La fiesta de la democracia por dentro: memorias de un vocal 1º

¡Yo no hago la mili! Una exclamación desgañitada recorría los pasillos del colegio de monjas. Atribuladas religiosas se sorprendían. La autoridad estaba presta a intervenir ante el acceso de locura del recluta. ¡Yo no hago la mili! Esta escena pre-constitucional se daba el pasado día de Nuestro Señor 9 de marzo de 2008: elecciones generales. El recluta era el vocal 1º de una mesa cercana que se negaba a hacer sus labores democráticas. Le habían tocado en un democrático sorteo del que se desconocen tanto el material del que están hechos los bombos como las manos inocentes que recogen la bolita. ¡Yo no hago la mili! La escena de ambientación franquista en blanco y negro quedaba ligada con el presente gracias a una modernísima actitud alta definición de púber de la E.S.O. ante sus consentidores papás. Ese vocal 1º, a partir de ahora un símbolo para todos nosotros, un ídolo, quería que le diesen la paga de 60 euros y que le firmasen el justificante para no trabajar 5 horas al día siguiente e irse a su casa. Finalmente, y ante la amenaza de una futura comparecencia ante el juez, accedió a quedarse el resto del día en su puesto pero de brazos cruzados, sin hacer nada, en señal de protesta. No queda sino aplaudir. Con verdaderos patriotas que aúnan tradición e innovación España sería otra. No sería Una, no sería Grande, no sería Libre. Pero sería Otra.

Nosecuánto 1, Nosequé 23, letra B. Ese fue el destino de un servidor de la patria, también seleccionado Vocal 1º como decía una escueta misiva con un dato aterrador: había que estar a las 8 de la mañana de cuerpo presente en el lugar señalado. Ante esto se producen varias actitudes en cadena bien estudiadas en psiquiatría:

a) Cagarse en su nación.
b) Incredulidad, lo que supone leer la carta 21 veces.
c) Trucos baratos: “Bueno, ¿y si hago como si no la hubiera visto?”
d) Expreso andalusí-baturro Córdoba-Zaragoza: “Yo no voy. Que no. Que no voy. Que me busquen. Pero que no voy”.
e) Carrusel de alternativas: “¿Un certificado médico? ¿alguien conoce a un médico corrupto?, ¿y si mi jefa me pone en una cuartilla que tengo que trabajar?”.
f) Expreso baturro-andalusí Zaragoza-Córdoba: “Que n-o v-o-y. No puedo decirlo más claro”.
g) Congoja ante un destino amenazante poblado de multas y guardias civiles con mostachos de posguerra que van a buscarte a casa y te sacan en pijama para llevarte a la urna. Juicios. Cárcel. Cae la pastilla de jabón en las duchas de la prisión provincial y Bubba te llena de cariño.
h) Cesión ante el autoengaño: “Bueno, así no salgo este sábado y lo mismo puedo empezar una temporada de limpieza del hígado”, “quizá la interventora del PP sea un pijita preciosa y perfumada que no pueda resistirse a mis encantos y me lo demuestre en el cuarto de baño hipnotizada por la pasión”.

Rendido ya ante el miserable autoengaño me personé a la hora acordada impresionándome en mi paseo hacia el colegio electoral la existencia de la mañana en los domingos. En el lugar una confusión de mesas que se arrastran, urnas que se colocan, papeles que se sacan. Todo ello protagonizado por homínidos de la especie “vecinos”, subespecie “del barrio de toda la vida”. Ni rastro de la autoridad salvo una pareja de municipales somnolientos. No hay control, sino prisa. Dos palabras vienen a la mente: “Primaveras” y “pardillo”. Rencorosos vocales y presidentes anteriores ocultan esta información a los futuros vocales y presidentes por pura inquina ibérica. Yo, español del siglo XXI, os he advertido: si os toca no pasa nada porque no vayáis. Hasta ahora un miedo cerval procedente de épocas de autoritarismo hace pensar en persecuciones de grises por las calles hasta que te cogen de los pelos. Hay que acabar con esa contaminación nacional-católica, con ese silencio cómplice. Acabo de ofreceros el germen de una revolución.

