Machos ibéricos

Fracasados en nómina dispuestos a hacer el ridículo por España

Habitualmente, conforme se acerca un Mundial o Eurocopa la prensa deportiva y la afición (o la parte de la afición que aún cree en la prensa deportiva) comienzan a desatar sus pasiones irracionales: “¿y si esta vez hacemos algo? Soñar no cuesta nada”, “España puede ganar a cualquiera”, etc. Vano intento. La experiencia demuestra, con una implacable regularidad de dos años, que la Selección Española es un equipo que, con independencia de que nos creamos aquello de que puede ganar a cualquiera, sin duda alguna también puede perder con cualquiera, y de hecho se dedica a trabajar en ellou una y otra vez con singular énfasis. Ya lo explicamos en el Mundial de Japón y volvemos a hacerlo ahora: desengáñese, ya puede Usted darse con un canto en los dientes si España logra superar los escollos de Rusia, Portugal y Grecia y se clasifica para cuartos de final, donde, jugando como nunca y perdiendo como siempre, será eliminada (y al menos esta vez el cruce deparará en condiciones normales a Inglaterra o, más probablemente, a Francia, es decir, penalty made in “Más Listo de la Clase” y eliminación).

Además, a diferencia de otras ocasiones, en donde existía cierto convencimiento de que la selección española atesoraba un alto grado de calidad (véase el Mundial 98 –eliminación en la liguilla previa- o el Mundial 86 –honrosa caída en cuartos contra equipo verbenero, Bélgica y su puto portero Jean Marie Pfaff, aquellos que tengan más de 20 años saben de quién estoy hablando ¿Recuerdan? Jean Marie Pfaff parándolo todo, trauma colectivo que algunos arrastramos en silencio desde hace décadas, el joputa de Jean Marie tardando siglos en sacar de puerta, Jean Marie parando el penalty de Eloy y eliminándonos, Jean Marie, Jean Marie, Pfaff, Pfaff, Pfaff, … ¡Cállate de una vez o saco la recortada y me lío a tiros, coño!), ahora todo el mundo es unánime en considerar que la Selección Española es aún más paquete de lo habitual. Y si no me creen, pasen y vean:

SANTIAGO CAÑIZARES (portero, Valencia): Probable portero titular de la Selección, a Cañete le avalan años y años de hacer populismo en el estadio de Mestalla. Cuando la atención del público se diluye, Cañizares es especialista en levantar los brazos hacia la afición más ultra, granjeándose así su eterno apoyo por si algún día decide montar un partido de extrema derecha con Salva Ballesta (injusta y desgraciadamente ausente de esta cita). Por lo demás, Cañete es comúnmente catalogado como un portero seguro y de ágiles reflejos que seguirá mostrando por muchos años, siempre y cuando no muera de resultas de la súbita caída del larguero. Si en alguna situación España tiene que solventar una eliminatoria en la tanda de penalties despídanse de la Eurocopa. Por tradición y por Cañizares.

IKER CASILLAS (portero, Real Madrid): Lo mejor que podemos decir de este chico es que pertenece a la gran familia del Real Madrid. Producto de su excelente temporada, Sáez ha decidido premiar al chaval con la convocatoria para la Eurocopa (después de todo, Casillas “es un porterazo”, y la culpa de que este año haya recibido un saco de goles no es suya, sino de la defensa del Madrid, que son unos paquetes), pero nos resistimos a creer que Sáez, sí, sí, incluso Iñaki Sáez, se atreva a ponerlo de titular (y eso que Casillas se nos antoja el jugador perfecto para el peazo de seleccionador que tenemos: del Madrid, y además cualquiera diría que es vasco, así que no descarten la titularidad).

ARANZUBIA (portero, Athletic de Bilbao): El mejor de los tres porteros de la selección, razón por la cual se pasará media Eurocopa calentando banquillo (la otra mitad, una vez España sea eliminada, de vacaciones). De todas maneras, no vayan Ustedes a creer que está aquí por bueno, lo está por vasco (piensen que Etxeberría no sólo ha sido convocado, sino que probablemente será titular).

