Gandía Shore, próxima reedición en digipack de Criterion
Sabemos que dentro de un par de décadas la gente ocultará sus tatuajes para no parecer mayor. Habrá niñas que traerán a sus amigas a merendar a casa y, para reírse a mandíbula batiente, sacarán del último cajón la cosa esa horrenda, los tangas que aún conserva su madre. Que en los libros de Psicología aparecerán, al lado de fotos de autolesiones con cuchillas de afeitar, imágenes de hombres que se perfilan la musculatura en el gym. Pero para todo esto habrá que esperar y, mientras tanto, asistir impasibles al triunfo social de féminas adolescentes de piel color zanahoria con el cabello aguaoxigenado y cabezas rapadas que te dicen qué pó qué pó qué pó si no le dejas sitio en la barra de un chiringuito para pincharse una teta ahí mismo.
Gandía Shore ha sido el programa que más se ha esforzado hasta el momento por acercarnos esta realidad de nuestro tiempo. Un experimento científico que, además, ha servido de gran ejemplo para la juventud. Los participantes en la experiencia han demostrado que uno puede pasárselo bien sólo bebiendo hasta vomitar, bebiendo un poco más hasta vomitar otra vez y bebiendo la penúltima para vomitar finalmente y caer a peso muerto, todo sin una sola gota de perniciosa drogaína. También ha demostrado que cualquier desencuentro puede resolverse gritando y haciendo aspavientos como para avisar a alguien que se ha quedado dormido sobre la vía del tren de que se acerca el AVE a 275 km/hora, todo sin navajazos ni palizas.
Decía El Mundo Today en una de sus bromas que alguien había mandado un vídeo casero de una boda a Cannes y había ganado la Palma de Oro. Lo cierto es que el cachondeo tenía mucho de certeza. La grabación de una boda española, con un buen montaje, puede ser una obra de arte. Poco a poco se van a acercando programas como Callejeros, que de un agradable paseo por un lupanar, un descampado de heroinómanos o un control de alcoholemia con guardia civiles muertos de risa, han enlatado piezas de cuarenta minutos que son arte con mayúsculas. Audiencias considerables, espacios de los que todo el mundo habla. De hecho, con el caso de la boda española apostaron fuerte y grabaron una gitana, con el preciosísimo desvirgue a pañuelo blanco con lluvia de flores como momento cumbre.
Si Gandía Shore se montase bien, para una hora y tres cuartos, ofrecería un fresco de los años 10 que muy posiblemente podría competir con garantías en Cannes. No en vano, un icono del cine indie como Harmony Korine lleva años trabajando en lo mismo. En los guiones de Kids y Ken Park, que fueron filmadas por su amigo Larry Clark. O en su último trabajo, Spring Breakers, que no hemos visto, pero que ojo a las reseñas que ya ha cosechado: “ese hastío por la vida vacía se transmite con enorme eficacia al espectador (…) un desenlace en el que el acid, el house y todo lo demás ya han hecho pleno efecto en sus creadores (…) filmado con la estética de los peores videoclips y sin que en ningún momento deje de atronarte la música house (…) Spring Breakers viene a ser el espejo de la cultura pop en el que la juventud se refleja, dejándonos sin saber si reír, horrorizarnos o maravillarnos por su extraña belleza (…) El Sr. Korine entra en un controvertido tema muy americano: la búsqueda de la felicidad llevada a extremos nihilistas, pero convierte esa exploración en una fiesta muy divertida…”
Sería difícil describir el argumento de Gandía Shore con otras palabras. Aunque para entender esta aventura hay que dar paso a una breve descripción de los personajes. Y en clave de realismo soviético, tratar de caricaturizarles sería imposible.
Arantxa Fernández. De Madrid. Le gustan las pollas grandes. Mucho mejor si están dentro de su cuerpo. Si el reality fuese de hace diez años, alguien habría despachado su personalidad con un ordinario “le gusta beberse la vida de un trago en vaso largo”, pero lo que ocurría con ella es que, sencillamente, daba la impresión de ser alcohólica. Sus preferencias en el amor cuando sale de marcha son “si es chico, mejor”. En el transcurso del programa sufrió un leve vaginismo que la tuvo apartada de las sábanas unas jornadas. Dentro de unos años puede que nos encontramos ante una excelente concejala de cultura.
