PERDIDOS
Historia de un bluff en seis temporadas
Como es más que sabido, el formato de las series de televisión está probablemente viviendo sus mejores años. La proliferación de cadenas y lugares de emisión, la facilidad de producción, distribución y acceso a los contenidos, han permitido desarrollar mucho más las historias, los géneros y la estructura narrativa de las teleseries. 24, también reseñada en esta página, es un producto claro de este proceso. Perdidos, recién finalizada, también lo es, aunque según otros condicionantes.
El argumento de Perdidos es más viejo que el mundo, y se corresponde con cualquier cuento fantástico: se pone a una serie de personajes en un mundo de fantasía (o de pesadilla) y no se explica por qué pasan las cosas que pasan, en la idea de que al lector (en este caso, al espectador) se le irán desvelando con el tiempo los interrogantes que se le plantean.
En este caso, el mundo de fantasía es una isla aparentemente desierta, ubicada en mitad del Pacífico (o eso parece), a la que llegan los supervivientes de un accidente aéreo. En la isla pasan cosas muy raras, sin explicación aparente. En paralelo, los capítulos se dedican sucesivamente a acercarnos al perfil de los personajes a partir de la narración de su vida en el mundo civilizado.
Aunque el planteamiento, insistimos, no tenía nada de innovador, la serie dosificaba muy bien la información, conseguía generar intriga en el espectador y, en fin, tuvo un gran éxito, de manera que logró generar muchísimos fans dispuestos a seguir las vicisitudes de los personajes y de la puta isla hasta el final; incluso en países como España, donde ya se encargó TVE, dueña de los derechos durante las primeras temporadas, de aniquilar la serie con su habitual estilo (cambiar los horarios, dejar de programarla, cambiarla de cadena, etc.).
La serie funcionaba bien porque se dedicaba a generar cada vez más y más incógnitas, con continuos giros narrativos que enrevesaban cada vez más el hilo de la historia, pero que la hacían, al mismo tiempo, más interesante. Y todo porque, naturalmente, ya se afanaron los guionistas y productoras de la serie en dejar claro que, a pesar de las apariencias, todo en Perdidos estaba atado y bien atado, todas las preguntas recibirían respuesta, y todo obedecía a un Gran Plan Transcendente que subyacía a las vicisitudes de los personajes que ríase Usted del Plan Florentino Pérez para el Real Madrid.
Por supuesto, esto generó un hervidero de discusiones entre los fans: si todo era tan raro, pero todo tenía una respuesta, la respuesta merecería la pena. Así que todo el mundo se puso a elaborar sus propias teorías sobre Lost, apoyadas en los episodios que iban sucediéndose, generalmente para complicar las cosas y aportar más preguntas conforme se resolvían algunas incógnitas.
Pero, claro, como nada parecía congruente, muchas intepretaciones de los fans acababan cayendo en los dos recursos argumentales más baratos, torticeros, y cutres que ha generado jamás cualquier escuela de guionistas habida y por haber: “Todos están muertos” y “Todo es un sueño” (o una pesadilla, o una alucinación). Pero, claro, nadie se atrevía a soltar semejantes respuestas tal cual, que no se veían en televisión desde los tiempos de Dallas (bueno, en el caso español, de “Los Serrano”). ¡Cómo iban a hacer esa barbaridad los guionistas de una serie excelsa como Lost, imposible! Aunque he de decir que, en esta línea, un amigo mío aventuró hace un par de años la que sigue siendo, a mi juicio, la mejor interpretación posible de “Perdidos”: “Al final, todo es un sueño de Antonio Resines” (tan brillante es el concepto que incluso existe un grupo de Facebook que ha plagiado esta idea).
El problema es que las temporadas iban pasando, sin que se viera la luz al final del túnel, y comenzaba a estar meridianamente claro que aquí de lo que se trataba era de alargar el asunto lo máximo posible (¡Oh, no! ¡Una productora de televisión tratando de hacer negocio con los fans! ¿Adónde vamos a parar?).
En el camino, los giros argumentales resultaban cada vez más impostados, a la par que increíbles, y los episodios-basura, que no aportaban absolutamente nada al argumento (lo cual es un problema si se supone que “todo obedece a un propósito superior”, trátese del Señor o de los guionistas de la serie), menudeaban cada vez más. Como uno, que me resulta particularmente querido, consistente en que un personaje consigue arrancar un autobús (por momentos, llegué a pensar que era yo el que había viajado en el tiempo y me hallaba en un cine club de los años 70).
Así que los guionistas de Lost prometieron cerrar el asunto en seis temporadas y comenzaron, sin un minuto de descanso, una incesante lucha por desinflar las expectativas que ellos mismos se habían dedicado a hinchar con dedicación a lo largo de las primeras temporadas: que si “no vamos a poder responder a todo”; que si “va a estar complicado”; que si “ejque es imposible dar respuesta a tantos interrogantes”, …
Por otro lado, la serie era cada temporada peor que la anterior, así que la degeneración de expectativas iba de suyo. Hemos asistido a una espectacular huida hacia delante de los guionistas, sacándose conejos de la chistera cada vez más alambicados e inverosímiles, mientras repetían, ante la incredulidad general, que “al final todo cuadra” (lo que podríamos denominar “El efecto Rodríguez Zapatero”), aunque quizás se quedada algo, ná, cuatro cosillas sin importancia, en el camino.
