etc etc etc
Comentario escrito por John Constantine — 27 de mayo de 2013 a las 8:52 pm
Si nos ponemos maquiavélicos la división interna puede ser un seguro ante un futuro lleno de nubarrones. Ahí tenemos al Psoe, monolítico tras ZP y su «me cueste lo que me cueste», sin nadie que pueda ahora desmarcarse del pasado.
Comentario escrito por Paco Pérez — 27 de mayo de 2013 a las 8:53 pm
Aznar está siguiendo la evolución de libro de todo ser acomplejado que llega mucho más alto de lo que nadie nunca pudo sospechar gracias a que su pequeñez le hacía ser siempre la opción por la que el poderoso se decantaba como compañero y escudero, sabedor de que no le haría sombra. Pero oye, a base de eso, de matar al padre y de algo de suerte, al final, se llega a la cima y los complejos mal reprimidos durante toda esa fase vital lacayuna afloran por doquier.
Este trauma con que nadie le invoque como redentor es muy significativo y marca el inicio del final del trauma, que puede acabar como el Rosario de la Aurora. O no. Necesitaríamos a un psicoanalista freudiano con credenciales y ortodoxo para que nos guiara.
Comentario escrito por Andrés Boix Palop — 27 de mayo de 2013 a las 9:18 pm
Por cierto, que Pedro Jota, el Regenerador, pretenda que nos confiemos a las sabias manos de Aznar sólo demuestra cuán lastimosamente obscena es la escenificación habitual en España de indignación connciertos comportamientos… siempre que los perpetren enemigos o los del otro bando.
Comentario escrito por Andrés Boix Palop — 27 de mayo de 2013 a las 9:20 pm
Recuerda un poco a Hitler (y con eso me marco el Godwin) en el bunker: los desesperados están arramplando con lo que pueden (me llama la atención la privatización sanitaria en Madrid: Aguirre en 12 años no se atrevió a tanto, Ignacio González en cambio no ha dudado ni medio segundo pese al atísimo coste electoral, probablemente porque sabe que lo tiene perdido de antemano), mientras otros mueven ejércitos inexistentes sobre el mapa. Aznar sería el «Armeeabteilung Steiner», las bajadas de impuestos las «Wunderwaffen», y el PSOE los aliados occidentales con los que pactar una paz separada para luchar juntos contra el verdadero enemigo, que es cualquiera que venga de fuera del reparto que han montado durante los últimos 30 años.
En el PP le están viendo las orejas al lobo, lo digan o no. La victoria del 20N era un espejismo, solo sostenible si la economía se recuperaba, y ya han visto que eso no va a ocurrir de aquí al 2015… ni hasta el 2020 por lo menos. Cuando lleguen las Europeas, en menos de un año, se verá que van desnudos.
O no, que esto es España.
Comentario escrito por Regularizado — 28 de mayo de 2013 a las 9:02 am
Si al menos los minoritaros tuvieran cabeza y usaran los resultados de las europeas para un «frente minoritario», con un programa común y un reparto de puestos en la lista consensuado, algo s epodría avanzar. Pero me parece a mi que van a seguir con la estrategia del Frente Judaico de Liberación Popular..¿O era el Frente Popular para la liberación de Judea?…al final, acabaran ganando los qeu no estan haciendo las vias más seguras ni haciendo que los acueductos funcionen bien…
Comentario escrito por galaico67 — 28 de mayo de 2013 a las 10:17 am
Mientras IU tenga al compañero lara al frente no hay nada que hacer. A. Garzón tampoco me emociona, que lo sepan. En el fondo mi ídolo es Julio Anguita, sin embargo sé que es imposible. Por cierto, su último libro es muy recomendable.
Comentario escrito por desempleado — 28 de mayo de 2013 a las 11:01 am
La presentacion del libro de Aznar, mas solo que la una en un sarao al que no fue ni Ana Mato, tiene algo de tragedia shakespeariana. A Aznar se le ha puesto cara de Fraga de repente, y no me extranyaria que en el partido le empezasen a llamar Don Jose Maria, para dejar claro cual es su papel en el new order pepero. Pobre Gallardon, siempre asociandose al caballo ganador del anyo pasado.
