Euroescepticismo vs eurobelieberismo
El pasado domingo la Candidatura d’Unitat Popular (CUP), fuerza emergente de la izquierda independentista catalana, anunciaba oficialmente el acuerdo por el cual, y por un estrecho margen de tres votos, resolvía no presentarse a las elecciones europeas de éste mes de mayo. Aunque oficialmente se esgrimen varios motivos para el rechazo a concurrir los comicios, relacionados con el déficit de legitimidad democrática de las instituciones europeas, las razones reales van más por el lado de los equilibrios internos y las obvias dificultades logísticas y organizativas: empiezan a sonar campanas de elecciones autonómicas anticipadas en 2014, ante el rechazo de Rajoy a la consulta catalana, y un partido con pocos recursos como es la CUP piensa en concentrar esfuerzos ante unas encuestas que le auguran doblar su representación.
Con la negativa de la CUP a concurrir a las elecciones europeas parece que se descarta la posibilidad de que exista una candidatura netamente euroescéptica desde el campo de la izquierda en estos comicios. La coalición de IU, ICV, CHA, Anova y compañía encabezada por el ilusionante Willy Meyer apuesta abiertamente por una unión fiscal que dote de instituciones políticas a la zona euro y aumente los poderes de la Unión Europea. ERC, Equo y Compromís son formaciones con una militancia mayoritariamente también muy europeísta y que apuestan por una democratización “desde dentro” de la UE y la zona euro. Incluso Bildu, fruto de su diversidad interna, plantea el tema en términos ambiguos y con tesis más cercanas a las de IU. Tampoco Podemos hace de la definición en éste tema algo central, optando por definiciones ambiguas alrededor del concepto democracia.
Nada de ésto es sorprendente si analizamos la trayectoria de cada una de las formaciones: desde la apuesta por el Compromesso Istorico del PCE-PSUC en los 70, por la UE en los 80 y el sí crítico a Maastricht y la Unión Monetaria en los 90; y los diferentes partidos nacionalistas que provienen de una tradición que ha buscado en la UE el deus ex machina que había de venir a desfazer los entuertos provocados por el ogro madrileño. Pero la CUP, producto de una nueva generación más deudora del movimiento antiglobalización que del viejo socialismo histórico, tiene en estas cuestiones un enfoque diferente. Sus organizaciones impulsoras ya advertían hace década y pico, cuál Casandra, que con el euro íbamos a la miseria. Y nada.
En el largo rosario mediático de advertencias sobre el auge de la extrema derecha, el euroescepticismo aparece -cuando lo hace- como un efecto colateral y cuasi mágico, sin aparente relación con la crisis económica. Tal y como se explica en el texto antes enlazado, el hecho de que entre 2002, año de adopción del euro, y 2007 (en plena “bonanza” económica) los precios de productos básicos -la inflación- creciesen a un ritmo tres veces superior a los salarios da al problema europeo una dimensión estructural, y no sólo coyuntural. Unido al comportamiento de la Comisión y el eurogrupo en materia de deuda y “rescates” es absurdo fingir que todo ésto no afecta a la percepción popular: la desconfianza hacia la UE aumentó en 45 puntos de 2004 a 2012. Con datos de 2012 el 72% de ciudadanos del Estado español tiene una imagen negativa de la UE.
Mientras tanto, en el campo de la izquierda que, al menos teóricamente, está llamada a capitalizar el descontento, la tendencia apunta en la dirección opuesta. En una línea similar a la propuesta por Syriza, aconsejada por su ideólogo, el economista greco-australiano Yannis Varoufakis, la mayoría de la izquierda ibérica -también la portuguesa- apuesta por una mayor de cesión de soberanía a la Unión Europea con vistas a crear un super-estado con presupuesto más robusto capaz de realizar inversiones. Para ello proponen una cierta armonización fiscal y regulatoria en materia bancaria y financiera: en otras palabras, instrumentos que permitan canalizar “excedentes” de los países del “norte” de la zona euro (Alemania, Países Bajos, Austria, Finlandia, etc) hacia los del “sur” (Grecia, Portugal, España, Chipre, Irlanda… y a ratos, Italia).
Este planteamiento, si bien sobre el papel parece el más razonable, tiene el pequeño inconveniente de que necesita al menos la aprobación de los países del norte de los que, al final, se solicita que paguen la factura al contado. Y en todos estos países, empezando por la metrópolis, Alemania, parece que el consenso político va por otros derroteros. Excepto Die Linke, el resto de partidos apuesta por profundizar en la agenda de contención salarial aprobada por Schröder y Fischer en 2003, con vistas a mantener la inflación baja. La opinión pública del norte no está por monetizar deuda de los PIGS (imprimir billetes) y tampoco invertir allí los excedentes que apenas generan con su raquítico crecimiento del 1% mientras siguen los recortes en casa. No parece realista.
En definitiva, la inmensa mayoría de la izquierda hispánica pide reeditar el pacto de los 80: abrir aún más la economía y ceder soberanía a cambio de que los alemanes metan la pasta necesaria para salir de la crisis. Pero hay diferencias sustanciales. En primer lugar, el mercado interno de los países del sur, reventado como está, con paro galopante y salarios a la baja, no resulta suculento como antes: los países del norte de la zona euro dirigen sus exportaciones mayoritariamente a mercados emergentes.
En segundo lugar, la mano de obra del sur no es lo suficientemente barata con relación a la del norte como para plantearse deslocalizar grandes fábricas y centros de producción. Precisamente la presión europea actual es para una mayor caída de salarios: no habrá grandes inversiones generadoras de empleo sin un desplome mayor de los salarios reales. También en esto -y especialmente en mano de obra no cualificada- los mercados emergentes son mucho más competitivos.
En tercer lugar, un euro devaluado o vinculado a las emisiones de deuda sindicada de los países del sur y el norte, los denominados eurobonos -el equivalente a vender como DO Ribera del Duero una mezcla 50-50 de Vega Sicilia y Don Simón- podría perder su condición de divisa de reserva para ciertos tipos de transacciones, y con ello comprometer la capacidad de los mercados financieros europeos para atraer capital. Además de la pérdida de poder adquisitivo de la divisa en bienes primarios de importación, como los hidrocarburos, de la que la gran industria del norte es altamente dependiente.