Ylenia Padilla. De Benidorm. Ha sido la salsa de la casa. Todas las peleas las ha empezado ella. Tenía problemas si no era el centro de atención, especialmente del tío que se tiró desde el principio, Labrador. Cuando este chico miraba a otra persona, ella la atacaba al grito de “fea, fea, qué fea eres”. Luego, cuando vino de visita la follamiga del muchacho, Ylenia le espetó “folla muy bien, guapa”. También acusó al resto de las chicas de la casa, que le habían retirado la palabra, de robar dinero, lo que ocasionó un gran drama. Otro día, en un acto de venganza contra ‘Core’, arrojó su maleta llena de tangas a la piscina. Las susodichas prendas flotando en el agua, con ‘Core’ llorando en el bordillo diciendo missh taaaaangas, misssh taaaangas a lo Golum, fue una de las imágenes más bellas del reality. Como para mandarla a Arco. Al final los compañeros le rogaron a Ylenia que se marchara de la casa, lo hizo airada, sin decir adiós. Días más tarde, arrepentida, envió una carta sólo con cosas bonitas. Ellos la quemaron.
Cristina ‘Core’ Serrano. De la minoría étnica, era la única catalana, quizá introducida por ley. Natural de Vic, su apodo viene de Hardcore. Dejó grandes momentos, como cuando se introdujo en el jacuzzi y le sugirió a Labrador que entrara para follársela. A lo que él replicó que, de hacerlo, la iba a follar como no la habían follado en su vida. Y ella: venga, entra, demuéstramelo. Cuando el joven se sumergió en el agua con el miembro en erección, Ylenia les vio por una ventana, empezó a gritar y se disipó la magia del momento. Una pena porque hubiera resultado muy edificante para la audiencia averiguar si pensaba cumplir su promesa o marcarse un Rajoy.
Momento “no me vaciles, ¿vale? porque tengo un rabo enorme ¿vale, nena?”
Esteban Martínez. De Valencia. Musculado como He-Man, tatuado como De Niro en el Cabo del Miedo, Esteban es el típico gigante bonachón. Lleno de buenos sentimientos, estuvo a punto de abandonar al contraer un virus que le postró en la cama temblando. Se recuperó y una de sus escenas más notables fue cuando se levantó empalmado de la cama y terminó por casualidad en el baño de las chicas ante una gran expectación. De tan bueno que es, le dejó a Arantxa tocarle el miembro con un dedo y todo fueron risas y alegría. Buena convivencia. Así sí.
José Labrador. De Sagunto. Quién sabe si por el orgullo herido de ver cómo su tierra, antes un pujante centro industrial, ahora convertida en un territorio fantasma para rodar películas posapocalípticas y exteriores de videoclips de Madonna, sólo sabía pronunciar unas palabras: qué guapo soy. Se tiró a Ylenia a las primeras de cambio y quedó atrapado en una espiral de gritos y discusiones absurdas. Gustaba de charlar con Esteban mientras se la metía a Ylenia, pues dormían en la misma habitación, con la otra berreando “me vas a matar, me vas a matar”. Fue curiosa una etapa de su evolución interior como personaje. Después de tanto tirarse a la aludida participante, suponemos que ya le parecería como meterla en un vaso de agua, llamó por teléfono compungido a su follamiga. Se había dado cuenta de que sentía algo serio por ella. Tuvo su interés el detalle, con la salvedad de que no citó lo que estaba haciendo dentro de la casa y optó por comentar que todas eran “muy feas”.
Abraham García. De Madrid. Una especie de Justin Bieber. Si bien podría parecer un gay metido de tapadillo, pronto demostró sus inclinaciones siendo uno de los chicos que más nenas trajo de las discotecas a la casa. Peinado como Brandom de Sensación de Vivir y con un bañador blanco como un slip pero holgado, de rostro para abajo con ese gallumbo parecía un menino da rúa buscando piedras de crack por las playas de Río de Janeiro, pero el chico se las tenía que quitar de encima con agua hirviendo.
