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LA ACCIÓN HUMANITARIA CONJUNTA, AL DÍA

Días K - L: Frente a los violentos, Ánsar trabaja en ello: No a Sadam, No al derrotismo, Sí a la guerra que No apoyamos

 

El avance de las tropas de liberación: La nueva doctrina Rumsfeld. Algunos comentarios derrotistas que le hacen el juego a los violentos aseguran que la guerra va mal, que Rumsfeld nos contó una historia de fantasía y logró vender a toda la prensa la cabra de que aquello sería un paseo y la coalición sólo tendría que enfrentarse al excesivo entusiasmo del buen pueblo iraquí ante la llegada de nuestras tropas (porque sí, también son nuestras, al menos en el plano estrictamente Humanitario). En los primeros momentos de la invasión, cuando parecía que la Coalición Humanitaria iba a llegar al mismo palacio de Sadam en dos días, cuando el Ejército estadounidense lograba batir día tras día el récord de la hora sección "Carros Blindados", y cuando se anunciaban conquistas por doquier y rendiciones en masa, uno estaba tentado de creérselo. Por aquel entonces, la doctrina Rumsfeld anunciaba una guerra de "Alta tecnología, operaciones quirúrgicas, acciones de comando y rápido avance hacia el objetivo". Esta estrategia, dicen los críticos vendidos al oro de Sadam, ha demostrado que el Carnicero iraquí no es el único aficionado a jugar a los soldaditos en el conflicto, y que Rumsfeld no le iría a la zaga. Nada más lejos de la realidad. Lo que ocurrió es que Rumsfeld, ocupado como estaba en proclamar éxitos rutilantes, no tuvo tiempo a enunciar la Doctrina en su versión completa. Lo ha hecho hoy día K: "Alta tecnología, operaciones quirúrgicas, acciones de comando, rápido avance hacia el objetivo y cuando sean necesarias más tropas, se envían". Concretamente, 120.000 hombres más, es decir, más de los que había en el plan inicial. Todo según lo previsto. Dos semanitas de valientes bombardeos aéreos mientras se espera que lleguen los refuerzos, que extrañamente para una coalición internacional de más de 65 países (aunque muchos, unos 55, siguen apoyando en secreto la Acción Humanitaria), pertenecen íntegramente al Ejército USA. Gran Bretaña ha anunciado que no enviará más tropas, pues con hacer de carne de cañón en Basora parece ya suficiente. Los kurdos ya hacen su papel de tropas de choque en el norte, apoyados por los norteamericanos de la única forma, al parecer, que contempla la Doctrina Rumsfeld: mediante bombardeos humanitarios. Del resto, de la batalla de Bagdad, fíense, igual se encarga Ánsar para cosechar más simpatías del mundo árabe.

Pero no piense el 91%, o 97%, o lo que sea todo ese barullo de violentos que la Coalición Humanitaria está estancada. Ni mucho menos; los beneficios de las tropas de Liberación ya comienzan a notarse en el único territorio por el momento liberado, la ciudad portuaria de Um Qsar, mediante la contratación de iraquíes, sí, sí, iraquíes, no británicos ni estadounidenses, para que ejerzan como estibadores del puerto. A cada uno de ellos la Coalición Humanitaria le va a pagar un fantástico sueldo de 50 euros al mes; la verdad es que a uno le dan ganas de hacerse pasar por iraquí, ser contratado por la coalición, trabajar un par de semanitas y retirarse en la opulencia. Los "grandes beneficios" que va a recibir el Buen Pueblo Iraquí se asemejan a los criterios de contratación de las Administraciones coloniales de los europeos en el siglo XIX, de grato recuerdo para todos los lugareños que en su momento las disfrutaron. Los británicos explican, en un alarde de generosidad sin par, que aún estarían dispuestos a pagarles más, pero que no lo hacen porque de ser así intentarían trabajar como estibadores también los iraquíes de profesiones liberales, médicos, ingenieros, trabajadores cualificados a los que necesitan para todos los ámbitos de la futura reconstrucción del país (cuidar a los heridos para que puedan beneficiarse de los jugosos contratos de trabajo, reconstruir las comunicaciones para transportar el petróleo a Um Qsar, extraer petróleo bajo la administración de empresas estadounidenses de carácter Humanitario por el bien del pueblo iraquí); y claro, si estos señores se pusieran a trabajar en el puerto en las mismas condiciones laborales, estamos seguros, que uno puede colegir de sueldos auténticamente "taurinos", nos podemos imaginar que luego no tendrían fuerzas para dedicarse a la reconstrucción, pese a la ansiada nómina de ¿60? ¿70 euros al mes? No pongan límites a su imaginación, la generosidad de los Aliados tampoco los tiene.