El escenario de ruptura del euro e incluso de la Unión Europea no es nada halagüeño, ciertamente está lleno de dificultades y pocas certezas; con la ya famosa intervención de Draghi en los mercados de deuda parece que el riesgo a corto plazo se disipó. Con la economía estabilizada, solo cabe resignarse a una larga década perdida de desempleo estructural superando el 20% y ninguna perspectiva de mejora o democratización de las instituciones imperantes en materia económica y monetaria. Desde el punto de vista unilateral -lo que desde España, Portugal o Grecia puede hacerse sin esperar milagros en la metrópolis berlinesa- el abanico se reduce a dos opciones: la resignación o un escenario de ruptura. Incluso cualquier propuesta creíble de reforma europea con capacidad para emplazar al norte necesita poner sobre la mesa alguna bomba nuclear que no suene a farol: la amenaza de impago de la deuda y abandono de la zona euro; y alguna remota posibilidad de que se lleve a cabo. De lo contrario, nadie tiene incentivos para ceder.
Sólo en Catalunya, con el proceso independentista en marcha, este tipo de cuestiones han entrado mínimamente en el debate público. La opción independentista sigue siendo la ganadora en las encuestas -aunque con menos margen- cuando se plantea la hipótesis de tenerla que llevar a cabo al margen de la Unión Europea y por tanto de sus instituciones. Las debates sobre la eventual continuidad de la libra esterlina en caso de independencia de Escocia dan algunas pistas sobre la cuestión. Aunque CiU y ERC siguen con su temerario wishful thinking, parte de la sociedad catalana da por hecho el veto español y plantea escenarios económicos alternativos.
Con todo ello, la negativa de la CUP a participar en las elecciones supone una gran pérdida para que el gran debate en el seno de la Unión Europea entrara mínimamente en juego más allá de las luchas partidistas por afianzar el escenario cara a las grandes citas de 2015. La izquierda moralsantinista se congratulaba ayer de que nadie irrazonable en estas cuestiones participara en los comicios: el gran debate sobre si dan más miedo los euroescépticos o los eurobeliebers y la inclusión de la realpolitik en política económica tendrá que esperar aún algunos años. Tratándose de España, seguramente hasta nunca.
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Comentario de Judge Dreed (11/03/2014 10:02):
Gran análisis, Francesc.
Plas, plas, plas.
Comentario de emigrante (11/03/2014 10:09):
“los precios de productos básicos -la inflación- creciesen a un ritmo tres veces superior a los salarios” ande estaba la socialdemocracia europea todo este tiempo? que en lugar de coger esa bandera la deja ahí tirada para que la extrema derecha y los euroescépticos se la apropien.
Dejando a las CUP aparte, soy yo el único que ve cierto paralelismo entre el europeísmo y el separatismo nacionalista? Me explico, el objetivo de las izquierdas, demasiado débiles para enfrentarse al stablishment tras 40 años de represión y clandestinidad, sería restar poder a Madrid ya sea por arriba (Europa) o por abajo (autonomía/independencia). Y cuando digo Madrid me refiero a la derecha de toda la vida, a los de siempre. Es la impotencia de llevar a cabo su proyecto o siquiera de hacer llegar su mensaje en un sistema hostíl lo que empuja a estos los movimientos a tomar el atajo de romper la baraja y empezar de cero en su rinconcito particular o pedir auxilio a la mamá Europa porque el abusón de Madrid no te deja jugar. Por mucho que nos joda Europa siempre parecerá más razonable y democrática que lo de aquí.
Comentario de Andrés Boix Palop (11/03/2014 11:40):
Las instituciones europeas han contenido, de momento, muy bien estos primeros embates de crisis estructural del diseño de mercado único y moneda común que se hizo en Maastricht. Ya veremos cómo evoluciona la cosa, pero está claro que el primer round lo ha ganado la visión clásica de la UE, que se está transformando e incrementando su poder cosa mala con esta crisis sin, de momento, haber perdido demasiado (ni siquiera, de hecho, demasiado apoyo popular en las economías más castigadas). La realidad derivada de los enormes desequilibrios de ese diseño, por el momento, no parece hacer suficiente mella en electores y poderes económicos del sur de Europa. Veremos cómo evoluciona el tema, porque es muy interesante.
Comentario de Latro (11/03/2014 11:42):
No lo sé emigrante, puede, pero también lo puedes ver desde el otro punto de vista.
En muchos de los temas mas urgentes de la situación económica, lo que tenemos ahora es un juego de “dile a papa, dile a mama” entre los gobiernos nacionales y Europa, que a base de escurrir el bulto terminan por implementar las políticas neoliberales en plan “no soy yo, eres tú el que me fuerza”. Eso de “ups, yo no quiero recortar, pero me manda Bruselas”, “ups, yo es que no puedo comprar deuda, asi que teneis que hacer mas recortes”, etc.
La propuesta sería decir vale, pues ahora si que estan todas las herramientas de la mano de Europa, no hay excusa que valga para decir que no se puede tomar otro camino.
Claro que eso es una absoluta utopía, no solo por la posibilidad de que esa super Europa NO este bajo el control de la izquierda, sino ya como dice Francesc, que los paises “centrales” acepten tal cosa cuando con lo que tenemos ahora les va de puta madre.
Comentario de Mauricio (11/03/2014 12:13):
No hay un modelo de Europa de izquierdas y otro conservador, una solidaria y otra egoísta, hay una Europa que paga y otra que recibe dinero. La izquierda, como se puede ver en Cataluña, defiende la solidaridad entre territorios hasta que tiene que pagar. Luego hablan de poner un límite a la solidaridad, o como en Francia, se pasan al Frente Nacional. Que no se preocupen en la CUP que Le Pen ya se encargara de defender sus planteamientos en Estrasburgo.