Cristina “Gata” López. De Valencia. Entró con novio y por este motivo sufrió mucho la desgracia de no poder dedicarse a follar a diestro y siniestro delante de los setecientos mil espectadores de media que han visto el programa. Sus desvelos terminaron cuando éste, su pareja, vino a visitarla y rompieron a follar con el fragor del que le toca reparar la vía de agua abierta en el Titanic. Ylenia se dirigió a ella como “lorzas” en una ocasión. Parecía modosita, pero un día le mentaron a la madre y montó una en defensa de la sacrosanta institución materna que ni Camarón y Antonio Flores puestos de base.
Alberto “Clavelito” Clavel. De Valencia. Extraordinario follador que alcanzó su cénit liándose con la novia del jefe del bar en el que trabajaban los muchachos. Fue un momento crucial y muy indicativo de lo que es hoy el mundo. Después de hacérselo con ella, el propietario del local le retiró el saludo, pero Clavelito aún tuvo arrestos de preguntarle si es que acaso le pasaba algo con él. Un detallito que habla todavía mejor del chico, que se niega a aceptar que una mujer tenga que ser propiedad de un hombre, puro sesentayochismo en la MTV, que afortunadamente no se resolvió con cuatro puñaladas y un prófugo de la Justicia que toma las de Qatar.
Dicho lo cual, pasemos al meollo. La trama del asunto era sencilla. Consistía en trabajar por el día en el chiringo playero, vomitando, arrastrando la resaca de mesa en mesa, y salir de noche para follar y vomitar, tratando cuidadosamente de que ambos fenómenos fisiológicos no sucedieran a la vez, que si ocurre tampoco pasa nada, se puede disculpar, siempre y cuando no te cagues también encima. En fin, el modus vivendi de cualquier adolescente sólo que comprimido en 24 horas en lugar de en una semana entera.
La vidilla, las anécdotas más refrescantes y juveniles, sí es verdad que transcurrían más durante la noche, como es lógico, cuando tanto ellos como ellas se agenciaban ‘presas’ que se llevaban a casa para follarse previa breve charla o destrucción de muebles a patadas. Y esto, día tras día hasta el paroxismo. Creo que fue Clavelito quien llegó a decir en el crepúsculo del programa, tal vez ya con el pene en carne viva, que no se iba a “llevar a unas tías a casa por llevar”. De nuevo un gran ejemplo para todo el planeta. Consumo de flujos sostenible, que llegue para todos, no como hacen con los recursos naturales los países ricos. Muchos jóvenes espectadores, tras escuchar estas declaraciones y con ese ejemplo, aprenderán a apagar las luces de casa cuando se van y no graduar la calefacción con el aire acondicionado hasta que una pequeña explosión en el horizonte con forma de hongo les indica que ha saltado por los aires la subestación eléctrica del distrito.
Este tipo de chavales, que no son ágrafos, Clavelito por ejemplo tiene una empresa, pero que miden la profundidad de un ser humano en centímetros, con el Sistema Métrico Decimal en la mano, con verdadero rigor, ya intentaron ser explotados por Telecinco. El programa se llamó ‘Las joyas de la Corona’ y también pintó un panorama muy interesante. En él, unos profesores enseñaban modales, saber estar y cultura general a un grupo de ni-nis de los que tiran la televisión por la ventana del hotel si les aguantas la mirada tres segundos. De los chicos poco se puede decir que resulte novedoso, chavalería de barrio, incontinente, etcétera. Pero lo mejor eran los profes que tenían que convertirles en gente de bien. Por citar sólo un ejemplo, la de Geografía les enseñó que el país más grande del mundo era China y corrigió de mala manera a una alumna que había dicho que era Rusia. Y agárrense a la silla, Liberto López de la Franca les enseñó protocolo. Se trataba ni más ni menos que del jefe de la Casa de Su Alteza Don Leandro de Borbón, el bastardo, que llevaba décadas dando tumbos por la televisión hasta que, reconvertido en reputado historiador y hombre de confianza del aludido aristócrata, logró colarse en este reality y de ahí patadón al armario y a perpetuarse en el mundillo. En fin, el Creepshow este culminó con la victoria de una tal Arancha, que en cuanto supo que ganaba se agarró las tetas con fuerza apretando con las dos manos pues había adelantado que gastaría el dinero del premio en unos pechos de silicona. Pero la moraleja del invento tenía guasa, al margen de que Carmen Lomana les aconsejara un día que daba igual en qué tienda se compraba, que lo importante era gastar, los chavales eran más o menos igual de burros que sus profesores, pero en el fondo mucho más honestos. Al menos no se las daban de nada que no fuesen.