El colegio electoral es una vuelta al colegio, valga la redundancia. Y éste era de monjas. Durante horas y horas se tachan nombres de una lista, se escriben a boli en otra, se cuentan papeletas, se rellenan a mano informes que han de repetirse porque las copias que hace el calco no resultan suficientes para las que hay que aportar al final en varios sobres que van a la subdelegación del gobierno…La Fiesta de la Democracia, al igual que otras fiestas tradicionales como la Semana Santa, la Navidad o las ferias, se ajusta a un guión preestablecido con muy pocas variantes. Ha de votar una mujer de más de cien años. La tuvimos. Ha de venir un señor mayor que tras depositar sus papeletas quiere votar por su esposa, que se ha quedado agonizando en el hogar. Lo tuvimos. Jóvenes padres cogen en volandas a sus pequeños y sonrientes niños para que metan ellos la papeleta. Los tuvimos. Votantes de cualquier generación llegan con la papeleta para el Congreso y Andalucía pero no la del senado, y arguyen “es que no me la mandaron”. Los tuvimos a todos. A las monjas que votan en fila india. También a la señora moribunda en silla de ruedas y al ciego que este año pide votar en braille, una novedad en el circo. Tuvimos un producto personalizador que nos llenó de ese sentimiento combinado juancarlista: orgullosatisfacción. Una señora mayor llegó de lejos exclamando “¡Qué miedo, miedo me da!” Conforme se acercaba señalaba con la barbilla mediante un rápido movimiento de cabeza al interventor socialista, que se encontraba en ese instante, las doce del mediodía, adormilado en su silla de centinela de los comicios y ni se dio cuenta. “¡Me da miedo! ¡Me voy ya porque me da miedo! Puffff, qué miedo.” Y salió de allí con un trote cochinero bastante ágil.

Después de las ocho de la tarde empieza el recuento y el proceso de rellenar los informes comentados antes. El recuento de las elecciones de Andalucía y las del Congreso de los Diputados sigue una mecánica aparentemente sencilla. Abrir los sobres, irlos clasificando en montones según los partidos y contarlos. No se espera una cosa, que las cuentas no cuadren. De hecho no cuadran. Es más, es imposible. Ciudadanos de bien aturdidos por el sueño, con doce horas de trabajo a cuestas y las nalgas dormidas tienen la responsabilidad de que las matemáticas hagan honor a su fama de ciencias exactas. No se cuenta con una ley aritmética no escrita, la Ley de Dios es Cristo y el Copón Bendito. Al principio respiramos aliviados. Servidor de la patria había tenido una laguna mental, una ausencia de la realidad de unos cinco minutos, y había numerado a los votantes mal: 258, 257, 258, 258, 259… Este mismo error había sido cometido también al final y por mímesis telépata por la otra vocal. Corregida la lista, seguían sin cuadrar los números. Sobraba un voto. La solución surgió de la boca del interventor socialista, que se negaba a contar “porque me equivoco” y que saliendo de su letargo y quitándose uno de los cascos donde estaba oyendo la radio indiconos: “Pues se le quita a una formación política”. Al unísono, las interventoras de PP e IU contestaron en alianza jamás vista: “Pues se lo quitamos a la tuya”. Al final, mirando como en la Balsa de la Medusa debieron mirar todos al primero que preguntó “¿Y qué hacemos para comer algo?”, miramos a nuestra víctima, un voto en blanco cuya eliminación solucionaba todo. Solucionado. Deglutido. En las andaluzas pasó lo mismo y añadimos cinco blancos. Las del senado, mucho más complicadas por las listas libres y la posibilidad de votar a uno, dos o tres senadores, cuadró inexplicablemente a la primera. Al día siguiente recordé que tan sólo una persona, a la sazón mi pae, no votó al senado, algo que ninguno recordó. O sea, que en realidad tampoco cuadraban.