El problema de Europa es que no sabe todavía qué quiere ser de mayor; tiene una ligera idea pero no ha sido capaz de marcar las etapas, excepto una que le ha salido medio rana. Desde luego no serán los euroburocratas/diputados quienes harán nada para cambiar demasiado la situación actual.
Comentario de Lluís (11/03/2014 13:01):
Mauricio, ya sólo le ha faltado decir que lo que hay en realidad es una Europa de liberales que trabajan, se lo curran y les roban a base de impuestos, y otra de vagos y maleantes que sólo ansía haraganear y vivir de la subvención.
Por cierto, los que más hablan de poner un límite a la solidaridad son precisamente los de derechas. Evidentemente, no todos, ya que otra parte de esos simplemente eliminarían todo tipo de solidaridad, que un Estado debe limitarse a invertir en policía, ejército y cárceles (y a ser posible, éstas deberían autofinanciarse a base de reintroducir los trabajos forzados), tal como se hacía en el siglo XIX. Luego, resulta que los “anticuados” son los rojos varios que insisten en que el estado debe derrochar en sanidad pública y prestaciones sociales varias.
Comentario de emigrante (11/03/2014 14:18):
#6 Lluis, no se me enfade que Mauricio tiene parte de razón. El boom que disfruta el independentismo catalán estos días lo hace bajo el lema de “Espanya ens roba” y el euroescepticismo en el norte de Europa es de derechas (UKIP, Le Pen…) mientras que en el sur es más de izquierdas (Syrizas y Grillos) aunque Grecia tiene de los dos tipos. La principales excepciones son España y Alemania por sus respectivos traumas históricos.
Comentario de parvulesco (11/03/2014 15:29):
Ves, si en el fondo tenía razón en tuiter, sólo querías que se presentaran para poderlos votar.
Yo aún estoy esperando que los fans de Varoufakis me expliquen por qué Alemania va a cambiar lo que lleva haciendo 20 años.
Comentario de Teodoredo (11/03/2014 16:18):
#6 Por una parte me suena que algo de éso (trabajo en las cárceles) hay en los esteits, aunque desconozco si llegan a ser autosuficiente. Por otra, y respecto a los rojos varios, existe una tercera modalidad, encarnada en el gran FRM, según la cuál no hay que tener miedo de que se carguen el estado del bienestar porque ése es precisamente el instrumento que usan las clases dominantes para tener a la plebe adormecida en un ensueño de adoración del estado o “estatolatría”.
Total, que entre los que dicen que te quita el estímulo para ser emprendedor y los que opinan que te apijota para impedirte alzarte en armas contra las clases dominantes parece que los tumores se los va a tratar el que tenga el efectivo suficiente para pagárselo.
Comentario de Caliban (11/03/2014 19:40):
A largo plazo, e incluso a medio, se me antoja un error de cálculo esa estrategia de algunas izquierdas de confiar en “Europa” como un ente superior y moralmente clarividente que se vaya a oponer en virtud vaya usted a saber qué a los zarpazos que le están pegando a las condiciones de vida en cada uno de sus países las oligarquías y sus palanganeros. Básicamente porque son esas mismas oligarquías y esos mismos palanganeros los que están ejecutando fríamente el abrazo del oso neoliberal sobre los estados que lo forman. El trabajo de zapa está perfectamente sincronizado desde dentro y desde fuera.
Comentario de Bunnymen (11/03/2014 19:47):
No hay un modelo de Europa de izquierdas y otro conservador, una solidaria y otra egoísta. Hay una Europa que presta, recibe y a la que le espera un cómodo asiento en Bruselas al fin de su carrera, y ciudadanos de una Europa a los que les toca poner y devolver.
Comentario de Bunnymen (11/03/2014 19:48):
Y devolver se asco tambien.
Comentario de Lluís (11/03/2014 19:51):
Emigrante,
En España, el euroescepticismo también está en la derecha. Aunque sólo sea por el motivo tradicional que preocupa al facha de a pie, (pérdida de soberanía nacional,…), por el lado derecho del PP andaban bastante revueltos con la derogación de la “doctrina Parot”, y basta meterse en medios como Alerta Digital para ver lo que piensan esos de Bruselas, a su lado los de la CUP parecen los palmeros de la Comisión Europea.
Yo diría que el euroescepticismo, en España, es algo transversal, igual que el “Espanya ens roba” de aquí o el “Puchol enano habla castellano” de la meseta. La única diferencia que veo es que la izquierda, más que antieuropea, está en contra de la forma en la que se está construyendo la Unión (por sus déficits democráticos o participaticos) o porque ésta está imponiendo unos principios más bien neoliberales, en cambio la derecha “patriótica” es antieuropea porque considera que atenta contra la grandeza de España, podrían tener a Hitler resucitado presidiendo la Comisión y protestarían igual.
Comentario de POCHOLO (11/03/2014 21:23):
A mi me hubiera gustado tener un partido de izquierdas que plantease la salida de España del euro y de la UE… Pero lamentablemente, sólo podemos elegir entre partidos ultramuntanos como el PP o partidos conservadores como PSOE, IU o Podemos.
Comentario de Schwejk (11/03/2014 22:29):
¿Grillo es de izquierdas? ¿Seguro?
Comentario de Guillem (11/03/2014 22:38):
En castellano, Cataluña. En catalán, Catalunya. En inglés, Catalonia.
Usad la ñ. Escribid correctamente.
Comentario de DG (12/03/2014 02:55):
#8 No sé si fan de Varoufakis, pero coincido en la mayoría con él, y a mí lo que me gustaría es que los defensores de la salida del euro nos explicasen cómo evitar que el shock económico de tal decisión nos llevase al hundimiento y desprestigios de sus proponentes y la vuelta triunfal de Aznar para arreglar lo que destrozó la “inoperante izquierda radical” hasta el final de los días.