Este tipo de productos suelen contar con dos ingredientes para ir sosteniéndose contra viento y marea:
1) Fans capaces de tragarse lo indecible con tal de seguir creyendo, dispuestos a defender “la idea” contra viento y marea, y a perder horas y horas y horas de su vida viendo los episodios en repetidas ocasiones y elucubrando sobre qué significa tal frase. Porque:
2) El argumento y los diálogos, y en realidad toda la serie en su conjunto, están pretendidamente cargados de significado. Todo está ahí por algo, todo implica algo profundo, súperintelectual (sí, “súper”, con el acento ahí, clavado, que hablamos de Lost y el fandom asociado); todo tendrá respuesta, así que no os preocupéis.
Pero como la serie objetivamente desvariaba cada vez más y los agujeros argumentales se superponían, los productores idearon un tercer recurso de apoyo, tanto para los fans (que querían creer) como para la historia, que se supone significaba algo. Ese recurso, tampoco excesivamente novedoso, es la musiquita de Lost, omnipresente. Cada vez que un personaje de Lost hacía algo, cualquier cosa, aunque fuera fregar los platos, ahí estaba la musiquita para decirle al espectador que, cuidado, no se fuera a confiar, que ahí había algo profundo de la hostia. ¿Qué digo “profundo”? ¡Súperprofundo! Para que los fans pudieran reconocer debidamente el sentido de cada acción, de cada escena de Lost, ahí estaba la musiquita, convenientemente estratificada en tres subtipos:
Musiquita a: intriga y terror: “¡Huyhuyhuy qué mal rollo que me está dando esto, qué malro, qué malro, pero QUÉ MALRO!”
Musiquita b: sorprendentes giros argumentales: “Pero… ¡Ahivá la hostia!”
Musiquita c: amor, pasión, profundidad: “Qué bonito. Y lo que es mejor: ¡te hace pensar!”
Con estos ingredientes, estaba claro desde hace tiempo que Perdidos forma parte de lo que podríamos denominar el fenómeno Matrix o la inevitable llegada, tarde o temprano, de la “caída del caballo” del fan, que por mucho que crea, y que quiera creer, en casi todos los casos, al final, verá que nada tiene sentido, que aquello es un bluff.
Recuerden Matrix: a casi todo el mundo le encantó la primera parte. Todos asumieron que la segunda era flojita, por ser generosos, pero en su mayoría se quedaron con los momentos salvables, asumieron que “ya nos lo explicarán todo en la tercera parte, ya verás” y que todo cuadraría. Sólo algunos aventajados tuvieron claro, ya entonces, que aquello no había por dónde cogerlo. Luego la tercera parte fue, como es notorio, una mierda, y a partir de ahí surgió un sector mayoritario de conversos que la pusieron justamente a parir y, a lo sumo, se agarraron a la parte buena (la primera parte) de la trilogía.
Aquí ha pasado más o menos lo mismo; si bien las deserciones de los fans, a lo largo de seis temporadas, han estado obviamente más escalonadas, el grueso de los seguidores han tragado quina hasta el último episodio: querían creer que, al final, todo o casi todo se arreglaría, y, sobre todo, que sus preguntas tendrían respuesta.
Recuerdo mi caída del caballo con Perdidos como si fuera ayer: el final de la segunda temporada. En aquel momento de la trama los malos son los moradores históricos de la isla, denominados “Los Otros” por parte de los supervivientes del accidente de avión, que tienen dos características: a) son malísimos; y b) son superpoderosos, inteligentísimos y, al parecer, invencibles.
Pues bien, resumiendo mucho, el final de la segunda temporada es que un personaje que se había largado hacía un porrón de episodios en pos de los Otros, y a quien todo el mundo daba por muerto, reaparece con una historia totalmente inverosímil, según la cual él ha estado espiando a los malvados Otros y tiene un superplan (perdón: súperplan) para acabar con ellos. Pero, para que todo salga bien, sólo han de acompañarle cinco personas escogidas por él, y nadie más. ¡Y todo el mundo traga sin rechistar! (Naturalmente, el personaje en cuestión es un agente al servicio de los malvados Otros, como cualquier niño de cinco años podría deducir enseguida).
Detalles sin importancia como este me hicieron pensar que tal vez no estuviese todo tan bien atado en Perdidos, y que aquello, eliminando de la ecuación el rollete “huy, qué misterio”, era un rollo de serie. Desgraciadamente para ellos, hubo gran cantidad de gente que siguió reivindicando Lost, y se tragó cuatro temporadas, cuatro, más. Hasta el gran final de ayer, en el que, y a grandes rasgos:
– No resuelven prácticamente ninguna de las preguntas que han ido desplegándose a lo largo de seis temporadas. Por ejemplo, qué es la isla, qué tiene de particular, qué clase de poder emana de ella, si es que hay alguno. Es decir, la pregunta más importante, crucial y omnipresente de esta serie. Pero, junto con esta, había un montón de dudas existenciales más. Por ejemplo, hay unos putos números recurrentes en Lost, que aparecen continuamente y sobre los que no se da ninguna explicación. Pueden navegar por Internet para hacerse una idea, hay gente que lleva seis años devanándose los sesos con cosas así.
– Todo queda en una maravillosa, tierna y entrañable parábola que podría resumirse en este axioma: la Religión es la respuesta.
– Por responder a algo, en el último episodio sólo responden a una duda tangencial correspondiente a la última temporada, que los guionistas se sacan de la manga única y exclusivamente para que no toda la acción transcurriese en la isla. Y la respuesta es… Están todos muertos, y todo ha sido un sueño. ¡Bravo!