Hablando al día siguiente con amigos y conocidos que habían estado como apoderados o transmitiendo datos y ayudando con los recuentos, supe que nuestro pecado era venial. En otras mesas de otros colegios, ya en torno a la medianoche con los ánimos bajos e infladas otras partes, vocales y presidentes añadían o quitaban votos nulos y en blanco por docenas, 30 por aquí, 40 por allá. La práctica es habitual.

Según fuentes de toda solvencia de las que invitan a cañas, los vocales y presidentes de algunas mesas contaban los votos del senado a la vieja usanza de la Piadosa y Secular Hermandad de Nuestra Señora Vivan las Caenas y la Vía Sacra de Nuestro Padre Muera la Inteligencia, como si fuesen listas cerradas, o sea, sin separar, pues en honor a Pero Grullo hay que separar las papeletas que votan a senadorables (senadoreíbols) de diversos partidos o tan sólo uno o dos de un partido. Las contaban como si fuesen PP, Psoe, IU o cualesquiera, en bloque, con tres votos para esa formación. El resultado era que sobraban docenas de votos, que a su vez se cuadraban eliminando otras tantas docenas de votos en blanco o nulos. Manifestome un apoderado: “Yo me di cuenta, pero no dije nada porque no estoy ahí para eso, y eran ya las una”.

¿Alguien dijo que los votos en blanco y nulos no servían para nada? Son los votos de los familiares, novias y amigos de los vocales y presidentes, que quieren que cuadren las cuentas rápido y vuelvan pronto a cenar. Son, españoles, los votos del amor. Y los votos en blanco y nulos que se inventan los interesados los del amor correspondido. Y en el amor ya saben que todo vale. Así que para qué profesionalizar una tarea que se realiza con esta verdadera comunión espiritual. Viajen hacia un lado y otro, como besos, los votos en blanco. Entrelácense en íntimo abrazo con los nulos allá en el horizonte, mientras la aurora tiende su manto y canta el ruiseñor.
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  1. Comentario de Público (12/03/2008 17:13):

    Asombroso.

  2. Comentario de Pablo CD (12/03/2008 17:21):

    Pues yo también padecí el hecho de ser 1er vocal, y tengo que decir que rellenar las actas y todo el papeleo final es un coñazo y que no es nada fácil. Soy ingeniero y creo que necesitaría al menos 6 meses de formación para poder rellenar bien un “papelaco” de esos. Menos mal que el presidente de mi mesa parecía tener un poco de idea.

    Lo mejor: llegar el lunes a currar y darte cuenta que estás hecho una piltrafa. Los lunes de curro normal no desgastan tanto como un domingo en “la mesa”.

  3. Comentario de Fucsia Masón (12/03/2008 17:26):

    De todas las chorradas que me tocó oir el Domingo (y fueron unas cuantas desde que empecé a las siete y media de la mañana) esta es la #1.

    “En una mesa de Retiro se acaban de dar cuenta de que uno de los vocales es analfabeto” (Hora de la comunicación, 15:30 horas)

  4. Comentario de Alfredo MG (12/03/2008 17:30):

    Es cierto. Estaba el lunes hecho polvo. Cuando iba con la presidenta a dejar los sobres le dije que no recordaba haber trabajado tanto en la vida. Y es que jamás he echado semejantes peonás. Lo de los informes es kafkiano, y el remate es esa parte en la que tienes que poner el número de votos de una formación con número… y también con letra (doscientos dieciséis). A esas horas. Y la guinda el firmar los sobres por delante -todos, presidentes vocales e interventores- y también por la parte donde se pega pero ¡haciendo que la firma cruce de un lado a otro como si fuesen lacres! Tampoco he firmado más en mi vida.

  5. Comentario de Deporaquí (12/03/2008 19:28):

    Pae ¿eres de Cabra?