Es cierto que Alemania no va a cambiar (hasta que no le quede más remedio), pero incluso esa situación es menos mala que la que nos encontraríamos tras una escapada del euro. Salir del euro es, a medio plazo, entregar el cortijo a los Aznares para volver a lo de siempre: el ladrillo y latrocinio. Dentro del euro no queda más remedio que reinventarse o morir.
Comentario de Teodoredo (12/03/2014 07:31):
#17 Los proponentes ya dejan bien claro que el shock va a ser traumático a corto plazo. Otra cosa es que si consiguen imponer su programa los que los hayan votado sean realmente conscientes. Yo mismo por ejemplo les votaría pero, aunque me imagino lo que es quedarme sin trabajo, no sé realmente cómo es un escenario de desabastecimiento, de saqueos, de hiperinflación o de lo que quiera que vaya a ocurrir. De todas maneras no se va a dar el caso porque los proponentes son todos de izquierdas y ya ha quedado sobradamente claro que Espéin no es un país de izquierdas y que ante todo lo que huela levemente a justicia y progreso sus habitantes huyen espantados.
Creo que la salida (de la ue, del €, de lo que sea) no será voluntaria sino más bien impuesta por circunstancias externas.
Comentario de kekkonen (12/03/2014 08:33):
Buenaas, a mi me parece interesante lo comentado por Mauricio. Resulta curioso como el auge de partidos populistas, abiertamente xenofobos, extremoderechistas, nacionalproteccionistas, euroescepticos… desde Francia hasta Finlandia, se simultanea con la perdida de apoyos de la izquierda tradicional. La izquierda parece haberse visto desbordada por sucesivas crisis, y encontrarse sin un objetivo claro, no ya de proponer una hoja de ruta sino al menos de saber contra que ir, contra las Sicav, contra los bancos, contra empresarios (grandes, medianos o pequenyos?), contra el conservadurismo, contra el escudo antimisiles, contra Reagan, contra Mourinho?…
Mientras sus votantes crisis tras crisis, desindustrializacion tras desindustr. veian perder sus puestos de trabajo y caer su nivel de vida, abrazando cualquier nuevo partido que les ofrezca el nuevo mana, ya sea echando inmigrantes, recortando antiguos de derechos, protegiendo el producto nacional frente a la amenaza externa, lucha de clases por abajo. Ante eso, ahora que?
Mas o menos Europa?es esa una cuestion de izquierdas o es de populismos?
(Perdonad el tocho y la falta de signos de puntuacion, no tengo teclado espanyol en mi movil chinorri)
Comentario de Latro (12/03/2014 10:40):
La salida del € puede ser muy traumática. Pero con la falta de “trauma” de lo de ahora estamos condenados. Ha quedado claro que la política económica europea es “lo que le venga bien a Alemania y absolutamente nada mas”. Si es época de vacas gordas bien, si es de vacas flacas, también, lo único que importa es que a ellos no se les afecte en lo mas mínimo. ¿Sufrir ellos una inflación mínimamente mas elevada para aliviar el peso de los países del Sur? Ni de coña. ¿Subir un poco sus salarios? Ni de coña. Etc…
En esas condiciones no se yo si el trauma, cuanto antes y mas rápido, no va a ser mejor que seguir asumiendo que la política económica de nuestro país esta en manos de gente a la que les importa una soberana mierda dicho país.
Comentario de Pogrom Pom Pom (12/03/2014 11:06):
Tengo una duda: la desindustrialización de España, ¿sobrevino simplemente porque no era competitiva, o por imposición de la entonces Comunidad Económica Europea?
Es decir, perdimos casi toda la industria productiva justamente o porque debíamos dedicarnos al chiringuito y construir urbanizaciones por decreto?
Lo digo porque, si es lo segundo, entonces ceder soberanía a un ente supranacional va a resultar que no es asunto baladí y puede tener serias consecuencias, más allá de ensoñaciones de justicia y hermandad fraterna.
Comentario de Teodoredo (12/03/2014 11:13):
#19 Fíjate en lo que has dicho “no están dispuestos a subir un poco sus salarios para aliviar a los países del sur”, que yo pienso que es absolutamente cierto: *sus élites* no están dispuestas a subir los salarios.
#20 A mí me suena que la división internacional del trabajo que mencionas le fue impuesta a FG por la socialdemocracia alemana como condición de entrada, junto con la renuncia al marxismo. Que puede que no fuera la ostia de competitiva, pues tal vez sí pero ¿es éso motivo para dejar que otros lo fabriquen absolutamente todo?
Comentario de Latro (12/03/2014 11:43):
A mi lo de la competitividad… vamos a ver. Según ciertas teorías económicas que por lo que veo yo no tienen porque estar erradas pues si, es mejor que te dediques a las cosas donde tienes “alta competitividad”, que intentar abarcarlo todo.
Vale, muy bien. Es lógico, por ejemplo, que si aquí se dan las naranjas muy bien pero que se yo, los arándanos no, pues me concentre en producir mas naranjas en vez de ver si puedo hacer arándanos mas caros aqui para consumo interno de lo que me saldrían comprándolos fuera.
¿Alguien me puede decir la razón específica por la que sea mas competitivo fabricar coches, o sistemas electrónicos, o piezas, o programas, o servicios, cualquier cosa de industria o servicio mas o menos “altamente cualificados” en Alemania y no en España?
Porque la única que veo yo es la inversión en tecnología y formación.
Comentario de kreyente (12/03/2014 11:48):
Pues yo veo normal que las CUP no quieran ir a Europa si creen que creyente se escribe “Belieber” en inglés.., quizás pensaban en Justin Belieber…
Comentario de Pogrom Pom Pom (12/03/2014 11:53):
#21 Yo también creo que fue así.
Cuando España todavía no pertenecía a la UE, queríamos entrar porque eso significaba que nos levantarían los aranceles y nuestras mercancías serían todavía más competitivas. Pero, ay amigo, con el sistema de cuotas hemos topado: Sacrifica vacas, que para eso ya está Francia. Arranca viñas, que los italianos también tienen derecho a vivir. Cierra los altos hornos y compra el acero del Ruhr.