JUANITO (defensa central, Real Betis): Arsa y tronío para ejercer de arsa y tronío desde el banquillo. Avalado por la excelente temporada del Betis, Juanito es un jugador aún joven que intentará emular en la Eurocopa, como ya lo hace en la Liga española, a su gran ídolo: el ex jugador de Zaragoza, Atlético de Madrid y Sevilla del mismo nombre, récord absoluto de expulsiones en la Liga española y una institución del fútbol español bien entendido.

PUYOL (lateral derecho, Barcelona): Jugador titular para que los catalanes no se enfaden, Puyol representa el espíritu del F.C. Barcelona. Cabe decir que en los últimos meses, conforme el Barça abandonaba sus patéticos resultados habituales en años pasados, la identificación entre el jugador y el club se ha visto resentida, pero aún así su ascendiente sobre la afición es indudable: como ya hicieran anteriores iconos del club de similar calidad y características, como el “Chapi” Ferrer, Puyol es un marcador rapídisimo, pegajoso y no exento de firmeza en el marcaje (es decir, que suelta yoyah a diestro y siniestro pero luego el equipo contrario hace un saco de goles por su banda). Destinado a jugar como central para que Sáez lograra un sistema defensivo sin un solo jugador del Valencia, la desgraciada lesión de Míchel Salgado le obligará a permanecer en su ubicación habitual de lateral derecho (es curiosa la manía de los entrenadores supervascos por experimentar con sus jugadores; ya puestos, podría poner a Puyol de medio centro).

JOAN CAPDEVILA (lateral izquierdo, Deportivo de la Coruña): Sustituto de Míchel Salgado, a diferencia de éste creemos que no jugará de titular, puesto que su participación en el juego podría implicar que algún jugador del Real Madrid calentase más banquillo del imprescindible. Jugador sobrio y rápido por la banda izquierda, cumple la misma función que las ministras del Gobierno de ZP: cubrir la cuota, en este caso, deportivista (después de todo, era un tanto escandaloso que el Deportivo –tercero, semifinales de la Champiñons-, plagado de jugadores españoles de calidad, llevase sólo tres futbolistas a la Eurocopa y el Madrid cinco).

IVÁN HELGUERA (defensa central, Real Madrid): En el imaginario popular, sustituye a un clásico en el Madrid y por ende en la Selección: a Hierro le gustaba jugar en el centro del campo y a Helguera también, Hierro rendía mejor en la defensa y Helguera también, Hierro soltaba yoyah ante la pasividad arbitral y Helguera también lo hace, Hierro hacía aguas en sus últimos tiempos y Helguera desde el principio (el alumno supera al maestro), … Justo premio a su insólito rendimiento en la defensa del Real Madrid, mecanismo de auténtica precisión en la temporada, Helguera es titular indiscutible en nuestra Selección.

MARCHENA (defensa central, Valencia): Como le ocurrió a Goikoetxea con Maradona en su día (¿recuerdan a Goikoetchea, el de los años ochenta? Repartía estopa en el Athletic de Bilbao con auténtica devoción y no fallaba un penalty), a Marchena siempre le perseguirá el salvaje Ushiro Nage que en su día perpetró contra el Más Listo de la Clase. Estigmatizado por esta orgía de crueldad que todos los españoles con estómago suficiente presenciaron a través de la televisión, Marchena es cinturón negro y séptimo dan de judo, lo que le ha permitido, con la ayuda de los árbitros, culminar una excelente temporada en el Valencia (gracias a él, y a otros como él, todos los partidos del Valencia eran soporíferos). Titular a raiz de la ausencia de Míchel Salgado.