Pero para trabajar en la reconstrucción es preciso comer y beber al menos tanto como las propias tropas de Liberación (una vez al día; se nota la ausencia momentánea del auxilio humanitario - logístico de Ánsar), así que los británicos tambien se han puesto a "trabajar en ello", usurpando las funciones de las asociaciones humanitarias aunque ¿no es también este Ejército eminentemente Humanitario? Tiros al aire, tumultos, avalanchas de gente empujada por los soldados británicos, … Un espectáculo digno de verse. Los funcionarios de la ONU y las ONG han puesto el grito en el cielo, indicando que el show es un atentado (más) a la dignidad de los iraquíes. Ni caso; estos malvados moros, que no saben lo que les conviene, ¿verdad, Ánsar?

Armas de destrucción masiva: 5.000 comandos suicidas. Tras el atentado suicida del sábado que se llevó por delante a cuatro soldados estadounidenses, el Gobierno iraquí anuncia la proliferación de futuros atentados contra las tropas de la Coalición y la llegada de 5.000 voluntarios provenientes de varios países musulmanes dispuestos a inmolarse por la fe en plan Intifada. La verdad, con todas las precauciones, más nos parece un golpe propagandístico que otra cosa. Pero un golpe propagandístico eficaz ante las tropas estadounidenses, que a partir de ahora, por lo visto, ejercerán su liberación aumentando aún más las medidas de seguridad ante la población civil (es decir, aún más imágenes de iraquíes humillados, obligados a tumbarse, cacheados, etc. Un regalo para los objetivos humanitarios de los Aliados), y previsiblemente se moverán aún en mayor medida como lo que todo indica que son: un Ejército de ocupación rechazado por los habitantes del país.

Las sucias argucias del Tirano: ¡Sadam utiliza las comunicaciones contra nosotros! Cada día Sadam nos sorprende con nuevas muestras de maldad: el Tirano ha aprendido lo suficiente de Hitler y Stalin para ser aún peor (y más peligroso, claro; ¿o alguien lo duda?) que los dos dictadores juntos: por si todo lo que ha venido haciendo hasta ahora no fuera bastante, ahora nos enteramos de que los medios de comunicación iraquíes, en sentido amplio (la televisión, pero también las infraestructuras de cable telefónico), tienen un "doble uso; civil y militar". Haciendo gala del mismo doble lenguaje del ministro Trillo ("los B - 52 pueden haber repostado en vuelo o pueden no haber repostado", recuerden) y de su doblez intrínseca, Sadam utiliza la televisión… ¡Como instrumento de propaganda! Utiliza el teléfono… ¡Para comunicarse con su Ejército! Así que no ha habido más remedio que aplicar la Solución Humanitaria número1: bombardear, punto único, por ahora, de la ya reseñada Doctrina Rumsfeld. Y que se vayan preparando Al Yassira, Abu Dabhi TV, y todas las televisiones del mundo musulmán que osan mostrar propagandísticas imágenes de niños afectados por los "inevitables daños colaterales"; las masacres de civiles podrían afectar al amplio apoyo que la acción bélica ha suscitado en la opinión pública mundial (la estadounidense no importa tanto, ya se encargan los propios medios de comunicación del país de cumplir su deber patriótico y censurarlo todo). Las infraestructuras destruidas, ahora lo sabemos, las reconstruirán los iraquíes que queden, y cuidado, que se les pagará bien (no en vano 1.900 de los 80.000 millones de dólares obtenidos por Bush del Congreso de EE.UU. para la Acción Humanitaria se reservan para la reconstrucción de Irak -el resto, para la Acción Humanitaria de las tropas en sí).