  6. Comentario de NK (12/03/2008 23:40):

    Es totalmente cierto, en todas las mesas, pasa de todo lo pasable siempre. Este año estuve de apoderada, hace cuatro de interventora (por compromiso, no por convicción) y hace uno recogiendo datos para la Generalitat (la única opción no-gratis). Pero la presidenta de este año se llevó la palma: se ausentaba cada dos por tres (cafeses, hora y media para comer…), casi se pega con un hombre bastante mayor (y bastante capullo) que quería introducir él mismo la papeleta, no quería firmar las actas de ninguna manera porque no le aseguraban que la llevaran y devolvieran a su casa en un coche de policía… Y no había manera, ni aunque le pagaran el taxi, ni quería llamar a la Junta Electoral desde su móvil (faltaría más!), etc.
    Aparte, a mí se me encaró un abuelo porque teníamos, como había que tener, un sobre pegado en cada urna, en la parte de delante para que quedara claro qué papeletas iban en cada urna como pide que se haga el reglamento o lo que sea, “este país es subdesarrollado, pero no tanto!”, qué poca faena…
    De cada tres personas, una comentaba algo sobre las sábanas y que había que buscar otra forma de hacer esas papeletas, como si fuera cosa de los pringadísimos de las mesas…
    Comentarios machistas a tutiplén: “Casi todo mujeres y luego decís que estáis discriminadas” y un larguísimo etcétera.
    Y, por supuesto, los votos nulos y en blanco siempre se ajustan al gusto. Muy bueno lo de “los votos del amor”.

    En fin, una fecha para recordar. En el fondo es divertido.

  7. Comentario de Ksiaze (12/03/2008 23:51):

    El artículo es, desde luego, asombroso, como asombroso es que todo esto quede en el plano de la anécdota y el chascarrillo, y los estamentos públicos no se ocupen de comprobar la calidad de la democracia que tenemos. Ahora me pregunto si se habrá tenido en cuenta mi voto para el Senado al Partido de los No Fumadores.
    Con el comentario nº3 me he partido el ojete.

  8. Comentario de Alfredo MG (13/03/2008 00:14):

    No, no soy de Cabra, “Deporaquí”, sino de Córdoba la llana. Aunque, eso sí, un gran admirador de la gran revista egabrense Sipote.com (qué pena que hayan cerrado).

    En cuanto al desarrollo de las elecciones, yo que había votado en blanco en varias ocasiones, me dejó anonadado. Pero cuando estás ahí, víctima de la burocracia rusa y una jornada también rusa por estajanovista, empiezas a comprender la Verdad Absoluta y el Horror.

    Una cosa me ha quedado clara. Es impresentable que se deje a tres personas normales y corrientes esa responsabilidad. Ahí tienen que estar funcionarios bien pagados y numerosos, formados para la ocasión, y que se ayuden mutuamente para que el proceso sea ágil y no quepan esos errores.

  9. Comentario de sentoki (13/03/2008 11:57):

    Si hombre, funcionarios. Como si no tuviéramos bastantes ineptos en la administración, les dejamos que lleven las cuentas los primeros interesados.

    Nunca vi tanto interés por cómo se desarrollaban las elecciones hasta que entré en relacción con la familia política de mi hermano, donde casi todos son funcionarios. Dependiendo de cómo se iban desarrollando los resultados iban sabiendo cómo se iban a repartir las consejerías (pasadas autonómicas y locales), y si el jefe iba a ser un cabrón o por lo menos se podían tocar los huevos tranquilamente.

    La fiesta de la democracia es eso, una fiesta para que cada cuatro años creamos que contamos algo en el sistema, así que tengamos la fiesta en paz y como buenos españoles todos partámonos la caja de los pringaos de turno y recemos por que no nos toque, como con las inspecciones de hacienda.

    saludos.

    P.D: Yo fui vocal suplente en las autonómicas/locales del ’99 y como lo hice tan bien, me llamaron de titular a las generales del 2000, cuando Aznar rulaba la tierra y pisoteaba con sus polvorientas sandalias los enjoyados tronos de la tierra.