RAÚL BRAVO: (lateral izquierdo, Real Madrid): Fidedigno representante de la escuela de los “Pavones” (como todos sus compañeros, Raúl Bravo es un excelente futbolista de Segunda División B), destaca ante todo por su polivalencia (es un mal defensa central y es también, si el equipo lo necesita, un mal lateral izquierdo). Titular indiscutible en el Real Madrid, cabe pensar que también lo sea en la selección (después de todo, Raúl Bravo es lo más parecido a un lateral izquierdo que tenía la convocatoria primitiva de Sáez, así que ¿no sería un poco raro que el recién llegado Capdevila le quite el puesto al chaval?), redondeando así la defensa ideal de Sáez (Casillas; Puyol, Marchena, Iván Helguera, Raúl Bravo), una defensa de campanillas que no desmerecería, a nuestro juicio, en la serie B italiana (y eso que Sáez no podrá cumplir su sueño perverso a raíz de la lesión de Míchel Salgado, tres jugadores del Madrid, tres, en la línea defensiva, y porque Roberto Carlos no es español; a fin de cuentas, y como todo el mundo sabe, la culpa del desastre del Madrid esta temporada no es de sus esforzados defensas, sino de la desidia de sus estrellitas).

CÉSAR (defensa central, Deportivo de la Coruña): Suplente de Iván Helguera, César es uno de los mejores centrales de la Liga española (con lo cual uno se pregunta, al igual que los propios convocados cada vez que se miren al espejo: ¿qué está haciendo aquí?), sin que esto quiera decir necesariamente que sea un peazo animal que reparta chapapote (en realidad sí lo es, pero en España, por fortuna, el nivel está tan alto que cualquier central que no ejerza al máximo de sus posibilidades parece, por momentos, un metrosexual indigno de compartir cartel con Pablo Alfaro, Javi Navarro o cualquier otro jugador del Sevilla); de todas maneras, salvo expulsión de Iván Helguera o Marchena en uno de sus Ushiros Nages es poco probable que juegue más allá de los minutos de la basura (es decir, y por otro lado, como atinadamente indicaba un lector, todos los minutos de los partidos de España).

GABRI (lateral derecho, Barcelona): Jugador de raza, con buen físico (esto, conviene aclararlo, no quiere decir “metrosexual a lo David Beckham”, sino “torete a lo José Mari Bakero”, hay que ver cómo hemos cambiado), se hinchará a hacer tablas de abdominales en los entrenamientos, porque jugar, lo que se dice jugar, no creemos que juegue mucho en los tres o cuatro partidos con que la Selección amenaza con deleitarnos. Y, la verdad, uno suspiraría aliviado (Gabri es, como Capdevila, otro convocado “de cuota”), de no ser, como también ocurre con Capdevila, porque visto lo visto uno no sabe qué es peor.

ALBELDA (medio centro, Valencia): El eje fundacional del campeón de Liga, el que más yoyah reparte y más balones recupera, su presencia es garantía de un mínimo de consistencia incluso en el seno de la Selección. También es garantía de aburrimiento, aunque si se trataba de eso no entendemos para qué lo ha llamado Sáez.

VICENTE: (extremo izquierdo, Valencia): Tras unos cuantos años de compartir cartel con Kili González, este año se ha salido literalmente en el Valencia, atormentando a los rivales con regates, asistencias e incluso goles. Es decir, que claramente este chico no sabe en qué equipo, ni en qué Selección, juega. Que haga como Mendieta hizo en su día y se vaya al Lazio “para ganar títulos” (si bien esta afirmación pudiera resultar a estas alturas un tanto sorprendente).

VALERÓN (media punta, Deportivo de la Coruña): “media punta, medio jugador”, decía Bilardo, y decíamos nosotros a propósito de Valerón en su análisis de la anterior Eurocopa. Pues bien, nos equivocamos en el análisis. No con Valerón, por supuesto, sino con el Más Listo, de quien en ese análisis infausto decíamos que era un gran jugador. De los errores se aprende (sobre todo con España). Valerón es un jugador de técnica excepcional pero que tiende a desaparecer de los partidos, así que no desentonará demasiado en la selección (salvo en lo de la “técnica excepcional”).