Alguna cosa me han contado de cómo antes España, a pesar de las barreras arancelarias previas, se las apañaba para negociar y colarle algún que otro gol exportador por la escuadra a la comunidad europea.
Comentario de Pogrom Pom Pom (12/03/2014 12:14):
#22 Eso es porque en la UE lo del libre mercado es un poco sui generis. Los países fuertes, a la hora de la verdad, intentan eliminar competencia en campos que consideran “estratégicos” (léase: no quiero que los lobbies se lleven un disgusto)
Comentario de Teodoredo (12/03/2014 14:24):
#26 Pero éso es una constante centro-periferia. En Espéin pasa lo mismo: ha habido una lucha feroz (que se ha ganado por goleada) por desindustrializar Levante (perdón Joan Fuster por usar el término) y Catalunya y trasladar los centros de decisión de las empresas en favor de Madrit. Algo así como lo que ya dijo en su día Pop (y le cayó la del pulpo): “déjennos a nosotros las cosas serias y ustedes dedíquense a servir jarras de sangría”. Lo de Alemania es lo mismo, pero a nivel Europeo.
Comentario de asertus (12/03/2014 15:06):
Teodoredo, lo cachondo es que ese proceso se ha llevado a cabo con la democracia y las autonomías por todo lo alto…, con la excusa de las imposiciones europeas, reconversión industrial, etc…
En la época del caudillo, se ponían fábricas de coches en Barcelona, se potenciaban astilleros en Galicia y Cartagena y se impulsaban altos hornos en Bilbao y Sagunto…, cosas veredes…
Saludos
Comentario de Teodoredo (12/03/2014 15:18):
#28 Pues sí. Pero no ha venido todo de golpe. Primero fue una oleada de desindustrialización que dejó las mesetas como un erial, pero sin que Madrit dejara de ser un nido de oscuros funcionarios. El 92, con sus fúnebres sucesos (expo, olimpiadas) fue el canto del cisne para Bcn: nunca me explicaré cómo pudieron abrazar con tanto entusiasmo lo que no deja de ser una humillante terciarización. Y después llegó el 96 con su victoria del PP, auténtica hora cero para la concentración de poder y centros de decisión en la capital.
Comentario de galaico67 (12/03/2014 16:16):
Por favor, Teodoredo, no olvidemos nunca, ni por un momento, el papel de las amadas élites catalanas en todo el proceso. Ha habido un muto intercambio con Madrit – si recordamos a Coby tambien tendremos que recordar a Banca Catalana, el saneamiento de la Seat, a FECSA…-, una historia común y compartida, muy española, donde el mutuo beneficio ha primado por encima de los principios y al final, todos los perifericos estamos jugando un papel subordinado y, además , la mayoría lo refrendan con los votos.
Comentario de emigrante (12/03/2014 16:42):
#20, 22, perdonen vuesas mercedes pero eso no es del todo cierto, al menos en el sector público tuvimos el año pasado una subida del 6%. También ha habido subidas en el metal y servicios, además han introducido el salario mínimo en algunos otros sectores. Todo esto la Merkel solita mientras sus socios liberales balbuceaban intentando explicar por qué el gobierno hace todas estas barbaridades. La CDU por su lado consideraba que la inflación no estaba en peligro y un chute al consumo en el momento apropiado es una buena vacuna contra la crisis contagiosa. Después, en la Gran Coalición una de las líneas rojas del SPD ha sido el salario mínimo universal.
#23, para producir una lavadora se fabrican las piezas en países donde Kunta Kinte desearía volver a su plantación de algodón, dan la vuelta al mundo hasta llegar aquí donde se ensamblan y con eso ya pueden ponerle un “made in Germany”. En el mundo globalizado sólo hay sitio para dos países exportadores, Alemania que produce calidad y China que produce barato, el resto está al verlas venir. La competitividad puede ser una trampa como la del ladrillo. Finlandia parecía haber encontrado su sitio con los teléfonos móviles en esto que vino Steve Jobs con su iPhone y se acabó el negocio. Al final el único consejo que se me ocurre para prevenir crisis es el de aunque tengas la gallina de los huevos de oro no pongas todos los huevos en el mismo cesto.
Comentario de galaico67 (12/03/2014 16:49):
“En el mundo globalizado sólo hay sitio para dos países exportadores, Alemania que produce calidad y China que produce barato”,
pues que conserven su “marca Alemania”, porque eso de “Alemania calidade” está de capa caida. Puede que la Bayerische Motoren Werke siga siendo el carajo y que los nuevos ricos de los BRIC se pirren por sus huesos, pero los que es el coche del pueblo, cada vez más truño. Y si hablamos de electronica, paqué…
Comentario de Teodoredo (12/03/2014 17:34):
#31 ¿En serio? Qué fuerte. En el SPD estarían horrorizados, ¿no?
Comentario de Pogrom Pom Pom (12/03/2014 17:42):
Y a veces la zancadilla a la industria viene de dentro. Hay un documental muy bueno sobre la historia de Barreiros (empresa privada), y de cómo desde el Instituo Nacional de Industria les hacían putaditas para favorecer a Pegaso (pública).
El presidente de Barreiros expuso sus quejas sobre el Villarato al caudillo en una ocasión que coincidieron, y dicen que quedó satisfecho con la promesa de éste de que hablaría con el del INI para arreglarlo.
Y ahí quedó la cosa.
Comentario de nachopepe (12/03/2014 18:39):
#8 Aquí un fan de Varoufakis. Dejo que él te responda:
“First, the unilateral suspension of policies demanded by the troika, and, second, via the use, or threat of using, its veto power in the European Council.[…] a SYRIZA government would have the right to veto all decisions until Europe’s approach to the Greek program is re-examined.”
Que quizás no sea a “bomba nuclear” que quiere Francesc, pero es que jugar al juego de la gallina con la destrucción (económica) mutua asegurada lo mismo tampoco es la apuesta más sensata.