  10. Comentario de makeijan (13/03/2008 12:54):

    Revelador relato…

    #8. ¿Le damos el trabajo a unos funcionarios, para que hagan lo que quieran con nuestros votos?
    a) Funcionarios y trabajo se contradicen y me juego lo que quieras a que la presidente del comentario #6 formaba parte de este colectivo.
    b) Tienen que ser personas normales, pero habrá que actualizar el procedimiento si este es ridículamente decimonónico (y no olvidemos que estamos en el siglo XXI).

  11. Comentario de Alberto (13/03/2008 13:28):

    En mi mesa contamos las del senado como votos por partido, es más fui yo quien propuso la manera de amontonar las sábanas y el recuento posterior, ni apoderados, ni el otro vocal, ni el presidente ni interventores parecían enterarse del “error” para terminar rápido. Cabe destacar que en ése momento los interventores ya habían insinuado que tras contar las del congreso se iban a casa, que el recuento del senado les daba igual.

  12. Comentario de asertus (13/03/2008 13:48):

    Seguro que no es el foro pero, por el último comentario, ¿el Senado para qué?. Que lo cierren, ahorren unos sueldos y gastos, y se simplifiquen algo las elecciones…

    Ah, que hay que colocar a los acabados, ¿y a mí qué? además, con el rollo de “segunda lectura” no sirve de nada…

    O al menos que lo pongan en Cartagena, como la Asamblea de Murcia, que ya no quedan mineros para incendiarla, pero se fastidia a los señores senadores…

    Saludos

  13. Comentario de Conan (13/03/2008 14:13):

    “Yo fui vocal suplente en las autonómicas/locales del ‘99 y como lo hice tan bien, me llamaron de titular a las generales del 2000, cuando Aznar rulaba la tierra y pisoteaba con sus polvorientas sandalias los enjoyados tronos de la tierra”
    Me has emocionao, ese Ansar con esa tableta de chocolate, en plan chuache, poniendo jachondas a todas las presentadoras de A3. Que grande!

  14. Comentario de baroja y su amigo Pio (13/03/2008 14:19):

    nunca he estado de vocal (o presidente) en una mesa electoral, pero si que tengo amigos que han estado y nunca me han contado estas irregularidades (por no llamarlas de otra forma), y estoy escandalizado.
    asi nos explicamos los porcentajes infimos de los votos en blanco.
    de todas maneras no me extraña porque un amigo me ha contado que en un ciudad de la periferia de madrid, estaba como presidente una persona que practicamente no sabía hablar castellano, ¿que como es posible?, pues aun cuando conocer el castellano es un requisito para obtener la nacionalidad, existe una corruptela en los registros Civiles en el si el interesado no sabe castellano viene con un amigo que si sepa, que le explica lo que tiene que hacer y todos tan contentos.
    por cierto no presentarse en el colegio electoral cuando ha sido nombrado vocal es delito, a modo de ejemplo la STS de 15 de marzo del 2007 que condena por no asitir a un colegio electoral habiendo sido designado vocal:
    III. FALLO

    Que debemos condenar y condenamos a D. Isidro como autor de un delito electoral, sin la concurrencia de circunstancias modificativas de la responsabilidad criminal, a la pena de tres meses de multa a razón de cuota diaria de dos euros, con responsabilidad personal subsidiaria de un día por cada dos cuotas impagadas, y a la pena de catorce días de prisión, que será sustituida en ejecución de sentencia, con audiencia del interesado, bien por la pena de veintiocho días de multa a razón de dos euros de cuota diaria, o catorce días de trabajo en beneficio de la Comunidad. Asimismo, le imponemos la inhabilitación especial para el derecho de sufragio durante seis meses y al pago de las costas de la instancia.

