ACTUALIDAD DE ESPAÑA                          JUNIO DE 2002

03/06/2002: Hacía falta ya, una huelga, una huelga…

Cándido Méndez se ha convertido en un sindicalista frustrado, porque el cabrón de Antonio Gutiérrez no le dejó convocar la huelga general que él ansiaba. De hecho, esa es la aspiración de todo sindicalista de nuestros días que se precie : montar una buena huelga general. Convertidas las organizaciones sindicales en paniaguados del Gobierno que viven (malviven, en realidad) de hacer algo de paripé para dar una pátina de legitimidad obrera a las reformas laborales del capitalismo occidental que está destruyendo paso a paso el " pedazo estatuto del trabajador " legado por el franquismo a los españoles, poco más que la convocatoria de huelgas generales queda a los dirigentes de las mismas para sentir que " han cumplido con su compromiso ".

Es por ello más o menos lógico que en España se haya convocado sistemáticamente una huelga general cada vez que un nuevo líder ha accedido al mando en CC.OO. o UGT. Méndez llevaba ya unos añitos exigiendo " su " huelga. Pero CC.OO., convertida en los primeros años de " España va bien " en el sindicato aznarista por excelencia, le negó ese placer. Ahora que en CC.OO. hay un tipo con una proyección pública tan minúscula e irrelevante como en su gran rival, la huelga general estaba cantada. Y a ella vamos.

Nada de lo antedicho supone juzgar en un sentido u otro la reforma laboral. Ni siquiera significa un juicio sobre la conveniencia de una respuesta en forma de huelga a las medidas propuestas. Simplemente pretende llamar la atención sobre lo patético de unos sindicatos que en España en realidad no son cauce de representación más que de intereses corporativos espúreos y que emplean las convocatorias de huelga de forma harto dudosa. Y viene a querer resaltar lo sorprendente que ha sido ver cómo los años de aznarato han transcurrido con una UGT que, sin ser del PP, tampoco quería, por nada del mundo, ser identificada con el PSOE, y unas CC.OO. que, siguiendo hasta límites insospechados la línea de la " izquierda pura " anguitista, se convirtieron directamente en correa de transmisión del PP, para pasmo, incluso, de la patronal.

La huelga será, previsiblemente, un fracaso. Habrá quien no trabajará, como es obvio (incluso puede haber mucha gente que no trabaje), pero pasará pronto y se olvidará. A las huelgas generales en España las mató la del 89 contra la política de González. Fue tal su éxito que todas se comparan con ella, y todas saldrán perdiendo en la comparación (además conviene recordar que la huelga fue masivamente secundada en parte porque el país tenía ganas de saber lo que era " parar el país " en democracia, de una parte, y que su éxito provocó, de otra, desastrosas consecuencias económicas, que llevaron a la cuasi quiebra de las finanzas públicas del 92) .

Por otra parte la reforma laboral del PP es una vergüenza en no pocos aspectos. No tiene en cuenta la realidad social y la fractura que existe en nuestro país, parece dictada por las clases medias acomodadas hartas de pagar impuestos que sólo ven al rival en los que están peor que ellos. Y no se trata, como es evidente, de eso. En cualquier caso, no deja de ser acorde con un programa y un proyecto lamentablemente clasista y sin ningún interes en tratar de reducir las desigualdades o de aumentar el equilibrio de oportunidades que fue masivamente plebiscitado por los españoles. Parece evidente cuál debiera ser la fórmula para responder a reformas de esta naturaleza.

La convergencia con Europa de España en materia de protección social debe hacerse, y es algo evidente. Pero alguien debería explicarles a los del PP lo que significa convergencia, pues de momento sólo parecen preocupados por situar a España, lo más rápido posible, como el último de la lista en cuanto a la existencia de estructuras estatales de seguridad y garantía social.

 

Contacta con LPD

España

Internacional

Biblioteca ideológica

Idiotologías

Las Indias

Debate sobre los Nacionalismos

El Sanedrín

Intelectuales orgánicos

Elecciones USA 2000

Regeneración de la izquierda en España

Elecciones España 2000

Política

Economía y Bolsa

Deportes

Mass Media

Libros

Historia

Teología

Cine

Música

La Red

Cultura Popular

Sexo

Foro

Obtuso