#29 La terciarización no tiene por qué ser mala ni humillante. Sólo que hay terciarizaciones y terciarizaciones (sangría vs. microscopios).
#31 De hecho ni el ensamblaje final se hace ya en Alemania, que por algo el término “economía de bazar” se inventó para describirles a ellos. La desindustrialización alemana ya es un hecho.
Comentario de Mauricio (13/03/2014 12:20):
Europa es la solución y España el problema. Como no nos lo han solucionado, pues Europa también es un problema. A este paso, una vez rematen a la Iglesia y la monarquía, acabaran echándole la culpa de sus, nuestros problemas a una alianza del mal entre Spectra y Cobra, liderada por el Dr. Infierno.
Yo de ustedes me iba a un pueblecito de Andalucía y me apuntaba al PER. Total, no es más rico quien más tiene, si no quien menos necesita, y todo depende de Alemania*, la Troika** y Madrid***.
* Sinécdoque de Europa, Banca, recortes, en definitiva, del mal.
** Animal mitológico europeo producto de una mutación financiera que está arrasando el Sur de Europa. Análogo al Godzila japonés.
*** Sinécdoque de España, Palco del Bernabeu, recortes, en definitiva, del mal.
“En el mundo globalizado sólo hay sitio para dos países exportadores, Alemania que produce calidad y China que produce barato”
Pues va siendo hora de que tomemos nuestra decisión, eso o le ponemos dos velas negras a Alemania, y otro par a China.
Comentario de Casio (13/03/2014 12:23):
El fondo del debate es muy interesante, y muy importante. A mí lo de la salida del euro me parece una salida banzai fruto del actual estado de desesperación y vacio mental de la izquierda. A los que creen que la población aguantaria estoica un shock como el que provocaria tal medida les recuerdo lo que le pasó a Mitterrand en los 80 y su amago de politica radical, que los mercados le hicieron la cama en un pestañeo.
El problema general de la crisis es la vampirización de la economia real por el sistema financiero, y eso no viene de 2007, viene de principios de los 80. La participación de los salarios en la riqueza no deja de caer desde entonces, la explosión de productividad derivada de Internet no ha servido sino para alimentar una enorme masa de capital circulante, que como los escombros espaciales de Gravity no hace si no dar vueltas al planeta a la caza der medio punto de margen de beneficio más. El dominio del capital financiero , que no paga apenas impuestos, que no tiene raices es lo que ha puesto a la sociedad europea patas arriba. Ni siquiera Alemania se ha salvado, van los millones de minijobs que ha habido que generar para que el paro se mantuviera en tasas no vergonzosas.
Nos hace falta Europa, pero una Europa dominada por partidos dispuestos a apretarle las tuercas a la City , de echar a los britanicos si hace falta, de imponer tasas al capital y a las grandes multinacionales. Qu drene riqueza del capital financiera a las familias. Eso no lo puede hacer un estado nacional.
Imaginemos una reforma fiscal que obliga a Google, a Amazon etc a pagar impuestos según facturación nacional. Si la medida es europea no les queda más que tragar o a arriesgarse al nacimiento de competencia si se marchan. En España es impensable una lucha antioligopolios en la medida en que el estado está tomado por ellos, vease IBex 35.
La receta no es menos Europa, eso es chavismo, es una Europa recuperada por partidos que defiendan los intereses de la economia real.
Comentario de Latro (13/03/2014 12:54):
Ya… ¿y eso lo esperamos para cuando?
Es que el problema es ese. No es que solución sería la mejor. Sino cual es la mejor de las factibles.
¿Tiene alguna pinta de que el entramado europeo actual vaya a cambiarse en algun momento por uno parecido a ese de “Europa recuperada por…”? ¿Se nos ocurre que por un momento si se da el milagro ese el resultado será otro diferente a “vale, democraticamente ha salido que ganan las posturas centroeuropeas por goleada”?
El trauma de salirse del Euro seria terrible. Eso no hay duda. Pero a partir de ahí si se puede considerar que la politica monetaria, fiscal, etc… pasa a ser absolutamente de nuestra competencia y controlada por un sistema político en el que pintamos algo.
En Europa, por mucha democracia que sustituya al actual sistema opaco, no veo yo que se vaya a hacer nada a contrapelo de Alemania, Holanda, etc.. nunca. A una mala el órdago de irse del Euro siempre lo pueden hacer ellos mejor que nosotros…
Comentario de Casio (13/03/2014 12:59):
En ordenes de improbabilidad, yo creo que gana por goleada el de que la gente vote salirse del euro y soportar el shock gracias a un enorme ejercicio de fe en una economia basada en la neopeseta, eh..
Comentario de Latro (13/03/2014 14:08):
No se yo, ambos escenarios los veo poco probables (si es por apostar, apuesto porque seguiremos aguantando lo que hay hasta pudrirnos del todo o “recuperarnos” porque vamos, mas abajo no podemos caer)
Pero veo mas probable que se logre un gobierno que haga tal movida de retirarse del Euro aqui (muy poco) a que se reforme el entramado de la UE (ni de coña) y en ese nuevo entramado democrático ganen posturas que perjudiquen en lo mas mínimo a los países que manejan el cotarro.
Pero eso, si es por apuestas lo pongo todo a seguir haciendo el zombie.
Comentario de Mauricio (13/03/2014 15:24):
¿La economía real es que google pague impuestos? ¿Qué fabriquemos a 6 lo que otros pueden fabricar a 2? Lo dicho, mejor llamamos a la bruja Lola…
Comentario de parvulesco (13/03/2014 16:26):
Ok, nachopepe, crucemos los dedos. De hecho todo este embrollo euro-sí, euro-no, etcétera, nos lo resolverá Syriza cuando gane las elecciones en función de si es capaz de cambiar las cosas o no…
Comentario de Casio (13/03/2014 16:32):
Una economia equilibrada es que google pague impuestos en una proporción, no digo igual, nos dariamos por satisfechos con que lo hiciera en el mismo orden de magnitud que la zapateria de la esquina o la fábrica de colchones del polígono de Móstoles.