    un saludo

  15. Comentario de Lluís (13/03/2008 14:31):

    Pues la verdad, me tocó hacer de presidente de mesa hará ya unos lustros, y lo pasé bastante bien.
    Claro que se trataba de un pequeño municipio (no llegaba a los 400 electores, e iban a votar menos de 300).
    Aparte las 8000 ptas. que soltaban por la época, había otros beneficios. El ayuntamiento se encargaba de las comidas y nos trataba a cuerpo de rey: desayuno y comida a la carta de un buen restaurante (no veais la zarzuela que nos metimos). A la hora del recuento, de buen rollo, con la colaboración de interventores, secretaria municipal y demás gente que corría por allí (de no ser por ellos, todavía estaríamos recontando el senado). Y lo más raro, todo cuadró pese a que de la botella de coñac que nos habían dejado con el desayuno apenas quedaba gota.
    Algunas pegas, eso si:
    – Los del PP no tenían interventora, sino interventor, y bastante feo, dicho sea sin ánimo de ofender. Los de los otros partidos, más o menos lo mismo.
    – No pude encontrar en el manual ningún artículo que me diese pié a que cualquier sujeto que yo quisiese durmiese un par de noches en el cuartelillo.

    En fin, que tampoco mata.

  16. Comentario de Danny (13/03/2008 15:13):

    Pues yo estuve de 1er vocal titular, en nuestra mesa teníamos censados 678, votaron 514 (todos votaron al congreso, al senado y al parlamento de andalucía excepto 4 que no votaron al senado) y nos cuadraron todos los votos ¡a la primera! Y terminamos a las 23.30. Hay que decir que gracias a 2 interventores del Psoe que nos echaron una mano (bajo la inquisidora mirada de un apoderado del PP, que el hijoputa nos miraba de brazos cruzados sin dignarse a hacer ni el huevo).
    De lo más pintoresco, los abuelos y abuelas que iban a votar con la tarjeta de la Seguridad Social en vez del DNI. Y el apoderado del PP, que no hacía más que quejarse de que la gente que entraba en las cabinas ponía las papeletas del Psoe tapando las del PP. “¿Algún día habrá civismo en este país?” y “es que siempre nos toca a nosotros”, decía el tío.
    Y si hace unos lustros eran 8000 pelas, a mí que me expliquen cómo cojones han actualizado el IPC de los huevos para que ahora den 60 euros de mierda.

  17. Comentario de Andrés Boix (13/03/2008 15:28):

    Yo siempre he tenido muchas ganas de que me toque en el sorteo estar en una mesa. Me perdería las juergas electorales que montamos mis amigos siempre para estas cosas pero, a cambio, montaría un colegio electoral con disciplina prusiana, con las papeletas bien ordenaditas y todo muy limpito, colas rectas con ciudadanos disciplinados esperando su turno y todas esas cosas.

  18. Comentario de NK (13/03/2008 18:33):

    Makeijan, la presidenta de mi mesa era dependienta, si bien es cierto que cumplía el topicazo de funcionaria a las mil maravillas.

    No creo tampoco, ni de lejos, que hubieran de encargarse funcionarios ni que estas funciones exijan mayor preparación. Además, así se valoran más las cosas. Sería deseable, eso sí, mayor interés (como el de Andrés!). Aunque ya se cuenta con que los interventores y apoderados tienen más experiencia (aunque hay de todo, clarostá, muy pocos se leen el reglamento y, por eso, se montan los follones que se montan entre los interventores de distinto signo, que ésta es otra peculiaridad que nunca falta en cualquier domingo electoral). De hecho, son los que orientan y/u organizan el escrutinio normalmente. El pasado domingo si no es por mí que autoritariamente organicé todo el recuento y por otro interventor que rellenó todas las actas finales aún estaríamos plegando sábanas con la presidenta cruzada de brazos.

  19. Comentario de Andrés Boix (14/03/2008 08:40):

    El otro día un especialista en observación electoral me contó una serie de cosas alucinantes sobre cómo son las elecciones en los países donde él ha trabahado (esencialmente en Latinoamérica). Yo nunca había caído en la multiplicidad de posibilidades de manipulación, fraude y compra de votos. Tampoco era capaz de imaginar la inventiva, esfuerzo y trabajo que dedican muchos a estas cosas. El relato de anécdotas y técnicas de todo tipo era espectacular.

