PROSPECTIVA:
Resulta increíble, pero al parecer Málaga, una
provincia que acoge a la Costa del Sol, una tierra de mestizaje
y tolerancia siempre y cuando aquéllos que aportan
ambos superen los 70.000 € de renta, es un feudo tradicional
de la izquierda. Más insultante aún resulta
constatar algo así si tenemos en cuenta que la provincia
de Málaga se ha beneficiado durante años de
la gestión municipal de Jesús Gil y familia
en alguno de sus más renombrados ayuntamientos. No
es ya que en Málaga el PP no lograra ponerse por delante
del PSOE hasta las elecciones del 2000 (y además, por
poco), el poder omnímodo de la izquierda antiespañola
es tan asfixiante que incluso parece ser que IU conseguía
habitualmente representación en esta provincia.
Por
fortuna, las encuestas electorales coinciden en apuntar que
IU perderá su escaño en estos comicios en beneficio
del PSOE, con lo que alcanzaremos una situación de
empate tácito que permitiría reeditar viejos
éxitos sobre lo apasionantes que son las circunscripciones
con una situación de práctico bipartidismo (el
Plan Badajoz adaptado a los 10 escaños
que se reparten en Málaga). Sin embargo, es preciso
constatar que el respeto que profesamos en LPD a las encuestas
es similar a la imparcialidad de los árbitros españoles
cuando pitan en el Bernabéu (no en vano tanto para
este análisis por
circunscripción como para la primera
versión del ElectoLPDtrón no nos hemos molestado
en preguntar a un solo ciudadano), así que vamos a
dar una vuelta de tuerca, un violento Oyokochi-San de la política,
que lamentablemente jugará en claro perjuicio del PP,
el único partido, hoy por hoy, que cree en España
tal y como la conocemos. Porque nuestro análisis en
Málaga parte de dos aserciones:
-
Por muy mal que esté IU no lo está tanto como
en 2000, así que pensamos que la coalición logrará
mantener la totalidad de sus magros ocho escaños de
las anteriores elecciones generales, entre otros el que consiguió,
in extremis, en Málaga.
-
El descenso del PP en estas elecciones, aunque sea limitado,
sí que será suficiente para que el PSOE lo sobrepase
en la provincia de Málaga.
Así
que en este caso, los resultados que arroja nuestro análisis
perjudican doblemente al PP: en primer lugar, porque IU, la
parte contratante de la primera parte de la coalición
socialcomunista, conseguirá un escaño (y eso
que ¿se imaginan Ustedes a Federico Trillo de ministro
de Defensa?" Huy, perdón, quería decir
"Llamazares"). Pero, además, este escaño
ni siquiera se lo quitará a sus amiguitos los violentos
del PSOE, sino que se lo arrebatará de las manos al
PP, por invertir el PSOE los resultados de 2000. Así
que PP 4, PSOE 5, IU 1.
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