Ahora llegará el llanto y rechinar de dientes, el “¡los guionistas nos engañaron! ¡Nos engañaron a todos!”), convenientemente acompañado por el clavo ardiendo al que se agarra lastimosamente un sector de los fans, basado en “es que en la serie no han podido contarlo todo, pero ya verás en el DVD, que hay 20 minutos de extras, seguro que ahí responden”. Inasequibles al desaliento, como ven. Y eso que una serie como esta, en puridad, no debería vender demasiados DVDs, porque ¿para qué quieren los fans revisar un argumento que, en teoría, ya se ha cerrado, ha sido debatido hasta la saciedad, y cuyo interés radica en el misterio de lo, en su momento, inexplicado?
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Comentario de JJ (25/05/2010 16:34):
Yo me caí a mitad de la quinta, pero ya era demasiado tarde y llevaba demasiado tiempo invertido como para no acabarla…
Comentario de moledo (25/05/2010 17:09):
No estoy de acuerdo con tanta “exigencia” por tu parte, ni por parte de los fans enfadados. Voy a llevármelo al ámbito de la literatura, porque es lo primero que pensé cuando terminé el capítulo. En Ensayo sobre la ceguera o sobre la lucidez, de Saramago, no se nos explica el porqué de la situación. ¿Por qué se quedan todos ciegos o dejan de votar? Al autor no le interesa, simplemente se centra en lo del medio, en la trama, en las personas. En Perdidos, por favor salvando las tremendas distancias, han hecho algo así. No era posible dar todas las razones de todo, mi curiosidad era conocer cuáles se resolvían, hasta dónde me iban a explicar. La gente le está pidiendo porqués exhaustivos a una serie de televisión que es fantástica, donde hay viajes en el tiempo y magia… vamos, hombre. Nadie le pide a Rowling que explique quién construyó Howards o de dódne viene la magia. Series como 24, sí son -más o menos- realistas y te lo terminan aclarando todo -eso creo de la primera temporada que es la única que he visto-, pero Lost es una serie de fantasía y de eso me di cuenta cuando Locke comenzó a andar o Desmond tuvo sus viajes mentales en el tiempo/espacio.
Yo estoy “contento” -con comillas- con el final de la serie. Si llegan más minutos o una película pues los descar.. emmm veré, pero tampoco hay que rasgarse las vestiduras, joder. No ha sido tan cutre como Resines despertando de un sueño. Yo lo que entendí del final es que unos pocos sí salen de la isla y viven sus vidas fuera, y el mundo paralelo es una especie de segunda oportunidad o un lugar común, creado para rencontrarse y ser súperfelices todos juntos.
Por último, además pienso que lo apasionante de esta serie ha sido precisamente el que todos nos estrujáramos los sesos y comentáramos -unos más fervientemente que otros- las posibles teorías que resolvieran las incógnitas.
Insisto, yo no creo que la serie, al completo, haya sido un bluff. Sí es cierto que tiene algunos agujeros argumentales o partes flojas, episodios basura y tal, pero venga, ¡es una serie! Y, es más, han conseguido engancharnos a muchísimos y convertir al frikismo a cientos de miles… eso es un logro, desde el punto de vista comercial y de los guionistas.
Sobre Matrix -siento este maremágnum de ideas-, he de decir que el error fue querer precisamente responderlo todo. Con la primera habría bastado, un final algo abierto era perfecto (¿y ahora Neo qué hará como súperpoderoso en Matrix?), y añadiendo las supuestas “respuestas” la cagaron hasta el infinito. Y si los guionistas de Lost siguen intentando contestarlo todo por mor de las exigencias del mercado, quizá la caguen -desde mi punto de vista- o la caguen más -desde el punto de vista de los insatisfechos-.
Esto quizá se debería debatir en un seminario sobre las teleseries, ¿no?
Un cordial saludo.
Comentario de Silvia (25/05/2010 17:16):
La web me reta a ser la primera en decir algo y lo voy a hacer…
No entraré en el tema de si la serie debía responder a todas las incógnitas que ha ido abriendo en la trama argumental. Cada cual tendrá su opinión al respecto. Sin embargo, no tengo por menos que negar esa máxima que desde ayer todos están divulgando por ahí. Sobre todo después de que la tertuliana de Cuatro dijera que todo había sido producto de la imaginación de Jack (como ahora está súper de moda linkar a páginas de Facebook, te dejo un par de links relacionados con el tema: http://www.facebook.com/group.php?gid=121721211194187 http://www.facebook.com/group.php?gid=113274498715715
No, no fue un sueño, ni producto de la imaginación de ningún personaje. Y no, no estaban todos muertos, es sólo que las realidades alternativas que nos han ido mostrando en la sexta temporada eran eso, realidades alternativas.
Comentario de Guillermo López García (25/05/2010 17:24):
JJ, yo también la he terminado, apurándola cual amargo cáliz. ¡Así de contumaz soy!
Moledo, tampoco es que lleve el cabreo o indignación que tal vez parezca destilarse del artículo. La verdad es que a mí Perdidos me decepcionó en su día y desde entonces la he visto (porque la he seguido viendo) con total escepticismo. No me esperaba mucho de la Finale y es eso lo que me ha dado (desde luego, habría pagado por esa aparición estelar de Resines en el último momento).
Ahora bien, sin negar sus méritos, que son muchos, y su cariz de fenómeno social – cultural, yo creo que en una serie de televisión también hay que pedir un mínimo de congruencia argumentativa, que esto era una serie de calidad, no Crepúsculo. Sobre todo si lo que te dicen desde la productora, durante años, es que todo tiene una explicación (e incluso, al principio, se permitían decir que era una explicación racional, no el rollito pseudomístico New Age que al final ha resultado ser). Porque si lo que te dicen es: “en esta isla puede pasar de todo” la cosa cambia. Y reconozco que yo llevo muy mal los productos culturales que juegan con el espectador, que le engañan. Por ponerte otro ejemplo contemporáneo, especialista en jugar con el lector, del que también acabé harto: Stieg Larsson.