En este caso, Gandía Shore no ha explotado de esa manera si sus participantes son más o menos listos o más o menos arrabaleros. Eso es loable. Y el final de la aventura concluía con una despedida lacrimógena con música en plan banda sonora de Drive para transmitir la sensación de que ese verano inolvidable se acababa para ti también. Un dolor, porque cuando esto toca a su fin a Arantxa, por ejemplo, te gustaría abrazarla como a un peluche.
Lo que sí que hay que reseñar con maldad es el papel de los espontáneos. Los chicos han ligado fácil en cada discoteca que pisaban, pero habría que considerar hasta qué punto, por guapos que fueran, esto no se debía a la presencia de las cámaras. En una situación concreta, Labrador cogió a una rubia y se la llevó al baño para que no le viera Ylenia ligar con otra. Dentro del cubículo de la taza del váter, imaginamos que en una nube de fragancias, le metió la lengua hasta el cricoides, y ahí estaba la cámara, grabando como podía, asomando el objetivo desde el váter de al lado. Si alguien que anda por ahí decide in situ someterse a tamaña charlotada lo mismo es por algo más que por ganas de follar. De ese modo, resultaba enternecedor cómo iban las chicas a la casa a buscar su momento de gloria. Un lucimiento que ha consistido al final en aparecer en blanco y negro en televisión siendo percutida durante siete segundos escasos. Y eso en la mejor de las situaciones, también podían salir marchándose de la casa humilladas con Ylenia detrás gritando “si no folláis, os vais de aquí”, como pasó en un capítulo.
En fin, que quien más quien menos se queda to rallao con este programa. Y en eso consiste la televisión hoy en día. En irnos acercándonos poquito a poco a un programa como el que salía en Perseguido, o el de Le Prix du danger que fue la peli original de Yves Boisset. Ya saben, realities con terroristas, o parados que para el caso vendrá a ser lo mismo, para destriparles con sierras eléctricas mientras se los follan. Ya llegará. Al tiempo.
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Comentario de Ruboslav (09/04/2013 20:13):
“puro sesentayochismo en la MTV, que afortunadamente no se resolvió con cuatro puñaladas y un prófugo de la Justicia que toma las de Qatar.”
Me he descojonado de la risa con varios párrafos pero con este sencillamente me quito el sombrero.
No sé como puede ver usted semejantes mierdas, Sr. Alvaro. Yo del programa no sabía nada, aparte de que existía, hasta que he leído este artículo. Buenísimo.
Comentario de lalo (09/04/2013 20:38):
grab articulo: dos apunte, la pelicula que menta es una bonita mierda, ridicula, cuya unica virtud es ver pequenas hembras ensenando carne; el deslumbramiento de la critica por semejante obra me escama sobremanera, yo como buen imbecil la padeci, si bien al menos pude solazarme un poco con los bellos cuerpos femeninos, al seguir las loas de los criticos. una buena tajada les deben haber dado.
segundo apunte, es usted amigo del susodicho clavelito? es el unico al que salva de la quema, y contrariamente, aunque yo no vi el programa de continuo, si vi episodicamente sus corerrias entre bostezo y bostezo los domingos por la noche, y este era el que especialmente mas me repugnaba, calvo, gordo, baboso contador de milongas.quiwqs, puede ser no lo niego, que semejante eespecimen inferior tuviera un verano bien servido de chichis sin ningun esfuerzo, fuera lo que mas me enervaba.
un saludo
Comentario de Ahric (09/04/2013 21:02):
Ya sabes nano, que eso es todo guión, nano. Pero aunque no lo fuera, nano, es cierto que la verdadera importancia nano, está en lo que nos mueve a producirlo y a consumirlo, ¿sabes nano?
