Valladolid
ANÁLISIS
EQUIPOS TEMPORADA 2000 - 2001
OBJETIVO:
Claramente, no descender. Como ocurre en las pretemporadas de todos
los equipos, el Valladolid se postula como candidato a entrar en
la UEFA (no especifica si sería a través de la Intertoto), y (¿por
qué no?) la Liga de Campeones. Más dura será la caída.
TRAYECTORIA: El Real Valladolid es el clásico equipo ascensor, pero
eso no quita para que sea un equipo de entidad, del que salieron,
en los últimos años, jugadores de alto nivel, como Fernando Hierro.
En condiciones normales no debería descender, pero sin duda se quedará
cerca de hacerlo. En los últimos diez años ha oscilado entre primera
y segunda, ascendiendo y descendiendo continuamente, hasta que en
el acontecimiento social más importante de los últimos 25 años (el
descenso "por decreto" de Sevilla y Celta a 2ª B, que
provocó la aparición de la sociedad civil en ambas ciudades con
el único objetivo de protestar por tal afrenta), el equipo supo
aprovechar su oportunidad y subió a Primera de una manera harto
sonrojante. Curiosamente, desde entonces parece que se ha estabilizado.
FIGURAS: Si Shoji Jo, el jugador japonés que provocó que las camisetas
del Real Valladolid se vendieran como rosquillas en Japón (y en
ningún otro sitio, claro) hubiera desarrollado la inmensa calidad
que sin duda tenía (recuerdo incluso un gol de esta exótica estrella),
sería nuestra figura indiscutible; pero una inoportuna lesión se
cruzó en su camino y Shoji Jo ha vuelto a su tierra natal (concretamente
al pedazo de tierra – 10 metros cuadrados para él, su esposa y sus
cuatro hijos- en el que debe vivir). Así que, como nos parece excesivo
nombrar a Ignacio Lewin como "estrellita" del Valladolid,
porque el hombre ya está mayor, vamos a suponer que el gran fichaje
vallisoletano, Cuauhtémoc Blanco (no se rían), delantero mexicano,
será la figura del Valladolid. ¿Y por qué? Pese a que todos y cada
uno de los delanteros mexicanos (en general, jugadores mexicanos)
que no sean Hugo Sánchez han demostrado ser unos paquetes, este
hombre, Cuauhtémoc Blanco, ha asegurado que ciudadito, que él no
se conforma con la octava plaza del año pasado, y que va a por el
título de Liga porque él es "uno de los mejores jugadores mexicanos"
(y yo del bloque de apartamentos en el que vivo). Parece que el
problema de las drogas alucinógenas en México está creciendo con
fuerza, añadiría yo.
NUESTRO CONSEJO: Cerrojazo. Cerrojazo siempre y rezar porque a Caminero,
aunque sea un abuelo, le de por sacar algunas gotas de calidad que
sirvan para ganar algún partido por la mínima. Este consejo debería
ser claramente superfluo, porque no nos cabe ninguna duda de que
el catennacio es la base del fútbol vallisoletano, pero la compra
del club por parte de una especie de productora de televisión cuya
cabeza visible es Ignacio Lewin, al que ya hice referencia, nos
hace albergar algunas dudas que sin duda desaparecerán cuando el
Valladolid, como siempre, luche por el liderato en la única clasificación
en la que tiene posibilidades: la del equipo menos goleador.
COMENTARIO:
El hecho de que toda la política nacional (Aznar y Zapatero) gire
en torno de esta ciudad castellana, y gran parte de la vida social
(Ania) también, nos hace suponer que el Real Valladolid va a hacerse
acreedor de un apoyo institucional hasta ahora reservado a los Elegidos
(Barça y Madrid). Más le vale, porque la plantilla es realmente
pobre, plagada de jugadores desconocidos (los nuevos fichajes),
pero también, y desgraciadamente para su afición, viejos conocidos.
A uno se le hace muy cuesta arriba indagar en la hondura del amor
a los colores de aquellos capaces de ir habitualmente al estadio
Nuevo Zorrilla, donde hace un frío que pela, un viento terrible
y además los partidos son siempre malísimos (esto último, compartido
con todos los demás equipos españoles). Pero el fútbol es así, y
de esta manera debe haberlo entendido Ignacio Lewin, dispuesto a
aburrirnos tanto con su nuevo equipo como lo hacía en su programa
de la Cadena SER (lo tiene difícil).
EL COMENTARIO DE NUESTRO TECNICO: Esteeee, Valladolid es una bella
ciudad castellana plagada de jesuitas y militares. Ambos colectivos
se caracterizan por una acendrada tradición futbolística, lo que
nos hace pensar que el fútbol practicado por el Real Valladolid
aunará lo mejor del antiguo Atlético Aviación, los partidos entre
sudorosos seminaristas y la clásica sobriedad castellana. Esto significa,
por si usted aún no lo ha entendido, que el diálogo establecido
entre el cuero y la plantilla en la cancha será el mínimo imprescindible,
puesto que hay algo mucho más importante en juego: la táctica como
refrendo concreto de las grandes líneas estratégicas que están insertas
en lo más profundo de la institución: mantener el resultado inicial.
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