(todo esto sin acritud, que no hablamos de nada serio, como el plan ZP de ajuste o los fichajes del Madrid para la próxima temporada)
Un cordial saludo
Comentario de Juan Carlos I (25/05/2010 17:32):
Pero por Diós, una serie con un horizonte argumental tan corto (una isla desierta, pues mira, ya está, isla y desierta en dos dias a comerte los mocos)igual que Prison Break (te escapas de la carcel, vale, ya estás fuera ¿y ahora?), pero si hasta Los Soprano se repetían como el ajo…..
PUES CLARO QUE ESTABAN EXPRIMIENDO A LOS MILLONES DE PANOLIS CON TÉCNICAS DE CULEBRÓN VENEZOLANO.
Desde luego, entiendo a los guionistas…¿para que esforzarse en hacer un gran guión coherente, si con cualquier folletin se gana lo mismo o más y te comes menos la cabeza?
Comentario de Lolo (25/05/2010 18:09):
He de decir en mi defensa, que los calé el el segundo capítulo. El primero me pareció flojo, en el segundo me dormí antes de que acabara pensado que los gionistas de Sensacion de Vivir trataban de hacer un culebron venezolazo a su manera y que alli, a pesar de ser una playa caribeña, habia muy pocas chichas al aire. Y lo que me he ahorrado, hoigan!!
Comentario de John Constantine (25/05/2010 20:38):
¿Porqué será que todos los que nos caimos del caballo (de Troya, porque para descabalgarnos tantos lomo tenía que tener, el hijoputa) lo hicimos al final de la segunda? ¿Tal vez porque vimos que, después de las oportunidades dadas, era lo mismo que Twin Peaks, osease, un vehículo para cosas mucho más allá que una historia medianamente bien explicada? ¿Y porque nadie es capaz de darse cuenta de que la gente se enganchó a millones en su primer año gracias al mimo con que se trató a todos y cada uno de los personajes, que son los que te hacen amar una serie, y que cuando estos empezaron a pintar una mierda es cuando empezaron las deserciones en masa?
Comentario de labuelo (25/05/2010 21:51):
Está claro que no hay que engancharse a series que tengan más de 12 ó 12 episodios, a no ser que todos los episodios tengan una estructura cerrada y solamente tengan en común los cuatro o cinco protagonistas.
No sé, por ejemplo, El Equipo A, McGyver o, por hacer algo de patria, La casa de los líos o Manos a la obra.
Así, no te llevas ningún chasco y, si a los 3 minutos te has cansado, pues cambias el canal o apagas la tele y santas pascuas.
Dicho esto, yo me estoy tragando True blood y Californication, así que no me aplico el cuento para nada.
En fin…
Comentario de Pucelano (25/05/2010 22:08):
Yo también abandoné la isla (jurl,jurl,jurl) en la segunda temporada, y ahora puedo decir a mis amigos levantando el morro a lo Mussolinni, YOYALODIJE. Lo que me extraña es que hayan podido engañar a alguien.
Si quieren ver una serie que plantea una serie de interrogantes con maestría, que tiene un final más o menos escrito desde el primer capítulo, y que al final resulta coherente y LO EXPLICA TODO, recomiendo Galactica Estrella de Combate (2003)
Los Soprano me parece un caso totalmente distinto, porque lo que importaba no era lo que pasaba, sino los personajes, a los que amabamos. No tenía importancia alguna que en bucle se introdujesen nuevos mafiosos en cada temporada para que Tony ordenara su muerte al final. Era imposible que aquella serie tuviese un final original, ya que todos los posibles estaban explotados en el cine de mafiosos hasta la saciedad.
Comentario de oscar (25/05/2010 23:03):
Yo es que una serie sin tías corriendo a cámara lenta en bikini rojo como que no le veo el atractivo…
Comentario de parvulesco (26/05/2010 00:49):
La serie es una puta mierda. Mirándola me sentía como Ignatius Reilly de la Conjura de los Necios, como un yonqui que odia su propia droga aunque tenga una pureza del 99% pero la sigue tomando y además quejándose de ello.
Lo que pasa es que los guionistas han violado repetida y violentamente, como un solitario pastor a sus cabras, las sacrosantas Reglas de Oro de la Narración. El escritor fija sus propias normas (y el espectador en un acto de fe voluntario se las cree) y se dedica a desarrollar la trama jugando a partir de ellas. Pero no se las puede ir saltando impunemente, porque esto genera pérdida de credibilidad en la narración.
Si hay aún fans que creen que Lost es una buena serie y “que no tenía que responder a todas las preguntas”, es que no se han enterado de lo que realmente es un McGuffin, algo que los guionistas de Lost no tienen ni idea de gestionar. En Pulp Fiction tampoco se explica qué es lo que contiene el maletín de Marcellus Wallace. En Los Pájaros tampoco se dice por qué empiezan a atacar los dichosos animalicos. Pero una serie no puede tener millones de McGuffins, como pasa con Lost.
Para cerrar todas las tramas y exclamar Alehop! justo después tendrían que haber llamado a Billy Wilder, pero estaba muerto. 1,2,3 o Bésame, tonto son dos ejemplos brillantes de cómo cerrar una trama embrolladísima durante hora y media en un minuto.
Comentario de Psicopanadero (26/05/2010 08:07):
Pues a mí me gustó y me sigue gustando después del final. Disfruté incluso más de las últimas temporadas que de las primeras y en ningún momento participé de ese afán por hipotetizar sobre la trama ni de esperar respuesta a todo. Imagino que dependerá de cómo la veas y qué esperes.
