España en el Mundial 2010 (2/4): ¡Dependemos de nosotros mismos!

Si bien la selección española, es cierto, no comenzó con buen pie su participación en este Mundial, no hay mal que por bien no venga, que diría el Caudillo. La derrota contra Suiza, como ya predijimos en su momento, ha tenido el efecto benéfico, como han explicado medios de comunicación desplazados a Sudáfrica y todos los jugadores, de unir más a los componentes del equipo en pos de la consecución de este Mundial y de reafirmar más que nunca que ellos y nosotros, todos juntos en la senda constitucional, creemos en este proyecto y confiamos ciegamente en sus cimientos y bases fundacionales.

En definitiva, y resumiendo, España ha gando 0-2 a la potentee selección de Honduras y ha zanjado por completo cualquier debate que pudiera existir o haberse planteado por la mala manera en que Luis Aragonés ha aparecido para meter la cuchara tras el traspiés sin importancia del debut, aprovechando, el muy sinvergüenza, que tiene tres o cuatro nociones ancilares sobre esto del balompié en la cabeza, el muy antiespañol. Conseguido semejante hito, debidamente festejado por cientos de miles de aficionados españoles en las calles, se impone una conclusión. Y más positiva no puede ser: dependemos de nosotros mismos ante el tercer y definitivo partido frente a los potentes y aviesos chilenos. Al igual que selecciones como Francia, Serbia, Italia y tantas otras, una victoria en este próximo encuentro nos llevará a la gloria más absoluta que, por lo visto, en este extravagante Mundial, está constituida por arribar penando y sin resuello a los octavos de final. Preparen pues coches, trompetas y banderas para festejar la gesta como es debido, caso de que se produzca.

Futbolísticamente el ejercicio de reafirmación frente a Honduras deja algunas lecturas interesantes:

– El seleccionador nacional y demás técnicos del equipo creen “firmemente” en el modelo que ha llevado a la selección nacional a convertirse en esa cosa llamada “La Roja” en la que todo el mundo confía. Es más, están instalados en el convencimiento de que el primer partido contra Suiza fue un mero accidente en términos de resultado y una confirmación de todo lo bueno del modelo en el resto de parámetros del juego. Como consecuencia de este firme planteamiento, Del Bosque ha cambiado de arriba a abajo el equipo, metiendo un segundo delantero de vocación trotona y especializado en marcar a la contra (F. Torres) e incluyendo un extremo (J. Navas) que ha deleitado en el Sevilla haciendo las diabluras que tantos réditos y portadas consiguieron para Joaquín hasta que tuvo que ir a jugar a un equipo donde los rivales esperan en su área. Unan a todo ello el empecinamiento con el que alineamos en nuestro equipo a Xabi Alonso, especialista en el desplazamiento en largo y en lanzar contragolpes y tienen ahí un dibujo claro y coherente. Lamentablemente, los hondureños no entendieron muy bien de qué iba todo el asunto y se encerraron en su área, sin entender que el fútbol es otra cosa. Al menos, cuando se juega contra nosotros. Que los hondureños no se lanzaran a dominar el campo frente a esa alineación española es inquietante, sí, pero hasta cierto punto. No predetermina lo que pueda ocurrir en el futuro. Porque los seres humanos son muy peculiares ellos y a veces hacen cosas raras. Cualquier día de estos nos cruzaremos con un equipo que salga a dominarnos y con estos jugadores los crujimos, no lo duden. El problema es que hasta que nos encontremos a alguien que voluntariamente se ponga debajo de las ruedas para que lo atropellemos con nuestras Panzerdivisionen del contragolpe excelso podemos toparnos con equipos guerrilleros que nos hostiguen en plan incordiante.

– David Villa, que sale a una media de un gol cada partido con la selección (o algo así) fue de nuevo preterido, por Real Decreto-ley para fomentar el empleo y la contratación indefinida, a la banda. De esta manera Fernando Torres, que con apenas 24 añitos está a punto de lograr llegar a la cifra de 100 internacionalidades (números que demuestran que el tipo está marcando una época con la selección) y futbolista que posee una visión digamos peculiar de lo que son las funciones de un delantero centro en el juego posicional, pudo campar a sus anchas. El resultado, dos goles de David Villa e incluso un penalty fallado por el asturiano (jodiéndome la porra, una vez más, por un mísero gol de diferencia), confirma la sabiduría de alejar en la medida de lo posible a los delanteros de la portería rival. No ha sido casualidad, es lo que queremos decir. Estaba todo pensado. ¡Es mejor así! Así nos lo han explicado el seleccionador y sus acólitos y así se lo contamos a Ustedes. Dado el éxito del experimento, esperemos que Villa juegue el próximo partido de lateral izquierdo, que allí el chaval sorprenderá a propios y extraños más si cabe.