Lo de fabricar yo a 2 como purga de Benitoes tan fácil de replicar con que el de más allá puede fabricar a 1,5, y el otro a 1,2 que en fin…..
Comentario de Pablo Ortega (13/03/2014 20:09):
¿Nadie ha considerado la opción Syriza del ultimátum? Es decir, amenazar claramente con la salida del euro, si la UE y el BCE no aceptan dejar de velar solo por Alemania, pero eso sí, asegurando una receta de auténticas reformas estructurales que no espanten a los inversores internacionales (que podrían incluir cierto proteccionismo ante la competencia china). Ah, y dejando claro a la UE que si -por ejemplo-, España e Italia salen del euro, éste se desplomaría. Básicamente, es una destrucción mutua garantizada. Salir del euro sería traumático para España e Italia, pero también lo sería para Alemania, a quien le conviene que éstos países sigan en el euro.
Por supuesto, para eso se necesitan líderes capaces, valientes, decididos, y con una amplia capacidad de divulgación, tanto para el empresariado como para el ciudadano de a pie. A la vez, que no sean populistas, y sepan explicar adecuadamente las medidas necesarias. En sintesís, estadistas. Ni Chávez ni Rajoy.
Comentario de Mauricio (13/03/2014 21:09):
Casio,
Pillin, en fin, no. Cuente, cuente, como hace eso de abaratar costos tan fácilmente. Hay miles de empresarios, grandes y pequeños, a la expectativa. Aquí y en la China, que diría Carod.
En cualquier caso, lo opuesto, fabricar más caro, pues parafraseándole, en fin….es como si nuestros arbitristas para solucionar la inflación que producía el oro americano hubieran pedido al rey que ignorase que se había descubierto América. La globalización es un hecho.
Así que el secreto para aumentar la competitividad, crear empleo, innovar, que fluya el crédito, etc, es que las grandes empresas paguen lo que “les toca”. Revolucionario. Lastima que nuestros políticos no sepan ver una solución tan evidente, espere, lo que usted insinúa es que los políticos no solucionan lo de la crisis porque están a sueldo de las grandes empresas. Acabáramos, y el gobierno no acabo antes con eta porque se beneficiaban del terrorismo.
De verdad, ojala las cosas fueran tan sencillas pero me temoque no.
Comentario de Mauricio (13/03/2014 21:14):
Pablo,
…y si pasa eso, dentro de otros 50 años, en LPD alguien diría que necesitaríamos lideres con visión de futuro para crear una Europa unida, con una moneda única para poder competir con USA y China…
Lo del euro se hizo mal, pero se hizo, no hay vuelta atrás, no le interesa a nadie…y lo de que Alemania también sufriría es lo del ciego consolándose porque el vecino se ha quedado tuerto…
Comentario de Pablo Ortega (13/03/2014 23:19):
Lamento que no entienda la idea, Mauricio. La idea es OBLIGAR A ALEMANIA A REFORMULAR EL EURO PARA QUE ASÍ DICHA MONEDA SEA REALMENTE FUERTE Y SOSTENIBLE, A CAMBIO CLARO, DE UNA MAYOR UNIFICACIÓN EUROPEA.
Empezando por disminuir el poder de los jefes de Estado y de Gobierno nacionales en pro de un auténtico gobierno europeo, aunque sea confederal.
Comentario de Andrés Boix Palop (14/03/2014 01:24):
#35 y demás fans de la solución del ideólogo believer de Syriza, ¿a este señor no le han explicado que con los cambios en los tratados eso del derecho de veto pasó a mejor vida hace mucho tiempo excepto para cuatro cosas?
Comentario de Mauricio (14/03/2014 10:15):
Lo entiendo… pero la táctica esta de “ojito conmigo, que estoy muy loco” como que no la veo. No creo que amenazar con romper el euro ayudase a reformular absolutamente nada. De hecho mucha gente en Alemania, Escandinavia, Holanda, etc, aplaudiría con las orejas. Probablemente a nuestra amenaza de irnos reaccionasen abriéndonos la puerta. Los faroles con una pareja de cuatros mejor dejarlos para las partidas de poker con los amigotes.
Hay dos vías para reequilibrar la UE: que los países del sur de Europa reivindiquen su peso en la UE, propongan un modelo alternativo, etc , pero ahí topamos con dos realidades: España, por mucho que se empeñen algunos, no es Grecia , ni nos interesa que nos identifiquen con ella, y por otra, muchos no queremos un modelo alternativo, nos gusta el alemán. A estos últimos, lo que nos queda es hacer las cosas bien, de hecho, mucho mejor que los alemanes, y entonces, exigir lo que haga falta. Todo lo demás es pura retorica que puede acabar en nada o con nosotros en el abismo. Por cierto, la UE le está reclamando a Alemania que se estire más, y creo que empezara a hacerlo, pero como dicen en mi tierra “quien paga, manda”.
Comentario de Teodoredo (14/03/2014 10:33):
El órdago no tiene que ser “romper el euro” sino “romper la banca alemana”, simplemente dejando caer los bancos españoles. Lo que ya no tengo claro es si se trata de una baza que todavía pueda jugarse, el momento era más bien antes de endeudarse a saco para rescatar la banca española, es decir, la alemana. Y mejor todavía antes de quemar el dinero que quedaba en la caja con el funesto plan E. Ahora en cambio seguro que los bancos alemanes han reducido su exposición a los bancos españoles y a la deuda soberana (jua jua JUAAAA!!!) española y el órdago o sería imposible o sería mucho menos efectivo.
En el caso de que hubiera voluntad para hacerlo, claro, cosa difícil dada la solidaridad de clase entre las élites alemanas y las de aquí.
La baza que sí que queda es la de hacer default y una quita. Más que una baza algo que ocurrirá sí o sí, tanto si nos gusta como si no, a decir de muchos. Varoufakis apunta que hay una diferencia muy grande entre promover uno mismo el proceso de default y quita y dejarse simplemente arrastrar por los acontecimientos. Todo apunta a que simplemente nos lo encontraremos y nos lo comeremos.