JOAQUÍN (extremo derecho, Real Betis): Jugador rápido e incisivo que se pone a hacer bicicletas, recortes, frivolidades, “magia”, en resumidas cuentas, y se queda solo. Por su culpa nos eliminaron del Mundial de Japón (fue el mejor de España pero falló su penalty en la tanda decisiva contra Corea del Sur, potencia mundial), y por su culpa nos eliminarán de la Eurocopa en el momento en que mire mal al Más Listo y éste, nervioso por la presencia de tanto antiespañol suelto en el campo, falle un penalty en el último minuto como ya hizo ante Francia en el 2000 y nos vuelvan a eliminar.

XAVI ALONSO (medio centro, Real Sociedad): El año pasado, con la Real Sociedad, se salió (como todo el equipo). Este año, por el contrario, no ha hecho nada (como su equipo, de nuevo), razón por la cual el Madrid está tentándole, y razón por la cual, de nuevo (lo de que le tiente el Madrid, aunque “no ha hecho nada este año” también es un criterio válido), ha sido convocado por Sáez. Aunque no es previsible que juegue como titular, vaya Usted a saber, tiene exactamente el perfil buscado por Sáez (madridista y vasco), así que “no descartamos ninguna posibilidad”.

XAVI (medio centro, Barcelona): Heredero y depositario de la escuela de Cruyff y Guardiola, Xavi es un medio centro sobrio, buen pasador pero sin suficiente entidad defensiva para encargarse en solitario de la organización del juego de un equipo grande. Con estos mimbres, debería ser titular indiscutible en la Selección, pero la proliferación de medios centros le abocan a la suplencia.

BARAJA (medio centro, Valencia): Tras unos comienzos espectaculares en el Valencia, lleva años sesteando, durante los cuales se ha asentado como uno de los pilares de la Selección. Probable titular, se dedicará a subir al ataque en plan media punta de calidad mientras Albelda suelta yoyah. También cumple el expediente en la gran e ineludible cita que espera a la Selección en cuartos de final: la eliminación en la tanda de penalties “tras un gran partido en el que España fue superior pese a la parcialidad arbitral”, dado que Baraja es un acreditado fallador de penas máximas.

LUQUE (delantero centro, Deportivo de la Coruña): Jugador polivalente (puede desenvolverse razonablemente bien por las bandas), no jugará, ni por las bandas ni por el centro, salvo unos minutillos en el final del partido España – Portugal (España necesitará la victoria para clasificarse, y para ello Sáez requerirá el concurso de Luque; al final España empatará el partido a cero, clasificándose para cuartos merced al empate entre Rusia y Grecia).

ETXEBERRÍA (extremo derecho, Athletic de Bilbao): titular indiscutible, protagonista en su día de una sonada deserción en el ámbito de decisión vasco (el Athletic de Bilbao pagó la cláusula de rescisión de Etxeberría a la Real Sociedad -500 millones, y además en la época previa a la locura de los contratos de la televisión digital, cuando 500 millones se pagaban por principio a los intermediarios por cualquier jugador de segunda división), Etxeberría es un buen jugador pero probablemente ya amortizado, y que en cualquier caso en la Selección nunca ha hecho nada (y perdonen la redundancia, pues es notorio que en la Selección nunca ningún jugador vasco hizo nada, por principios, con la excepción de Julio Salinas, quien antes que vasco era Patrimonio de la Humanidad), pese a lo cual, o precisamente por ello, Sáez lo mantendrá impertérrito para que sestee por la banda derecha.