– Por lo demás, resulta inquietante que una de las más enojosas costumbres de Villa, de la que hacía gala en el Valencia con mucha más frecuencia que en la selección, haya reaparecido en todo su esplendor y con un resultado óptimo. Nos referimos a esa acción técnica, a ese modo de manejar la pelota y posicionarse en el campo, a esa forma de entender el fútbol y sus esencias más profundas, a esa manera de conducir el balón… que los especialistas en esto del fútbol suelen denominar como “chupar”. Villa, un conocido “bola”, ha abusado de su individualismo hasta la náusea en el Valencia. La excusa en que se amparaba para hacerlo, llegando incluso a tirar todas las faltas e incluso los córners (por supuesto, tratando siempre de meterla directamente, por escorada que estuviera la falta e incluso aunque se tratara de un saque de esquina), es que no había más remedio que ser el típico mamón de colegio a la vista del nivel de los compañeros. Que con la selección empiece a hacer lo mismo y, lo que es peor, que fuera ésa la única manera de desatascar el partido (o-1 en jugada con una exhibición de egoísmo de delantero de las que sólo se olvida uno si acaba en gol), no es algo demasiado bueno para España (por lo que significa y por el efecto que va a generar en Villa en los próximos partidos, y si no, al tiempo). Anticipa, al menos, eso sí, momentos de gloria y conflicto en el Barcelona, con un asturiano sobradito que se niega a pasar a Messi y demás heroicidades hispanas.

– El hecho de que incluso con el partido abierto por el gol de Villa (y a pesar de que enfrente estaba la selección de Honduras, ni más ni menos) el equipo español padeciera de lo lindo para cerrar el partido es algo que debiera mover a la reflexión. Aunque es verdad que se falla un penalty y alguna ocasión más, también lo es que Honduras llegó, incluso, a desmelenarse al final del encuentro. Frente a la tendencia de estos días de focalizar los problemas de funcionamiento de la selección en Busquets quizás habría que comenzar a plantearse que en un Mundial es suicida jugar con dos delanteros que consideran que no han de defender, presionar o hacer el más mínimo atisbo de participación en tareas defensivas, si a ello se añaden además personajes como Navas, Iniesta, Mata, Silva y demás ralea de “jugones” endiosados que consideran que de defender ya se encargarán otros. Uno de los grandes méritos de Luis Aragonés era meter en el medio campo a gente de esta calaña y lograr que curraran, además de lucirse con paredes y túneles. Es cierto que puede que no sea tan sencillo como lo fue entonces conseguir semejante nivel de compromiso ahora que están endiosados con eso de ser campeones de Europa y tener a tías como Sara Carbonero siguiéndolos al fin del mundo (por cierto, esa Sara Carbonero de la que tanto se habla, ¿está buenorra o es un bluff de estos con los que los medios de comunicación nos acostumbran, ccomo la tal Belén Esteban?). Pero también lo es que la función de un entrenador consiste, además de confeccionar alineaciones, en tratar de tener hipermotivados a los jugadores que salen, aunque sea con el acojone propio de nos sentirse titulares o por medio de insultos o las torturas psicológicas que se precisen, para que se dejen la piel, ante todo y en primer lugar, defendiendo. Los argentinos lo tienen claro y putean a los chavales poniendo a Maradona de entrenador, que es como decirte que estás a las órdenes de un loco psicópata capaz de cualquier cosa, que no se acojona ante nada y que si es capaz de meter a Martín Palermo de titular en la final puede hacerte cualquier perrería como no te hayas dejado la piel. En cambio, en nuestro caso, a los chavales les ponen vídeos de los osos amorososo en el hotel de concentración. Y claro, asistir al espectáculo de cómo se rompe la selección española en cuanto le tiran una contra e incluso en algunos ataques estáticos porque siempre hay cuatro o cinco tíos que entienden que eso de defender no va con ellos es un espectáculo más dantesco todavía que el dibujito del arco-iris que tienen los osos esos en la panza. Vamos, que este asunto no hace avizorar nada bueno sobre lo que pueda ocurrir en próximos partidos en esta parcela.

En cualquier caso, ya saben, reiteramos, no nos vayan a decir que somos unos derrotistas hipercríticos, lo bueno es que España, tras este resultado, depende de sí misma. En realidad, lo que es cai mejor, de sí misma ha dependido siempre. Antes y después del primer partido. Y antes y después de este segundo. ¿Quieren una prueba más clara de lo bien que se está llevando todo esto?. Aún les diría más, el equipo también dependía de sí mismo antes de afrontar tantas y tantas citas mundialistas. Es decir, que no es un dato necesariamente tranquilizador ni demuestra, de momento, mejora alguna. ¡Pero tampoco supone un empeoramiento! ¡Lo ven! ¡No hemos ido a peor! Y recuerden siempre, al menos,que tenemos la ventaja de que el empate contra Chile lo más normal es que nos sirva para pasar a octavos. Y, una vez allí, pues a ver si hay suertecilla, caray, que esto es un Mundial.радиаторы вертикальныеюридическая помощь при дтп

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