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Atlético de Madrid

ANÁLISIS EQUIPOS PRIMERA DIVISIÓN - TEMPORADA 2003 - 2004

 

OBJETIVO: Que vuelva Jesús Gil al poder. Los éxitos cosechados en la primera época de D. Jesús pese al acoso constante de los poderes fácticos, que son, además, babiosos y sociatas, aconsejan acabar cuanto antes este lamentable interregno impuesto por una Justicia corrupta. Parece mentira que a estas alturas se le nieguen los méritos a un hombre pionero en la implantación en nuestras costas, nuestra capital y nuestra España de las más avanzadas teorías del llamado "marxismo-ladrillismo", y sin andarse con tonterías de untar al poder político, sino haciéndose con él directamente.

TRAYECTORIA: La trayectoria del Atlético de Madrid en las últimas décadas (coincidentes con los años de D. Jesús al frente) es digna de un estudio monográfico de Teoría del Caos. Récord absoluto de compra de jugadores, récord absoluto de pago por jugadores desconocidos, récord absoluto de contratación y expulsión de jugadores, algunos de ellos dignos de una galería de los horrores ("Tren" Valencia, Roman Kosecki, Juninho) y todo ello aderezado con un doblete, varias finales infructuosas de Copa del Rey, varios años de ridículo en Primera, dos añitos de nada en el Infierno, y la pérdida absoluta del capital futbolístico que alguna vez pudo tener un equipo tan malo que parece de provincias, pero que al ser de Madrid muchos periodistas aún catalogan como "el tercer grande de España" (y se quedan tan anchos).

FIGURAS: "Cholo" Simeone. A sus 34 años, Simeone está hecho un chaval que suelta las mismas yoyah que cuando actuaba con los juveniles de la selección argentina. "Cholo" es la figura de este club por lo que es y también por lo que simboliza, el contacto con una tradición futbolística que hunde sus raíces en la fundación del club (cuando jugaba con el nombre de Atlético Aviación y tuvo el honor de disfrutar a lo largo de la década de los cuarenta el título oficioso de "Equipo del Régimen", antes de ser sustituido por el mismísimo MEMYUC), tradición aposentada sobre la lucha, el esfuerzo, las patadas, la absoluta ausencia de calidad y las agresiones sin cuento (recuerden a Tomás Reñones, a "Pichichi" Manolo, a Pizo Gómez y, por encima de todos, a Juanma López, todos ellos entrenados por Javier Clemente; fue tan bonito que casi parecía uno de esos "equipos ideales" de cachondeo que uno idea con los amigos).

NUESTRO CONSEJO: El Atlético de Madrid lleva unos cuantos años mereciéndose sobradamente el seudónimo de "Patético de Madrid". Su actual entrenador, un hombre gris en todos los órdenes, es parte de ese patetismo, y además, aunque no lo fuese, entrena al entrañable Pateti, y tradición obliga. Nuestro consejo es que el Atlético despida a Manzano cuanto antes, fiche de aquí a finales de la primera vuelta a un entrenador por jornada y contrate para la segunda vuelta a Luis Aragonés, asegurándose los réditos propios de las segundas vueltas de los equipos de Luis y fortaleciendo ante la justicia el argumento de que si bien es cierto que el Atlético estaba desquiciado bajo la égida de Gil, bajo la égida oficiosa de Gil lo está aún más, lo que propiciaría el cumplimiento del objetivo designado para esta temporada, la vuelta de D. Jesús, pues en un país serio como España no es de recibo tener a un hombre amargado con procesos judiciales por unos pecadillos sin importancia que, además, son motor y fundamento de nuestra economía.

COMENTARIO: El Atlético de Madrid es, al parecer, el "equipo más simpático de España", en reñida competición con el Betis. La simpatía que provoca entre la afición española proviene, suponemos, de su segundo apelativo, "El pupas", el equipo al que todo le sale mal, especialista en hacer el ridículo y en perder siempre. Aunque es sintomático que dado que uno de los dos equipos de Madrid (el tercero en discordia, el Rayo, no entra en la competición por razones obvias) sea el "bueno" oficial para todos los españoles por decreto ley, el otro tenga que resultarnos forzosamente "simpático", no deja de ser curioso que lo sea por sus constantes fracasos. ¿Qué sentido tendría, en caso contrario, que cayera simpático si todos los periodistas y hombres de bien en general son del Real Madrid, y por tanto es de suponer que sus simpatías estarán más bien orientadas hacia el MEMYUC? ¿Por qué otra razón habría de ser simpático el autoproclamado "eterno rival", junto al Barça, si este último no sólo no resulta simpático sino que ni siquiera es español?

EL COMENTARIO DE NUESTRO TECNICO: Esteee, el Atlético de Madrid es un representante fidedigno del buen pueblo español, ajeno a las maniobras de merchandising de algunos aprovechados. Desde los tiempos del Atlético Aviación el Atlético sigue fielmente los más firmes preceptos de la única escuela de fútbol digna de tal nombre: la argentina, que a pesar de ser única no por ello es monodiscursiva, antes bien capaz de construir relatos variados e incluso contradictorios. No cabe extrañar que uno de los líderes intelectuales de la tradición menottista, César Luis Menotti (no en vano inventó él mismo la tradición que por otro lado lleva su nombre), fracasara cuando intentó inocular en los jugadores del Atleti el gusto por el toque, la formación de sociedades futbolísticas y el manejo cuidadoso del cuero. Efectivamente, el Atleti siempre ha bebido de las fuentes nutricias de la otra gran escuela argentina, la bilardista, aquella que afirma que el fútbol no es toque sino guerra, no es calidad sino fuerza, no es cuero sino tobillo de los rivales. En este sentido, el Atleti es el más argentino de los equipos no argentinos que hay en el mundo, pues siempre ha jugado de la misma manera: patadas al jugador contrario y patadas al balón para jugar al contragolpe (eso sí, lo menos posible), como lo hacían los argentinos que, emigrados a Gran Bretaña en el siglo XIX, se disfrazaron de ingleses y se dedicaron a inventar este gran deporte en los descansos que les dejaba su duro trabajo como estibadores del puerto.

Guillermo López (Valencia)

ANÁLISIS DEL ATLÉTICO DE MADRID TEMPORADA 2002 - 2003

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