¿Una serie no puede tener millones de MacGuffins? Pues parece ser que sí. ¿Cómo se puede pretender ser rígido con una narración acuñando normas autoexcluyentes? Pues no se puede. Vamos, que habrá divergencias en la interpretación final de la trama, en lo atractivo del conjunto, el peso de los personajes, etc., pero descartar que el gusto por la serie pueda ser genuino y no fruto de la ignorancia en base a reglas nacidas hipotéticamente a partir de la aprobación pública de ciertas narraciones y no para sojuzgar dicha aquiescencia a sí mismas sino para conseguirla de la forma más eficaz, a poder ser siempre y con cuanto menos esfuerzo mejor, me parece que no se sostiene demasiado bien. Si la Regla de Oro de la Narración fuese una ecuación matemática que ofreciese predicciones erróneas, diríamos que la ecuación es incorrecta y construiríamos una mejor en base a la experiencia en lugar de aplicar parches o sesgos mediante interpretaciones favorables que la salven de sus fallos; como, por ejemplo, desacreditando las informaciones divergentes.
Comentario de Juan Carlos I (26/05/2010 09:04):
Bueno, no mentemos a Billy Wilder en un hilo sobre un negociete de sacaperras que han conseguido prolongar durante 6 años.
Yo Lost lo comparo con un listo al que dejas dinero y luego, durante años, te va diciendo, mañana te lo devuelvo…..
En fin, son estas cosas las que demuestran al resto del mundo que los lectores de esta sagrada página también son humanos. Y eso amigos hace que el pueblo nos vea mas cercanos.
Comentario de Garganta Profunda (26/05/2010 09:35):
“LOST” ha sido una oportunidad “perdida”. Lo que pudo ser y no fue. Y digo esto, porque de un arranque muy bueno en plan “ciencia ficción” a lo Ray Bradbury, al final se nos ha colocado un pastiche “buenrrollista/espiritual” a lo Paulo Coehlo.
Insisto, una lastima que demuestra cuan importante es tener un grupo de guionistas minimamente decente que saque jugo a las situaciones. Y había elementos a exprimir en “LOST” a cascoporro…”El proyecto Dharma”, “La bomba que el ejercito americano olvida a finales de los años 40”, “Los Otros”…
Aun así la impresión es que los guionistas han olvidado por completo que la serie nos enganchó (al menos al principio) por su personaje principal, que no es ni mucho menos “San” Jack ni Sawyer “Coolwater”, sino la Isla. Al convertirla en un cajón desastre en el que TODO es posible han desvirtuado la piedra angular del proyecto y como bien apuntan algunos la cosa ha degenerado en un miniculebrón “venesolano”.
Salvaré los capítulos de Desmond Hume, auténticas perlitas distópicas dignas del mejor Philip K.Dick. Tan solo el magnífico capítulo “La constante” ya vale más que las últimas tres temporadas juntas.
Pintan bastos para la ciencia ficción televisiva. Si LOST nos ha defraudado en su cojunto, HEROES se ha quedado en una morralla insulsa y lenta en su 3ª temporada y FLASHBACK cancelada por inoperancia de sus guionistas que no han sabido salir del Piloto.
Comentario de Otto von Bismarck (26/05/2010 10:34):
Gracias LPD por mantenerme al tanto de las referencias culturales de supervivencia para moverme en un mundo de chonis y poligoneros sin tener que sustraer horas a mis lecturas de schopenhauer junto a la chimenea de mi pabellón de caza ambientado con alguna cantata de bach. Lo de escassi, y gran hermano y cosas como esta me suponen una gran ayuda.
En fin, teniendo en cuenta que apenas leo novela porque siempre me siento estafado por las historias que se montan los escritores y no me creo nada, puedo proclamar y proclamo que no he visto ni un episodio completo de esta “cosa” y que lo que voy a decir lo hago solo de oídas. Por favor, los que todavía la defienden, abandonen su síndrome de estocolmo y asuman que les han profanado el ojo de saurón. Podría ser peor, podrían haberse comprado un telepick.
Me despido recalcando que no tengo ni puta idea. Mis condolencias a los premiados.
Comentario de desempleado (26/05/2010 10:41):
Mi caída del caballo fue el comienzo de la tercera. Esos episodios en la jaula en los que no pasaba nada eran insoportables. Al menos siempre nos quedará Kate. Dudo que vea la sexta.
Comentario de CusCus (26/05/2010 12:11):
Una serie de 6 temporadas en una isla desierta en la que pasan cosas raras. Es lo que presentaba Paula Vázquez, no? Y dices que no la veremos más en bikini?
Comentario de parvulesco (26/05/2010 13:15):
Psicopanadero, no puede tener millones de McGuffins porque destruye la consistencia de la trama narrativa y por ende su credibilidad frente el espectador. Lost es totalmente inconsistente y, por eso, quizá la única serie verdaderamente post-moderna.
Ahora, todos juntos, toca decir… THE WIRE… THE WIRE…
Comentario de Rocamadour (26/05/2010 13:34):
Yo la dejé al principio de la tercera, por si tiene algún valor estadístico, con el rollito de las jaulas y eso del que alguien habla más arriba.
Y sí, digamos todos con parvulesco… THE WIRE, THE WIRE, THE WIRE.
Saludos.
Comentario de Imperator (26/05/2010 13:34):
Una pregunta del buen rollo, Guillermo.
Dices que te caíste del caballo en la 2ª temporada, al final.¿Y has seguido la serie hasta el último capítulo de la 6ª temporada? Me asombra… poco, pero me asombra.