Para el poder el teatro y la representacion siempre son importantes, porque el verdadero poder consiste en hacer creer a los demas que lo tienes. Fijaos si no en el cambio de tono y de gesto entre la entrevista en Antena 3 y la comparecencia en el congreso. En la primera Aznar llega presidencial para acojonar, que es lo que mas le gusta. En la segunda llora » soy uno mas pero no soy menos». De lo terrible a lo patetico en tres telediarios. No me extranyaria que fuese parte de una nueva conspiracion de Pedro J, dado que su exito para tramar conjuras es similar al de Gallardon a la hora de buscar alianzas. Pero mientras el Mundo estrella a la Lideresa, al Lider Supremo y quien sabe que mas contra el muro de indiferencia de Rajoy, este recorta poquito a poco el grifo de publicidad institucional del que pende la cabeza de Pedro J. La tortura gallega es como la china, pero mas lenta.
Comentario escrito por InVino(Veritas) — 28 de mayo de 2013 a las 6:27 pm
Interesante el articulo, pero como ya dije una vez, el anterior gallego (nada contra los indigenas oigan) que trincó la jefatura la dejo cuando la palmó.
De por el imperio hacia Dios a por la indiferencia a vivir como Dios.
Estoy de acuerdo con Galaico y desempleado como no aparezca alguien este no cae, y Pedro J se cargaría a Gonzalez, pero Mariano y su tancredismo requiere una catastrofe tipo INLFACCIÓN o glaciación very heavy para caer.
Aznar,Rubalcaba, Gallardón, la lideresa y el resto de conspiradores solo siguen la más noble y antigua de las tradiciones del político español de la casta…
http://www.youtube.com/watch?v=ZoRy_R6tcyM
Comentario escrito por Trompeta — 28 de mayo de 2013 a las 8:49 pm
#10 No, si estamos totalmente de acuerdo. Yo también creo que la principal virtud de Mariano es su capacidad para resistir una vez pilla una poltrona, por más griterío que monten a su alrededor. Otra cosa es, como dice Desempleado, que tenga que marcharse por ignominiosa derrota electoral, pero eso será en 2015 (dudo que convoque elecciones antes; como mucho, las hará coincidir con las Municipales).
Un cordial saludo
Comentario escrito por Guillermo — 29 de mayo de 2013 a las 12:19 am
Tienes razón, Trompeta, pero una puntualización: el gallego al que te refieres no fué realmente el último, entre él y Marianito Gafotas tuvimos a Leopoldo Calvo Sotelo, gallego de Ribadeo, que duró poco tiempo, se retiró voluntariamente, y demostró discreción y buen hacer, o así me lo parece.
Comentario escrito por Borratxo i fí. — 29 de mayo de 2013 a las 8:09 am
#12 ¿Ese señor al que citas no fue uno que tenía fama de ser muy gafe? Pues eso
Comentario escrito por JoJo — 29 de mayo de 2013 a las 4:06 pm
En el País Valenciano ya tuvimos hace unos años una gerra intestina y cruenta dentro del PP, la de campistas contra zaplanistas. Incluso llegaron a las manos, y no es una metáfora. Incluso tuvo que intervenir la Policía Nacional:
http://elpais.com/diario/2004/11/23/cvalenciana/1101241077_850215.html
Comentario escrito por Guerau — 30 de mayo de 2013 a las 12:19 am
#9 plas, plas,plas
Comentario escrito por Andrés Boix Palop — 31 de mayo de 2013 a las 12:44 pm
Si todo esto es un chiste o una sátira, tiene su gracia. Si es un análisis serio, es bastante patético y hace dudar que quién lo haya escrito tenga la menor idea de política española, tanto local como nacional. Sólo con mirar las encuestas se sabe por qué los barones autonómicos están tan revolucionados, y sólo con ver las informaciones de El País sobre la boda de los Aznar y demás se sabe por qué Aznar está tan cabreado.
Comentario escrito por Juan — 03 de junio de 2013 a las 6:52 pm