Me quedo to loco si me imagino un reality de la Casa Real nano, eso sí que sería farla y pibas a saco, nano, con Campechano gritando “¡Te parto en dos!” mientras se agarra el paquete. Es que lo pienso y flipo nano.
Comentario de galaico67 (09/04/2013 22:30):
¿Como podeis ver eso sin medicaros a posteriori? ¿Acaso os pre-medicais con un supresor de las neuronas que gobiernan el sentimiento antes llamado “verguenza ajena?
Por lo demás, jrande. Me voy al google para analizar a alguno de esos especimenes….
Comentario de Teodoredo (09/04/2013 22:42):
“… y ahí estaba la cámara, grabando como podía, asomando el objetivo desde el váter de al lado. ” yo ésto no lo recuerdo…
Pero sí, GS es grande, mucho. Aunque no sea lo más llamativo yo me quedo con el gran Esteban: un saco de músculos que se pilla una pulmonía en pleno agosto, en Gandía, y tiene que tirarse una semana en el hospital (!!!) y que luego se echa a llorar como una magdalena porque la gran Ylenia la lía parda. Humano, muy humano.
Saludines
Comentario de Teodoredo (09/04/2013 22:43):
Ah, yo juraría que lo que le dice Labra a la Core es más bonito, es algo así como que “mira que como me meta te voy a follar como no tan follao en tu vida”.
Saludines
Comentario de Álvaro (09/04/2013 22:48):
teodoredo, cuando tienes razón se te da
http://www.dalealplay.com/informaciondecontenido.php?con=460448
Comentario de Quevedin (10/04/2013 00:04):
Como díria Arcadi Espada, gloriosas páginas de la crítica televisiva
Comentario de Casaubon (10/04/2013 00:29):
El documento que ha puesto Alvaro debería de estar grabado en el disco dorado de la Voyager 2, camino de Andrómeda.
Comentario de Asín...nos va (10/04/2013 00:51):
Labrador al parecer se queda “plasmado” como Rajoy en sus ruedas de prensa.
En la crónica televisiva es donde Álvaro lo da todo, donde lo echa todo, donde se exorciza de la mierda que ha tragado durante varios programas.
Comentario de Garganta Profunda (10/04/2013 08:06):
El horror, ah, el horror!…
Comentario de mochuelo (10/04/2013 08:44):
esta subestimando a la especie humana, que dos se metan en el cuarto de baño de una discoteca a fornicar en medio de la inmundicia no es algo tan extraordinario
Comentario de Teodoredo (10/04/2013 09:35):
Ah, y echo en falta comentarios sobre una de las escenas más memorables… cuando se les atasca el báter y llaman a un payuco para que se lo desatasque, que les cobra 50€ y les parece mucho… brutal.