A mi la serie, hasta el final de la 5ª, me ha gustado mucho, mucho. He esperado a que acabe, porque quiero verla del tirón, en vez de esperar una semana por capítulo. De modo que no sé si me gustará la 6ª temporada y el final. Quizá, quizá no.
Lo que tengo claro es que, si el final de Lost no me gusta (como me pasó con el último capítulo de Galactica)eso no va a borrar todos los buenos ratos que he pasado con la serie. Para mi ha sido tiempo y dinero bien gastado.
Pero vaya, tenía clarísimo que hicieran lo que hicieran mucha gente se quejaría del final. No se puede competir con las expectativas de la peña :D
Comentario de GaUsS (26/05/2010 15:03):
pues empecemos a meter dedo en ojete…. a todo gafapasta que lee la página.
la 6 temporada ha sido, en general, una mierda. punto culminante: capítulo donde descubrimos que ricardus (richard) monta en guaguas por las canarias adelante con acento ¿venezolano?¿chileno?¿jamaicol?
lo único importante de la sesion finale es la conversación de jack con su papi que resume la 6 temporada (sólo la sexta): la vida paralela no es vida paralela sino una especie de ¿sala de espera? para que todos los amiguetes de la isla (independientemente de cuando mueren) se reunana para digi-evolucionar…. que digo yo que esto lo cuentas en el minuto uno y después explicas lo del tapocinto, la estatua de 4 dedos y los jodidos números del gordo millonario….
de ahí a poner a parir las 6 temporadas …. no me jodais… la quinta temporada es muy buena y su final es glorioso y dan ganas de matar a los guionistas por dejar el climax tan alto…
que no han tenido huevos… exacto… comparla con matrix.. herejes!!!! herejes!!!! que para esto que la mataran en la quinta si no sabían como continuar… lo firmo.
ahora bien, estos comentarios gafapastosos (en el sentido más peyorativo de la palabra rosa díez dixit) de yo lo dejé en la segunda porque me lo veía venir… anda…. anda… anda…. pues haber puesto un foro en internet y haberte dedicado a hacer spoilers, rappel con tanga de leopardo.
conclusión desde esta página recomiendan el turruño de la cinta blanca y, i love scassi mediante, sacrifican en la pila funeraria a perdidos… es de gente que se la coje con papel de fumar y lee a schopenhauer entre visita y visita al metropolitan….
y ahora que me caigan negativos… coño… que esto no es menéame… sorry ;-D
Comentario de Jose (26/05/2010 15:43):
Enhorabuena por la entrada. La mía es un poco más modesta, de chorizo en sarta…
http://palabradepezabisal.blogspot.com/2010/05/chorizo-en-sarta-lost.html
Comentario de Psicopanadero (26/05/2010 16:05):
Parvulesco, la trama cambiaba cada temporada aunque se mantuviesen ciertos aspectos y personajes. Y cada temporada era, en mi opinión, perfectamente consistente con los hechos que en ella se desarrollaban, manteniendo además una continuidad global. Pero es que aunque no fuese así da exactamente igual porque aun con una total y absoluta inconsistencia me habría gustado desafiando, por lo tanto, las sacrosantas Reglas de Oro de la Narración.
Comentario de Jacob (26/05/2010 16:05):
Joder Guillerermo,
No has visto la serie y la pones a caer de un burro basándote en los comentarios radicales de los foros. Lo mismo digo de los demás que se bajaron del caballo en la segunda temporada.
Para empezar, el último capítulo, hasta los últimos 10 minutos, es uno de los mejores, por no decir el mejor, de la serie. Y aunque al final te lo resuelvan todo con en esa explicación tan previsible, con perspectiva el final te deja buen sabor de boca.
Yo mismo recién terminado el capítulo le daba un 4 y ahora le doy un 8 alto y subiendo.
Y decir que porque estén muertos es una mierda de serie es como decir que El Sexto Sentido es una mierda porque Bruce Willis está muerto.
Por otro lado, la gente escribe para protestar, no para decantarse a favor de algo, de ahi que haya mayoría de comentarios negativos.
Además, la gente no tiene ni puta idea de lo que ha visto, porque he estado leyendo comentarios en los diferentes períodicos en los que comentaban la noticia y la mayoría de la gente que se quejaba, o no había entendido el final o, como tú, no lo había visto. (Algo me han contado también de una tía en Cuatro diciendo que estaban todos muertos y había pasado todo en la cabeza de Jack nada más terminar la serie).
En fin, lamento deciros que os habéis perdido, en global, la mejor serie de la historia (que me perdonen Los Soprano) y que no vais a ver nada igual en mucho tiempo.
No voy a Dharmas vueltas al asunto,
Un saludo,
Comentario de SuperSantiEgo (26/05/2010 16:46):
¿En serio a alguien le importaban los misterios, la inciativa Dharma y todo eso, en vez del hijo ilegítimo de la coreana las familias deestructuradas de Sawyer y Locke?
Yo creía que la gente veía esta serie y Pasión de gavilenes como yo, por su enfoque ibseniano y brechtiano y análisis introspectivo de los personajes, no por otra cosa.
Las sorpresas que se lleva uno.