    Votos en blanco arriba o abajo, en España la cosa parece que funciona, en lo sustancial, bien. ES decir, que la cosa no es fraudulenta, sino un descontrol ciudadano alegre y despreocupado, del que además todos somos co-responsables, del que todos participamos y que todos podemos controlar. No está mal. De hecho, nadie aquí ha puesto en duda un resultado electoral por historias de estas. Debe de querer decir algo.

    Y una pregunta; ¿cuál es la diferencia entre un interventor y un apoderado? Supongo que el apoderado sí que tiene capacidad para actuar en nombre del partido y el interventor es mero observador privilegiado o algo así, pero ¿lo puedes aclarar?

  20. Comentario de Alfredo MG (14/03/2008 09:48):

    Los interventores tienen que ser electores de la circunscripción y se quedan todo el rato en la mesa que les ha tocado. Los apoderados van dando vueltas por ahí, por diversos colegios electorales y pueden estar presentes en el recuento que hace la junta electoral. Son vigilantes más “generales”. Ambos pueden participar en las discusiones con voz pero sin voto, y si no están de acuerdo reclamar siguiendo unos criterios.

  21. Comentario de Pseudónimo (14/03/2008 10:42):

    Cito de Andrés: “Votos en blanco arriba o abajo, en España la cosa parece que funciona, en lo sustancial, bien. ES decir, que la cosa no es fraudulenta, sino un descontrol ciudadano alegre y despreocupado, del que además todos somos co-responsables, del que todos participamos y que todos podemos controlar. No está mal. De hecho, nadie aquí ha puesto en duda un resultado electoral por historias de estas. Debe de querer decir algo”.

    Es que no sólo nadie se ha quejado, es que nadie se imagina que en España esto pueda ir de otra manera. Yo incluso me enfadaría si no funcionase así.

  22. Comentario de fer_plus (14/03/2008 12:38):

    Genial, hilarante, sterniano, cervantino. No tengo palabras.

    Alfredo Martín-Gorriz, mi más profunda admiración por esta pequeña joyita.

  23. Comentario de NK (14/03/2008 17:57):

    Sí, básicamente, el apoderado tiene las mismas funciones que el interventor, pero no firma las actas. De hecho, si en alguna mesa, no hay interventor, se puede quedar el apoderado como tal.

    En el cole que estaba yo (por cierto, ver-gon-zo-so, todo barracones…), hubo jaleo porque un interventor del PP no quería dejar a una apoderada del PSOE cerca de la mesa, a una distancia considerable sí, pero cerca decía que no… Al final, daba penica y todo el chaval cuando se leyó el reglamento y le cambió la cara. De todas formas, el escrutinio es público y puede entrar quien quiera a verlo.

    La picaresca latinoamericana debe de ser espectacular!

    Aquí el sistema funciona bien y, en cualquier caso, siempre será mejor que modernizarse y votar con máquinas.

  24. Comentario de Garganta profunda (17/03/2008 14:08):

    Conclusion:

    Todo indica que al final los errores cometidos se equilibran y/o entran dentro de una distribución normal (campana de Gauss y se acabó) y los resultados podemos considerarlos fidedignos…

    Curioso.

    Fdo. Quiero ser mesa en la proximas, porfa!!

