PROSPECTIVA: Por azar del destino, muchas personas que vivían en Cáceres en 2000 nos han abandonado para siempre para ir a un mundo mejor, y otros tantos han emigrado de la provincia en busca, imaginamos, de mejores expectativas laborales y, porqué no decirlo, a tocar un poco los huevos a los catalanes, trabajando en su industria, contribuyendo a la prosperidad de Cataluña pero, he aquí lo importante, sin hablar catalán. En consecuencia, la provincia pasa de cinco a cuatro escaños.

Lo cierto es que Cáceres ha perdido buena parte de su interés electoral, pues con cuatro escaños a repartir, y con la igualdad PP - PSOE de las últimas convocatorias (acabados ya los tiempos gloriosos de 1977, donde mucha gente interpretó correctamente lo que significaban las elecciones y votó en función de los réditos del Señorito), ni siquiera Rodríguez Ibarra podría cambiar las cosas: Empate a dos. Así que esto, unido a la igualdad que también se da en Badajoz, nos lleva a preguntarnos: ¿para qué sirve Rodríguez Ibarra y su insultante carisma extremeño en unas Generales? Pues, en efecto, para lo que todos Ustedes están pensando: para promulgar un peazo Congreso Extraordinario en el PSOE después de las Elecciones.