Comentario de Teodoredo (14/03/2014 10:34):
Donde dije Varoufakis quería decir Lapavitsas.
Comentario de Casio (14/03/2014 14:27):
Mauricio, abaratar costes no es tan dificil, bajar sueldos un cincueta por ciento, laminar el impuesto de sociedades y costes sociales, reducir las horas de descanso y vacaciones, vamos el estado de la cuestión en China o Bangladesh. Porque Alemania no vende por costes , vende por tecnologia. Y esto es asi desde 1880 más o menos.
La crisis actual, que tiene como fondo la financiarización de la riqueza se agrava porque la deuda privada se convierte en publica. Hay que reducir esta ultima y todos sabemos cómo se está haciendo. La opción es que la pasta salga de las grandes multinacionales y empresas oligopolisticas, que se lo pueden permitir. Quienes no nos lo podemos permitir somos nosotros, porque entre otras cosas el consumo es un motor gripado, se va a tomar vientos y el paro se multiplica por tres.
Comentario de Andrés Boix Palop (14/03/2014 14:59):
Por cierto, por si alguien más está interesado:
http://en.wikipedia.org/wiki/Voting_in_the_Council_of_the_European_Union
Al final del artículo tenéis un cuadrito con la de políticas europeas que desde el 1 de noviembre de 2014, al pasar a aplicarse el sistema del tratado de lisboa y dejar atrás el de Niza, dejan de requerir unanimidad y pasan a decidirse por el sistema de mayorías cualificadas, haciendo absolutamente imposible lo de bloquear el funcionamiento de la UE por parte de un solo país que decida hacer el troll.
Comentario de ieau (14/03/2014 16:00):
#53 Además, señor Boix, de otros sutiles mecanismos del tipo “doctor, no nos haremos daño, ¿verdad?” que pueden llegar a ser mucho más efectivos si se lanzan hacia el troll con una entonación a lo “marlonbrando” del padrino junto con algún representante del bce en la sala…
Comentario de parvulesco (14/03/2014 18:11):
Teo,
ahora mismo los bancos españoles están zombis perdidos en coma inducido por Draghi, no por Mariano… Como Andrés apunta, además no hay poder de veto real por parte de un gobierno y lo máximo a lo que podríamos llegar es PIGS + Francia, y esto parece muy difícil.
Lo único que Alemania vería con temor es que el euro se viera en entredicho como moneda internacional y esto no implica una salida del euro necesariamente, sólo una amenaza suficientemente creíble. Por eso se petaron a Berlusconi. Yo propongo copiar la estrategia de Moshe Dayan del perro loco: “es que yo estoy muy loco”
Comentario de nachopepe (14/03/2014 19:01):
Ya pero están ustedes sugiriendo con que juegue al perro loco ¿quien? ¿Rajoy? ¿Cayo Lara? ¿Pablo Iglesias?
Las elecciones griegas son en 2016, mucho me temo que para entonces ya muchas de estas cosas van a dar igual.
Aún está en la parte de -por unanimidad-: “the finances of the Union”. Si esto quiere decir que se puede bloquear el presupuesto europeo, a mí no me hace falta más, la verdad. Al día siguiente tienes los tractores de toda Francia asediando Bruselas.
Por otro lado, sin salirse del Euro hacer un default en toda regla viene a ser la misma bomba al corazón de la credibilidad del Euro, y eso no lo está descartando nadie aún.
Yo del shock famoso de la salida del Euro me parece que también hay mucha paranoia. Se creó el Euro con toda suavidad, pero descrearlo, ah no, eso no, eso trae las siete plagas. Pues no trago, si se hace por las buenas y avisando no me creo las fugas de capital, “bank runs”, etc. que se auguran (Varoufakis el primero).
YO, puestos a soñar, creo en echar a Alemania del Euro.
Y totalmente de acuerdo con Casio en #37: déjense ya de lo de la política europea “a medida de Alemania” porque allí vive mucha gente además del CEO de Deutsche Bank, y su poder adquisitivo no hace nada más que bajar desde hace años, mientras que a Botín no parece que le vaya tan mal.
Comentario de Latro (15/03/2014 13:02):
¿Suavidad? No se yo que tanta suavidad, por lo pronto recuerdo unos picos de inflación tochos cuando “redondeamos” por el €…
Comentario de Teodoredo (16/03/2014 14:54):
#55 Lapavitsas comenta en su libro que la credibilidad del euro es bastante poca y que su intento de convertirse en divisa internacional y de reserva ha fracasado hace ya tiempo.
Comentario de Mauricio (17/03/2014 11:06):
Casio,
Y viajar a Saturno es tan sencillo como coger un cohete. Dando por bueno que los sueldos pudieran fijarse por decisión gubernamental, no hay gobierno en el mundo que tomase unas medidas así. Ya no por la contestación social, porque perderían las elecciones, si no porque no tendrían con que financiarse.
La deuda privada no es un problema, de hecho se está reduciendo. Las familias y las empresas saben apretarse el cinturón. El problema es la pública, que es la que está creciendo, y el estado para paliar el déficit está intentando rebañar de todas partes. Pero de donde no hay, no se puede sacar. Esta muy bien eso que las grandes paguen lo que toca y luchar contra el fraude, pero solo con eso no se va a ninguna parte. Ni quitas, ni salir del euro, algo tan sencillo como adecuar el gasto a los ingresos. Hacer lo contrario, es la circunferenciación del cuadrado.
Comentario de parvulesco (17/03/2014 18:20):
Pues Teodoredo, por no tener credibilidad está a 1.39 dólares… Más fuerte que nunca…
Comentario de Teodoredo (18/03/2014 10:37):
#60 La credibilidad no es lo mismo que un tipo de cambio puntual…
Comentario de sam (23/03/2014 18:38):
lo que hay que hacer es salir de la UE, es la realidad, España nunca debió entrar y la UE si sigue asi centralizando el poder colpasará