Saludines
Comentario de pescadilla (10/04/2013 09:47):
a mi una vez me entro un tipo hiper musculado de estos, y te lo juro, pensaba que le faltaba un hervor….eso sí, parecía buen chico y con ganas de agradar, pero ahí, en el fondo de sus ojos, no se veia ninguna luz
y se le había quedado la cabeza muy pequeña, en comparación con el corpachón
Comentario de Eye (10/04/2013 11:19):
Exageráis, es como ver un documental de animalillos de la Dos; sólo que, en lugar del ritual de apareamiento de los chimpancés o los escarabajos peloteros de Namibia, te muestran el del Homo Sapiens…
Por cierto, en el ayuntamiento de Gandía hubieron unos plenos épicos en los que se discutía si el programa daba o no buena imagen de la ciudad. La oposición se lamentaba de que sólo iba a servir para atraer puterío, la alcaldía –creo que del PP, si no recuerdo mal– que era cojonudo para llamar al turismo. Retransmitir alguno de esos plenos hubiera sido un buen epílogo para Gandia Shore. En fin, un día más en Blaveristán…
Comentario de Lorenzo (10/04/2013 11:51):
Alguien me podría explicar por qué casi todos los participantes y participantas de tan magno show son de etnia valenciano-levantina? Es porque Gandia les quedaba cerca o es que por allí hay una excepcional concentración de “gente especial”? Pero qué cojones pasa por la Comunidá Valenciana? Qué crueles experimentos de ingeniería social ha llevado a cabo el PP en las últimas décadas? Yo todavía estoy conmocionado por el grandioso episodio de Callejeros que narraba las aventuras de un grupillo de alegres muchachos y estupefectos beneméritos en un control de alcoholemia de el extrarradio de Alicante a primera hora de la mañana de un finde cualquiera… “nos queda coca pa enterraros a loh dos”…”quiereh que te saque la pittolah?”
Sí, ya sé que canis haylos en todas partes, pero es que los más chungos parece que son todos levantinos… igual que los fachas, los peores y más agresivos son valencianos también. Curioso.
Comentario de jose (10/04/2013 13:12):
Lorenzo
Dada mi natural tendencia a la forocochización de las discusines te digo que los canis más chungos de España están en andalucía occidental. Es cierto que en Valencia hay muchos delitos, pero en Andalucía son canis sin remedio desde los niños hasta las personas mayores. Mírate un video de El Torrejón o Las 3000 viviendas. Los barrios de valencia son a los de andalucía como Góndor es a Mordor. Aquí aún moran miles de yonkis y hordas de gitanos incontrolables.
https://www.youtube.com/watch?v=ppz665Q19es
Saludos
Comentario de Eidan (10/04/2013 13:25):
Como alicantino, me parece fatal que englobéis a toda la juventud en los estereotipos mostrados que si pim que si pam… Que no! Aquí hay una concentración de infraseres que no te los acabas, primo. Mi teoría es que esto se debe a:
A) Abundante solano en la puta cabeza. Pasé un año en Bilbao y, sí, todo estaba perdido de ETA, pero con los cielos encapotados todo el santo día, la concentración de chalados era bastante menor.
B) En los días de ladrillo y rosas, un alto porcentaje de la chavalada se dejó la ESO para poner copazos / escayola en nuestro floreciente modelo económico. Ahora no pidáis que citen selectas citas de Kant mientras que astillan los cabezales de la cama con la testuz.
C) La playa tradicionalmente ha sido un imán de cachondeíto y droja, atrayendo lo mejor de cada casa.
D) Hogueras en Alicante y Las Fallas en Valencia consiste en estar trabajando todo un puto año para prenderle fuego en un día a todo lo hecho. Ese espíritu nihilista, carpe diem oh capitán mi capitán se impregna en nuestros esponjosos cerebros como el esperma penetra en la tapicería de un seat león con cristales tintados en un políngano.
E) Importante nudo para el tráfico de drogas en Europa, y, citando al clásico vídeo del eclipse, “el placer de meternos 5 pollos, 10, de buena mañana, que es como entra la coca. La poli se mete, hasta el presidente se mete”.
http://www.youtube.com/watch?v=cnzjd14H15g
En fin, nuestros abuelos/bisabuelos morían en la línea XYZ, y aquí estamos nosotros, para dignificar el sacrificio.
Comentario de Lorenzo (10/04/2013 15:10):
#17
Yaaaaaa, pero no confundamos conceptos: los yonkis son yonkis, y los gitanos, gitanos… pura marginalidad, pero como no acostumbran a moverse demasiado de su hábitat natural, tampoco molestan demasiado. Los canis son gente más o menos normal cuyo desarrollo vital fue gravemente perturbado por lamentables factores socioambientales que los llevaron a vivir enfundados en un chandal, leer poquito, teñirse el pelo de colores imposibles y desplazarse en ruidosos medios de locomoción.