"Estamos trabajando en ello": El conflicto iraquí se traslada a España. Anuncia Jaime Mayor Oreja que todo lo del No a la Guerra responde a una siniestra estrategia de la izquierda y, naturalmente, los nacionalistas para destruir España. Sólo la victoria del PP en las elecciones de Mayo evitaría una nueva Guerra Civil (el "terrible acoso" que sufren los militantes del PP por parte de la opinión pública, zafiamente manipulada por la oposición en lugar de por el Gobierno, sería un primer síntoma de esta Conspiranson). Hasta ahora, Jaime Mayor era el favorito, según las encuestas, para suceder a Aznar. Su estrategia política consistía en no decir nunca nada y responder, a cualquier cosa, "la culpa de todo la tiene el PNV". Ahora que el apoyo a su causa, según las malignas encuestas, comenzaba a descender, Jaime Mayor ha decidido salir a la palestra y, en un ejercicio retórico de indudable dificultad, ha conseguido hablar de lo de siempre también en lo que concierne al conflicto de Irak. Como diría Chirac, "ha perdido una excelente ocasión para callarse". Pero claro, es complicado callarse cuando el día anterior el gran líder, el propio Joe Mary Ánsar, ha divulgado en el ABC que asistimos a una siniestra operación política contra el PP. Dado que en esa siniestra operación política colaboran "los violentos", esto es, la opinión pública, el mensaje de Ánsar parece taxativo: antes desaparece España que dejo de apoyar a Bush. Impasible el ademán.

El frente interior: M.A.R. deja las cosas claras. Ayer Día K pudimos asistir a un debate en "La noche de Fuentes y Cía.", en Telecinco, sobre la guerra en Irak y, sobre todo, la guerra de Ánsar. El debate contaba con la presencia de Carlos Carnicero (SER), Luis Herrero (COPE), Pedro J. Ramírez (El Mundo) y Miguel Ángel Rodríguez (La Razón). Las posturas en el debate estaban claras: Pedro J. (la más sonora deserción en este asunto del Periodismo Independiente) y Carnicero contra la guerra y Herrero - Rodríguez a favor. Podría haber sido un debate interesante, pero como ocurre casi siempre en estas cosas, el formato del programa televisivo (y quizás las propias características del medio) impidió que la cosa tuviese profundidad alguna, limitándonos a escuchar unos cuantos lugares comunes ya expuestos con profusión en las distintas tribunas periodísticas. Luis Herrero tuvo el buen criterio de, defendiendo a Ánsar, mantenerse en segundo plano (tampoco podía hacer otra cosa trabajando en una emisora propiedad de la Conferencia Episcopal, no creo que quisiera arriesgarse a una excomunión por parte de su propia empresa) pero, naturalmente, M.A.R. no podía hacer lo mismo (sintomático, por cierto, que de dos contertulios favorables a la posición del Gobierno uno sea miembro del PP), así que desplegó todas sus artes, compendio de un manual que podría titularse "Hacer política para ciudadanos imbéciles", para defender a Ánsar. Al escuchar a M.A.R. uno se da cuenta de la auténtica debilidad del Gobierno, y se pregunta si los manifestantes no les hacen un favor cuando "nos impiden ejercer nuestro derecho a la libertad de expresión" en sus actos públicos. Algunas rutilantes intervenciones de M.A.R. que nos obligarán a ampliar nuestro Verbatim:

- "La pregunta es si estamos con EE.UU. y Gran Bretaña o con Rusia y China", versión light del "Entre Bush y Sadam, me quedo con Bush" de Ánsar.
- "El PSOE tardó dos semanas en condenar los ataques al PP".

Y ya está. No recogimos absolutamente nada más digno de mención para apoyar la intervención de España en el conflicto. Frases huecas de mercadotecnia que se dirigen al público equivocado, como comentaremos en breve en nuestro análisis del papel de la opinión pública en el conflicto. Las intervenciones de los demás contertulios tampoco dieron mucho más de sí constreñidos por constantes interrupciones por parte del moderador, Manel Fuentes, para dar paso a distintas intervenciones de un público seleccionado (un iraquí, un estadounidense, una militante del PP, otro del PSOE, un miembro de la Cruz Roja y un asistente al debate de Blair en la MTV, todos fieles al papel previamente designado, respectivamente: en contra de Sadam y del ataque a Irak; en contra de Sadam y a favor del ataque; Guerra Humanitaria y qué malos son los violentos que nos atacan instigados por el PSOE; nosotros no atacamos en las manifestaciones, la policía nos golpea sin mediar provocación; esto es un desastre; Blair y Ánsar no molan, pero al menos Blair tiene el detalle de aparecer a la luz pública), que al reducirse a su vez a una única intervención de menos de un minuto entorpecían más que enriquecer el debate; e intervenciones también de los humoristas que colaboran habitualmente con Fuentes, que en absolutamente todos los casos iniciaron su sección con una vergonzosa alusión a "Esto es mu complicao, Fuentes, estoy deseando hablar de Hotel Glamour".

Guillermo López (Valencia)

 
La Radio Definitiva