ACTUALIDAD DE ESPAÑA                          NOVIEMBRE DE 2003

20/11/03: Salutación al virus de la gripe:

Ajeno a las guerras preventivas, a la pax americana, a las princesas de cuentos de hadas e incluso a los pactos entre políticos catalanes, el virus de la gripe ningunea una vez más a esa actualidad urgente de titulares y bustos parlantes en la pantalla. Llega desde la lírica del otoño, con la tristura de hojas caídas que tanto abunda en los poemas de aquellos que nunca estarán en una antología de temporada. Llega desde la ciencia-ficción, con nombres imposibles que evocan artefactos, androides y quásares. El AH3N2, así se llama esta vez el bicho de las mil caras, acude fiel a su cita y con ganas de marcha. La incidencia de la gripe es 20 veces mayor este año que durante el pasado. Los médicos se santiguan, los políticos aprovechan para atacarse, los científicos se quedan boquiabiertos. Pandemias en ciernes y pestes en potencia aparecen en los periódicos y cada estornudo furtivo puede contener al minúsculo enemigo: “pues este año conozco a un montón de gente que se ha puesto fatal, así que...”.

A una sociedad que aspira a tomar café con los habitantes de Urano y a cantar el código genético como la tabla de multiplicar se le resiste el virus de la gripe, aún más irreductible que el poblado galo de Astérix. El último romántico ha resultado ser una criatura microscópica que quizá ni esté viva.

Trae fatiga, dolores de cabeza y fiebres, y se lleva maldiciones y tratamientos. Pero hay cosas de las que no se puede hablar. Sí, todos esperamos a este pequeño salvador. Rezamos para que nadie encuentre la vacuna definitiva. Los niños se librarán de la escuela, los adultos del maldito trabajo. Será la excusa perfecta para no acudir a esa cita. Rompe la rutina, le hace una burla al jefe, convierte los deberes en bolas de papel que acaban en la papelera, pospone la visita a la familia política. Sólo su querencia por las toses, los dolores y el cansancio evita que este particular alienígena tenga una cohorte de seguidores a modo de estrella del rock. En un mundo sin respiros proporciona el único respiro, aunque sea con la nariz hinchada. Nadie le dedica una oda, nadie brinda por él, nunca tuvo su soneto de elogio y jamás le han rendido honores. Pero el incomprendido vuelve siempre, nos entiende demasiado bien. El último humanista es un camaleón de una millonésima de milímetro.

Queremos cepas de virus de la gripe en casa. Queremos pasearlos como a mascotas queridísimas. Queremos nuestra simbiosis anual. Apoyamos la libertad de mutación. Aceptamos AH3N2 como animal de compañía.

Alfredo Martín-Górriz