Comentario de Teodoredo (10/04/2013 15:18):
Como contribución a la forocochización quiero añadir que uno de mis prejuicios más arraigados es el de que “los valencianos están todos locos”, con perdón.
La prevalencia de levantinos en la casa supongo que puede deberse a que una mayor cantidad de ellos se presentaron al casting porque les pillaba a mano. Éso sí, fijo que había tiparracas de recursos inhumanos seleccionando, y si dejamos la cantidad a un lado para fijarnos en la qualité, los dos protas indiscutibles, con los que acertaron de lleno (el gran Labra y la grandíiisima Ylenia) son levantinos de pura cepa.
Saludines
Comentario de parvulesco (10/04/2013 15:58):
A mí el programa me mola por lo mismo que vosotros, pero también está el componente thatcherista muy fuerte que no.
http://elventano.blogspot.com/2013/01/el-odio-la-chusma-o-la-decadencia-de-la.html
“Quién sabe si por el orgullo herido de ver cómo su tierra, antes un pujante centro industrial, ahora convertida en un territorio fantasma para rodar películas posapocalípticas y exteriores de videoclips de Madonna, sólo sabía pronunciar unas palabras: qué guapo soy.”
¡Exacto!
Comentario de Jiri (10/04/2013 16:47):
Primero iba a destacar una frase de la crónica de Álvaro, por ejemplo: “montó una en defensa de la sacrosanta institución materna que ni Camarón y Antonio Flores puestos de base”
Luego pensé que mejor no, que si eso hacía una “enmienda a la totalidad”, era como un “Alvarito, guapo, cásate conmigo o córrete en mi boca, mientras me susurras esas cosas tan bonitas que te surgen del magín”
Pero luego me enamoré del comentario número 17, con su bella referencia final a la línea XYZ.
¿Será la primavera?
Comentario de Exe_FollAor_to_Flama (10/04/2013 17:08):
Ke isse el Albaro ese? mu VasilOn tu, k testas riendO de los xaBales o ke? Poh va comeme tOla pOlla, nAnO, Ke ere un clasista desos.
Y como te bea porai te partO tol jepetO.
Comentario de sangonereta (10/04/2013 18:05):
Yo, como valenciano que pretendo ser, también me preocupó ese hecho y fui directamente al origen y resulta que la productora y la MTV han intentado copiar el formato tal y cómo lo hicieron en sus dos versiones anteriores: Jersey Shore y Geordie Shore, en las dos intentaron centrarse en un estereotipo sobretodo de tíos: Jersey Shore los italoamericanos (Guidos) y en Geordie los ingleses del norte sobretodo Newcastle, y aquí pues con los Rafasmoras y influencias del youtube lo tuvieron muy fácil para elegir: Valencia.
Comentario de jose (10/04/2013 20:06):
Lorenzo
Esos del video del eclipse son obviamente unos fantasmas. Te digo que esos a un uruk-ani del Vacie de Sevilla o del Torrejón de Huelva no le llegan a la suela del zapato.
Véase un prototipo de lo que estoy diciendo y comparen:
http://www.scenicreflections.com/files/Uruk_Hai_Lord_Of_The_Rings_Wallpaper_JxHy.jpg
http://i2.ytimg.com/vi/ySZuFH_ZmxA/mqdefault.jpg
Finalmente, los gitanos cuando quieren sí que son chungos de verdad y manejan el menudeo de droga con bastante astucia sin llamar mucho la atención. Nada que ver con la fanfarronada de esos del eclipse. Es mucho menos temerario vacilar a un guardia civil que a un gitano, aunque ambas cosas tienen su riesgo. Particularmente suelo pensar que los guardias no van a darme una puñalada en el costado si me río de ellos. Con los gitanos me lo pienso. Y en Andalucía hay más de 300.000 registrados -un 3,3 %-.
Saludos
Comentario de juan carlos I (11/04/2013 14:41):
Como añoro los dias en que en Valencia podiamos ser drogadictos y festeros entre arrozales y naranjos y no eramos el hazmereir del resto del pais. Es más, habia un cierto estilo.