Comentario de Guillermo (LPD) (26/05/2010 18:16):
Sobre el dilema de si he visto o no las últimas temporadas de Lost, respondo a las acusaciones antagónicas de Imperator y Jacob: sí que vi Lost hasta el último capítulo, sin perderme uno solo en la secuencia. Tampoco me he basado en lo que decían en los foros de Internet y demás. Así que, respondiendo a la crítica de Imperator: pues tienes razón, pero es que en verano tengo mucho tiempo libre y el verano pasado me quedé, definitivamente, sin series de consumo rápido, así que, en un ejercicio de responsabilidad institucional de “yo acabo lo que empiezo” típicamente español, decidí tragarme los episodios restantes. La tercera temporada me pareció infame también, pero la cuarta, dentro de lo malo, mejoraba algo y la quinta, centrada en viajes en el tiempo (que es una cosa que, lo confieso, me pone) estaba bastante bien, dadas las circunstancias. Todo ha desembocado después en una sexta temporada muy floja (probablemente la peor de las seis, que ya es decir) y el ridículo final, pero como me lo merecía sobradamente (ya digo que me caí del caballo, aunque no de la serie, en la Finale de la segunda temporada) tampoco podía quejarme, que ya sabía dónde me metía.
En resumen, y respondiendo a Jacob: sí que la he visto, sí, para mi desgracia. Y por eso me quejo, que estamos rayando a un nivel casi, casi, de cine español, por favor.
Un cordial saludo
Comentario de Juan Carlos I (27/05/2010 02:33):
Precisamente, muchos no hemos visto más que capítulos de la serie, porque no nos convencía en absoluto.
Me ví unos cuantos capñitulos al principio….perdidos en una isla, y tal , ok, los dramas entre los personajes, sus vidas pasadas, como llegaron al avión, todo medio coherente.
De repente aparecen los primeros fenomenos extraños, el humo, vale, bien, una trama. Una serie. Un guión.
Te reenganchas al poco y descubres: Que viajan en el tiempo, que la isla no está nada desierta, que hay tecnología perdida como en la fabrica de Sony…primeras sospechas ¿no me estarán liando sin pies ni cabeza?
Se confirman las sospechas, mientras ves como lo que a ti te parecen incoherencias y tomaduras de pelo, al resto le parecen interesantisimos alardes de misterio misterioso
Alguien dijo alguna vez que indudablemente el cine de Almodovar era sorprendente, porque metía siempre a toda la fauna aunque fuera a presion y sin sentido: Transexuales, violadores, violadas, putas, homosexuales de uno u otro sexo, psicopatas, etc…Cambiese fauna del imaginario de Almodovar por misterios inventados la noche de antes y metidos a discrección, y tenemos algo como Perdidos.
Eso si, yo no he hecho un postdoctorado en la serie, así que no se me exija que mi critica sea con conocimiento de todos y cada uno de los capitulos.
Y de todos modos, una serie de televisión consiste en creatividad y buenos guiones, hasta atrapar a la gente, y luego simplemente estrujar la gallina de los huevos de oro. En esta fase, donde ya tienes a un publico semicautivo simmplemente por saber que pasará (cosa que me suele importar un carajo), solo las series con mucha dignidad aguantan tambien la parte de la creatividad y el guion con cierta dignidad.
Si incluso los Soprano caian en situaciones de liarla por liarla y rellenar temporada…
Comentario de Zeta (27/05/2010 06:40):
Primero estoy completamente de acuerdo. El final ha tirado a lo fácil, a lo MUY FÁCIL. Que no se había visto nada así desde el sexto sentido….jajajaja.
Que hay muchas cosas sin explicar…Dos cientas cincuenta mil. De hecho hay un video que en 6 minutos no para de preguntar y preguntar cosas como: ¿Por que los otros querían a Walt? ¿Por qué se encontró John Lock con su padre? ¿Donde demonios esta el cuerpo del padre de Jack?
Link http://www.collegehumor.com/video:1936291
Por otra parte decirte que los números tienen una “explicación” (entre comillas claro). Son los 6 números que acompañan a los 6 elegidos de Jacob. No recuerdo el orden pero era algo así como 32 Jack Sheppard – 12 Hugo Reyes… etc etc…
Tras esto ya puedo afirmar categóricamente: The wire ha pasado a ser mi serie favorita :P
Comentario de Armin Tanzarian (27/05/2010 18:11):
Aun no ha visto el final de la serie, y no sé si lo haré.
Hace tiempo que el lírico equipo de guionistas logró que me sudase completamente el trócolo el destino de sus malditos personajes. Esto, siendo soez.
Si pretendo tirarme el pisto con una interpretación sociopolítica, podría decir que en su conjunto, “Perdidos” me parece una serie mojigata y bastante reaccionaria. No hay sexo por ninguna parte (ya me contaréis: una isla tropical con montones de tiarras y pimpollos con más de quince o veinte músculos abdominales perfectamente esculpidos…y allí se folla menos que en los Ropper). Por no hablar de todo el rollo místico y moral del Bien y el Mal. Repugnante.
Pero lo peor es lo indecentemente tramposo de la trama en general. Lo que parece dotar de sentido a toda la Historia de la Civilación durante tres o cuatro episodios, resulta que luego se devalua y tiene el mismo interés que el parte meteorológico para un pingüino.
Dicho esto, yo me la he tragado (mi señora manda) de forma intermitente. Y os puedo asegurar que he entendido lo mismo que mi querida esposa, que se la ha visto hasta doblada al esperanto.
Comentario de Miguelcrockett (27/05/2010 19:53):
Anda, que cuando os levantáis rajones en LPD… Si realmente era TAN mala, tan ñoña, tan obvia ¿cómo aguantas SEIS putas temporadas? Porque el que diga “es que… es que quería saber qué era la isla!” es para darle un premio, es como si te quedas a ver Ciudadano Kane y al final dices: “¡Vaya mierda! ¿un puto trineo?Venga, no me jodas…”
Otro apunte: si se simplifica tanto, el 99% de lo que podamos ver-escuchar-leer va a sonar estúpido. Como ejemplo de simplificaciones facilonas:
“- Todo queda en una maravillosa, tierna y entrañable parábola que podría resumirse en este axioma: la Religión es la respuesta.” o
“Están todos muertos, y todo ha sido un sueño. ¡Bravo!” que ni siquiera es cierto ¿todo ha sido un sueño? creo que no es tan sencilla la cosa.