  25. Comentario de Lluís (17/03/2008 15:44):

    Sobre el tema apoderado/interventor, en las circunscripciones rurales de mi zona suele haber únicamente apoderados, por lo menos en las elecciones que no interesan demasiado (europeas, generales y autonómicas; las locales, que a veces se deciden por media docena de votos, pueden ser más conflictivas). Incluso los partidos de peso en esas zonas (léase CiU y antes el PP) carecen de suficientes militantes con el fanatismo necesario como para ir a aburrirse allí todo el santo día y tener que pagarse incluso el bocata de su bolsillo. Total, cualquiera que viva la política en esos lugares puede precedir el resultado con una diferencia de +/- diez votos. El apoderado, por lo menos, se pasa el día dando vueltas con el coche (por lo menos es algo más distraído), y tiene la coartada perfecta para pasarse el día fuera de casa (con parada técnica, si lo desea, en el prostíbulo del pueblo de al lado). Encima, come donde quiere, y si se acerca al bar donde los jerifaltes comarcales del partido han instalado el cuartel general de campaña, tiene pagado el carajillo.
    En fin, ya puestos, mejor hacerse apoderado.

  26. Comentario de manolito (17/03/2008 18:42):

    el articulo la verdad es que es para enmarcar.

    sobre el tema interventor / apoderado: el interventor esta registrado en la mesa en la que participa, solo en una y debe presentarse antes de las 8.30 para que forme parte de la misma. Luego, alli, puede opinar y reclamar lo que quiera, pero las decisiones las toman los membrillos a los que les ha caido la suerte de sufrir la jornada. el firma las actas que se generen y las reclamaciones en la mesa que tenga a bien inventarse.

    el apoderado es el guay del circo, que va de un colegio a otro -y como bien se dice, pasa mas tiempo en cafes y comidillas que haciendo algo util- Pero no forma parte de ninguna mesa, y puede quejarse de el funcionamiento general de una mesa o del colegio -que falten papeletas, los cazavotos de toda la vida… etc- pero no participa en las decisiones puntuales de cada mesa, aunque puede plantear cuantas quejas quiera a la junta electoral sobre el funcionamiento concreto de una mesa.

  27. Comentario de manutc (21/03/2008 18:31):

    Cinco veces interventor y siempre nos cuadra y nunca hacemos trapicheos. Qué curioso…

  28. Comentario de Alfredo MG (21/03/2008 19:28):

    Eso es que te toca siempre en la mesa de los empollones y gafitas.

  29. Comentario de Lalolailolailo (22/03/2008 23:32):

    Gracias Alfredo por hacer público aquí lo que ya muchos imaginábamos que sucede en esta España tan plural y democrática. Total, como los de los votos blancos y nulos no van a venir quejándose.

    Soy capaz de hacerme misionero y de comprarme un billete para Burkina Faso antes que verme en la mísera obligación de tener que participar en semejante pantomima.

  30. Comentario de X-man (25/03/2008 17:40):

    El sistema es va dissenyar el 1977… Quan bevíem Mirinda i els PC eren “la bitxa” i no uns instrument habitual.

    Potser ja seria hora de reformar aquest show.

  31. Comentario de uno que pasaba (26/03/2008 02:39):

    hombre, x-man, si ya entiendo lo que dices, pero 情報化が行われてもスペインだからどうせ拙い制度になってしまうだろう(^。-)

  32. Comentario de Qué país... (27/03/2008 19:39):

    ¿Por qué “show” lo escribes en inglés? Qué poco congruente eres, tronco.

    En tal caso, dí “aquest espectacle”. :D

  33. Comentario de V (31/03/2008 03:20):

    Esta web empieza a ser la misma mierda que podemos leer en prensa:

    España BALCANIZÁNDOSE y vosotros haciendo el ñordas.

    Aragón ye nazión (esto es solo por joder :P)

  34. Comentario de guimusa (31/03/2008 13:56):

    Muy bueno el artículo, pero que muy bueno.
    A mi lo del interventor ese que dice que se había dado cuenta pero que el no estaba para eso y que “además eran ya las una” me ha dejado sin respiración, pero de la risa.

  35. Comentario de egggqueeee (31/03/2008 23:03):

    Pues no me quiero imaginar cómo irá eso de los tribunales populares, claro, que con jueces de carrera tampoco van muy sobraos.

  36. Comentario de es mi primera entrada (15/05/2008 13:25):

    bien por la pagina

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