RAÚL “MÁS LISTO DE LA CLASE” GONZÁLEZ (“segundo delantero”, Real Madrid): El alma de la Selección (ahora se explicarán Ustedes muchas cosas), donde Raúl es feliz porque él ante todo es español y si algo hay más español que el Madrid es la Selección (se suele animar a uno y otro equipo con las mismas banderas, uno y otro equipo suelen tener similar porcentaje de jugadores españoles del Madrid, y bueno, justo es reconocer que el éxito no sonríe históricamente en igual medida a uno y otro equipo), sobre todo porque en la Selección no hay extranjeros del Madrid que puedan disputarle al Más Listo su posición de Estrellita Máxima, y le permite ejercer convenientemente sus obligaciones (que se resumen en “Tirar del Carro” con el acreditado éxito del pasado). Es cierto, este año Raúl no ha hecho absolutamente nada en el Madrid (aunque en realidad la culpa del fracaso de su equipo no es suya, sino de los pérfidos extranjeros, y sobre todo de Valdano), pero cuidadito, en la Selección Raúl se crece porque la siente como propio (y así es, propia: todos juegan para él con el fin de que el chaval se luzca y luego llame a Ruiz Gallardón preguntándole qué tal lo ha hecho), y de todas maneras la cosa da bastante igual: piensen Ustedes que Sáez ha convocado a absolutamente todos los titulares del Real Madrid que podía convocar (todos los demás puestos están cubiertos por “Zidanes”), y es más, probablemente todos ellos jueguen de inicio. Y sí, bueno, es posible que convocar a cinco –que serían seis de no mediar lesión de Míchel Salgado- jugadores del Madrid sea un tanto excesivo, dado que el Madrid ha quedado cuarto en la Liga española, dado que a nadie se le escapa que no son precisamente los españoles los que marcan la diferencia en el Madrid, y dado que, en cualquier caso, es difícil pensar en un club cuyos jugadores hayan llegado más bajos de forma a final de temporada que el Madrid y sus cinco derrotas seguidas; pero no dejen que estos argumentos, deslizados por antiespañoles amigos de los violentos, les hagan flaquear: esta Selección es, por historia y tradición, un fidedigno representante de la desgraciadamente fenecida Españaza, y así debe continuar.

MORIENTES (delantero centro, Real Madrid): La Liga española ha vivido este año una auténtica eclosión de delanteros españoles goleadores: Fernando Torres, Mista, Reyes (hasta que fue fichado por el Arsenal), Villa, … sólo el primero de ellos ha sido convocado por Sáez (y no tanto por sus goles sino por una cuestión, de nuevo, de satisfacer la cuota con el Atlético de Madrid y en su caso los deseos de la prensa deportivo-rosa). Delanteros que han firmado casi veinte goles esta temporada en la Liga han sido condenados al ostracismo. ¡Si hasta hemos desechado sin compasión la “opción patriota” de Salva Ballesta, con lo que nos habríamos reído! (Imagínense a Salva antes del partido contra Francia en cuartos, si es que España llegaba tan lejos; ¡la crónica se escribiría sola!). Y, sin embargo, Sáez se decanta por Morientes, delantero, qué duda cabe, en buen estado de forma y también capacitado para cargar sobre sus hombros la pesada responsabilidad de vestir la camiseta nacional (el otro día Sáez me llamó para sustituir a Míchel Salgado en la convocatoria, pero en Junio tenía exámenes y tuve que decirle que no), pero la cosa canta un poco. Aunque, todo hay que decirlo, ¿quién mejor que Morientes para entenderse con el Más Listo, objetivo primordial de la Selección?

FERNANDO TORRES (delantero centro, Atlético de Madrid): El “Niño” disputará con Morientes la titularidad en el ataque de la Selección, asumida por todos la condición vitalicia del Más Listo. Probablemente la cita le venga pronto. Es un jugador con proyección, pero de proyecciones está el mundo lleno, y de jugadores quemados por prematuros, también (recuerden el emblemático caso de Lucendo, que habría podido acompañar a Pelé y Maradona en el panteón futbolístico mundial, con Cruyff). Es duro, para alguien que aspira a triunfar en la Liga más exigente, la española, y en competiciones internacionales de prestigio, descubrir de súbito que por tu origen estás obligado a darlo todo por España. Muchos no lograron superarlo sino tras duras sesiones de psicoterapia.где купить сковороду вокподбор слов гугл

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