¿Que la serie ha tenido fallos y momentos flojos? Por supuesto. Pero creo que en muchos sentidos ha sido una buena serie de autor, o si no a ver quién ha tenido los webs de meter paradojas temporales en horario de máxima audiencia. Que sí, que The Wire mola mucho y todos los que la hemos visto somos mu listos, pero no por despreciar otro tipo de series nos va a caer una sexta temporada cual maná…
Comentario de josé luis (27/05/2010 21:20):
Perdonad el link pero no me he podido resistir
http://www.youtube.com/watch?v=XFKoxKQHOk4
Comentario de engelson (28/05/2010 13:14):
falta que expliquen por qué a Jack no le crecía el pelo en las dos primeras temporadas
Pingback de TEXTO CASI DIARIO ; ) - María Pilar Clau y Mariano Gistaín » Sobre la serie ‘Perdidos’, en La Página Definitiva (29/05/2010 11:22):
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Pingback de “Lost in love” / “Lost in shit” « Seashell (29/05/2010 13:39):
[…] in love” / “Lost in shit” Tan decepcionada como un fan de Perdidos: la historia de un bluff tras doce temporadas. ¡Qué mierda de […]
Comentario de John Constantine (29/05/2010 19:03):
A mi, que como he dicho ya , la deje al final de la 2ª temporada por los mismos motivos que Armin Tanzarian, me da la impresión cada vez más cuando leo la defensa de sus furibundos seguidores, de que EL rey está desnudo.
Comentario de tacito (30/05/2010 12:26):
Como comenta SSE “A quién le importan los misterios”. Lo interesante son las seis temporadas de enredos y sainetes que le mantienen a uno la mar de entretenido, y le permiten mantener conversaciones tabernarias en el periodo estival (una vez rematada la liga)… Y si los guionistas me han engañado, pues que más da, si soy de esos que se ponen de punta en blanco en los domingos electorales para ver florecer la democracia en plan http://www.youtube.com/watch?v=lFARd8aKoSU#t=1m30s
Comentario de ardid (31/05/2010 02:14):
Permiteme q te tutee Guillermo,¡Alabado sea tu analisis!(como no nos conocemos permiteme que te diga que te hago este comentario sin sarcasmo alguno)
Comparto plenamente tu opinion y he de entonar mi mea culpa,estaba subyugada por completo a los enigmas insulares,a los de los personajes ,a los de los números etc
Si,fuí débil,no entendía muchas cosas pero nada erre que erre,yo solita me conformaba por que claro se habia dicho q tal enigma de la temporada primera estaba explicado en algún momento de un episodio de la temporada cuarta pero q yo torpe de mi no habia reparado en el porque habia pasado por alto un simbolito grabado en la hoja de un árbol de la selva y claro ya se sabe con tamaño despiste como iba a seguir la trama argumental de Lost…
M i fidelidad tambien fue alimentada habilmente porque en todos lo comentarios de los experto losties se daba fé que los buenos de los guionistas lo tenian todo ya pensado, lo unico que les quedo por enseñar era el documento firmado por el señor notario fulanito de tal de Móstoles,que daba fe de que el final de perdidos estaba pensado como hace todo buen guionista ,diseña el final y luego le da forma a la historia.
Pero bueno Guillermo que me quiten lo bailao,q durante la travesia me lo pase bien muy bien,no voy aburrirte con francachelas a costa de lost,esas teorias imposibles de mis compañeros de fatigas pinchandonos en vena un find una temporada completa.Te ahorraré las batallitas.
A l final para no envenenarme me quedo con los dialogos de Sawyer,la musiquita q te alertaba de que estabas ante una rebelacion que cambiaria el rumbo de tu vida y todas esas cosillas que han hecho que Perdidos ya forme parte de mi vida y que cronologicamente organice mis acontecimientos vitales en funcion de las temporadas de lost.Cuando acabe de pagar mi hipoteca habran pasado tantoss años que no me acordare ni de cuando la firme ,hare un esfuerzo memoristico y dire : Aaah! Siii! fue cuando no me entere mu bien de que significan los numeros que aparecian constantemente por toda la isla y aguien me recuerda que quedo super claro solo q yo no me fije en el detalle.
Comentario de Adam de la Halle (31/05/2010 19:40):
yo me trague la serie entera porque le gustaba a mi mujer. entonces supongo que mi opinion no sera del todo ecuanime, asi que me la callo
Comentario de Jordi (02/06/2010 00:39):
A mi me moló hasta la segunda-tercera temporada (durante el apogeo del enfrentamiento con Los Otros), después para mi ha ido en lento declive. Le pongo un 6,5.
Pingback de La Página Definitiva » Garth Marenghi’s Darkplace (08/06/2010 07:38):
[…] de aquellos tiempos. Y también, un anhelo irresistible de que los totems de la actualidad, como Lost, House o 24, tengan su justo castigo a manos de la próxima generación de cómicos […]
Comentario de JJ (15/06/2010 19:18):
Tiene un poco también de “Efecto Harry Potter”. O de cualquier saga, en general. Ya que has invertido una cantidad de tiempo determinado en ella, te provoca menos remordimiento continuarla que dejarla.